"Las masas humanas más peligrosas son aquellas en cuyas venas ha sido inyectado el veneno del miedo.... del miedo al cambio."
Días después de Shoseki
Afueras del Castillo Ketsueki
Luna llena
A través de la máscara, la visibilidad del lugar no era precisamente la mejor, a pesar de tener un ojo entrenado y acostumbrado, aquella noche la neblina presente llegaba a transformarse en un elemento inquietante... Aquel efecto no tenía que ver con la técnica que lo había llevado a él de regreso al castillo, parecía más bien como una propia jugarreta del lugar que, casi en un acto profético, se había preparado intencionalmente para el recibimiento de aquel que ya en el pasado había cargado con el peso de ser el Maestro de todos los quirópteros. De eso ya había pasado bastante tiempo, de aquella relación ligada a la sangre poco quedaba y de hecho, sólo Kenshiki, quien en el pasado era la figura más iracunda y rencorosa del lugar, era el único que mantenía un contacto con él, todo en razón del respeto que aquella bestia sentía frente a toda voluntad fuerte .-A pesar de que pasen los años, sigues siendo tanto o más estúpido, humano.- Si, aquella voz era inconfundible, pero para aquel momento parecía provenir de todos los lugares al mismo tiempo, como si la bestia no fuese una criatura sino más bien el mismo castillo y sus alrededores esforzándose por imponer su voluntad ante cualquiera que fuese un invasor .-Silencio, con quien he venido a hablar es con Byoki.- La voz del Enmascarado sonó igual de segura y profunda como se había escuchado por última vez allí, hace más de quince años .-Imagino que se encontrará donde siempre, el viejo trono en el salón principal.- Los pasos de Shujin finalmente comenzaron su andar hacia la entrada de aquella gran construcción de piedra, aun cuando sus pasos eran seguros, la poca visibilidad no le dejaba indiferente... Pero de llegar a mostrar sólo un ápice de inseguridad, sabía muy bien que las criaturas aprovecharían cualquier tipo de apertura en su guardia .-El anciano no desea verte, no desde que actuaste en contra de la tradición.- Pese al comentario, el antiguo shinobi de Iwagakure estaba completamente decidido, desde los acontecimientos que había experimentado en Shoseki, sabía muy bien que necesitaría de todos los recursos posibles como para poder sobrellevar aquella nueva realidad problemática que se le presentaba, en una tierra de monstruos él más que nadie necesitaba las herramientas para transformarse en uno, quizás el más terrible de todos.
Unos ojos rojos como la misma sangre comenzaron a revolotear rápidamente alrededor del Invocador, una respiración agitada comenzó a ser cada vez un sonido más fuerte, incluso lo suficiente como para combatir el chillido que todas las criaturas nocturnas proferían para comunicarse unos con otros, aquel era un jadeo propio del hambre, una muestra de intimidación, una reacción que conforme pasaban los segundos parecía ser cada vez más hostil .-Basta, Kenshiki.- Los pasos de Shujin poco a poco se detuvieron, no por voluntad propia, sino porque una gran figura de pesadilla se había interpuesto en su camino .-Si, creo que me he equivocado en algo, criatura.- Los ojos de Shujin se cerraron un momento tras la máscara provocando que la misma se viese vacía durante unos instantes, una cáscara que simplemente no contenía nada, un espacio donde sólo habitaban las tribulaciones de un hombre que había decidido vivir en la oscuridad, un sujeto que .-No he venido a hablar...- Como era de costumbre, un viejo kunai se deslizó por su manga derecha hasta llegar a ser empuñado firmemente por su mano .-Simplemente vine a recuperar el poder que me pertenece.- Un rápido golpe cortante fue lanzado hacia la criatura pero, como si de una pesadilla se tratase, el gran murciélago se desvaneció entre la niebla ¿Cómo era posible? Según sus propios recuerdos aquella criatura nunca había sido capaz de realizar tal movimiento pero... La niebla pareció volverse más densa de golpe y los chillidos de los miles de murciélagos en los alrededores se intensificaron resonando incluso dentro de la cabeza del Enmascarado; De inmediato su cuerpo pareció sufrir un entumecimiento extraño .-¿Un Genjutsu? ¿Desde cuando estas criaturas son capaces de...?.- Varias sombras revolotearon en sus cercanías, por primera vez en mucho tiempo aquel sujeto que siempre parecía guardar la calma sintió una pequeña presión en su pecho. Sus pasos se reanudaron, pero a una velocidad un poco mayor con tal de llegar rápidamente a la entrada .-Hasta este punto jamás habían pasado de simples amenazas, pero ahora.- Por el rabillo del ojo el Enmascarado alcanzó a observar cómo dos orbes rojizos se iluminaban entre la niebla, una criatura gigante se abalanzaba hacia él con rapidez .-¡Mierda...!.- Sus reflejos eran rápidos, pero aquel bullicio, aquella presión... Sangre, pese a la esquiva su brazo izquierdo había sido herido y el Kunai de su mano derecha se había terminado estrellando contra un gran colmillo. Chispas emergieron y ambos cuerpos se distanciaron luego del choque .-Te lo he advertido, humano, has cruzado la línea... Cuando te dimos la oportunidad, nos dejaste, cuando te ofrecimos el mundo simplemente fuiste muy débil para soportarlo.- Gotas de sangre cayeron desde el colmillo de la bestia y desde el brazo de Shujin .-Basta de tonterías, Kenshiki, ¡es hora de...!.- Sus manos iniciaron rápidamente una serie de sellos, su chakra para ese momento debió haberse movilizado por su cuerpo y moldeado de tal manera que una fuerte descarga eléctrica inmovilizara a la gran criatura, pero nada de ello ocurrió... La presión en su pecho se hizo mayor, poco a poco la calma era consumida .-Si, ese es el olor de los miedos.- El gran quiróptero se relamió.
¿Cuánto tiempo había pasado? Por más que el Enmascarado recorriese aquel puente que se dirigía hacia el castillo la distancia parecía no disminuir, aquella batalla frente a la gran bestia parecía no tener un final próximo y al mismo tiempo en que sus fuerzas disminuían, la figura de aquel que antes había sido su aliado se volvía cada vez más grande .-Si esto continúa así yo... ¿Es que realmente me he vuelto tan débil?.- Otro ataque había sido repelido, nuevamente su Kunai se había encontrado con las garras de aquel gran animal .-Años de búsqueda, años de conflicto y... Aun estás atado a las tribulaciones humanas.- Grandes alas cubrieron la noche, un abrazo de muerte había sido propuesto para Shujin quien, dificultosamente se había logrado apartar trastabillando en el proceso .-Todos los obstáculos, todos y cada uno de ellos...- Sus memorias le llevaron a sus últimos días, un enfrentamiento contra un calamar gigante, una misión fracasada completamente, un duelo frente a una shinobi que le había hecho probar la tierra con la boca... Todas y cada una de esas pruebas terminadas en una derrota .-¿Por qué te estás debilitando? ¿En qué estás fallando exactamente?.- Un golpe seco se escuchó en el ambiente, Shujin había recibido un golpe directo en el torso, no había sido cortante, pero sí lo bastante contundente como para regresarlo de golpe al lugar de la batalla .-¿Lo comprendes, basura? Poco a poco los miedos te consumirán y todo el discurso que has construido te devorará poco a poco.- Kenshiki parecía disfrutar de aquella situación, aquella criatura que antaño le había reconocido como el gran Maestro para estos momentos no veía en el Enmascarado más que un insecto cuya sangre le serviría de sustento durante varios días... Aquel cambio tan drástico no era fortuito, los seres de pesadilla regularmente funcionaban de acuerdo a las sensaciones, entendían a quien servir según su carácter y tradición, por lo que un ser humano repleto de inseguridades simplemente no tenía espacio en la familia real de la sangre .-Un tiempo atrás no habría dudado en cuanto a mis acciones... Un paso tras otro, firme en la búsqueda del cambio que el mundo necesita, probablemente he olvidado lo que significa abrazar a las sombras....- Sus ojos se fijaron en la figura de pesadilla que ahora se encaminaba hacia él, no había escapatoria, para ese momento el bullicio y los efectos del golpe mantenían a Shujin con una de sus rodillas en el suelo .-Si ahora llegase el final... ¿En qué cambiarían las cosas? Una existencia que carece de sentido, una vida nihilista no podría llegar a ser constructiva... Es por eso que.- Su mirada se volvió firme y rápidamente se incorporó .-He elegido una no-vida, el deber de construirme como promesa de caos, no tengo permitido temer a las pesadillas.- Sus pasos aceleraron en dirección a la gran bestia, el kunai fue empuñado con mucha más fuerza .-Porque yo debo ser la pesadilla que envuelva al mundo y la muerte es sólo un estado que yo....- Su arma se deslizó rápidamente en el aire provocando una vez más que brotase sangre, pero esta vez no sería suya, un corte adornaría el ojo izquierdo de la bestia y el Enmascarado evadiría su figura para correr hacia la entrada del castillo .-Yo ya he muerto incontables veces.-
Dentro del Castillo Ketsueki
Penumbras
La ley de la no-vida es la decisión, es la entereza y determinación de llevar a cabo una tarea de la cuál nadie quiere hacerse cargo, es lidiar con la responsabilidad de sostener una postura aun cuando el alma se encuentre fragmentada... Shujin era uno de tantos que se había centrado en recorrer la senda de los sacrificios .-¿Dónde está papá? No lo hemos visto hace...- Susurros acompañaban los pasos de un Enmascarado que a paso firme emprendía el último camino hacia la sala del trono, voces desconocidas repletaban los vacíos pasillos de un desolado castillo, voces del pasado .-Lograremos cambiar el mundo, Maestro.-¿Era aquel Kisei? una vida siempre comprometida con la causa de la transformación... Un vínculo que poco a poco se desvaneció en el infinito, vínculos humanos... .-¿Cuantos han quedado atrás?.- Los pasos del hombre se volvieron más lentos .-¡Basta, por favor no...!.- Gritos desgarradores que en algún punto se habían transformado en anestésicos, lamentos que no lograban tocar un corazón puesto que emitían sus últimos sonidos frente a una figura que no tenía uno .-Yugure, Rieki... Surazal, Ryth.- ¿Cuántos eran los nombres? ¿Cuántos eran los vínculos rechazados? Los pensamientos generaban una respiración más pesada, cansada... ¿Eran aquellos los efectos del combate anterior? No, Kenshiki no tenía habilidades como esa, todo debía ser obra de Byoki .-Maldito viejo, no dudaré... No llegados a este punto.- Sus ojos divisaron a lo lejos una cabellera roja y brillante, un soplo de vida que se había desvanecido igual de rápido, el recuerdo de una mujer cuyo regalo había sido la liberación, una cautiva de Iwagakure, su propia tierra, la misma que de vergüenza se ocultaba bajo tierra .-Yagashi... Otra sacrificio más ¿Cuántos más serán necesarios?.- Aquella figura desaparecería en las sombras más no sería el único fantasma allí presente, la imagen de aquella otra mujer parecía difusa, pero era completamente distinguible .-¿Incluso ella?.- Sus puños se apretaron y los pasos fueron más firmes, sonoros, de una intención reveladora... Que todo el mundo supiese que él estaba allí .-Los que sean necesarios.- Su voz retumbó fuerte dentro del salón principal, a lo lejos, sobre un trono de piedra, un murciélago anciano y muy pequeño observó con detenimiento .-La cordura te ha abandonado, el miedo se ha vuelto tu compañero, las pesadillas tu patio de juegos...- Suspiró .-Atentaste contra nuestras leyes, contaminaste este lugar trayendo personas lejanas al pacto, ¿Es que acaso crees que cederemos?.- Pequeños murciélagos comenzaron a revolotear alrededor de Shujin, criaturas que poco a poco comenzaron a rasgar y morder la carne .-Quizás el dolor... Puro y honesto logre someter ese cuerpo carente de códigos y...- Contrario a lo que la criatura esperaba, el Enmascarado no detuvo sus pasos, eran lentos e incómodos, ciertamente, pero nunca equivocaron el camino hacia el gran pergamino de invocación que se encontraba junto al trono de piedra .-¿Dolor? He sido capaz de soportar la muerte de todo aquel que se ha relacionado conmigo... He sido capaz de hacer pedazos mi propio cuerpo.- Sangre brotaba, las criaturas gozaban, más la misión no cambiaba en lo absoluto. El Kunai se desprendió de su mano, sus ropas fueron dañadas pero aquella fría máscara en ningún momento se movió .-Tradición, sacrificios, dolor... Nada de eso es importante viejo, los seres humanos sólo tenemos un fin.- Sus pasos frenaron y su diestra se estiró lentamente pasando incluso junto al gran pergamino de invocación, su mano se posó firme sobre la cabeza de Byoki .-"Poder", todo se resume en ese único concepto, cualquier discurso, cualquier idea, cualquier propuesta siempre será eclipsada por el poder de quien la emite... No interesa la poesía, no interesa la crítica... Sólo vencer e imponer.- Presionó más fuerte, provocando incluso daño en la criatura que inmediatamente chilló .-Ustedes no lo tienen... No en solitario, porque su Maestro ha estado ausente y.- Lo soltó de golpe .-Seré yo quien les entregue un mundo de sombras que gobernar, ni tus mordidas ni tus juegos han tenido ni tendrán el poder de doblegar el firme andar de alguien como yo.- Aquella era la declaración final, una firma hecha en el discurso, el retornar de un gobernante ausente, un Maestro decidido a enfrentar directamente a "dios" si es que con ello podría apoderarse de los corazones del mundo.