Última modificación: 19-01-2024, 04:03 PM por Akari.
La nieve cae en los cuerpos cálidos haciéndolos fríos mientras ellos mismos regresan a ser liquido.
¿No es irónico eso? Cómo ellos vienen al mundo con formas definidas, caen del cielo y tan pronto como tocan el suelo se disuelven sus cuerpos.
El copo de nieve añora por el cálido verano pero nunca ser capaz de dejar atrás el frío invierno.
Si todopoderoso es el dios creador que tanto se dice existe ¿Por qué crea cosas tan frágiles y temporales?
Si tanto nos ama ¿Por qué el mundo sufre de esta terrible plaga?
¿Por qué es su creación más perfecta tan débil?
¿Por qué es su creación más perfecta tan idiota?
¿Por qué es su creación más perfecta tan horrenda?
¿Por qué?
Si hubiese persona capaz de responder esa pregunta... sería mejor que estuvieran muertas. Ningún hombre sobre la tierra tenía la respuesta y quienes lo presumieran no serían que el eslabón más débil de la jerarquía vendiendo a las masas una realidad inventada con una deidad falsa y doctrinas intelectualmente desviadas.
Oh, como ella deseaba matar a dios si había uno, ella veía no más que un cruel señor donde otros cantaban sobre un padre todo afectuoso.
¿Pero cómo podrían las masas entender? Vendidas en la idea y moldeadas en la creencia, su mundo girando alrededor de tan simple visión indescifrable por lógica o razón ¿Y como podría ella pronunciar sus profundas frustraciones al niño acobijado en su abrigo?
"L-lamento m-mucho esto se-señorita." Primero oro y solo tras terminar le hablo, tan agradecido como lamentado. En estas calles oscuras ¿Nunca alguien se había molestado en darle al niño una mano? ¿O algo para el frío en este caso?
"Esta bien." Fuera no por ella, el niño no tendría más que nieve para llamar su cobijo, y su tumba.
La nieve caía y las velas ardían, ninguna prendida por ellos.
Aunque el frío los tenía el calor mutuo los acogía ¿Pero por cuanto tiempo su tiempo prolongaría?
"La-la-lamento mucho..."
No pararía de pedir perdón, incluso si lo necesitaba, incluso si no lo controlaba.
"No lo hagas."
Era una gran frustración, pero aunque le gritara, aunque en la cabeza se lo taladrara, el niño no abandonaría sus maneras justas.
Los fósforos en su canasta numeraban casi la misma cantidad desde la mañana hasta que la luna se alzara.
El niño se rehusaba pero a este punto a Akari poco le importaba.
Estuvo por prender el fósforo en su mano, y hacer una fogata con la canasta, pero pequeños y temblorosos dedos se apretaron alrededor de su brazo.
"..."
"¿Preferirías morir aquí?"
"..."
De sus dedos pudo sentir su pulso, pero de sus ojos no vislumbraba su luz.
Incluso si tribulación divina caía y al infierno eran condenados, ella no tendría un niño muriendo en sus brazos.
No le tomo ni un segundo prender fuego al fósforo y hacer de la canasta una fogata apropiada.
"¡Oiga! ¡¿Qué creen que hacen?!"
Muy convenientemente un guardia apareció, hacía ellos con una tonfa se acerco.
Pero una sola estrella ninja y al suelo cayo.
Afortunadamente el niño no estaba consciente para ver aquello, incluso podía liberarlo de su abrazo y dejarlo al lado del fuego, agarrar el cuerpo del guardia y quemarlo junto al resto.
¿No es irónico eso? Cómo ellos vienen al mundo con formas definidas, caen del cielo y tan pronto como tocan el suelo se disuelven sus cuerpos.
El copo de nieve añora por el cálido verano pero nunca ser capaz de dejar atrás el frío invierno.
Si todopoderoso es el dios creador que tanto se dice existe ¿Por qué crea cosas tan frágiles y temporales?
Si tanto nos ama ¿Por qué el mundo sufre de esta terrible plaga?
¿Por qué es su creación más perfecta tan débil?
¿Por qué es su creación más perfecta tan idiota?
¿Por qué es su creación más perfecta tan horrenda?
¿Por qué?
Si hubiese persona capaz de responder esa pregunta... sería mejor que estuvieran muertas. Ningún hombre sobre la tierra tenía la respuesta y quienes lo presumieran no serían que el eslabón más débil de la jerarquía vendiendo a las masas una realidad inventada con una deidad falsa y doctrinas intelectualmente desviadas.
Oh, como ella deseaba matar a dios si había uno, ella veía no más que un cruel señor donde otros cantaban sobre un padre todo afectuoso.
¿Pero cómo podrían las masas entender? Vendidas en la idea y moldeadas en la creencia, su mundo girando alrededor de tan simple visión indescifrable por lógica o razón ¿Y como podría ella pronunciar sus profundas frustraciones al niño acobijado en su abrigo?
"L-lamento m-mucho esto se-señorita." Primero oro y solo tras terminar le hablo, tan agradecido como lamentado. En estas calles oscuras ¿Nunca alguien se había molestado en darle al niño una mano? ¿O algo para el frío en este caso?
"Esta bien." Fuera no por ella, el niño no tendría más que nieve para llamar su cobijo, y su tumba.
La nieve caía y las velas ardían, ninguna prendida por ellos.
Aunque el frío los tenía el calor mutuo los acogía ¿Pero por cuanto tiempo su tiempo prolongaría?
"La-la-lamento mucho..."
No pararía de pedir perdón, incluso si lo necesitaba, incluso si no lo controlaba.
"No lo hagas."
Era una gran frustración, pero aunque le gritara, aunque en la cabeza se lo taladrara, el niño no abandonaría sus maneras justas.
Los fósforos en su canasta numeraban casi la misma cantidad desde la mañana hasta que la luna se alzara.
El niño se rehusaba pero a este punto a Akari poco le importaba.
Estuvo por prender el fósforo en su mano, y hacer una fogata con la canasta, pero pequeños y temblorosos dedos se apretaron alrededor de su brazo.
"..."
"¿Preferirías morir aquí?"
"..."
De sus dedos pudo sentir su pulso, pero de sus ojos no vislumbraba su luz.
Incluso si tribulación divina caía y al infierno eran condenados, ella no tendría un niño muriendo en sus brazos.
No le tomo ni un segundo prender fuego al fósforo y hacer de la canasta una fogata apropiada.
"¡Oiga! ¡¿Qué creen que hacen?!"
Muy convenientemente un guardia apareció, hacía ellos con una tonfa se acerco.
Pero una sola estrella ninja y al suelo cayo.
Afortunadamente el niño no estaba consciente para ver aquello, incluso podía liberarlo de su abrazo y dejarlo al lado del fuego, agarrar el cuerpo del guardia y quemarlo junto al resto.