[FlashBack] Senju, recuperando el linaje perdido.
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Última modificación: 02-05-2023, 04:05 AM por Bishamon.

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126DVF, 25 de Rokugatsu. 7:35 hrs
Después de la incursión a Marfil.

La huida del reino de Marfil de Bishamon había consistido en invocar a Katsuyu, y posteriormente realizar la invocación inversa que la llevaría al Bosque Shikkotsu, en donde despertaría dos después luego de haberse sometido a la recuperación intensiva. En ese lugar, la paz era pan de cada día, dia a día, la reina babosa atendía a Bisha, quien solo pensaba en sus compañeros.

¿Crees que los otros hayan sobrevivido?— indagó al rubia a la porción de Katsuyu de treinta centímetros que la acompañaba.

No importa ahora princesa, tu debes es descansar y reponer fuerzas. Ha sido arduo el camino hasta este momento y la incursión en Marfil estuvo mucho más complicada de lo esperado.— guardó silencio.

Bisha, sentada con la comida a un costado bajó su cabeza enterrando su mirada en la sábana blanca que tapaba sus piernas. Apretó con fuerza su mandíbula y empuño sus manos arrugando la sábana.

Había demasiado en Juego… ¿Qué clase de kunoichi soy si no soy capaz de salvar a los míos? ¿Acaso es esa la voluntad de fuego que cargo?... Todos los Senju transitaron caminos diferentes a los míos y yo… yo ni siquiera soy capaz de proteger a nadie… Amaya, Shain, Adan, Mako… El mismo Our, no fui capaz siquiera de ser apoyo para mí compañero de equipo— su cabello tapó sus ojos.

Las lágrimas empezaron a surcar sus mejillas sin contención mientras que la babosa, expectante, guardaba silencio. Katsuyu era prudente y entendía dos cosas: La primera, que tenía que cuidar a la rubia de sus impulsos; la segunda, que se vendría un entrenamiento sin precedentes que le daría a la chica la confianza suficiente para poder continuar con el peso que ahora cargaba.

Tengo que hacer algo Katsuyu… Tengo que…— intentó ponerse de pies, pero de inmediato, su cuerpo había fallado tirándola contra su propia comida —Doy pena… Necesito ser más fuerte, necesito sentir que puedo ayudar a los míos. Necesito… acceder a nuevas formas de poder.— fue lo único que dijo antes de caer inconsciente, nuevamente, producto del cansancio y del derroche de chakra que había usado para sobrevivir.

Días después, la rubia se había recuperado y entonces, empezó un entrenamiento en compañía de Katsuyu usando Senjutsu. Emplearía estrategias específicas para poder acumular el chakra natural, que normalmente era el punto débil de aquel tipo de técnicas, dado que debía usarse tiempo para concentración sin poder moverse y demás. Lastimosamente, y pese a sus intentos, no logró dar con la forma de lograr el chakra natural en movimiento, y mucho menos lograr captar el chakra natural con dos clones. Se gastaba mucho más en el esfuerzo que significaba que la utilidad que tenía el mismo. Sin embargo, en luchas que le dieran ventaja de llegar antes, podría ser que sus clones pudieran captar la fuerza natural mientras ella se desempeñaba en el campo de batalla.

Luego, un par de semanas después, la tarde cayó sobre el bosque Shikkotsu. Sobre una colina, la rubia miraba como el sol de ese lugar se escondía en el horizonte. Allí, del suelo, saldría una pequeña porción de Katsuyu.

Es tiempo de irme, Katsuyu. No puedo ocultarme y quedarme aquí eternamente. Además, tengo pensado consultar sobre mi clan… Quiero intentar con fuerza, si para mi es posible acceder a las técnicas del clan Senju— hizo un silencio contundente.

A tu edad, princesa, deberías saber que no es fácil lograr el desarrollo de las técnicas de Kekkei Genkai, normalmente estas se desarrollan a temprana edad y tu ya tienes 18 sin poder lograr el dominio del Mokuton.— sentenció la babosa. —Sin embargo, no descarto la posibilidad… Si sientes que puedes, y es tu deseo, entonces te apoyaré tanto como pueda—. Las palabras de la babosa sacaron una sonrisa de la boca de la rubia.

No volveré a konoha, tengo pensado trabajar un poco más en mi antes de volver a integrarme como Kunoichi en la aldea.— suspiró —¿Crees que haya un lugar en el mundo para indagar y conseguir lo que quiero?— preguntó a la babosa, quien dio respuesta justa e indicó a la jounin de konoha en dónde podría empezar su entrenamiento. Poco después de organizó y dejó el bosque Shikkotsu para internarse en las cercanías del país del viento

Año 2, Después de Yugata en adelante.

El mundo había empezado un cambio, justo después de Yugata, por todo el mundo empezó a correr el rumor de que Eifen, el Hokage de la hoja había desaparecido y que muchos de los shinobi de antaño habían renegado de las aldeas. Bisha, por otro lado, se había internado en tierras del país del viento desarrollando sus habilidades en medicina, logrando dar con médicos de alto talante que la ayudaron a mejorar sus habilidades.

Al tiempo, logró el dominio de su tercero elemento tras un arduo entrenamiento. La arena no disponía de fuentes hídricas que la ayudaran y claro, la base de aquel elemento era la manipulación del agua. Sin embargo, logró hacerlo y dio en ese momento un paso importante, pues sabía bien que uno de los pasos para lograr el mokuton era lograr el dominio de sus dos elementos base: Suiton y Doton, siento este primero, el último en conseguir, incluso después del Katon como segundo elemento.

El mundo siguió cambiando con el pasar de los años dejando cada vez más una brecha evidente entre lo que se entendía por el mundo shinobi y el nuevo orden mundial impuesto por Kami-sama. Años después, la jounin de Konoha decidió reintegrarse a la aldea con un único fin: Estar bajo el mando de la Hokage actual, seguir con sus labores militares corrientes y esperar el momento para apoyar a los rebeldes a retomar la igualdad de antaño y a recuperar el terreno contra Boshoku. Su regreso a la aldea había sido por lo menos, caótico. Se había catalogado como desaparecida y tras esto, se inició una investigación para descartar que la misma no fuera infiltrada rebelde buscando hacerse paso en las filas shinobi de la hoja. Poco a poco, la rubia ganó terreno hasta hacerse un lugar como médica reconocida apoyando y dando tratamiento a imperiales heridos en guerra por la facción rebelde.

En medio de su rutina, y ya con el avance del suiton y el doton, la de ojos violáceos empezó un entrenamiento, dentro de la aldea de su kekkei genkai, el poder de los Senju: Mokuton. Poco a poco, el poder y el control de la naturaleza se hacia uno con Bishamon y entonces, empezó a suceder, las ramas pequeñas empezaron a reaccionar a su chakra y con el pasar del tiempo, todo el campo de entrenamiento la obedecía. Lo había conseguido, Bishamon había logrado, por fin, dominar el arte que portaba su apellido.

Año 14, Después de Yugata.

El entrenamiento era exhaustivo y, sin embargo, sentía que debía perfeccionarlo cada vez más. Día tras día, mes tras mes, año tras año, la rubia se enfocó en control del suiton y en el del Mokuton. Entonces, un evento tendría lugar en los campos de entrenamiento de Konoha: Cerca al año 15 después de Yugata, varios integrantes del clan Senju estaban en la zona de entrenamiento justo cuando el campo completo empezó a estremecerse a varios kilómetros de la ubicación en la que ellos estaban. Sin saber que pasaba y creyendo un ataque a la hoja, alistaron sus armas para dirigirse al lugar en el que se había escuchado el estruendo. Al llegar sin embargo se quedaron atónitos, la rubia había invocado al golem de madera con el Mokuton: Mokujin no jutsu.

La misma, estaba sobre el gran Golem conservando el único sello que permitía que el mismo se moviera paso a paso. Ellos decidieron no estorbar, pero inmediatamente los comentarios llegaron a los dirigentes del clan para ese entonces. Se rumoraba que había alguien, una chica, rubia, capaz de dominar las técnicas más avanzadas del clan Senju. ¿Cómo era aquello posible? Su existencia hasta ahora era desconocida por las personas del clan y los ponía a todos en jaque. Ninguno había sido capaz de invocar al gran golem de piedra que ella había podido llamar y no solo eso, la chica también parecía dominar el Senjutsu, mismo que Hashirama usaba.

Poco a poco, las investigaciones sobre la chica empezaron a desarrollarse del lado de los jounin y altos rangos del clan y para cuando se dio cuenta, era demasiado tarde. Justo después de volver de los fideos, un hombre con atuendos del clan Senju esperaba a Bishamon a las afueras de la puerta de su casa. Al verlo, ella lo supo, aquel hombre era del clan Senju. Poseía la armadura rojiza y los emblemáticos símbolos del clan en ella.

Bishamon…— La llamó haciendo que la rubia detuviera sus pasos a unos metros. —No debes estar a la defensiva, soy uno de los integrantes del clan Senju y vengo a proponerte algo…— sentenció.

Ella, desconcertada no emitió palabra alguna. No sabía del todo que hacía aquel hombre allí y por qué, alguien del clan que toda su vida le había dado la espalda, ahora estaba en la puerta de su casa buscándola. El hombre suspiró y empezó a caminar rumbo a la chica y detuvo su andar a unos pasos de ella.

Como bien sabrás, el clan Senju tiene hijos por distintas partes, pero actualmente nuestro legado está perdido. Hasta hace unos meses, desconocíamos de tu potencial, pero entonces te vimos en el campo de entrenamiento dominando nuestra más importante técnica. Queremos saber más de ti, queremos que seas parte de nuestro legado… Como líder de nuestro clan.— dicho esto, un silencio incómodo reinó en medio de ambos.

...¿Ser la líder del clan?— replicó la rubia quien puso su mirada sobre el otro. —¿Por qué debería? Digo, como bien acabas de decir, desconocían hasta ahora de mi existencia y según entiendo fue un accidente… ¿Por qué ahora? Cuando era una niña de solo siete años se me negó el derecho de ser parte del clan y desde entonces crecí sola… ¿Por qué debería proteger y llevar el estandarte de los que nunca estuvieron para mi?— indagó la jounin mientras apretaba sus puños.

Precisamente a eso voy, Bishamon, hemos cometido muchos errores en el pasado, y luego de investigarte en los archivos, quienes estamos en el consejo del clan hemos decidido, de forma unánime, que no hay quienes nos represente mejor.— comentó —Ahora te conocemos, ahora te vemos, te reconocemos. Eres una de las médico más influyentes del mundo shinobi y de la aldea… Lograste las hazañas de Tsunade, la quinta Hokage, incluso eres la dueña del pacto de Babosas que la misma poseía, lograste dominar el Byukugo y además, portas la voluntad de fuego y las habilidades de Hashirama con el Mokuton. Para nosotros sería un verdadero honor, que quien logró conseguir las hazañas del primero y la quinta, sea quien nos represente y lleve el clan y sus movimientos, sus doctrinas y su forma de vincularse con el nuevo orden.

La explicación había sido contundente y tenía todo el sentido. Pero no era fácil para la rubia tomar aquella decisión. Si las cosas con Yugure lograban sobrevivir, luego de la muerte de Yatako y Kureha, entonces su papel en la aldea sería puesto en peligro. Pero también entendía que daría un gran paso, uno que la pondría más cerca que poder lograr algo más que los anteriores Senju habían logrado. Hashirama, Tobirama y Tsunade habían sido primer, segundo y quinto Hokage respectivamente. ¿Podría ella llevar el título de la 12ava Hokage? Tragó con esfuerzo imaginando el escenario y entonces el fuego en su pecho volvió a encenderse.

Si es la decisión del clan, aceptaré tomar las riendas como líder del mismo. Los acompañaré y los guiaré hasta donde se me permita.— dicho esto, aquel hombre habría hecho una reverencia y sin más, se marcharía, ni son antes decirle a Bishamon que terminada la tramitología, y si nada se ponía en tela de juicio, sería llamada a compartir con su clan en el barrio de los Senju y así mismo, se le daría el título de líder de clan.
[Imagen: Firma-Bishamon.jpg]
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Tema supervisado y aprobado
  • Bishamon Senju ha sido declarada como líder de su clan.

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