¿Quizá el Jounin habría sido apresurado? No realizó introducción alguna y pretendía ir directo al grano del "aparente" encuentro. Recitar de tal forma el verso clave que se le entregó debería de transmitir su intención, pero... ¿Fue ese realmente el mensaje que se dio?
Shokan agitó muy ligeramente su melena antes de dar los primeros vistazos a la joven, incluso cuando recitaba aquel verso, su mirada y la de la joven no estaban ni cerca de cruzarse. Llamaría la atención del joven Sin Clan; aquellos ropajes de doble tonalidad, quizá iban a juego con su cabello o quizá con algo más.
Ligeramente cautivado por la vestimenta y apariencia en general de la chica, pretendía indagar un poco más antes de dar por servida la información. Y así, llegó.
La voz emanó con suavidad y el verso llegaría a los oídos del joven Shokan, pero... ¿Era el verso correcto? Difícil de definir. Siquiera él estaba totalmente seguro de si la respuesta que acaba de recibir era o no incorrecta. — ¡Bien! — Exclamó rompiendo aquel extraño silencio y su semblante de frialdad.
¿Qué podría salir mal? A fin de cuentas es el imperio, no es como que me importase mucho lo que pueda ocurrir con la operación, simplemente entregaré la información y cobraré el dinero por ello. — No sé si el maldito verso es correcto, pero eres la única persona en este sitio con una vestimenta no muy llamativa y eso, pega justamente con los datos que me entregaron. — Confesó el peli azul un tanto agobiado de todo el secretismo y protocolo detrás del proceso de entrega.
— Toma. — Extendió el sobre con total seguridad hacia el costado de la joven Chunin. — Dentro tienes toda la información necesaria para el golpe de Suishido. Mantén al guardia arriba, pues, mis informantes me han comentado que no somos los únicos competidores sobre la mesa. — Añadió intentando más que nada advertir a la Chunin sobre la situación. — Se rumora que son alrededor de 3 compañías las cuales han enfocado sus inversiones a obtener esta información. — El joven Shokan giró su cuerpo con la intención de mirar fijamente a Izanami.
— ¿Estás entendiendo lo que esto vale, no? — Preguntó. Y aquella "falsa" duda no tenía más finalidad que limpiar al joven Shokan de todo aparente compromiso, pues, si fingía sentirlo, no podrían culparlo por no estar en línea con los intereses de los clientes. — La acción estará ocurriendo dentro de un mes, prepárate para ello. ¿Alguna pregunta? — Añadió la oportunidad de despejar cualquier duda que la joven pudiese tener, no obstante, aquello no fue más que un ligero desliz de esa agobiante amabilidad que solía mostrar... ¿Acaso ella tenía razón?