[Trama Única] La ira de un hombre amable
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Última modificación: 13-02-2024, 04:32 PM por Musacus.
25 de Octubre 15 D.K
Kirigakure

¿¡Dónde esta Fujitora!?

Una vez más La Hoshigaki camina por las calles de Kirigakure como un lobo solitario ajeno de lo demás, nadie se le acerca, más bien aleja a los tímidos y espanta a los niños, su mera presencia atrae las criticas y en ocasiones alguna piedra acompañada de un insulto. No era bien recibida en los comercios, ni mucho menos en los lugares de " gala ", aunque lo usual era que la ignorasen, al fin y al cabo ella hacia lo que le apetecía y cumplía su merecido cargo como autoridad, según la orden del día podría ser cazar unos rebeldes o una vuelta por las callejuelas, lo más importante era el Imperio, su Imperio.

El otoño aún continua su cauce dejando oleadas naranjas de hojas en cada rincón de la Aldea. En esta fría y peculiar ocasión la joven Hoshigaki parece estar buscando a cierto sujeto... Pero encontrarlo por sus propios medios le daba pereza por lo que acudió a uno de sus pocos amigos dentro de la Academia Shinobi, " amigos " básicamente sujetos en lo que tenía un poco de confianza.

OYE VIEJO! estoy buscando un tipo...
uno de los nuestros, un tal Fuji.. Fujitora...

Alguna de las palabras de Nakia con quien fue alguna vez su Instructor en las artes Shinobis, el sujeto con paciencia y amabilidad le devolvió una sonrisa y un gesto, con algo de suerte El Espadachín aún estaría en la Aldea. 

...Cual es tu plan? Pregunto el Jounin
...Debo advertirle unos detalles, quizá le interesen... Respondió Nakia

La conversación duro unos minutos más luego cada uno se fue por su cuenta, el Jounin haría un simple llamado por Radio convocando a Fujitora a la Academia y también enviaría un gennin en su busqueda para advertirle de la situación. El mensaje podía llegar de cualquiera de las dos formas, " Se solicita la presencia de Fujitora en la entrada a la sede para una Reunión informativa, se fijo el horario para las 1700hs."

Una historia, un recuerdo, alguna pista de la verdad, cualquier razón era suficiente para afrontar la crueldad del Pasado y afrontar de una vez por todas al Enemigo.    ¿Una Reunión informativa? lo normal era que comunicarán un punto de encuentro o que los convocaran para misión. Debe ser algo importante o al menos lo suficientemente decente para ser comunicado vía radio y gennin mensajero .

Aclaración
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Última modificación: 01-02-2024, 02:20 PM por Fujitora.
La recia niebla característica de la villa se arremolinaba con especial dureza hoy, me recordaban a aquellas de antaño de cuando era joven en las que internarse por determinadas calles de la aldea con tal manto, era incluso más peligroso que pasar una tormenta en alta mar. Además, tal niebla, me traía recuerdos que añoraba de aquellos quienes compartieron por desgracia menos años de vida de los que compartí con la soledad, mi familia.

Ordenaba en la cocina los armarios y evaluaba si faltaba algún alimento, sobre la encimera reposaba un papel en el que iba apuntando a lápiz aquello que necesitaría comprar.

- Algo de col, para conservarla encurtida y también fresca para cocinar, setas deshidratadas para proveerme de sobra, que en invierno suben de precio... y parece que de especias voy también algo justo, tendré que coger también de más para este mes de caldos -

Dije en voz alta, hablando conmigo sobre que más apuntar. Con los brazos en jarra, observé en silencio algunas cosas más, y acabé determinando que era ya suficiente, pues por más que necesitase o quisiera comprar, los espacios de la cocina eran limitados, y aunque para mí solo fueran más que suficiente, no podía permitirme el lujo de abarrotar los cajones porque además me daba coraje verlos sin huecos.

Cogí el papel, a Teitoku, coloqué mi Yukata para salir a la calle y cerré la puerta del apartamento. Ir a comprar al mercado después del mediodía tenía principalmente 2 beneficios, el primero era que recién comido tienes menos antojos que comprar, y segundo, había mucha menos gente, es cierto que no encontrarías productos tan frescos como a primera hora de la mañana, pero también se podía encontrar determinados géneros de alimentos recién repuestos para la venta de por la tarde, sin embargo, nada más poner un pie en la calle, me asaltó un joven shinobi, que venía aprisa y le faltaba levemente el aliento, dándome el alto con la mano y acompañando tal gesto con un recado que portaba para mí.

- Ho ho holaaa, ¿Fujitora?, le traigo un mensaje para usted, es para una cita, tiene que acudir a las 5 de esta tarde en la academia, pues se le precisa para una reunión informativa... ¿me podría firmar la hoja como que ha recibido el mensaje? -
- Ah chico muchas gracias por el aviso pero, ¿Se puede saber sobre que es la reunión? -
- Ni idea señor, solo me informan para que le cite, es mi primera misión D -
- Entiendo... deja que firme eso, gracias y ánimo joven -

Vi en el chico esa efusividad que le caracterizaba a la generación a la que pertenecía, eléctrica e impulsiva, pero poco me vi reflejado en eso. El gennin se perdió tras la devolverle el papel, calculaba si me daría tiempo a comprar y volver al apartamento para más tarde acudir a la reunión de la academia, no obstante, el resultado de dichos cálculos no eran favorables para tal labor, dado que la academia y el mercado estaban bastante alejados entre sí.

- Iré a comprar tras la reunión, si no dura mucho puedo encontrar todo igualmente en el camino de vuelta -

Me dije, mientras tomaba como destino la academia. Caminaba con parsimonia porque aún faltaba tiempo para la cita, de vez en cuando, abría los ojos para comprobar que tan espesa se volvía la niebla, la de hoy abrumaba hasta a los propios nativos de la villa, y así me lo hicieron saber conversaciones de aquí y de allá de los viandantes cercanos. Cuando mis pasos finalmente me llevaron a las cercanías de la academia, calculé el tiempo que quedaba para tal reunión, sin embargo, en la puerta parecía no esperarme nadie aún tras cerciorarme de ello, entreabriendo levemente los párpados para asegurarme. Fui recortándome metros hasta llegar a la puerta, cuando finalmente la alcancé esperé en ella a que alguien de allí me recibiera, ¿Qué reunión informativa sería aquella en la que me citaron? por el contexto, suponía que se tratara sobre algún tipo de misión, pero poco faltaba para salir de dudas.

lore de Fuji

otras consideraciones
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25 de Octubre 15 D.K
Kirigakure

¿¡Dónde esta Fujitora!? [parte II]


El gran salón de combate o mejor conocido como la Academia se hallaba extrañamente vacía, vacía de sonido y presencias, como si los gennin estuvieran en alguna actividad lejos de allí, solo algunos pocos merodeando por el lugar, entre ellos un viejo Jounin bastante amigable para su Rango y edad, aunque era mejor conocido como Instructor de nuevo reclutas para el Imperio. Unos minutos de silencio mientras Fujitora se cuestionaba sobre aquella peculiar solicitud, una de las pequeñas puertas principales se abrió precipitadamente revelando la identidad de su Solicitante, aquel viejo anuncio su llegada con un cálido recibimiento.

Tu debes ser Fujitora!
Me alegra verte por aquí - sonrió 
((El ultimo heredero... ¿O me equivoco viejo ermitaño?)) dijo susurrando y apaciguando el sonido con una de sus manos libres

Viejo sin Nombre
En fin... quizá algún día nos conozcamos mejor...
Te he convocado aquí por petición de Nakia, 
¿La conoces? pregunto asombrado
no porque sea algo relevante,
solo para avisarte que esa jovencita esta algo desquiciada
Por su entusiasmo parecía algo importante aunque eso lo veras Tú:

El Jounnin llevaba consigo una tetera y una taza de té la cual no paraba de beber, aparentemente un sujeto de considerada edad, algo arrogante, sumamente extrovertido, pero con un cierto halo de amabilidad que lo rodeaba, sin duda un Imperial cercano a retirarse... Antes de aparecer el Instructor, tras de Fuji aparecieron dos sujetos, jóvenes aprendices con túnicas azules, los cuales dejarían dos banquitos y una pequeña mesa en las afueras de la entrada para instantáneamente retirarse. Sí, un pequeño montaje para disfrutar el Té observando como las niebla poco a poco empezaba a disolverse junto con la claridad del día.

Toma asiento por favor, gustas de un Té? Preguntó mientras dejaba una pequeña tacilla de cerámica sobre la mesa.

El viejo se sentó y continuo el informe.

Según las palabras de nuestra compañera
tiene información sobre el paradero de tu clan...
¿Extraño no?¿ Pero quien soy yo para juzgar?
Ya sabes... si te interesa esto me dijo que te esperaría en la costa Sur...

Entre tanto y tanto resultaba por ser una conversación fluida y ¿casual?, algo desinteresada por parte del Jounnin quien disfrutaba su Té y la peculiar compañía de viejo Kaguya. Realmente fue un mero aviso de posibles novedades con una pequeña advertencia sobre aquella Shinobi.

Cita:
Aclaración
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Pasaron breves momentos desde mi llegada a la puerta de la academia, repiqueteaba la punta de Teitoku contra algunas de las piedras del suelo para hacerlas chocar entre ellas, a modo de minijuego para combatir la espera de esos instantes. Sin embargo, llegó el momento de que alguien apareció, y la figura esbelta de un hombre de avanzada edad apareció para recortar distancias conmigo, como si de un conocido de toda la vida se tratase, con toda la confianza que creía tener conmigo para tomarse esas licencias, me saludó a expresos centímetros con un ánimo desenfadado y seguro.

- Eh eh... ¿Último heredero? ¿Oiga? -

Le pregunté extrañado, con un gesto incrédulo e intentando romper con aquella atmósfera discordante con mi rareza, mientras veía como sacaba consigo una tetera que rellenaba una taza particular. No obstante, si aquello del heredero me descolocó, lo que añadió a continuación fue algo que aumentó mi alarma, mi curiosidad y mi asombro.

- ¡¿NAKIA!?! -

Exclamé interrogativamente abriendo los párpados, pues sabía de boca de la joven, que portaba información acerca del clan, que de alguna forma u otra poseía pero que desconocía por completo como la obtendría, y que aguardaba el día en el que volviera a coincidir con ella para saber todo lo que la hoshigaki conocía. 

- A si que esa joven de nuevo... No más de una semana atrás ya tuvimos contacto con ella pues estaba siendo perseguida por rebeldes... No es que yo me considere un imperial modélico, ni tampoco un rebelde, pero impera en mí cierto sentimiento de justicia y verla acorralada en aquella iglesia me impulsó a escoger un bando... aunque este no me identifique como tal -

Le contesté a si la conocía, sumando un movimiento descendente con la cabeza con el que acepté a sentarme a beber té con el viejo shinobi, era raro en mí declinar una oferta de un té de por medio, aunque obviara la calidad de este. Y parecía que tras iniciar algunos primeros tragos, el viejo soltó la información que en teoría la alocada joven le prestó para entregarme, lo que provocó que apretase labios y entrecejo cuando confirmo mi suposición de que la chica sabía algo sobre el paradero de gente de mi clan, sin embargo, ¿Sabría el viejo algo más al respecto?

- Me gustaría conocer tu nombre, aunque me hayas adelantado que este acercamiento no duraría mucho... y respecto a la información que me revelas que Nakia quiere entregarme, te pediría personalmente algo más de recelo al respecto, es un tema sensible para mí y airearlo como sabanas a secar en plena calle me hiere, aunque te agradezco que estés de intermediario y bueno... también por estos sorbos de té ¿De donde es si puede saberse? -

Intentando marcarle ciertos límites sobre el tema al viejo, pero quitándole hierro al asunto a la par, le contesté a esas palabras que añadió mientras permanecíamos sentados uno frente al otro dando sorbos a las tazas.

- Y con que en la costa sur... ¿Hay algo que deba saber más al respecto? Desconozco si la conoces, pero me gustaría saber más detalles de este reencuentro si pudiera ser... algunos detalles extra con los que ir más precavido, nunca se sabe -

Pretendía mostrar interés, pero intentando transmitir ciertos aires de confianza con el viejo, ir en su onda, aunque mi estado interior fuese lo más analítico que podía frente a lo que escuchaba, como lo escuchaba o lo que veía, atravesando cada retazo gestual del hombre para sacar cualquier tipo de información subliminal que pudiera delatar algo, ¿No era sumamente extraño este tipo de cita? No es que me fiara, si no que las formas en las que estaba recibiendo todo este contenido me resultaban extrañas... tan extraña como lo era Nakia, quizá si que todo esto entonces podría encajar.
[Imagen: 20231127_013118.gif?ex=664f3727&is=664de...813aae68f&]

~ Narro ~ Hablo ~ Pienso ~
pasivas
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Ciclo de Tinieblas

He He solo bromeaba, 
((Es que desde hace años no veo a ningún Kaguya por aquí)) Susurro
No te preocupes, soy una tumba...

El Jounin rellenaba las tacitas en cada oportunidad que se vaciaban, se notaba gustoso por la conversación pero también notó su poca fragilidad con el tema y pidió disculpas.

Asique la conoces... 
Bueno eso me deja un poco más tranquilo
Por tu expresión  veo que estamos hablando de la misma persona! Respondió riendo

Ya veo, pensé que me conocerías, 
me disculpo por mi arrogancia.
Mi nombre es Arata Yamada, ultimo líder del Clan y actual Jounin a cargo de instruir a los nuevos...
Una historia larga... más de 30 años que vivo aquí y ejerzo como Shinobi,
aunque esos tiempo ya quedaron atrás...

En cuanto hubo pronunciado su nombre su gesto cambio a uno serio, pero solo por unos instantes, como si hubiera recordado todo su linaje con cada una de las letras en su nombre.

No te preocupes, si soy bueno en algo es en guardar información,
esta Reunión nunca sucedió. Respondió

¿Te gusta el Té?
Lo descubrí recientemente, ya ves que su color verde resulta extraño
pero también ayuda a relajar la mente y el cuerpo,
té Sencha.

Una conversación fluida donde poco a poco aquellos dos grandes hombres se conocían y compartían información, todo bajo control y sin nadie alrededor, si Arata tenía tanta seguridad para hablar al aire libre es porque sabía que no había nadie escuchándoles. Los dos asistentes uniformados se mantenían alejados de la escena sin escuchar palabra alguna, teniendo en cuenta la fragilidad del asunto es que fue precavido con el horario de Reunión para no llamar atenciones indeseadas y más sabiendo como se maneja el Imperio, aquel Jounin era un señor astuto, bajo su apariencia de hombre relajado había un Jounin experto en combate y un gran estratega informático, sin dudas un hombre sabio.

Tengo entendió que allí vive Nakia,
lejos de la civilización,
No debería ser muy difícil encontrar su rancho
Justo frente a la playa, una pequeña choza hecha con sus manos... Respondió mientras tomaba un trozo de papel de su bolsillo y empezaba a realizar unos bosquejos.

Con unos trazos inscribió un pequeño mapa con algunos puntos claves hasta dar con el hogar de la Joven, unos cuantos kilómetros hasta la costa y a partir de ahí dos kilómetros más...

Arata se quedó pensativo por algunos momentos haciendo un gesto con su mano y dejando la taza recientemente vacía en la mesita.

Me dijo que esperaría en su casa hasta la mañana siguiente...
Mira, se que la joven es una extremista con los rebeldes,
(( no te preguntare si tu eres Rebelde, prefiero no saberlo )) Susurro
Debo admitir que a mi también me parece extraña la convocación
¿ Como es que la niña tiene información de tus ancestros?
(( Pues no lo se, hay misterios en esta villa que están ocultos bajo la protección de los poderosos ))
Supongo que si no haz hecho nada para enojar a esa pequeña todo saldrá bien,
aunque viéndote, hombre! no creo que sea un problema, claro en caso de que tuviese segundas intenciones...

La tardecita daba inicio oscureciendo en pequeña medida aquella Isla de tinieblas mientras la conversación de a poco concluya, un encuentro casual sosegado por el interés de conocer la historia verdadera, una de tantas otras historias del pasado, que por razón alguna, "la niebla y el Mar " mantenían ocultas.

Fujitora, ya debo irme Dijo mientras le hacia una seña a sus ayudantes los cuales desmontarían las sillas y mesas.
Espero verte de nuevo por aquí,
he disfrutado hablar contigo

El viejo se incorporo y extendió un saludo con su mano para luego retirarse lentamente de la escena en dirección a la zona residencial junto con sus dos uniformados discípulos.



A partir de aquí queda un viaje por recorrer hasta dar con aquella casa, o bien esperar a encontrarla en otra ocasión, allí se presento una oportunidad, mientras tanto Fuji se quedo en la escena pensativo, en su mano sostiene el mapa realizado anteriormente con las indicaciones correspondientes. Las primera luces de la ciudad se encienden y consecuentemente empieza a circular gente por los alrededores, un gran grupo de Gennin en dirección a la Academia vuelven de su misión, hombres y mujeres cierran sus tiendas otros abren sus negocios, la ciudad de prepara para recibir la noche junto con sus diversas actividades.
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Última modificación: 07-02-2024, 03:18 PM por Fujitora.
Al hilo de la conversación, esta, gracias al té en parte también, fue haciéndose algo más llevadera para mí y cada sorbo de la taza reconfortaba con sus toques amargos pero afinados silvestres, mi paladar relamía el líquido contra el cielo de mi boca para saborear todas sus notas una vez cerraba los labios y apartaba la taza de estos, no esperaba catar un té tan equilibrado y particular hoy de la nada, pero sin duda, aquel resultaba bastante gustoso a comparación de los que se servían por la zona.

Me limité a escuchar atentamente y a asentir con la cabeza las nuevas aclaraciones que el viejo, ahora conocido como Arata Yamada, afirmaba mientras seguíamos bebiendo cordialmente la infusión. Por sus palabras, transmitía una experiencia sin igual en los ámbitos que desempeñaba, a los cuales hacia referencia entre otros siendo instructor de la academia, y viendo los aires con los que desempeñaba su conducta, quizá antaño hubiera sido sumamente insoportable como tutor para mí, no obstante, con una ceremonia improvisada del té como la que había montado en un santiamén, me hubiera ganado como alumno.

- Sin duda no me importaría tener alguna que otra ración guardada en casa para tomarlo, ¿Es comprado o de elaboración propia? -

Le pregunté siguiendo su aclaración del té. Y seguí escuchando sus palabras, las cuales estaban sumamente medidas para que me fueran transmitidas con seguridad, detenimiento y discreción, o el anciano llevaba preparando esta reunión días y semanas o sin duda alardeaba de un talento especial para comunicar información clasificada como ningún otro. Siendo una cosa u otra, al término de la conversación concluyó dibujando rápido un esbozo de lo que parecía ser la ubicación donde podría encontrar a Nakia, haciéndome fruncir el ceño mientras veía los garabatos y anotaciones que se representaban en el papel.

- Señor Arata... mi posicionamiento hacia los bandos establecidos por el sistema actual está tan lejos de los imperiales como del bando rebelde, si le sirve de consuelo, digamos que mi bando es mi clan, pues es lo único con lo que me siento representado y por lo que daría hasta el último aliento -

Añadí susurrando igual, sonando firme pero cercano, mi transparencia respecto a mis ideales era algo que no solía darme miedo a expresar, aún con la situación que se vivía respecto a un bando u otro, detestaba ser encasillado como tal de forma casi automática, y hacia el viejo Arata, a pesar de que lo conocía tan solo de unos instantes, no me procesaba temor a la hora de revelar mi orientación político-militar.

- Y respecto a esta chica, ignoro de momento como obtuvo tal información, por eso es algo que también sacude mi atención y mi curiosidad, sin embargo, es una kunoichi digamos... difícil de tratar, y por mi parte me involucré en su favor tiempo atrás por como la situación estaba volviéndose en su contra... soy un férreo y tozudo buscador de injusticias, a pesar de como y donde provengan estas para mi desgracia, pero intento que no se produzcan, nada más hay que verme como tengo la cara... pero eso es otra historia... le agradezco el rato, la información y sobre todo el té señor Arata, espero volver a coincidir con usted para un encuentro similar -

Acabé agradeciendo el tiempo y el gesto del anciano con un último sorbo de la taza hasta vaciarla, sería una ofensa dejarlo ahí. Pronto, los 2 asistentes desmontaron el tinglado y fui recuperando mis pasos tras estar un breve lapso de tiempo pensativo, reflexionando sobre los pareceres que acontecían las revelaciones que me había hecho llegar el viejo.

- Me puede más la curiosidad de saber que guarda la hoshigaki, y no habría hambre, sueño o sed que pueda ahora frenar el hecho de encontrarla y conocer que esconde... maldita sea -

Me dije hacia mis adentros evaluando la situación en la que me encontraba.



 
~ Camino al sur

Volví con premura a casa para recoger todos los indispensables ninjas y prepararme para la aventura, una incursión a través del sur del país en aras de encontrar a la inestable hoshigaki, la cual no es que provocase en mí unas fervientes ganas de reencontrarme con ella, pero el mero hecho de que tuviera información relevante del clan, era un hilo que estaba dispuesto a tirar a pesar de la repercusión que tendría que soportar por lo que pudiera acarrear.

Ya fuera de la aldea, comencé una andadura decidida, apliqué un sello para monitorear una enorme zona de mi alrededor por 2 sencillas razones. Eran tiempos raros, y cualquier tipo de prevención para salvaguardarse de cualquier impedimento era bien recibido, y 2, era una acción esencial si quería encontrar a la joven, que aunque tuviera las indicaciones de Arata, el radio de acción de 80 metros a la redonda me ayudaría a localizarla con más exactitud una vez me estuviera acercando.

Kanchi no Jutsu

Mis andares iban acompañados del apoyo de Teitoku, que apoyaba su extremo sobre el suelo para armonizar el paso de la pierna izquierda, mis ojos permanecían cerrados, mis oídos en alerta y la cabeza llena de conjeturas sobre que podría llegar a decirme Nakia. Estaba preparado para lo que fuera que tuviera que oír.
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Costa Sur
Anocheciendo, 20 hs
Ciclo de Tinieblas [parte II]


La luna asoma al paso que Fujitora recorre la Isla, un sendero vacío e iluminado en ocasiones por pequeños destellos lunares, hojas secas e incertidumbre, su paso es acompañado por la espesa bruma y la luz de la luna llena, a cada minuto las Tinieblas crecían dando una sensación de misterio para cualquiera que no estuviera acostumbrado. A medida que avanzaba, su cercanía con el Mar era revelada gracias a su olfato que detectaba la sal en el aire.

A medio camino el Shinobi dispondría un sello para ejecutar una técnica sensorial la cual revelaría chakras en 40 mts a la redonda pero sin hallar nada. Aproximadamente dos horas de viaje a paso moderado hasta dar, por fin, con la playa. Unos doscientos metros hacia el Este se puede observar una pequeña choza de madera decorada con el esqueleto de un tiburón, debido a la espesura de la niebla solo se pueden ver detalles de esta y una pequeña luz proveniente del interior. A medida que te acercas observas con detenimiento la muy humilde choza apenas sostenida con unos tablones, un rancho bastante sencillo, y en su interior su dueña, Nakia.

Desde fuera se escuchan ruidos de olla y el sonido de un cuchillo cortando carne, la Kunoichi parece no haberse percatado de la presencia de Fujitora, el aroma a sal ahora se mezcla con la humedad del ambiente y el aroma a guiso de mariscos. Desde el frente de la casa se observa un tubo el cual asciende y libera humos propios de la fogata en el interior del Hogar. 

[Imagen: b077c9a875656b989ec2afc73eb86cea.jpg]

Una modesta casa levantada sobre la arena y apoyada sobre varios pilares y vértices para quedar sostenida en el aire en el caso de que la marea subiese, un pequeño ranchito deteriorado y oxidado se posa allí, sobre la misma nada, un lugar que muy pocos visitan debido al publico conocimiento de que Nakia vive ahí, una playa seleccionada especialmente para no ser molestada por curiosos o turistas, un lugar de completa paz, donde el único sonido sostenido es el oleaje.
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La larga caminata me llevó finalmente a la costa, y el olor a mar se volvía tan notorio como la humedad que se palpaba en el ambiente. Algo diferente a la de Kirigakure, pero cuyo manto salpicaba a la vegetación y a cualquier rincón de la zona, algo que notaba en mi yukata, que presentaba una fina capa ligeramente mojada dada también la hora, pues la caída del sol acentuaba lo que parecía una llovizna perpetua. Consultaba el mapa improvisado del viejo Arata detenidamente asimilando las señales del papel con las que se representaba en el terreno, llegaban a mi vista las palmeras, las rocas, la costa y en mi plano mental se dibujaba el entramado de caminos que había cruzado y los que me quedaban por surcar hasta llegar a la zona.

- Debería de estar ya cerca -

Me dije, cuando al llegar al fin a la playa para obtener una visión mucho más limpia y diáfana de la que ofrecía el espesor del bosque, pude divisar un elemento no natural que se alzaba a lo lejos, resaltando por su volumen y por una tenue luz, por lo que fuera o no mi destino final, sería conveniente comprobar con cautela aquello que se asemejaba a una casa.

Agudicé el oído, mis instintos se intensificaron, y mi monitoreo de las cercanías de aquella amorfa guarida la engulló cuando rebasó mi límite perimetral, determinando que había alguien en su interior.

- ¿Nakia? -

Me pregunté, pues en ese momento no podía permitirme el lujo de pensar en alto, pero tras consultar por una última vez el mapa, no cabía duda de que en primera instancia debería ser ella la que yacía en el interior de aquella particular estructura, que por su apariencia destartalada, podría cuadrar perfectamente con la guarida de la joven hoshigaki. Recorté algunos metros más con extrema cautela, a mi nariz llegó el embriagador olor de fuego y cocina, a mar, a guiso, a marisco... Olía de maravilla. Me movía encorvado intentando evitar ser visto a través de su ventana, la cual vigilaba para verificar que se trataba de la kunoichi, cuando en un vaivén pude divisar su contorno y reconocerla, sin duda era ella. Acto seguido, una vez verifiqué a Nakia, dirigí mi atención al entorno, tenía asegurada a la joven pero quería cerciorarme de que estábamos solos, por ello concentré mis esfuerzos en monitorear un mayor área, aquel perímetro creció hasta 80 mts a la redonda y para mi suerte, no había nadie ni nada de lo que debiera de preocuparme, el terreno estaba limpio.

Sin rebajar aquel nivel de seguridad, mi limité a caminar por la concentración hasta la puerta de la entrada con sigilo, la arena de la playa camuflaba mis pasos, y mis pisadas de samurai disimulaban cualquier ruido, 5 metros, 4, 3, 2, 1... Alcé a Teitoku y con su extremo inferior golpeé comedidamente la puerta con la intención de no alterar a la joven, a la cual ya conocía y no es que me esperase una respuesta estable, pues dadas las circunstancias, era casi de noche e ignoraba de que me estuviera esperando a esas horas, ya que el anciano Arata mencionó que lo haría hasta la mañana siguiente, y ya que quería evitar un supuesto malentendido, acompañé los toques de la puerta con una breve y desenfadada presentación.

- No creo que quieras comerte tu sola lo que sea que estés cocinando ¿No?... huele tan bien que se percibe a kilómetros -

Pretendía que me identificase por la voz, y tras ella, aguardé en la puerta con los párpados cerrados como los solía tener, sereno, y con Teitoku apoyada como el bastón que era. Puesto que la joven era lo más impredecible que se podría experimentar, me esperé todo tipo de reacciones de su parte tras abrir la puerta, si es que la abría, algo que también contemplaba. De igual forma, aquí me tenía tras su citación, por lo que estimaba que pronto conocería aquello que quería contarme.
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Ciclo de Tinieblas [parte III]
Fujitora! 
Pasa! pasa! Exclamó desde adentro indicándole su libre acceso.

Eran de esas puertas que costaba abrirse, un poco de fuerza para levantarla hacia arriba y luego se movía. En el interior de la pequeña choza, dándole la espalda a la puerta, se encontraba Nakia, con un cuchillo de tamaño considerable cortando partes de calamar. El pequeño monoambiente dispone de una cocina en el extremo derecho y en su izquierda una pequeña mesa circular iluminada por una lampara de aceite. Al costado de la puerta algunas herramientas y armas shinobis arrojadas en el suelo, junto con lanzas de caza. Aproximadamente una superficie de 4 x 4 metros, un sitio acogedor.
[Imagen: d40d875ba6b5cb10c07f41af14dd2494.jpg]

En cuanto hubo entrado, la joven dejo el cuchillo sobre la mesada y tomo una tela para limpiar sus manos.

AH! Llegaste justo a la cena!
Típico de Rounin! Exclamó con sarcasmo
Siéntate! Adelante, sirve unas copas Dijo mientras señalaba una mesa junto a unos cojines que se hallaban en el rincón opuesto.

Aparentemente Nakia lo recibía en su hogar como su invitado, aunque las dudas sobre la situación generaban algo de tensión en el ambiente. La postura de Nakia era la típica, siempre segura de si misma, ruda, con su mueca de media sonrisa que demostraba, en parte, su falaz empatía y al mismo tiempo delataba su interés particular. Un encuentro forzado o más bien rebuscado que se convertiría en las respuestas que tanto tiempo estuvieron ocultas.

Entonces... Supongo que el Viejo ya te dijo... ¿No? Preguntó.

La comida estaba preparada y la joven bestia no demoro demasiado en servirlas en unos cuencos y luego sobre la mesa. Una botella de Sake junto a tres pequeñas tacitas estaban allí mismo. 

No hubo presentaciones ni mucho menos saludos formales, era lo más parecido a estar en un Bar en el fin del mundo, suerte que Nakia estaba amable y le sirvio un plato de comida a Fuji, si, con sus propias manos, Nakia era lo opuesto a servicial, pero en esta ocasión estaba de muy buen animo.

Si viniste hasta aquí es porque buscas la verdad
Pero las verdades cuestan! Haha! Sonrió con malicia y bebía del caldo
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Kanchi No Jutsu

Plantado allí, frente a la puerta de madera desgastada, esperé hasta que la voz de Nakia se alzó, interiormente, me removió un pequeño sentimiento fraternal que poco a poco se apagaba tras acordarme de lo desesperante que podía llegar a ser la hoshigaki. Tras su permiso, abrí la puerta con algunas dificultades ya que por su desgaste, paracía complicarse su apertura, después la cerré a mi pasó y me interné encontrándola en la parte derecha, cortando en su cocinita, realicé una rápida batida visual por el espacio, el cual se presentaba diáfano y humilde.

- Antaño podría vivir aquí perfectamente... de hecho, me entran ganas de volver a aislarme viendo esta maravilla -

Pensé mientras repasaba todos los detalles que cundían por la estancia, aguardando expectante a la joven en el centro de esta.

- Veo que no te lo montas nada mal por aquí, ¿me gusta tu estilo sabes? -

Dije sinceramente, aunque resultara jocoso o incluso irónico mi tono, sin embargo, ambas cosas estaban lejos de mi conducta cada vez que me comunicaba con conocidos o gente estimada. La hoshigaki, pronto me dio licencia para servir un par de copas, las cuales se hallaban en la mesa, justo al lado, algunas botellas de sake propias del país, aunque todas abiertos y sin acabar. Alcancé la botella más llena que había y rellené las 3 copas

- Aah si, el viejo Arata, pero no soltó mucha prenda al respecto, solo que querrías verme aquí porque tenías información sobre mis ancestros.... por cierto, tiene un té excelente, aparentemente parece un hombre algo particular, aunque no tengo el gusto de conocerle a fondo... ¿tu si? -

Camuflaba la expectación al tema central que me había traído hasta ahí, aparentando naturalidad, apoyándome en Teitoku mientras terminaba de servir la segunda copa con la mano restante, y apoyando posteriormente la botella entre ellas.

- Por cierto Nakia... ¿esperamos a alguien? -

Pregunté con tranquilidad pero con perspicacia, pues si mis cálculos no fallaban, sobraba un vaso ahí en la mesa. ¿Era costumbre de la joven tener 3 tacitas cuando en principio íbamos a ser 2? algo a priori no encajaba, y monitoreaba la zona sin encontrar a nadie por los alrededores, por lo que mi curiosidad se veía alimentada por tal detalle.

Nakia, se acercó hasta la mesa con lo que parecía ser el guiso acabado, tomé asiento ayudándome de Teitoku, y lo sirvió con las manos sobre mi cuenco, el gesto podría ser totalmente incomprensivo para alguien con un juicio normal o con una visión de la realidad y los protocolos sociales normativos, sin embargo estaba con ella, por lo que no me sorprendía en absoluto aquello, y meno aún su forma de iniciar lo que parecía ser la esperada conversación.

- Si... obvio que vengo aquí en busca de respuestas Nakia, es algo serio para mí y tengo bastante expectación con lo que tengas para contarme... en cuanto a los costes, todo dependerá de que tengas y que pidas por ello, sin embargo... esos costes de los que hablas no sé si estarían cubiertos con cierta deuda a mi favor por sacarte de aquella iglesia... jajaja ¿la recuerdas? -

Dije mientras removía con una cuchara de madera puesta en la mesa el caldo, el cual humeaba en exceso, transmitiendo con esto su elevada temperatura para tomarlo, aunque la hoshigaki ya hubiera empezado a sorberlo. A guardaba a las respuestas de la joven, especialmente por el número de tazas y respecto a esos costes de los que hablaba.
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Última modificación: 14-02-2024, 07:01 PM por Musacus.

Ciclo de Tinieblas [parte IV]


Así es Fujitora, le dije al viejo que necesitaba hablar contigo...
Hmm... ese viejo esta algo loco, es el Único que se atreve a hablarme Hihi. Respondió riendo
No es amigo, en su momento me recibió como cadete de la Academia, pero eso fue hace años ya...
es una de mis fuentes... ya sabes...

La conversación fluía con tono seco por parte de la Hosighaki sin ningún tipo de gesto demostrativo, solo devoraba su plato y bebía del Sake mientras conversaba con su contraparte.

¿Qué dices? Aquí solo estamos tu y yo... ¿Acaso estas nervioso? HAHA!
No te preocupes por la tercer taza, yo la bebo... Respondió mientras tomaba la segunda tacita y la fondeaba de un sorbo.

Poco a poco el verdadero interés se esclarecía con las palabras de la Joven bestia, siempre manteniendo su tono irónico y arrogante.

Hehe! si, supuse que te interesaría saber un poco de la historia ¿no?
PUES BIEN!
Solo deberás acompañarme unos kilómetros mar adentro... Exclamó mientras llenaba su tacita nuevamente y observaba con frialdad al viejo.
PERO NO TE APRESURES! 
Primero comeremos y beberemos, en cuanto la luna se ponga en lo alto del cielo podremos salir...
Hay que disfrutar la comida al máximo, la vida de los Shinobis suele ser efímera...
Me sorprende que un viejo como tu aun siga con vida...

En cuanto a lo enunciado por Fuji respecto a aquel día en que la había ayudado ella simplemente lo ignoro e hizo una mueca, en los pensamientos de Nakia esta la idea de que nada ni nadie puede ayudarla, solo ella es capaz de salvarse, aun así lo acontecimientos fueran de otra forma, la mujer es tozuda y mantiene su fuerte carácter el cual hace que todos los demás sean hormiguitas para ella.

La luz de la mesita iluminaba los rostros y generaba sombras en toda la habitación, el contraste de temperaturas entre el interior y exterior provocaba que las pequeñas ventanitas circulares transpirasen gotitas que poco a poco descendían sobre el vidrio. Una pequeña hoguera en el interior de la Choza era la que mantenía cálido aquel monoambiente, en ocasiones se arrojaba un leño para conservar el fuego. Por fuera de la choza una suave brisa se levantaba desde el Mar, provocando un constante goteo sobre las chapas generando el ruido típico de lluvia sobre chapa.

La joven Nakia en cuanto hubo vaciado su caldo se levanto y acerco la olla más grande hacia donde estaban sentados, de esta forma cada quien podría servirse cuando gustara otra porción. Un encuentro prometedor e inusual, la tranquilidad de la joven Bestia contrastaba con sus palabras y la poca empatía para con los ancestros de Fuji, esto era parte de su personalidad y su manera de vivir despreocupada, lo más importante para ella eran sus propios intereses, y claro, estarían por encima de todo lo demás.
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- Ey ey ey... ¿Cómo el único?, ¿Qué hago yo aquí entonces? -

Una frase irruptiva pero amigable, para hacerle saber a la hoshigaki que podía considerarme algo más que un contacto eventual en la niebla, vale que había venido por medio de su invitación, pero muy amablemente hubiese accedido igual aunque no estuviera el tema de mi clan sobre la mesa. 

- Vivir en soledad te hace perspicaz, y soy rápido con los números también, por eso me extrañó ver una taza extra para alguien más... discúlpame igualmente -

Le contesté ante su desenfada respuesta, al fin y al cabo, toda medida que se tome fuera de las villas no está de más, y dudaba de la posición de la cabaña así como de su seguridad, ya que entendía que si la chica fue perseguida semanas atrás, también era posible que alguien la acechase o la coaccionara para que atrayera a más imperiales, aunque yo no me considerase como tal. Al hilo de lo último, comencé a tomar el guiso de Nakia con gusto, el sabor a mar estaba muy presente, y aunque hubiera algunos fallos de ejecución durante el cocinado, la calidad del producto que había usado para tal guiso se notaba por su frescura, era inmensamente mejor que al que estaba acostumbrado a comer en la villa, no era de extrañar que lo hubiera pescado y casi acto seguido cocinado. Escuché atento a sus palabras, las cuales empezaban a tirar del tema que me trajo hasta aquí, sin embargo, había un detalle que a priori mencionó y que no contemplaba, la tenía que acompañar mar adentro.

- Con que mar adentro... ¿Y se puede saber a que viene una petición tan particular?, soy hombre de tierra firme al fin y al cabo... ¿Hay algo mar adentro que de alguna forma necesites para transmitirme la información? aquí en tu cabaña se está bastante bien, pero si no hay remedio... aun así, ya podrías soltar prenda y avanzarme algo de lo que tienes, vine desde bastante lejos y encontrar la casa fue difícil, me ayudó más el olor de tu guiso que las indicaciones del viejo -

Y ante su insinuación respecto a mi edad, no me quedé callado, disfrutaba de la conversación, la comida y al fin y al cabo también de la actitud de Nakia, al menos por ahora que no colmaba mi paciencia, y su juego era soportable todavía, más adelante quizá me arrepienta.

- Eh... ¿Viejo?, ¿Qué insinuas?, Estoy bastante lejos de la edad que te piensas seguro, sé que mi piel está algo castigada, pero llamar viejo a alguien de 37 años me resulta hasta insultante JA, no todos podemos tener la piel tan lisa y de porcelana como la tienes tu chica -

Asentí y tras ello se produjo un silencio interrumpido por los seguidos sorbos de cada uno, seguido de la olla que la kunoichi acercó hasta la mesa para repetir. La joven comía vorazmente, pero yo me limité a acabarme el plato y a no continuar, la ingesta había sido suficiente y quien sabía lo que deparaba la mente de la joven, o incluso que podríamos encontrar ahí a fuera en la noche sobre el mar, que al menos para la tranquilidad de todo hombre precavido y sabio, ni era sin luna ni era tormentosa.

- Por cierto Nakia, te voy a ser sincero respecto a todo esto, aunque sé que eres inteligente y puedes vérmelo... No soy alguien apto para tanto vaivén y prefiero las cosas claras y concisas, creo que te lo dejé claro en aquella cueva, y por ello, sabes que este tema del clan Kaguya tiene para mí una importancia tal que es la que me anima a seguir amaneciendo día tras día... PERO, también vengo aquí por tí, hay coletazos de vacío contigo que me gustaría conocer, pues seguro que ambos guardamos más similitudes que diferencias que podrían separarnos, y aún así, puedes deshacerte de la tosca armadura con la que te armas, y que seguro que ya llevas amarrada a tí, no soy de esos shinobis al uso de pretenciosos y juiciosos pareceres, creo que salta a la vista... si estoy dándote un voto de confianza con algo tan interno mío, tu si quieres también puedes hacerlo -

Sonaba a ultimátum pero era una declaración de intenciones hacia ciertas formas para facilitar la conducta de la joven, no desistía con ella y aunque fuera como la séptima vez que le hacía saber que podía confiar en mí desde que la conozco, sabía muy de primera mano que nunca se echa en falta una mano tendida nunca, por muchas veces que se ofreciera.
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Última modificación: 19-02-2024, 02:25 AM por Musacus.


Deber de familia


Lo miró con ojos desconcertados, tenia un buen punto, y había dado justo en el clavo. ¿Por qué recibía al hombre tan amablemente? Amigos no buscaba ni mucho menos simpatizar con la gente...

Hehe! Eres una excepción! 
Solo por esta noche... 

En respuesta a los interrogantes Nakia golpearía la mesa con uno de sus puños demostrando su poca tolerancia a los cuestionamientos ajenos,  también se la veía algo predispuesta más allá de su tozudez, una actitud que poco a poco generaba sospechas. No era una cena de agradecimiento ni nada por el estilo, el acontecimiento es meramente personal, un ajuste de cuentas... O ¿Un recuento de la historia...?

Así como escuchaste Viejo... Mar adentro...!
¿¿Qué no te preguntas donde están los huesos de tu familia??
Pues déjame decirte, Fujitora, puedo llevarte directo a su tumba...

En un repentino movimiento y con total naturalidad la joven se pondría de pie  para luego acercarse a un estante con decoraciones, tomaría una caracola peculiar y la señalaría con su mano.

Puedo bucear... 
¿Viste el tiburón de afuera?
Fue mi alimento de la semana pasada... Dijo mientras devolvía la caracola a su lugar.

Aprovecho la conversación para coger un atuendo de piel, vestirlo y encapucharse. Luego observo unos momentos el Mar a través de la pequeña ventana, evitando responder algunas preguntas que le hacia Fuji y cerciorándose de las condiciones del clima. 

No busco amistades Fujitora
solo estoy siguiendo mi deber... Respondió en tono agresivo

Ya es hora de partir Viejo! Exclamó dando un Ultimatum a la cena.

Luego de preparar sus vestiduras la Joven Hoshigaki se acerco a la puerta para luego comenzar su viaje hacia la orilla del Mar, era el momento preciso en que la marea estaba en su punto más bajo, hasta alcanzar el agua eran doscientos metros de piedra. Una vez allí empezaría a caminar por el agua hacia mar adentro.

Mientras caminaban, la joven Nakia comentaría, en un tono reflexivo y algo más amistoso.

¿Asique no sabes nada eh?
¿No es extraño? los secretos que andan oculto bajo el Mar, los secretos de las naciones...

Fue breve, casi como un pensamiento salido de su boca, algo inocente siguió su camino sobre el Mar que ocasionalmente estaba tranquilo.

La niebla en cambio, no cesaba en lo absoluto, opacaba en gran medida el campo de visión, aunque gracias a la luna podían ver con algo de claridad sus pisadas sobre el agua de Mar. El resto era silencio y pensamientos compartidos, un cambio total de escenografía, no faltaría demasiado para llegar a su supuesto destino, un antiguo Naufragio oculto en lo profundo, que gracias a la marea-baja hacía mas sencillo su acceso al reducir la profundidad del Océano.

Habrán sido unos kilómetros desde la costa hasta que la Hoshigaki detuvo su marcha espaldas a Fujitora. Su silueta era apenas iluminada por la claridad de la Luna, allí parada se quito parte de su atuendo y lo dejo hundirse en el Mar. En tono serio comentó:

Hemos llegado...
Aquí pondremos fin a esta Historia...
No más Kaguyas... Es mi deber... Susurraba en tono escalofriante recordándose a si misma lo que le había enseñado su Familia
Terminar el trabajo de mi familia

Nakia
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Expectante por seguir viendo que más podía llegar a mostrarme la hoshigaki, una acción detuvo mi contemplación cuando la misma sin ton ni son, atizó la mesa con una sobre pronunciada determinación. ¿Qué le molestó de todo aquello que le pregunté? Sin duda, una duda vacía y carente de respuesta fijo, pues la joven siempre había sido extremadamente hermética y muy reservada en cuanto al trato social, aunque en esta cita tuviera entre comillas, a un conocido delante. No obstante, a pesar de mi advertencia anterior, Nakia parecía no entender tal grado de importancia para mí sobre mis antepasados así como el respeto ante tal asunto, y su obscena boca parecía no filtrar impuntualidades formales al respecto cuando además de llamarme viejo, volvió a sacar sin ningún tipo de tacto el tema central, aún así, lo dejaría pasar.

- E intuyo que tal tumba está en el fondo del mar... -

Dije casi como un acto reflejo sin reparar en aquello, solo por salir del paso, ya que era obvio y redundante que se refería a una localización marítima donde se encontraban pistas o restos de mis antepasados, pero estaba con la mente en otra cosa, pues solo podía intentar comprender aquel repentino rebote de la inestable joven, sin embargo, aunque hacía desconfiar lo contemplaba. Pues para colmo, tras añadir sin sentido que comió un tiburón que la misma cazó, su tono se mostraba algo más agresivo que de costumbre, alertando mi extrañeza, que por si cabía más continuó faltando al respeto. Me limitaba a contemplarla en silencio evaluando que la estaba llevando a comportarse así, le seguía la corriente y sin mediar palabra, la seguí hasta que nos internamos en el mar.

Kanchi No Jutsu

La marea se presentaba baja, además de tranquila, y seguía monitoreando la zona de 90 mts a mi alrededor ya que la niebla se presentaba densa, pues seguía sin descartar un tercer integrante a la cita. Coloqué a Teitoku en mi cinturón, ya que caminar sobre pleno mar garantizaba no toparse con obstáculos, por lo que tras colocar mi bastón katana ahí, recogí los brazos sobre si mismos en L sobre mi plexo solar, entrelazándolos con la ayuda los dedos, y así los dejé mientras nos adentrábamos mar adentro.

No contestaba a Nakia, la seguía con el ceño fruncido y esperando a que diera el alto, llegaba a pensar que todo esto empezaba a ser una broma de mal gusto, y aunque esperaba que no lo fuera, tampoco lo descartaba. Caminábamos en el silencio del mar, con el fondo del brillo de la luna que bañaba con su luz las crestas del suave oleaje, habíamos dejado la costa ya bastante tiempo y calculaba que estábamos alejados de esta por varios kilómetros, cuando de pronto, solo se escuchó un caminar, el mío, Nakia quedó a mis espaldas y aunque seguía andando sobre el agua, tras las palabras de la hoshigaki me detuve, pues resultaron especialmente amenazantes, y la situación intuía que se pondría peligrosa.
Contenido Oculto

- ¿Qué quieres decir con eso Nakia?... No hagas ninguna tontería -

Le dije mientras me daba lentamente la vuelta y posaba mi mano derecha sobre el mango de Teitoku, aún engarzada en el cinturón, mientras que la otra la dejaba caer. Pero me coloqué cara a cara hacia la joven, separado 5 metros de ella, con el semblante serio y preparado ante lo que hiciera la joven, todo apuntaba a una encerrona. La situación pintaba fea.

Estadísticas de Fujitora Kizaru

Por aclarar, el gasto del kanchi no jutsu al ser menor que mi regeneración de chakra nunca lo coloqué como gasto en la barra de chakra.
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Deber de Familia [parte II]


¡Así es Fujitora! 
¡Aun sigues con vida! 
¡ Y es mi deber terminar con la encomienda de mis Padres!
¡Agradece haber llegado hasta aquí Maldito Kaguya!
Terminare lo que comenzaron mis ancestros...

La actitud de Nakia era revelada en un instante, dejando claro su objetivo, completamente dispuesta a fulminarlo. Gracias a su " deuda " por haber sido rescatada es que lo llevo hasta allí, como un pequeño gesto antes de matarlo, una estrategia sumamente perturbadora, ya que creía que todos los huesos Kaguya debían estar en el mismo sitio, y ¿Qué mejor lugar que aquel Naufragio donde una vez combatieron sus ancestros?

La figura de Nakia toma posición de combate y desenfreno, casi poseída por el rencor, ya había sido suficiente tiempo de caridad, era momento de cobrar sangre. Mientras la Hoshigaki gritaba furiosa empezó a hundirse en el Mar desplegando una siniestra aura (Seiryuu), hasta tal punto de perderla de vista, como si fuera un pez se movió a altas velocidades bajo la oscuridad del Mar hasta posicionarse 15 Mts bajo Fujitora. Desde allí empezaría a ejecutar una potente técnica Gotai la cual envolvería el Puño de Nakia con la suficiente presión para expulsar un potente pulso de energía en dirección hacia Fuji.

Cuarta Postura – Seiryuu

Ren



Cita:OFF: Daño del ataque potenciado por Seiryuu y Suiton= 145 + esp (27) + Got (12)= 182
Vida:
Chakra: -15 de Suiousama -15 Postura (-5) -100 (-10) REN = -115/ 858
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Kanchi No Jutsu

Mis estimaciones por gracia o por desgracia parecían cumplirse, una impepinable traición por parte de la hoshigaki se manifestaba con maldad sobre aquella zona en la que nos encontrábamos del mar. Precavido, tenía listo un recurso, puesto que por la situación y sus últimas conductas no me fiaba y necesitaba tener una carta bajo la manga para contrarrestar aquel calculador movimiento de conducirme a pleno mar para liquidarme, a un verdadero callejón sin salida, pero no me quedaría parado, por eso mediante un furioso silencio, descargué a Teitoku con rabia sobre la superficie del mar en la que nos encontrábamos, justo tras la última frase exclamativa de esta pobre diabla que quizá haya errado en cazar al Kaguya equivocado.

- Sucia traidora desequilibrada.... -

Pensé. Una onda de chakra raiton se expandiría en un radio de 8 metros engullendo la posición de 5 metros que nos separaban. A la par, me prepararía para la batalla desencadenando huesos, los jodidos huesos que tanto estuvo cazando, y con la otra mano alcanzaría el interior de mi yukata para coger una píldora de soldado que comería.
Contenido Oculto
Yunohone no Jutsu

Kai YANAGI NO MAI

La zona electrificada dejaría a merced a la kunoichi, sus piernas quedarían fijadas al agua e incapaz de realizar movimiento alguno, sin embargo, estaría pendiente de su tren superior y de lo que pudiera generar, pero ya tendría mucho ganado con ello. Tenía preguntas que hacerle, aunque la cordura de su ser fuera turbia y lejos de cualquier comprensión humana, además, notaba como el fuego de mi ira cobraba chispa y fulgor. Todo lo que podía suceder allí era un limbo.

resumen, gastos y daño
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Última modificación: 23-02-2024, 04:23 PM por Musacus.

Ira


Astuto Fujitora se vio venir la traición y el consiguiente accionar de la Hoshigaki, gracias a ello es que reacciono justo antes de que se sumergiera en el agua y prepare su ataque. La electricidad interrumpió el movimiento promiscuo de Nakia y sus palabras, para luego esquivar de un salto el ataque.

Por fin!
ya estoy harta de fingir! 
te destruiré! Exclamo desquiciada mientras esquivaba


Cita:
Nivel de reacción: 50 v 90 = 40 = N.R 5, puede esquivar hasta por 15 mts.


Salto 5 mts hacia atrás, justo la distancia necesaria para prevenir su técnica Raiton. Instintivamente Fujitora prepararía su técnica de huesos mientras Nakia esquivaba. Tras el esquive era su oportunidad para contratacar, con su semblante desquiciado cargaría su puño de chakra y ejecutaría un golpe al aire, en dirección a Fujitora, instantáneamente una potente pulsación de aire buscaría impactar con Fuji.

Cuarta Postura – Seiryuu

Ren


Justo a tiempo y con astucia ejecutaría su técnica a distancia procurando mantenerse alejada de los peligrosos huesos de su Rival. En caso de asestar el golpe buscaría sumergirse, caso contrario se mantendría en el lugar. Entre los dos Shinobis hay una distancia de 10 mts, a duras penas pueden verse el uno al otro, en caso de que se alejen más perderán la visión de su rival.
Cita:OFF: Nakia esquiva y luego ejecuta el golpe, su acción demora 2 segundos entre las dos técnicas, por lo que interrumpe la armadura de huesos ( que demora 2 seg.).
[Aclaración, a partir de los 15 mts se pierde la visión del oponente debido a la neblina] 
Vel= 90 + 10 (efecto de bajo la lluvia) = 100
 Daño del ataque potenciado por Seiryuu y Suiton= 145 + esp (27) + Got (12)= 182
Vida:
Chakra: -115 + 90 (tec cancelada) -15 (souiousama) -15 postura -100 tec. daño = -155/858
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Activos
Kanchi No Jutsu

Yunohone no Jutsu

Aquella simple pero oportuna cazada por mi parte hacia la joven, se vio evitada tras el momento en el que clavé la punta de la vaina de Teitoku sobre la superficie del mar, su reacción generó en mi irritabilidad e hizo que permaneciera en guardia, y blandiese férreamente la shikomizue para utilizarla ante cualquier respuesta de Nakia, paralelamente mis huesos florecieron.

Sin perder la concentración en la situación avancé mi guardia trasera hacia la joven recortando un paso de los 10 metros que nos separaban, en una posición preparatoria ligeramente agachado con las rodillas flexionadas, a la par de esto, ella en un abrir y cerrar de ojos adquirió una extraña postura para a continuación preparar su puño para posteriormente soltarlo.

- Ahí viene -

Me dije manteniendo la posición, viendo como se aproximaba una gran andanada de chakra suiton proyectada desde la hoshikai, había que contrarrestar eso y responder rápidamente, no dando margen a réplica, y había hecho las preparaciones necesarias para todo ello. Mis dedos, que seguían blandiendo a Teitoku preparados, reaccionaron ante la acometida, el pulgar que agarraba la vaina de la shikomizue accionó el filo extrayéndolo un par de centímetros de la funda, para que la mano que sujetaba el mango liberase de allí la hoja blanca resplandeciente y chisporroteante de chakra raiton para chocar aquel ataque, una técnica sincronizada que todo maestro de kenjutsu aplicaba con maestría para acabar guardando de nuevo la hoja.

Chakura Ha

aclaración


El feroz impacto elemental deshizo aquel ataque de la joven dejando atrás de mi, una fina lluvia del agua que contenía su ofensiva, y ahora iba la mía. Gracias a la preparatoria anterior, me deslicé marcando una parábola hacia la joven, ya que mantenía la postura previamente, la fluidez de mi avance hacia la hoshigaki sería tan fugaz como dañina, y en lo que dura un parpadeo, aquella distancia que nos separaba la atravesé hasta colocarme frente a su espalda, con Teitoku pidiendo venganza, su filo de nuevo emergió desde la vaina, para acabar chocando contra la columna de la joven en un corte ascendente que la seccionaría por completo. Un fatal tajo que destrozaría la espina dorsal cortando todas las vértebras que la componían, algo sumamente insalvable para cualquier shinobi.

IAIDŌ Kaizen

Sirento Kiringu


- Muere perra asesina demente -

Le dije mentalmente tras mi impacto, envainando de nuevo el filo. El poder de mi estilo samurai basado en el iaido culminaría aquel vertiginoso ataque contra la traidora asesina de toda mi estirpe, o al menos era lo que con suma ira pretendía. El corte me hizo aún así preservar mi guardia y esperar como respondería ante él Nakia, de caer sobre el agua, y perder la sostenibilidad de sus pies en la superficie del mar, daría por exitosa la técnica, en caso contrario me prepararía para reaccionar.
Contenido Oculto
resumen, gastos y daños
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Ira



Un choque de técnicas completamente explosivo sobre la superficie del Mar, esto provoco un poco de movimiento de olas sobre el calmado Mar. Fujitora no dudo en contrarrestar la ofensiva de la Hoshigaki, que por una sutil desventaja, parte de la ofensiva impacto en las vestiduras y brazos de su contrincante generando un poco de daños sobre el espadachín.

Cita:
60 daño residual 


El combate revelaba, de una vez por todas, las verdades intenciones, el objetivo de Nakia era enterrar a cualquier Kaguya como parte de su legado familiar, la cual dio la vida en un combate años atrás, cuando los Kaguya eran perseguidos, una de las grandes familias de cazadores a sueldo, decidió hacerse cargo del pedido por parte de la Aldea para llevar a cabo la ejecución del aquel y potencialmente peligroso Clan ancestral. Hoy día es historia oculta, pocos conocen aquella batalla de antaño donde la península colapso en estruendos y sangre, colapsando toda la playa en un rojo carmesí durante días, aquella batalla duró una noche completa, siendo la unica sobreviviente la Madre de Nakia. Una historia recordada solo por Nakia quien entonces era solo una bebé, con los años y la muerte de su Madre se le revelaría aquella secreta rivalidad con los Kaguya.

HAHA! rio desquiciada al ver como su rival recibía la embestida
¡¿Acaso es todo lo que tienes?!

Rápidamente Fujitora sin un segundo de espera se lanzo al ataque, esta vez con una mirada completamente frívola y determinada, no había más nada por saber, suficiente de soportar el mal carácter de la Hoshigaki, era momento de saldar cuentas.

Cita:125 V 90 = diff 35: Nivel 1 de reacción.

Por unos instantes la bestial Hoshigaki se confió, fue entonces que Fujitora aparecía por detrás, en un movimiento sumamente calculado y letal ejecutaría un corte atravesando completamente la piel de la Bestia. Un momento de silencio mientras el cuerpo de Nakia se partía en dos y caían, primero el torso y luego sus pies, frente al espadachín. Poco a poco un rastro de sangre señala el hundimiento de los restos del cuerpo, más precisamente en la ubicación del Naufragio. Una victoria indudable para Fujitora quien no vacilo a la hora de proclamar justicia, un duelo digno que traería respuestas a las preguntas del no tan viejo Kaguya.

Allí mismo, bajo sus pies, se encuentra un Barco naufragado, un Barco que funciono como resguardo de toda su familia en su intento de escape, alrededor de este, en las profundidades, descansan docenas de huesos y ahora también el cuerpo partido de Nakia, una escena oscura y dramática se mantuvo oculta por mucho tiempo, ya era momento de recibir de una vez por todas el legado de su Familia. ¿Acaso Fujitora accedería a sumergirse y descubrir el destino de su Familia? ¿Cuál sería la determinación de este nuevo hombre que paso a paso escribía su historia?



Cita:
OFF: Combate exitoso!

 Respecto a tu ofensiva hare algunas aclaraciones: Ofensiva= 90 + 5 Ken + [15 (yunohone) + 10 (iado)]= 20 + [15 (Sirento)]=10 = 125

Bonus de atributos: Si se usan varios jutsus que mejoran un atributo temporalmente, solo se podrá acumular hasta un +20 en cada atributo (excepto pasivas de tienda/maestría). En caso de que un jutsu supere los +20 de mejora a un atributo temporalmente, el usuario solo mantendrá la mejora más alta.

Bonus de velocidad del jutsu: Si un jutsu ofensivo tiene un bono de aumento de velocidad en su ejecución, este tendrá un máximo de +10 al atributo usado para su ejecución y no contara como una mejora al atributo del usuario.
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La ira de un hombre amable


El click hueco del filo de Teitoku cerrándose al choque del mango y la vaina de hueso, pareció como si accionase la caída de la hoshigaki. El latido de mi pecho estaba acelerado y mi respiración la acompañaba a la par, tras dicho click pude cerciorarme de mi estado y como desde mi interior se estaba desatando algo tan desconocido para mí como incontrolable. Mis ojos ardían, mi corazón vibraba sumido en una furia iracunda y era plenamente consciente de ello, sin embargo, aquella sensación me estaba gobernando y meramente la contemplaba sin ponerle remedio.

Tal era aquello, que aunque no fuera apropiado o normal en mi estilo, aquel tajo en el que creía que iba a ser superficial pero a la vez mortal para Nakia, literalmente la partió en dos, pero no sentía remordimiento por ello, solo pura ira. Estaba desencadenado.

Cuando su cuerpo empezó a desmoronarse, fijé a Teitoku en el cinturón y paralelamente con la otra mano, alcancé a agarrar los pelos de la nuca de la joven antes de que cayera junto con la parte inferior de su cuerpo hacia el fondo del mar, con el semblante serio y la cordura rota, hice un gesto de muñeca para girar su cuerpo y ponerlo frente a mí mientras colgaba en el aire, cuando de nuevo agarré los pelos de la hoshigaki, mis párpados se abrieron dejando ver una mirada tan perdida como oscura. La escena se presentaba atroz y hasta decadente, pero estaba fuera de mí, con el brazo izquierdo agarraba a la joven y con el derecho lancé sin pasión ni respeto un brutal puñetazo a su rostro, la venganza me consumía.

Sentí como los nudillos se clavaron sobre su tabique nasal, el cual quebró y se hundió levemente. De nuevo otro puñetazo fue descargado con ansia en la misma zona, comenzando a brotar más sangre y afectando a la base del rostro. Otro más, otro de nuevo sobre la boca, otro aún más potente sobre la mitad de la cara, otro más, y otro... El ensañamiento contra aquel ser dibujó un semblante diabólico en mis facciones, había algo dentro de mí liberado que salvajemente desfiguraba con gusto la cara de Nakia, notaba como al retirar el puño para cargarlo de nuevo, como el cuero de la piel sujetaba fragmentos rotos de los huesos de su cráneo, había llegado tal punto que el mechón de pelos que mantenía sujeta a la joven se soltó de la cabellera y tuve que reforzar el agarre desde la parte posterior de su cabeza, sujeta desde la nuca, la diana no tambaleaba y cada encaje de puñetazo resultaba más destructivo y desfigurante.

Su cara acabó siendo tan solo un producto macabro y gore de una alta repetición de puñetazos, ya no se identificaba la cara, y tanto huesos como otro tipo de elementos de la cabeza brotaban abiertos ante mi. Mi mano y mi antebrazo estaban teñizos de un rojo oscuro que parecía alimentar las acometidas, uno tras otro, empecé a sentir algo más tierno y gelatinoso, pues la calavera de la joven estaba tan destruida que su resistencia no obstaculizo que llegase hasta la cavidad cerebral, la cual tras el último golpe, terminó de abrirse y soltar su relleno sobre el agua.

Notaba aquello fluyendo con una leve presión por mis nudillos y cayendo al mar, mis ojos lo miraban con saciedad, desencajados y lúgubres, sin embargo, por más ensañamiento que descargase contra su ser, no encontraría más respuestas, o al menos no aquellas que había venido a buscar al fin y al cabo. La respiración seguía acelerada, mire hacia abajo y recordé que Nakia se paró allí por algo, recordaba que dijo que había secretos ocultos bajo el mar y que habíamos llegado, ¿Acaso en el fondo de donde me encontraba hallaría finalmente aquello que ansiaba?

- Puta diabla desgraciada -

Dije antes de liberar la mano y dejar que cayera hasta hundirse. Tras ello, ejecuté una serie de sellos, liberé la concentración de chakra de mis pies y me hundí sobre el fondo marino. Se generó alrededor de mi cabeza una burbuja de oxígeno con la que podría respirar bajo el agua, pronto tras sumergirme, percibí la forma de un barco en el fondo, aceleré el nado hacia él pero la penumbra del fondo lo engullía todo, canalicé chakra raiton para que mi cuerpo resplandeciera, iluminando todo lo que podía alcanzar a ver. Identifiqué plenamente el barco, el cuerpo de Nakia y múltiples cadáveres alrededor de la embarcación, los examiné pero el tiempo y el mar complicaba su identificación, no obstante buscaba entre ellos, buscaba algo representativo que pudiera relacionar con algo.

Si suponía que Nakia no mentía, y que ahí estaban las respuestas a mis antepasados, conectaba aquellos cuerpos al linaje Kaguya, pero aún sin saber de forma certera, si serían parte de otras familias, o si por el contrario, aquellos podrían ser el abuelo, padre o mis hermanos Fenrujiro, Isona y Naranai... ¿A quienes pertenecían esos huesos?, y por otra parte ¿Qué habría dentro de aquel barco?

Kisoku Kihou

Raigeki no Yoroi


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