[Misión - C] Hora de Elecciones (Rama A)
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Última modificación: 20-04-2023, 02:29 AM por Ohona Hyuga.
[Misión - C] Hora de Elecciones (Rama A)
esta rama solo pertenece a Satoru y Hao.
Midoriya, no leas ni publiques en este tema si no quieres recibir spoilers de tu misión.



Estaban a las afueras de la zona residencial, en un edificio cerca del perímetro exterior de la aldea, un parque verdoso se veía por la ventana y al interior estaba todo hecho de madera, la iluminación era bastante buena y habían cortinas y decoraciones verdes que hacían sentir el lugar bastante natural, al centro de la habitación una alfombra circular de tejido blanco estaba siendo usada por Hao, quien se mantenía sentado en el suelo mientras la niña sin nombre jugaba con su cabello, a un costado, una mesa de madera en la pared donde Satoru se sentó para descansar de aquel largo día, tenía un vaso de agua frente a él y una taza de té al otro lado de la mesa, el té verde ya estaba frio, lo había dejado antes Jinzo Nara y lo dejo ahí, como si se olvidase de su existencia.

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De fondo, una canción sonaba en el ambiente, provenía de una radio antigua, pueden considerar que este es el opening de esta misión.



Jinzo Nara, el joven de pelo alborotado y cicatriz en el ojo, se quedó regañando solo ante las ocurrencias de aquel hombre enmascarado. Era 14 de Sangatsu y el muy idiota había salido… - si… el día de los enamorados, mira que imbécil, nosotros estamos gastándonos la vida y peleando por sobrevivir y el muy imbécil se va a una cita… AAAA PUTO MARC, COMO TE ODIO – gritaba mientras pateaba el suelo. Luego de eso, se cruzó de brazos y miro de reojo a ambos jóvenes.

Satoru aún estaba sentado en la mesa del comedor observando hacia afuera, mientras que Hao tenía el pelo cada vez más trenzado y se veía atónito tratando de ver a la joven sin nombre que jugaba con él, se podía ver como sus ojos rojos miraban de un lado a otro mientras que el rostro del muchacho solo mostraba incertidumbre ante lo sucedido – valla… así que tú tampoco puedes verla… pensé que solo se ocultaba ante los Hyuga… - dijo con tono de sorpresa, mientras caminaba por la sala, este hombre estaba realmente molesto y preocupado por lo vivido el día de hoy, y por sobre todo… aquel imperial que estaba tirado en el suelo… su cráneo estaba bien, había recibido primeros auxilios de parte de Marc Aburame, la sangre la limpiaron los mismos insectos que uso para curarle la cabeza, era un gran curandero… pero… de ahí a que recobre la conciencia… no… este se acercó por la espalda y, en un acto de valentía le pateo la columna, luego salto atrás para protegerse tras una silla, dándole la espalda a Satoru.

OFF Topic
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Última modificación: 21-04-2023, 12:46 AM por Musacus.
El día no terminaba para Satoru, cada vez parecía hacerse mas largo, a medida que iban sucediendo cosas Satoru intentaba comprender los hechos aunque la muerte de su amiga lo tenia distraído y ofuscado. No tuvo tiempo de conocerla lo suficiente aun así Satoru ya había logrado cierta confianza con ella, gracias a la serie de eventos Satoru estaba como mínimo malhumorado, aunque entendía que esto era problema suyo y no tenia porque descargarse con los allí presentes. Pasaron horas, Satoru miraba el vacío a través de la ventana, de alguna forma buscando consuelo, o alguna señal...Tampoco estaba dispuesto a simpatizar con el Nara, aun desconocía sus intenciones, prefería mantener un perfil bajo y responder lo justo y necesario. No tendría problema en quedarse allí, al fin y al cabo lo habían sacado de apuros, le costaba asumir su debilidad... Al parecer el Nara estaba inquieto, poco caso le hizo a sus quejas, aunque lo tomo por sorpresa la patada que le dio al Joven malherido, de hecho le hizo enfadar, entendía que aquel joven partencia a los Imperiales, pero Satoru sabía que existía manipulación, aquel joven Uchiha había perdido el control durante el combate, no era el mismo, esto fue claro para Satoru... Luego de darle semejante patada al indefenso, Satoru se paro de un brusco movimiento y puso su mano sobre el hombro del Nara para de esta forma voltearlo de un fuerte tirón y cuestionar su actitud.
-¡¿Qué haces?!-
¿Y tu crees estar del lado de los justos?!-
-¿Acaso no ves que esta completamente indefenso?-
Luego de cuestionar al Nara, Satoru rápidamente se sentó al lado de Tamao para atenderlo y estar atento a alguna reacción, intentaría acomodar su cuerpo para que descanse lo mejor posible. De esta forma también estaría atento a cualquier reacción que pudiera tener, en caso de un ataque Satoru lo bloquearía por la fuerza, si el joven retomaba la conciencia intentaría calmarlo y le diría que: no se preocupe que hasta que no se recupere no lo dejaran salir y que no tenia ningún resentimiento. Esto con ánimos de que no tenga otro ataque de cólera. Mientras tomaba asiento Satoru se quito la venda de los ojos para hacer uso de su Dojutsu, era una forma de asegurarse tanto su seguridad como la del joven herido, ya había pasado un buen rato desde el conflicto por lo que sus energías se habían recobrado.-Todos somos Humanos no habría que hacer diferencias- pensó 

Byakugan



Satoru seguía rememorando aquella batalla para atar hilos e intentar entender la muerte de Naomi, algo triste por no ser lo suficientemente ágil, esta idea de inferioridad lo tenían atado a un pozo, a un vacío, recordaba su niñez y todo lo que le costo llegar a ser alguien habilidoso, aun así no era suficiente, este era el "castigo" que Satoru se hacía a modo de represión y su pilar, una forma de seguir avanzando en su camino ninja. -No permitiré que vuelva a suceder- pensó, mientras miraba atentamente al joven acostado frente a El...
OFF: Haría poco caso a la respuesta del Nara, ya que no esperaba ningún tipo de reflexión de su parte, simplemente fue la reacción que tuvo Satoru ante lo que fue para El una injusticia, se dejo llevar e interrumpió al Nara en su acto de agresión. 
Satoru
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En mi corta vida, pocas veces había tenido el disgusto y la ocasión de tener días asi de difíciles y largos, la verdad es que no sabia exactamente que estaba pasando, todo me parecía muy confuso y los gritos de aquel sujeto no ayudaban en absolutamente nada, a mi mente llegaban imágenes de aquel salvaje ataque, un montón de humo a medias la cara de aquellos sujetos y claro de las sorprendentes habilidades de Satoru, por lo que no sabia si quiera que esperar de estas personas, por otro lado, me sentía muy cómodo en ese lugar, el ambiente y la iluminación entregaban unas energías increíbles, muy hospitalarias, lo cual me ayudaba mucho a meditar, mientras cruzaba mis piernas como si me tratase de algún tipo de indio, a la vez que cruzaba mis brazos.

                Mientras miraba a mi alrededor, pude notar de inmediato el cuerpo inconsciente tirado sobre el piso, el cual pertenecía a ese muchacho, si aquel mismo que se presentó en el café para atacarnos, el joven que comparte clan conmigo, portador del Sharingan, quien se las había arreglado para acertar el brutal ataque en mi contra, dejándome entre la vida y la muerte, en primera instancia, al ver su presencia mis manos comenzaron a apretarse, tenia algo de ira, ganas de darle un golpe de esos que lo terminarían levantando del piso, pero con el tiempo ya me había logrado acostumbrar a su presencia, tanto así que hasta ya me daba igual, si estaba o no estaba en el lugar.

                Todo cambio de un momento a otro, en el mismísimo instante en el que el Nara pateo indiscriminadamente la cabeza del inconsciente Uchiha en el piso, Satoru se movió de forma muy rápida, saltando de inmediato con la intención de defenderlo, llegando al punto de tocar al Nara, todo esto no paso desapercibido para ninguno de los que estábamos presentes en la sala, por lo que sin hacer mayores movimientos separe mis piernas, preparándome para saltar en el caso en el que todo se saliera de control, a pesar de esto, por mi parte no existía ningún tipo de afecto por aquel joven Uchiha, solo tenia una cosa clara y era que como miembros del mismo clan debíamos velar por preservar ocultos los secretos de este, no podía dejar que estos cayeran en manos de cualquiera de los que estábamos ahí presentes, los cuales incluían los ojos de ese idiota, por lo que estaba planeando cuidadosamente mis movimientos en el caso de que este diera síntomas de estar moribundo o de fallecer en el lugar.

                Al percatarme de que las cosas estaban al limite de salirse de control, en cualquier momento, dije – a ver, a ver… cálmense todos… En ese momento mira a todos los presentes en la habitación… ¿Alguien me puede explicar que fue lo que paso allá? ¿Qué está pasando?
||| Hablo || Pienso |||
[Imagen: hao_firma.jpg]
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El Nara observo de reojo al joven de pelo blanco, la rabia se le notaba en los ojos y el hecho que le tocara le provocaba demasiado. Cuando el joven Uchiha se movió, sin querer izo tropezar a la niña sin nombre, no lo logro notar al instante, ya que, de hecho, su presencia volvió a ser notoria poco después de que este hablara… el ambiente se notaba tenso, la niña se estaba sobando la cara y el Nara dijo a voz agresiva – ni siquiera saben lo que ha pasado y actúan tan arrogantes – se separó de Satoru – desde hace ya un tiempo han estado muriendo gente dentro de la aldea, los imperiales los han estado encubriendo, nosotros simplemente estábamos cuidando que este idiota no pereciera mientras investigaba a esa gente tan peligrosa – dijo, volteándose y apuntando con su dedo enjuiciador a Satoru. La niña sin nombre empezó a moverse nerviosa y a tiritar en su puesto – no sabes cuantas veces tuve que sacarte de las fauces del lobo maldito arrogante… y para más remate, este niño aparece y casi lo arruina todo. Los asesinatos fuera de ese burdel fueron la gota que derramo el vaso, el mismo Marc tubo que salvarte la puta vida, esta niña tuvo que esconder tu rastro, todos hemos trabajado para que ustedes dos no mueran ¿y para qué? Para que vengan a hablarnos con esa superioridad suya… NI SI QUIERA SE PORQUE SON TAN IMPORTANTES

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Enojado, Jinzo se alejó un par de pasos de ustedes, mientras que la niña, se acercó a un estante, revolvió unos papeles y saco uno en específico, era un diario local, una noticia perturbadora sobre la muerte de una mujer de mediana edad, descuartizada y destripada, la noticia hablaba sobre la perdida de partes del cuerpo, donde casi del tórax para arriba era lo único que se podía rescatar de ella, luego de eso, mostro documentos, donde indicaban muertes en diversas fechas, una de ellas era el 7 de Marzo, mismo día que ocurrieron los eventos fuera del burdel, donde dos muertos fueron dispersados por los imperiales no sin antes perder partes de su cuerpo de igual forma, y aun así, los hicieron ver como accidentes o asaltos de bandidos.

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Los acontecimientos que han vivido solo es la punta del iceberg, aún no saben siquiera lo que ocurrió ese mismo día unas horas antes, simplemente saben lo que ha ocurrido acá… Jinzo se amurro y se encamino al baño, pero antes de entrar, se volteo y una manera extraña de hablar en el se pudo sentir - recuerda informarle a Adan Yamanaka sobre esto - para luego ingresar al baño. para ambos los acontecimientos estaban siendo igual de estresantes, pero, para Satoru, algo cambio… de repente logro percatarse de algo…

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El, a través de su Byakugan, podía ver muchas cosas, como en los departamentos aledaños algunas personas hacían su vida normal, una pareja teniendo relaciones, un perro cagando en la alfombra y un gato comiendo del plato de sus dueños, todo era normal en ese edificio, pero, lo que no era normal, era una habitación dentro de este mismo departamento, una habitación con una puerta común y corriente, una habitación la cual, en su interior, no podía ver nada… era la misma sensación que le daba esa niña que ahora les enseñaba esos papeles… era un bloqueo visual.

OFF
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Última modificación: 25-04-2023, 10:07 PM por Musacus.
La situación no mejoraba pero Satoru esta vez contaba con mas información, aquel shinobi lo había estado siguiendo, aunque esto lo desconcertó y más aun saber que conocían a Adan y este no le había dicho nada, Satoru empezó a sospechar de aquellos Shinobis, a tal punto de querer marcharse del lugar, ya había pasado buen rato desde su llegada y lejos estaba de conseguir tranquilidad. Al parecer el Nara tampoco tenia muy clara la situación, aun así Satoru ya no estaba predispuesto al dialogo, ese lugar era muy extraño, ya no había mas tiempo que perder... Aunque ahora sabia el nombre del otro Shinobi... -Marc...- Pensó.

-...todos hemos trabajado para que ustedes dos no mueran ¿y para qué? Para que vengan a hablarnos con esa superioridad suya… NI SI QUIERA SE PORQUE SON TAN IMPORTANTES-
La situación estaba fuera del control de Satoru, lo único que quería hacer en ese momento era salir de allí y mas sabiendo que existía un interes por su persona... aunque no seria fácil, tenia a aquellos dos Shinobis de los cuales poco sabia y además el peso muerto del Shinobi herido, no seria sencillo escapar...
-¿Acaso somos prisioneros...?- Pensó mientras miraba con cara de inseguridad a su compañero, esperando que este tuviera la misma sensación que El.
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Luego la joven invisible, que osadamente mostro unos documentos alertando así a Satoru, al parecer ellos estaban al tanto de la peligrosidad del Imperio, esto le hizo volver a pensar en su amiga y en cierta forma le dio coraje para seguir con su misión o mejor dicho su objetivo ninja, no debía temer de nada ni detenerse... en ese momento lo mas importante era sobrevivir para llevarle la información a Adan. Luego de escuchar a Jinzo, coincidió solo por esa vez con el.
- Recuerda informarle a Adan Yamanaka sobre esto -

Aunque no entendía porque, aquel Shinobi sabia cosas, pero no estaba seguro si estaba de su lado, al menos sus métodos no coincidían, por lo que sin mas, ni bien el Ninja entro al baño Satoru se percato de aquella habitación extraña, estaba claro que debía salir de allí, no estaba dispuesto a seguir conversando con aquellos Shinobis, no hasta haberse encontrado con Adan...
Rápidamente le indico a su amigo que se fuera de allí, Hao y Satoru habían desarrollado en el poco tiempo que se conocían una serie de señas con las manos, eran tres: un dedo levantado indicaba la retirada, dos dedos levantados indicaba silencio y tres dedos levantados indicaban refugio. Por lo que con destreza Satoru levanto un dedo y luego tres, para así no llamar la atención de los otros Shinobis o al menos dejar desconcertada a la joven niña. Luego de esto Satoru cargaría en hombros a el Shinobi Herido e intentaría salir lo mas rápido posible por la ventana, luego de cargarlo se acercaría a la ventana aunque este haría el menor ruido posible, estaba claro que la niña lo veía pero sabia que ella casi no emitía sonidos, por lo que se demoraría en avisarle a su compañero... Ni bien pudiera Satoru saltaría por aquella ventana y haría una serie de sellos...
OFF: En caso de entrar en combate hare el descuento de chakra correspondiente en el siguiente post. (Byakugan 2 turnos). En caso de que pueda saltar por la ventana, los sellos son del Kage Bunshin, de esta manera dejaría dos clones en su lugar y El escaparía con el Shinobi herido en brazos, con la intención de que los dos clones hagan algo de tiempo en caso de persecución.
Kage Bunshin no Jutsu


Satoru
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Al fin logramos conseguir un poco mas de información, sin embargo, a medida que la íbamos consiguiendo, más tensa y desfavorable era la situación, estaba en un lugar desconocido, rodeado de shinobis que parecían tener mucha información acerca de mi y de mi compañero, pero al parecer se negaban a revelarla del todo, la desconfianza y la urgencia por salir de aquel lugar comenzaban a apoderarse de mí, no podíamos permitirnos perder mas tiempo en aquel extraño y peligroso lugar, pues no teníamos claridad sobre si éramos prisioneros o simplemente estábamos atrapados en una situación fuera de nuestro control.

Miré a mi compañero, Satoru, buscando un indicio en su rostro, de que también se sentía inseguro y atrapado, en ese momento nuestros ojos se encontraron y de inmediato, con tan solo mirarlo, me percate de que nuestras expresiones reflejaron la misma incertidumbre, en ese momento, recordé lo que habíamos conversado con Satoru, la importancia de la misión y de informar sobre todo lo que estábamos presenciando, no podíamos permitir que el Imperio quedara impune, poniendo en peligro a la gente de la aldea.

La joven invisible, quien mostró documentos que corroboraban la peligrosidad del Imperio, reforzó mi determinación, Tenía que sobrevivir a toda costa y llevar esa crucial información, esta era nuestra responsabilidad como shinobis de konoha, sin embargo, no dejaba de darme vueltas el nombre mencionado, Adan Yamanaka, aún no había tenido la oportunidad de conocerlo, pero por lo que todos mencionaban parecía ser una persona realmente importante, en ese momento solo se me venia a la mente mis conocimientos de libro sobre el clan Yamanaka, uno de los clanes más destacados de la Aldea Oculta de Konoha, el cual se especializa en técnicas de manipulación mental y sensorial, extremadamente útiles para el espionaje y la recopilación de información.

Cuando el otro shinobi ingresó al baño, era nuestro momento debíamos actuar cuanto antes, había logrado entender las señas que poco tiempo atrás habíamos desarrollado junto a Satoru, donde en este momento, levanto un dedo y luego tres, indicando que debíamos retirarnos y buscar refugio, Era el momento de actuar con cautela y rapidez, por lo que cuando este comenzó a levantar al shinobi me levante de inmediato tras el dispuesto a seguirlo, cubriendo sus espaldas.
avanzamos silenciosamente hacia la ventana, evitando llamar la atención de los otros shinobis de los alrededores, a pesar de que aquella niña nos estaba observando, confié en nuestra ventaja ante su falta de capacidad para emitir sonidos, mientras Intentaba no hacer ruido nos acercábamos a la ventana, esperando tener la oportunidad de escapar sin ser descubiertos.

Una vez cerca de la ventana, preparé una serie de sellos en silencio, al parecer era el momento de comenzar a actuar, salté por la ventana tras Satoru, manteniendo mis sellos en caso de cualquier cosa, sintiendo la adrenalina correr por mis venas, era algo arriesgado, pero Satoru ya había comenzado a moverse, no había vuelta atrás, no podríamos permitirnos quedarnos en aquel lugar.

 La caída fue rápida y controlada, una vez en el suelo, miré a Satoru, transmitiéndole con la mirada la urgencia de alejarnos lo más rápido posible, levantando mi brazo y empuñándolo, dando la señal de reagruparnos, la cual era que nos juntaríamos en el lugar seleccionado llegadas las 1600 horas, en ese momento, nos comenzamos a separar, adentrándonos entre las casas, utilizando la cautela para asegurarnos de no ser seguidos, mientras esto pasaba, mi mente se enfocaba totalmente en la misión y en el deber de llevar la información A pesar de la adversidad, sentía una determinación renovada, nuestro camino no sería fácil, pero como shinobis, estábamos dispuestos a enfrentar cualquier obstáculo para proteger a nuestra hermosa aldea.
||| Hablo || Pienso |||
[Imagen: hao_firma.jpg]
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La niña sin nombre estaba desesperada, apenas vio el movimiento del joven Satoru comprendió que todo estaba marchando relativamente mal, Jinzo-san estaba en el baño, Marc-dono estaba fuera en una cita con Tyare-sama, ella no podía gritar ni hacer nada para evitar que actuaran de esa forma… lo único que se le ocurrió fue lo mismo que antes se le encomendó a hacer… en caso de que alguien huyera de aquel lugar, siempre debía actuar de la misma manera, aunque estos jóvenes ninjas intentaban actuar de manera sigilosa ante el Nara, no lo estaban haciendo para la niña sin nombre, ella estaba adiestrada para actuar ante problemas como este, y simplemente junto las yemas de sus dedos y cerró los ojos con fuerza.

En el mismo instante, una barrera se posó sobre las ventanas y puertas de la casa, estas desaparecieron ante los ojos de los ninjas, solo seguía ahí la puerta del baño, era como si nunca hubiesen existido, ni siquiera podían recordar la posición original de estas mismas, habían desaparecido completamente… era un Jutsu increíble, pudieron notar en un instante de que se trataba, un Jutsu de barrera que venía de paso con una ilusión mental, pero, esta ilusión, llego a sus cerebros tan rápido que no pudieron darse cuenta de que estaban cayendo en un Genjutsu, la niña era una maestra en este arte, o mejor dicho, era el único arte que realmente conocía.

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Tres golpes al suelo, dos rápidos seguido por un silencio y uno final, estos golpes los efectuó con el talón de su pie derecho, era una especie de código, o mejor dicho, un comando, algo previamente marcado… en caso de intrusos o intentos de escape, el Nara automáticamente al escuchar estos sonidos lanzaría su posesión de sombras por toda la habitación principal, tanto Satoru y Hao fueron poseídos, mientras que alrededor de la niña sin nombre había un pequeño círculo sin sombras que le rodeaba… parecía practicado, pero… no lo era.

Hao y Satoru quedaron sentados en el aire, era como si estuviesen imitando la misma postura que tenía Jinzo en el baño, este, a su vez, empezó a replicar desde dentro del mismo baño diciendo sorprendido – que… PERO QUE PASA, PORQUE ESTOY HACIENDO ESTO – empezó a gritar desesperado, se paró como pudo y limpio su trasero, salió del baño y pudo ver a Hao y Satoru imitando sus pasos, debió ser gracioso ver a ambos limpiarse y levantarse unos pantalones imaginarios, pero, lo que más preocupaba, era la cara de sorpresa del Nara, este estaba atónito y sorprendido, no podía liberar su jutsu y no paraba de gritar en busca de respuestas…

La joven sin nombre, se aproximó a donde estaba la ventana, la cual volvió a aparecer por un instante, mientras aparecía además una jaula al borde de la misma, una jaula que antes no habían visto, tenía tres aves de distinto color, tomo la negra y la arrojo por la ventana, para luego volver a desaparecer junto con dicha ventana…

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Pasaron unos minutos de desesperación, no fueron más de 15 minutos cuando la puerta volvió a aparecer tras un golpe de dos, un silencio y otros dos golpes, un código distinto… al abrir la puerta, entro Marc y Tyare, el joven Nara empezó a preguntar por quien era esa mujer, quien simplemente caminaba seria por la habitación haciendo sellos de manos… Hao pudo reconocerla, pero, luego de eso, nada de lo que había ocurrido podría recordar… sus últimos recuerdos fueron de cuando Marc salió de la habitación, todo lo demás fue borrado.

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A la mañana siguiente, despertaron en el living de la casa, arropados con un par de mantas, no recordaban nada de la noche anterior… pero… lo que más les sorprendió al despertar, es que Tamao Uchiha, aquel ninja imperial, estaba cocinando, preparando desayuno y de buena manera… este los saludo amablemente y el Nara le hablaba con cariño, como si se conocieran de mucho antes… la niña sin nombre no paraba de mirarlos, sentada en la mesa como si estuviese en una pesadilla que no paraba de repetirse…

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Hao, Satoru… su mensaje de ir a un refugio fue lo único que no pudieron eliminar al 100%, pero, si hubo un cambio… en sus mentes ya no había un lugar privado al cual ir… solo había lugares públicos, cafeterías y restaurantes… era el lugar donde se reunirían hoy a medio día… pues a partir de ahora, pueden salir caminando por la puerta de aquel departamento.

importante
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Última modificación: 01-05-2023, 11:07 PM por Musacus.
Un gran vacío azotaba la mente de Satoru era como un sueño extendido, lo que habían sido horas simplemente fue un recuerdo olvidado, un sueño.-Algo no va bien...- Pensó mientras abría sus ojos y se acomodaba lentamente. Satoru era una persona comprometida con sus horarios por lo que levantarse mas tarde era algo inusual, El realizaba sus meditaciones durante la mañana y la noche, por lo que no recordar haberlas hecho también le generaba incertidumbre. Todo esto rodeado de un grado de pesadumbres, faltaba una pieza, un vacío, un sentimiento. A duras penas reconoció a aquellos Shinobis, aun así quería salir de allí a toda cosa. Su instinto nuevamente le alertaba sobre aquellas personas, había algo pendiente entre ellos. Despertó y se encontró con un ambiente muy casual, aquellos shinobis compartiendo el almuerzo. Esto no lo detuvo en su salida, lentamente se incorporo analizo la situación y se acerco hacia la puerta. Justo cuando estaba frente a la puerta Satoru tuvo un cruce de mirada con aquella niña y su semblante, era la primera vez que le veía y ya le generaba cierta tensión y curiosidad, por otro lado estaba aquel Uchiha que animo a saludar a Satoru dándole la bienvenida mientras le ofrecía un plato. Satoru no estaba para nada a gusto sumado a su total desconcierto y mal humor, aquel shinobi lo había atacado días atrás por lo que decidió darle una clara advertencia.
-Oye... La próxima vez uno caerá...- Respondió Satoru
Dejando claro que no estaba dispuesto a simpatizar con ellos además la situación era muy frágil creía que esta era una forma clara de advertir su poca tolerancia, luego le advirtió a su compañero que debían irse, dando pie a su salida. Rápidamente  abrió la puerta haciendo caso omiso a lo que le dijeran y se marcho por las escaleras mientras preparaba su atuendo y su clásica bincha.
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Una vez afuera del recinto pudo asegurarse de su entorno, intentaba memorizar el momento en que entró y lo que sucedió después, algo no andaba bien, un vacío y una sensación de perdida... aun así hoy tenían una reunión con su compañero, esto ultimo estaba seguro ya que Satoru tenia previsto un viaje y quería comentárselo a Hao, el lugar de encuentro era el mismo de siempre, el Café donde días antes había sucedido un conflicto, de paso vendría bien asegurarse a los allí presentes, pedir disculpas por sobre todo, por lo que decidió esperar a su compañero a que bajara e ir juntos. Una vez en la vereda decidió poner a prueba uno de sus jutsus, este le serviría para analizar a aquellos Shinobis, esta información quizá sería útil en caso de enfrentamiento o bien alguna presencia que valga la pena tener al margen. Con total impunidad mientras civiles pasaban a su lado en aquel mediodía de Konoha Satoru empezó a realizar una serie de sellos para que luego se desplegara una esfera junto a Satoru, la cual serviría para un análisis de chakra alrededor del sitio.
Kanchi Suikyū
Satoru
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Aquella mañana parecía ser una como cualquier otra en la tranquila aldea de Konoha. Me desperté en el cómodo sofá del living de la casa con una extraña sensación en mi mente, como si algo importante hubiera ocurrido, pero se hubiera desvanecido en la oscuridad del olvido, no podía recordar absolutamente nada de lo que había sucedido la noche anterior, solo quedaba un gran vacío en mis recuerdos y un sentimiento de pérdida que me atormentaba.
 
Al levantar la mirada, noté que Satoru también había despertado y su expresión reflejaba la misma confusión y desconcierto que yo experimentaba, Estábamos rodeados de un ambiente casual en el departamento, y para nuestra sorpresa, el mismísimo Tamao Uchiha se encontraba en la cocina, preparando el desayuno como si fuera lo más natural del mundo, a pesar de su aparente amabilidad y familiaridad hacia nosotros, no podía evitar sentir una profunda desconfianza hacia Tamao, en ese momento recordaba claramente la brutalidad con la que nos había atacado hace apenas unos días, y eso me mantenía en constante alerta. Opté por guardar silencio, manteniendo una distancia segura, mientras observaba cómo Satoru mostraba un comportamiento más rudo y desafiante hacia aquel ninja. La tensión en el ambiente era palpable.
 
Después de nuestra breve conversación con Tamao, Satoru tomó la decisión de salir del departamento y, sin dudarlo, decidí seguirlo, algo en aquel lugar despertaba en mí una gran desconfianza, un instinto de supervivencia que me decía que debíamos alejarnos y hablar sobre lo ocurrido la noche anterior, sabíamos que teníamos una reunión pendiente en un lugar público, y en ese momento, sentía una ansiedad creciente por entablar esa conversación con Satoru y discutir todo lo que habíamos experimentado.
 
Mientras caminábamos por las pintorescas calles de Konoha, mi mente estaba llena de preguntas sin respuesta. Quería saber qué había sucedido en esa noche en blanco, qué nos había llevado a despertar en aquel lugar rodeados de desconocidos. Buscaba desesperadamente alguna pista, algún indicio que pudiera ayudarnos a reconstruir los fragmentos perdidos de nuestra memoria, el ambiente de la aldea era tranquilo y apacible. Los rayos del sol de la mañana se filtraban entre las hojas de los árboles, creando un hermoso juego de luces y sombras en el camino, a medida que avanzábamos, notaba cómo los habitantes de Konoha nos observaban con curiosidad y cierta reserva. Nuestro aspecto y nuestra actitud probablemente generaban sospechas y especulaciones entre ellos.
 
En mi interior, sentía una mezcla de determinación y precaución, sabía que no podía confiar en nadie ciegamente, ni siquiera en aquellos que parecían conocidos, juntos, Satoru y yo éramos el único apoyo que teníamos en medio de aquel enigma, tenía la esperanza de que, uniendo nuestras fuerzas, pudiéramos desentrañar los misterios que nos rodeaban y encontrar las respuestas que tanto queríamos, fue en ese momento que vi aquel Jutsu que este estaba haciendo a lo que le pregunte – ¿Qué quieres hacer Satoru?
||| Hablo || Pienso |||
[Imagen: hao_firma.jpg]
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¿Aquel radar de Chakra pudo ser acaso el error más grande que ha cometido Satoru Hyuga hasta entonces? Puede ser, pues nunca supuso que una fuente de chakra tan grande fuese a colapsar su sentido, esta era tan grande como el mismo edificio del que salían, tanto que su aura y presencia llegaba hasta donde estaban ellos mismos y a se extendía mucho más allá… era sorprendente… pero… así de sorprendentemente desapareció.

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En el departamento donde convivieron ahora solo estaban las presencias de dos personas, una más grande que la otra, pero no, por tanto, pero aquella masa absurda de chakra desapareció… probablemente aquella niña silenciosa en este momento no se encontraba visible… de nuevo, ese truco infernal que siempre hacia no pudo ser detectado por esta fuente de chakra, pero a diferencia de todas las otras veces, esta es la primera vez que no olvidaste su presencia, simplemente desapareció de ahí.

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Los jóvenes tenían la intención de juntarse en la misma cafetería del día anterior, cuando fueron atacados por Tamao Uchiha y emboscados por Yukina Hyuga y Grou Akimichi, pero también es el lugar en donde Marc Aburame, Jinzo Nara y la niña sin nombre los rescataron, poco antes de ver la muerte de Naomi y Yin Jinsoku, todo lo ocurrido el día anterior había sido un desastre, pero eso no los alentaba a no ir a este lugar… era, sin lugar a dudas, un lugar peculiar de reunión… sin embargo, antes de ir, uno de los dos decidió separarse repentinamente, el joven Satoru Hyuga tenía algo que hacer… pero… que era, no lo sabrán todavía que fue lo que hizo, ya que el mismo no lo recuerda todavía… solo puedo decirles que... si, lo que izo tiene relación con las cartas que mandaba a Adan...

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Las horas pasaron y el joven Hao Uchiha esperaba el arribo de su compañero, se sirvió una taza de café y se sentó en el mismo puesto de antes, aun sorprendido porque este lugar volviese a abrir tan pronto luego de lo que había sucedido el día anterior. Bebió de su café y cuando bajo la taza, pudo ver frente a él, a la niña sin nombre… no tenías nada en contra de ella, y ella no parecía hostil hacia ti, simplemente te volvió a entregar los mismos documentos que el día anterior había entregado… te observo a los ojos… parecía una súplica, ella simplemente señalaba el periódico y mostraba las muertes que se habían efectuado… en las fotos, señalaba algo… pero… no era tan notorio de notar… hasta que pudiste ver todas las fotos al mismo tiempo. La marca de aquel asesino, su huella singular, todas las victimas de todos los diarios tenían algo en común, a todos les faltaba al menos un ojo… a todos y sin excepción el ojo derecho les fue extirpado… cuando por fin lo vio, miraste a la niña nuevamente, ella te pareció peculiar… y en ese momento te diste cuenta… rara vez la viste a los ojos, escasamente pudiste percatarte de que sus iris eran totalmente distintos uno del otro… ella señalo un edificio cerca de este mismo lugar, pero luego de eso, desapareció.

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Casi al instante, Satoru llego a la mesa de Hao, este parecía cansado, al parecer tuvo que correr mucho para llegar… pero, ahora, Hao tenía información importante que revelar.

Contenido Oculto
[Imagen: oK1I80D.png]
- Master of puppets, I'm pulling your strings -
The Devil
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Última modificación: 08-05-2023, 06:22 PM por Musacus.
Ya habían pasado unas horas desde que había partido de aquel edificio, luego de un percance que tuvo camino al Café ya estaba llegando al lugar de reunión algo apurado, habían quedado en una hora, pero Satoru se demoro demás, una de sus consignas era siempre llegar a horario, pero esta vez estaba en falta...En cuanto entro vio a su compañero y su taza de Café vacía.
-Oh querido te pido disculpas por haber llegado tarde, espero que puedas acompañarme un rato mas-
Luego de presentarse Satoru tomó asiento frente a Hao e inspecciono rápidamente el lugar, todo parecía normal, aunque no pudo identificar a la joven moza del día anterior, sino mas bien vino alguien en su remplazo. Luego Satoru pidió Té y una porción de Budín. Mientras esperaba su pedido atinó a charlar con su compañero.
-Estos últimos días han sido muy extraños ¿No crees?- Le pregunto a Hao
-Por cierto... quería comentarte que me ausentare de La Aldea por unos treinta días, necesito despejar la mente, estando aquí se me hace difícil-
-Por otro lado me gustaría que sepas que puedes contar conmigo, que no te quepan dudas de ello- Dijo Satoru sonriendo a Hao
-En general no soy muy social, pero he visto en ti un gran Shinobi emergente y por sobre todo un buen ser Humano
-Quisiera contarte más de mis planes, pero por el momento no puedo... Lo único que te diré es que algo esta por suceder en la Aldea o al menos esto me dice mi instinto, mejor evitar problemas con el Imperio... Ya hemos hecho nuestra parte- Dijo Satoru susurrando en voz baja.
Luego de unos minutos llego su pedido el cual Satoru agradeció. Mientras disfrutaba de su Té Satoru escuchaba a su compañero con suma atención. Lo notaba un poco distraído, pero era lo normal, al fin y al cabo los últimos días habían sido bastante agitados y poco memorables, aun así Satoru creyó que lo mejor era dejar pasar al menos por ese día los eventos anteriores de los cuales poco podía decir, esto le generaba mareos y más confusión. Aun así los Shinobis tenían mucho que hablar, hace rato que no se encontraban solos, esta era la oportunidad, luego de revisar nuevamente el sitio, estaba ellos dos solos y quien los atendía por lo que sería propicio sacar conclusiones...
Satoru
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Última modificación: 10-05-2023, 05:15 AM por Hao.
Ya había pasado un tiempo desde que llegué al café y me senté en mi lugar habitual, esperando la llegada de Satoru, mientras bebía mi taza de café, mi mente divagaba entre los acontecimientos recientes, los días anteriores habían sido caóticos y llenos de sucesos inexplicables, sin embargo, esa no era la razón principal de mi inquietud en ese momento.
 
       Observaba a mi alrededor, notando cómo el café volvía a su rutina habitual después de los eventos perturbadores de ayer, era inevitable preguntarme si esta era realmente la mejor ubicación para reunirnos, considerando todo lo que había sucedido, sin embargo, era el lugar donde nos habían rescatado anteriormente, tal vez había algo especial en este sitio que aún no podía comprender.
 
       Mientras sumergía mis pensamientos en el café humeante, levanté la vista de mi taza y me encontré con la mirada de la niña sin nombre, inmediatamente en ese momento me sorprendió su presencia, nuevamente sentía una gran confusión al verla, simplemente no podía confiar en ella, esta no mostraba hostilidad, sino que me entregaba los mismos documentos que había recibido el día anterior, parecía suplicante, señalando hacia el periódico que sostenía en sus manos, En las fotografías, algo captó mi atención, todas las víctimas tenían algo en común, les faltaba al menos un ojo, y era específicamente el ojo derecho, miré a la niña y noté que sus iris eran diferentes entre sí, algo peculiarmente sospechoso, parecía que intentaba comunicarme algo importante apuntándome en dirección a un edificio del lugar, sin embargo al instante desapareció.
 
       En ese momento, pensaba en que habíamos quedado en encontrarnos a una hora específica, pero Satoru se había retrasado considerablemente, siempre he sido puntual, no tenía problemas en esperarlo, sin embargo, estaba esa posibilidad de que algo le hubiera pasado, por lo que cada minuto de demora en su llegada se hacía realmente algo eterno, casi en ese mismo instante Satoru llegó al café, visiblemente cansado, parecía haber corrido mucho para llegar, Decidí guardar los documentos y las reflexiones por el momento y centrarme en lo que Satoru tenía que decir.
 
       Satoru mencionó que le gustaría contarme más sobre sus planes, pero por el momento no podía hacerlo. Sin embargo, me advirtió que algo estaba por suceder en la aldea, según su instinto, y que era mejor evitar problemas con el Imperio, ya que ya habíamos hecho nuestra parte. Susurró esas palabras en voz baja, creando un ambiente de confidencialidad, ante esto le agradecí con una expresión de gran sinceridad diciéndole que ante cualquier cosa estaría para él.
 
       "Satoru, me alegra verte. No te preocupes por el retraso, entiendo que los últimos días han sido agitados", le dije con una sonrisa tranquila. "Gracias por estar aquí. También quería compartir algo contigo. La niña sin nombre me entregó estos documentos nuevamente, y algo llamativo ha captado mi atención en las fotografías. Todas las víctimas comparten una característica en común, les falta al menos un ojo, específicamente el derecho. Además, la niña parece tener información adicional que señala hacia aquel edificio. Apuntando al edificio posicionado en frente de nosotros ¿Estaba pensando quizás podrías apuntar tu Byakugan en esa dirección y ver si allá había alguna pista en el lugar?"
 
       Esperé a que Satoru procesara la información mientras continuaba tomando sorbos de mi café, ansioso por escuchar su perspectiva sobre este inquietante descubrimiento, pasaron unos minutos y llegó nuestro pedido. Satoru expresó su agradecimiento y comenzó a disfrutar de su té, mientras tanto, yo lo escuchaba atentamente, notando que parecía distraído, era comprensible, considerando los agitados y confusos últimos días que habíamos vivido, decidí que era mejor dejar de lado, al menos por ese día, los eventos pasados que nos habían afectado tanto, nos encontrábamos solos en el café, aparte del personal que nos atendía, esta era nuestra oportunidad de hablar como shinobis, teníamos mucho de qué discutir, revisé nuevamente el lugar, asegurándome de que no hubiera nadie más alrededor, era el momento propicio para sacar conclusiones y compartir información.
||| Hablo || Pienso |||
[Imagen: hao_firma.jpg]
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Rõgu por cosas del destino acabó uniendose a la fuerza militar de Konohagakure (temporalmente) para ayudarlos a detener a un duo de asesinos que azotaba a la aldea. Por eso hoy se encontraba con su traje de combate y rodeado de bellas mujeres, ellas eran su equipo de respaldo y aunque solo "conocia" a Yukina y a Nana (su amor imposible) confiaba en todas para esta misión.

Confío en ustedes-aclaró mientras mostraba su pulgar arriba en señal de que todo iria bien-Y con Rõgu es suficiente-acabó mencionando sonrojado, la formalidades eran vergonzosas para él.

Rõgu haria un unico sello y un aura ascendente empezó a recubrir su cuerpo con fuerza. Rõgu cerró sus ojos y concentrando su chakra en puntos necesarios empezó a abrir "las puertas celestiales" -Primera... Segunda... Tercera-el cuerpo de Rõgu empezó a verse rojo por el aumento de flujo sanguineo, de hecho, sus venas se marcaron-Cuarta... ¡Quinta puerta! ¡puerta del cierre! ¡abierta!-su aura se volvió verde mientras la tierra del techo se alejaba del cuerpo del muchacho por la imponente concentración de chakra.
Kirameki Kikan

Tomon

Yukina daria la orden de atacar y sin dudar Miroriya saldria corriendo por toda la columna de aquel edificio para no destruir los vidrios. Un aura verde queda como estela por donde ha pasado y con un sprint de mas de 15 metros Rõgu salta al pavimento para continuar su carrera contra aquel hombre de cabellera blanca como la nieve.
Kinobori no Waza

Tai Atari

Rõgu esperaba que con el siguiente golpe lograra noquear al sujeto, aunque bueno, no era un golpe tan simple-¡Doble disparo!-pensó emocionado mientras atacaba el rostro del hombre dos veces en una secuencia de tiempo casi imperceptible.
Daburu Atakku

Estadísticas de Rõgu Midoriya

Chakra: 475/610

610 - 30 - 40 - 20 - 45
Daño:
30 + 5 + 45 + 47 = 127 x 2 = 254 total
Velocidad: 95
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Última modificación: 11-05-2023, 08:18 PM por Musacus.
Luego de una frenética conversación con su compañero Satoru se percato de algunos detalles de los que no estaba al tanto, aunque lo mas preocupante fue escuchar que la base de operaciones era justo en frente y que muy probablemente sus atacantes estuvieran allí o al menos era su base de operaciones. Hao animó a Satoru a usar sus habilidades sensoriales. 
-Además, la niña parece tener información adicional que señala hacia aquel edificio.- 
-¿Estaba pensando quizás podrías apuntar tu Byakugan en esa dirección y ver si allá había alguna pista en el lugar?"-
Esto hizo reaccionar a Satoru, le provoco en cierta forma un baldazo de realidad, no podía pretender relajarse luego de lo sucedido... Tras escuchar sus palabras una ola de tensión ocupo la mente de Satoru, quizá un estado de supervivencia. Rápidamente activo su Dojutsu y miro justo en frente, donde estaba aquel edificio, y por si fuera poco habían tres sujetos en la terraza altamente llamativos. Uno de ellos empezó a desplegar una gran fuerte de poder que dejo claro a Satoru la peligrosidad de la situación. Un segundo y el sujeto ya estaba frente a Satoru a punto de darle un poderoso golpe, pero este atino a bloquear su técnica.
Hari Jizou

Byakugan


-Estamos en peligro, salgamos de aquí-


Rápidamente el pelo de Satoru se extendió de tal forma que lo envolvió por completo haciendo de este un escudo para el golpe del Shinobi rival. Aun así luego del golpe Satoru salió despegando contra la ventana del frente del café, provocando serios daños tanto en el frente como en la vereda, producto de la fuerte técnica. 
Estadísticas de Satoru Hyuga

chakra= 339-5-20=314
Satoru
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Última modificación: 13-05-2023, 03:40 AM por Hao.
Todo paso en cosa de unos cuantos segundos, en ese momento Satoru acababa de llegar, me encontraba observándolo atentamente, como una simple casualidad del destino o quizás una gran suerte para Satoru, alcance a decirle que activara el Byakugan, por suerte, este pareció escuchar mi advertencia y rápidamente las venas del duojutsu se pudieron ver en algunas partes de su rostro, con esto, el shinobi logro reaccionar a tiempo, no para esquivar, pero si para protegerse justo antes de que la poderosa patada impactara en su dirección original, ese momento apara mi fue un gran alivio, sabiendo que le posiblemente lo había salvado de sufrir un daño grave.
 
        Me sorprendí de inmediato, al ver cómo el cabello de Satoru se extendió rápidamente, llegando a envolverlo por completo y formando un escudo bastante improvisado que le sirvió para protegerse del potente golpe del shinobi rival, ambos hicieron una muestra impresionante de su dominio sobre los Jutsu, unas habilidades que no había presenciado antes, a pesar de su intento por protegerse, el impacto de la patada fue tan fuerte que Satoru salió despedido contra la ventana del frente del café, El estruendo del cristal rompiéndose resonó en el ambiente, mientras los escombros y el polvo se esparcían por el lugar, la fuerza de la técnica del shinobi rival había causado daños significativos tanto en el frente del café como en la vereda.
 
                Con el corazón acelerado, miré hacia el shinobi rival, cuyo rostro reflejaba una mezcla de sorpresa y satisfacción por el éxito de su técnica, aunque estaba dolorido y el café había sufrido daños considerables, no estaba dispuesto a darme por vencido. «"No dejaremos que esto termine así"», pensé para mí mismo, decidido a encontrar una manera de responder a esta amenaza y proteger a aquellos a quienes apreciaba.
 
                Me acerqué rápidamente a Satoru, preocupado por su estado quería tratar de ayudarlo a ponerse de pie y verificar si había sufrido heridas graves, pero se me hacía imposible con aquel ninja frente a nosotros. -"¡Satoru, estás bien?" pregunté, mientras evaluaba la situación, sacando mi kunai y mostrándola intentando intimidar a aquel extraño personaje, al que le dije -"¿Quien eres? ¿Qué quieres de nosotros?" aunque el impacto había sido devastador, esperaba que su resistencia y habilidades le hubieran permitido minimizar el daño, en ese momento bajo mi capa prepare una bomba de humo, la cual lanzaría si el ninja se acercaba o si Satoru me hacia una señal apretando por detrás mi capa.
||| Hablo || Pienso |||
[Imagen: hao_firma.jpg]
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Moderación simple de Combate


El movimiento de Rogu fue impresionante, la velocidad que empleo era inconmensurable, nada se le comparaba, al activar la quinta puerta y avanzar con el poder de la velocidad parecía una lanza verde que arremetía contra su oponente. El cuerpo de Rogu paso por un costado de Hao, quien solo pudo sentir el viento pasar poco después de que aquella patada impactara en el rostro de Satoru, pero, el pelo cubría ya aquel rostro.

[Imagen: IMG_2766.png?width=629&height=354]

Tras una rápida reacción de aquel shinobi, gran cantidad de pelo rodeo al shinobi, cubriéndole el rostro y parte de su cuerpo, especialmente su espalda. Este movimiento logro amortiguar gran parte del daño proveniente de la patada, pero le lanzo hacia atrás atravesando por la ventana a toda velocidad… en ese minuto, no sabía si era producto de la contusión o el mareo, pero… se percató de algo… el tiempo pasaba lento mientras atravesaba esa ventana… era… increíble… ya había activado antes su Byakugan en este mismo sector, y era la primera vez que se daba cuenta que el nunca antes había visto el interior de esta cafetería… no hasta este preciso instante en que atravesaba por su ventana y llegaba a un lugar… un lugar algo extraño…
Vida: 86/240

154 puntos de daño

Rogu se quedó mirando de reojo al joven Uchiha, quien se aproximó a su compañero, se paró en una pierna y se dispuso a volver a atacar, este tomo nuevamente posición de carrera, pero algo le distrajo. Tras suyo, el edificio donde estaba empezó a colapsar.
Sí, es cierto, el joven Rogu corrió por el pilar de este edificio, intento no comprometer la estructura del mismo, pero era un edifico antiguo y su paso fue enormemente veloz, sus refuerzos estaban ya a la orden del día, tanto la mujer de aspecto rudo y blanca cabellera como Nana Nara, la joven muchacha de pelo oscuro y armadura amarilla estaban tras de él, listas para actuar – no lo haces nada mal muchacho – dijo la mujer misteriosa – cariño, eres sorprendente – sonrió Nana, mientras colocaba sus manos en pose de jutsu y su sombra empezaba a moverse. Hao quien entro a la cafetería y miraba con rabia hacia el exterior sabía que de esta no se salvarían… pero, el edificio….

[Imagen: 193.png?width=489&height=656]

Un simple pilar viejo fue motivo suficiente para que empezara a caer y parte del segundo piso se desmoronara, solo se vio caer una pared y el resto del edificio se mantuvo en pie… pero… lo que cayó del interior no eran solo escombros… eran cadáveres, y no pocos… si no muchos… el olor a putrefacción empezó a penetrar las calles y al interior de aquel edificio un gran hombre con una máscara de papel miraba sorprendido hacia el exterior… aquella mascara solo tenía un ojo, el ojo derecho… era macabro este ser… al ver en la situación que se encontraba, este salió corriendo por la puerta del edificio.

En ese mismo momento, Yukina Hyuga había bajado a la mitad de la calle y con una gran y resonante voz esta enuncio a su equipo – ALTO, La misión acaba aquí. Allí está el verdadero culpable. – el poder del Byakugan y su gran cerebro le hicieron entender inmediatamente lo que esto significaba… ya se había enterado de sectores donde su jutsu era burlado y este sujeto… este sujeto era aquel quien con bisturí en mano y un cadáver en la mesa de operaciones era el culpable. Rápidamente esta se dirigió al interior del edificio.

Rogu Midoriya, ya no tienes por qué continuar con este combate, de hecho, nada te obliga a seguir a Yukina ni nada por el estilo, eres un hombre libre y actualmente no perteneces a ninguna facción…

[Imagen: IMG_2767.png?width=629&height=354]

Por otra parte, volvamos al interior de la cafetería.

La joven muchacha que el día anterior les había atendido en el café, hoy estaba curando la cabeza del joven Hyuga usando jutsu médico, varias personas se pararon con sorpresa ante lo sucedido, entre ellos un par de caras familiares, Tamao Uchiha y Jinzo Nara, ambos se sorprendieron ante lo sucedido y no sabían bien que hacer, hasta que uno de los encargados de la cafetería abrió una trampilla secreta a mitad de la estancia, en ella un pasadizo secreto que llevaba lejos del centro de la ciudad, empezaban a gritar y llamar a la gente a ingresar en ella, pues estos rebeldes habían sido descubiertos… que jugarreta del destino fue esta, porque estos jóvenes eran los únicos clientes de este café de mala muerte, porque mierda tenían que atraer a los imperiales… porque… por Tyare…

Los ojos del Nara observaban al exterior, podía ver tanto a las dos muchachas que estaban afuera, pero las ignoro completamente… su vista solo estaba centrada en aquel edificio que tenía en frente. Las mujeres que acompañaban a Rogu desviaban la mirada y no hacían contacto visual con el interior de la cafetería, pues si, aquella barrera apenas funcionaba, pero era lo suficiente como para evitar que los que estuviesen afuera notaran que dentro estaba lleno de rebeldes. El Nara corrió por la puerta trasera.

Bajo el cuerpo de Satoru, una niña sin nombre estaba sosteniendo sus manos con fuerza, no soltaba su postura de manos por ningún motivo, aun cuando un trozo de silla le atravesaba el pulmón y la sangre brotaba por su boca… pero extrañamente, el ninja médico no la atendía a ella…

[Imagen: alhaitham_genshin_impact_drawn_by_kokote...height=656]

En ese momento, cuando ya todo el mundo intentaba escapar, Tamao Uchiha se detuvo un segundo y miro para atrás, observo con preocupación a los ninjas y les grito con apuro – ¡Apúrense y entren! No hay tiempo para explicar – mientras empezaba a bajar por la trampilla a aquel túnel… pero, también recibieron un nuevo mensaje…

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Aquella mujer ruda observo a los ninjas que yacían en el suelo, sin poder ver como uno de ellos recibía tratado médico, esta de reojo les dijo – chicos, perdón, nunca fueron el objetivo. Si son ninjas entenderán, el objetivo se escapa, aún pueden ayudar – dijo, mientras empezaba a correr hacia el edificio de en frente.

En sus cabezas empezaban a ocurrir un montón de cosas, pero más imperiosamente era el hecho de que tanto los imperiales como los rebeldes ocultaban muchas cosas… Rogu parecía ser el único capaz de ver, tal vez sea porque él fue quien rompió la barrera con su patada antes de que llegaran las imperiales… era el único capaz de ver la preocupación de estos rebeldes y como atendían a ese joven Hyuga… era obvio, estos niños nunca fueron rebeldes y tampoco estaban en contra del imperio… pero el imperio igual les puso un blanco en la espalda… sin embargo, Nana Nara estaba ahí, y con cariño te toco el brazo y dijo – cariño, si puedes ayudarnos entonces yo te invito al café más tarde – con una sonrisa de oreja a oreja mientras también empezaba a correr hacia el otro edificio.

[Imagen: __s_force_rappa_chiyomaru_yu_gi_oh_drawn...ebe73b.jpg]

Este es el momento crucial de esta misión… hora de elecciones. ¿Qué harán? No hay una respuesta correcta, para ninguno de ustedes, pero tampoco hay una respuesta incorrecta.

Les presento tres opciones:
  1. sigan al imperio, aquellos que decidan cruzar la calle e ir tras aquel homicida será un imperialista de tomo y lomo.
  2. entren en la trampilla, sigan al grupo rebelde, ninguna de las imperiales podrá verlos ni seguirlos, una vez dentro se les explicara todo y se unirán a la rebelión.
  3. no tomen ninguno de los dos caminos, no están de acuerdo con nada de lo que han vivido y vivan una vida lejos de esta idiosincrasia, serán Criminales o Rounin en este mundo de perros y gatos, no tomaran partido ni por un bando ni por el otro.

No hay orden de post en este momento, cuando estén decididos qué camino tomar, este no puede ser influenciado por otro user dentro de este tema, tienen toda la libertad que quieran para elegir su bando.
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Última modificación: 14-05-2023, 11:19 PM por Musacus.
Otra vez había fallado, inconveniente tras inconveniente dejaron a Satoru saturado, por unos momentos luego del golpe Satoru pensó si era apto como Shinobi, tuvo una suerte de reflexión sobre su vida y poca capacidad para los eventos, había comenzado su vida en Konoha con muchas expectativas pero la cruda realidad le dio una gran lección... Nunca subestimar las circunstancias.
Tras el impacto Satoru quedo desmayado por unos segundos, luego un gran estruendo producto de la ruptura del edificio y una cálida sensación sobre su herida lo despertaron. Nuevamente puso en peligro a aquella joven, que por si fuera poco se estaba tomando la molestia de curarlo. Y por si fuera poco luego de espabilar quitándose la tierra de los ojos y manos pudo notar a aquella niña, lo primero fue ver su tenacidad, se notaba su compromiso, pero luego observo una herida de gravedad esto puso nuevamente en alerta a Satoru. En un gesto quizás descuidado de su parte se levanto y le dijo a la civil medico que atienda a la niña.
- Esto es un mundo de locos...- Dijo Satoru mientras se levantaba suavemente.
[Imagen: 7fb19852f0b306c89f090779914c6759.jpg]
Todo paso muy rápido, no eran los únicos allí por alguna razón había cesado el combate y no estaba dispuesto a averiguar porque, el dolor era suficiente como para mantenerlo al margen de cualquier conflicto, aunque en parte le daba intriga conocer al poseedor de semejante técnica. La situación era un Caos, primeramente observo a aquel Shinobi que lo había atacado, pero no pudo reconocerlo luego rocas cayendo por doquier, sumado a esto algunos gritos por afuera indicando ordenes, aunque Satoru no pudo entender que es lo que decían, el Nara y sus compañeros al margen de la situación, alentándonos a huir de allí. Mientras tanto su compañero Hao observándolo esperando alguna respuesta de Satoru, algo aturdido tardo en responder, hizo un gesto con su mano agradeciéndole, pero el momento fue interrumpido por Tamao.

¡Apúrense y entren! No hay tiempo para explicar
Creía que su amenaza funcionaría pero no hizo efecto alguno, aun así Satoru guardaba resentimiento y no estaba dispuesto a ir con aquellos Shinobis, de hecho no estaba dispuesto a seguir a nadie. Satoru le devolvió una mirada dándole a entender a Tamao que sigan su camino.

La destrucción seguía, escombros y ladrillos caían a velocidad en la calle, pero lo peor ya había sucedido, por suerte estaban un tanto reparados, pero no era seguro estar allí, lo mejor sería escapar. Luego de que Tamao desapareciera de su vista aparecieron dos mujeres Shinobis que lo que menos daban era cariño, claramente era expertas en su oficio. Para confusión de Satoru esto había sido un malentendido, simplemente había quedado en medio de una treta, aunque en cierta forma fue un alivio para Satoru.
chicos, perdón, nunca fueron el objetivo. Si son ninjas entenderán, el objetivo se escapa, aún pueden ayudar
Ante su propuesta Satoru casi cae en la tentación de vengarse de aquel Uchiha, pero no era el momento y menos quería relacionarse con aquellas mujeres, aun así intento ser lo más cordial al rechazar su oferta.

-No se preocupe dama, estas cosas suelen suceder...- Dijo Satoru mientras reconocía los cadáveres en la calle y se daba cuenta de la terrible situación en la que estaba. 


-Me quedare a ayudar en este lugar que ha sufrido graves daños- Respondió Satoru.


Aunque Satoru tuvo  tiempo para elaborar sus palabras, casi que no pudo terminar sus frases pues las Shinobis salieron rápidamente en su persecución, dándole a entender que podrían con o sin El. Ahora quedaba enfrentar la situación, no se iría así sin mas, lo primero era poner al resguardo a todas las personas que quedaban allí, incluida la niña y la mujer del Café. 

-Debemos ponernos a salvo!- Exclamo Satoru a los allí presentes. 

Luego hizo una serie de sellos y tres clones aparecieron a su lado, aunque estuviese herido aún podía ser útil, entre Satoru y un clon llevaron a la niña por la Salida de Atrás para ponerse a salvo y asegurar la integridad de la niña, mientras los otros dos Clones se encargaban de liberar el paso en caso de  haber obstrucciones o ayudar a los civiles que se encontrasen por Allí. 


OFF: Satoru se quedaría en el lugar e intentaría ayudar a los civiles su prioridad es establecer un perímetro alrededor de la zona colapsada. También estaría dispuesto a dialogar con Hao y Midoriya, Satoru no guarda ningún rencor, lo digo por si quieren interactuar con El. 




Mode Rounin : ON
Satoru
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La ofensiva de Midoriya no daria en el blanco, la anticipación de su contrincante amortiguaria mas daño de lo que el Jinsoku hubiera querido pero aun así logro lanzarlo hacia atrás para lastimarlo contra la ventana y tener tiro libre contra el Uchiha pero antes de eso Rõgu escuchó como algo se quebraba, al mirar hacia atrás notó que era aquel edificio donde antes estaba parado. 

Nana Nara y la albina ruda llegaron para felicitar a Rõgu y sonrojarlo un poco-Agradezco sus palabras-mencionó rascando su cabeza apenado.

Los escombros empezaban a caer y el Jinsoku miró rapidamente si podía salvar a los civiles pero no necesito moverse ya que no habia civiles cerca ni adentro del edificio o al menos no con vida.

Este olor... Es de un cadaver-la mano del muchaho tapó su nariz, quedó perplejo al notar como cadavares caian tras ser recopilados en un solo punto. Aquel Uchiha decia algo pero Rõgu tenia la cabeza en otra parte.

Un hombre con una bolsa de papel en la cabeza se daba a la fuga, pero antes de que Rõgu pudiera moverse logró escuchar a Yukina declarar que la misión llegaba hasta ahí. Confuso, el muchacho miró a sus compañeras, la albina explicó que aquellos dos no eran el objetivo. El hyuga fue amable al no molestarse, la chica de la cafeteria lo estaba curando pero habian personas huyendo por un tunel secreto, todas y cada una poseian miedo por lo que el pecho de Midoriya empezó a latir fuerte al sentirse el villano de la historia.

Yo...-antes de decir algo, Nana tocaria du brazo para decirle algo dulce, Rõgu desvió la mirada sin saber si seguirla o no, pues, sentía que los imperiales de Konoha eran simplemente muy torpes para juzgar a la gente, bueno, al menos ese enmascarado habia sido encontrado con las manos en la masa por lo que no podían juzgarlo mal ¿o si?

El hyuga planeaba ayudar a evacuar, era cierto, con algunos civiles cerca y una posible pelea en camino la destrucción de esa area era casi inminente.

¡Lamento mucho atacaros! Pero... Quiero ayudar a la gente y ya mucho me estoy tardando-tras una reverencia, Midoriya salió disparado a por el asesino, Yukina posiblemente no lo quería dentro de esta pelea pero eso era lo que se buscaba por traerlo a todo esto.
Tomon

Kirameki Kikan

Chakra: 420/610
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El impacto de su patada resonó en todo el café, sacudiendo el cristal de la ventana y enviando a Satoru a volar lanzándolo varios metros hacia atrás, esta había sido la patada más poderosa que había visto, aquel joven shinobi que recién acababa de aparecer en el lugar, tenia una fuerza realmente absurda, la cual envió a Satoru a chocar contra la frágil estructura de vidrio, rompiéndola en mil pedazos mientras el sonido del cristal quebrándose llenaba el aire.
 
        Vi con preocupación lo ocurrido con Satoru, quien parecía estar completamente noqueado por el brutal ataque, un sentimiento de angustia y confusión apareció al verlo en ese estado, me apresuré hacia su lado, comprobando si estaba consciente y evaluando la gravedad de sus heridas y observé al joven shinobi, viendo como aparecían más personas aun en el lugar, quienes parecían felicitarlo por su gran patada, en ese mismo instante, un estruendo ensordecedor resonó a lo lejos, seguido del sonido del derrumbe de un edificio justo frente a la cafetería, el impacto del colapso sacudió el lugar, y el ruido retumbó en cada rincón, sumiéndolo todo en una nube de polvo, algunos gritaban de pánico, mientras otros intentaban buscar una ruta de escape, la confusión reinaba en el ambiente, y era evidente que la situación se estaba volviendo cada vez más peligrosa.
 
       La confusión reinante y el alboroto parecían haber tenido un efecto positivo en Satoru, quien poco a poco recobró la conciencia, observé con alivio cómo se ponía en pie, superando aquel fuerte golpe, me aseguré de que se encontrara en condiciones estables antes de tomar una decisión, en ese momento mientras evaluaba la situación y observaba a las personas que se agolpaban en la cafetería, llegué a la conclusión de que toda esta situación no lograba llamar mi atención o despertar mi interés, el caos del momento y la confusión solo me empujaban a abandonar ese lugar.
Ante esto, me acerqué a Satoru, asegurándome de que estuviera lo suficientemente recuperado para seguir adelante, tras confirmar su estado, tomé la decisión de abandonar la zona y volver a casa, tenia muchas cosas que hacer aun, sin mirar atrás, me aleje de la escena, dejando atrás la conmoción y la incertidumbre que llenaban el ambiente.
||| Hablo || Pienso |||
[Imagen: hao_firma.jpg]
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15 de marzo
Medio día
El caos era tal en esta parte de la ciudad, un edificio colapso en lo que parecía ser la calle más problemática de la zona, los Anbu hacían vista gorda de lo ocurrido, pues eran sectores imperiales los que estaban siendo afectados, los rebeldes escapaban por las alcantarillas liderados por Tamao Uchiha, el comandante rebelde de este escuadrón, un joven prometedor que se había infiltrado en el imperio, pero que al tiempo, perdió contacto con el resto de sus compañeros y sus propios sentidos, aquel joven ahora era dueño de sus propios pensamientos nuevamente, y aunque ninguno de nuestros protagonistas le acompaño, él era el que guiaba a la gente llevando de su mano a la Niña sin Nombre, si, la misma que ustedes conocen, quien seguía a pasos agigantados a este hombre y no paraba de sonrojarse por el acto tan heroico que este hacia…

Por otro lado, los imperiales establecían un perímetro e intentaban dar con aquel hombre enmascarado, era frustrante, tanto Yukina como el resto de sus compañeras no habían sido capaces de seguirle el rastro, era como si fácilmente el desapareciera de la fase de la tierra, era increíble que ni la aguda vista de Yukina Hyuga ni el olfato infalible de Tazz Inuzuka (la mujer ruda de pelo blanco) podían encontrar a ese sujeto… no podía ser… o al menos eso es lo que creían… Tazz se alejó del perímetro por su cuenta, llevando a esa niña ciega en el hombro y corriendo por los tejados lejos del resto, pues su infalible brújula ciega le había indicado el camino. Rogu, si deseas seguir a Tazz, solo llegaras una vez su objetivo hubiese sido completado.

[Imagen: __producer_and_higuchi_madoka_idolmaster...526512.jpg]

Para aquel que se quedó en el lugar, más que ayudar a civiles y las personas, simplemente pudo detectar a la muerte en el sector… ya los civiles habían huido y solo quedaba el, con un gran dolor en el rostro y barro en los pantalones… la lluvia empezaba a caer sobre tu cabeza y no podías hacer ya nada… ya no alcanzarías a encontrarte con los imperiales ni sabrías donde se fueron los rebeldes, hoy en día estas solo ya que ni Hao se quedó a tu lado…

[Imagen: __hayakawa_aki_chainsaw_man_drawn_by_ika...857f61.jpg]

Para aquel que corrió a casa, el camino lluvioso cada vez empezaba a ser más molesto, pudiste ver una sombra en el pasaje, al verlo de reojo pudiste reconocer a Jinzo Nara, el único rebelde que no corrió por las tuberías… aquel hombre se vestía de una manera extraña en un callejón oscuro, apenas pudiste verlo de reojo, pero fue suficiente para ti… quieres estar lejos de él y de todo lo que ocurre en este momento.

La lluvia empezó a caer más y más fuerte, este es el momento clave de la búsqueda en el que llega Tazz a su destino, guiada por aquella muchacha, un callejón oscuro, un ataque despiadado y la muerte de aquel hombre de la máscara de papel… Yukina y Nana llegarían a la escena, primero sería la Hyuga, quien al ver bajo la máscara de aquel hombre usando su Byakugan, solo atino a detener a Nana en el tejado… la lluvia impediría oír lo que dicen… sin embargo, un grito desesperado desde aquella muchacha de ropas amarillas y un colapso nervioso harían estremecer a cualquiera… Yukina la abrazaba y consolaba… Tazz no sabía lo que hacía… y sus manos estaban manchadas… solo podía ver como a la entrada de ese pasaje estaban sus compañeras mirándola de esa manera, mientras Nana Nara no paraba de llorar y gritar… no habían palabras de consuelo.



16 de marzo
10am
Cementerio de Konoha

Una ceremonia asistida netamente por imperiales estaba llevándose a cabo, la lluvia era fuerte ese día, pero no tanto como el día anterior… Rogu Midoriya estaría en la tercera fila a mano izquierda, desde ahí podía ver tanto a Yukina como a Nana, también identificaría a Grou, el gigante Akimichi, quien sostenía un paraguas para Yukina… la ceremonia fue larga y deprimente… el cuerpo de Yan Jinsoku bajaba hasta posarse finalmente en su cripta final… es posible que Rogu haya conocido a Yan alguna vez, pues eran del mismo clan, al fin y al cabo, pero en este momento solo restaba presentar los respetos ante los presentes….

Cuando los imperiales empezaron a irse, solo quedo Yukina frente a una tumba a un lado de Yan, una pequeña tumba con solo un nombre mal escrito… Naomi… la prostituta que fue asesinada en aquel lugar… un ramo de flores de parte de Yukina adornaron esa lapida… estaría ahí esta mujer junto a su fiel acompañante por alrededor de una hora… pero nadie tenía permitido acercarse a ellos…

Por su parte, Nana Nara estaba desconsolada… su rostro era sombrío y nada ni nadie la podía hacer hablar… Tazz, por su parte, no fue a la ceremonia…

Para aquellos protagonistas que no pudieron estar presentes en esta escena, simplemente no sabemos su ubicación, ustedes por favor indíquennos que hicieron este día 16 de marzo que ha impactado fuertemente a ambos bandos… porque si, los rebeldes también tuvieron hoy un funeral.
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