En las plantas más inferiores de la base de Kakusei, se encontraban diferentes salas espaciosas donde los miembros podrían entrenar y no desmejorar sus capacidades físicas. Eran salas cuadradas de 50x50, de estructura férrea que garantizaba con holgura cualquier tipo de entrenamiento que los usuarios quisieran realizar.
Me interné en ella y me coloqué en una de sus esquinas, llevaba tiempo premeditando sobre el gasto de recursos que generaban las técnicas de mi repertorio, y pretendía al menos, rebajar dicho gasto y que mis reservas de chakra no se vieran tan mermadas tras el consumo.
- Bien, todo es repetir y practicar para pulir la optimización de chakra, solo así podré conseguir que mi desplazamiento mejore sin que me suponga tanto gasto -
Me dije para concienciarme de cuál sería el guion a seguir, y tras ello, concentré chakra en mis pies e inicié el desplazamiento hasta la esquina contraria, aprovechando todo el espacio en diagonal de la sala, aunque no llegase hasta la otra punta. Repetí el proceso una y otra vez, solo era al fin y al cabo el inicio.
Después de algunas horas, y fatigado por el desgaste a nivel físico como a nivel de chakra, empecé a vislumbrar los frutos del trabajo, aunque estuviera cansado, notaba que la realización del shunshin ya no repercutía de la misma forma en mí.
- Es por aquí, debo de continuar para pulirlo al 100% -
Me dije mientras me costaba respirar, pues notaba una aceleración de los pulmones debido a la exigencia del entrenamiento, pero no iba a parar, no se quedaría ahí. Pero así fue como tras decenas y decenas de intentos después, logré finalmente darme por satisfecho. Había perdido la cuenta de las veces ejecutadas y la distancia total que había recorrido, sin embargo, estaba satisfecho, pues las últimas ejecuciones habían optimizado el gasto de chakra en mis pies sin apartar ni la velocidad ni el alcance del desplazamiento, finalmente lo había conseguido.
~ Narro ~ Hablo ~ Pienso ~