[Común] Motel Jojo´s, sombra y mono.

Última modificación: 19-03-2024, 07:48 PM por Musacus.

Amigos y Maestros

Al día siguiente

Tardecita, Motel Jojo

El motel se encontraba con sus puertas abiertas pero sin gente en el interior, solo 3 mesas vacías con sus respectivos asientos y una barra al final de la sala donde se tomaban pedidos, detrás de esta el viejo Jojo lo interrogaría al entrar. La habitación cuenta con unas escaleras en un lateral, el piso es completamente de madera y tiene la cocina en el fondo del mismo. La planta baja esta reservada para almuerzos, cenas y bebidas mientras que en primer piso se encuentras varias habitaciones.

Mientras el viejo cuestionaba al Nara sobre su interés por su nuevo maestro, Satoru aparece en la escena bajando las escaleras y advirtiendo al viejo que no se preocupe.

Ey Jojo! no te preocupes, es amigo...! Exclamo al bajar

El peliblanco vestía un kimono completamente oscuro y unas humildes sandalias, ansiaba la llegada de su futuro aprendiz, con una sonrisa en su rostro extendió un saludo para luego observarlo con amabilidad.

¡Tu debes ser Shikagetsu!
Me alegras que hayas venido
Por favor siéntate...

Señaló una de las mesas para luego tomar asiento y conversar más cómodos mientras que el viejo se retiro a la cocina para seguir con lo suyo.

Shikagetsu volteo la mirada ante la respuesta a sus espladas donde vió al hombre hacer un gesto con sus manos y señalar amistosamente que tomara asiento, el Nara siguió el gesto del ojos blancos mirando sin poder evitarlo al dojutsu inactivo del hombre "Vaya un Byakugan" pensó emocionado seguido a lo cual se sentó frente a Satoru con una expresión tranquila pero expectante en su rostro. Observó detenidamente a su posible maestro, absorbiendo cada detalle de su apariencia y comportamiento con atención. La amabilidad y la confianza que irradiaba Satoru eran contagiosas, y el joven Nara se sintió instantáneamente a gusto en su presencia.

- Gracias por recibirme, Satoru-sama -respondió Shikagetsu con cortesía, utilizando el título de respeto apropiado para dirigirse a alguien de rango superior -Antes que nada, quisiera agradecer el responder mi solicitud, no estaba seguro de que fuera forma de oslicitar un maestro, pero en la academia no fueron de mucha ayuda para asignar un profesor-

Mientras hablaba, Shikagetsu no pudo evitar pensar en las expectativas y los desafíos que esta nueva relación de maestro y aprendiz traería consigo. Se sintió emocionado por la oportunidad de crecer y desarrollarse bajo la tutela de Satoru, pero también consciente de la responsabilidad que recaía sobre él para aprovechar al máximo esta oportunidad.

Mientras esperaba la respuesta de Satoru, Shikagetsu reflexionó sobre su propio progreso como ninja hasta el momento.

Al mismo tiempo, Shikagetsu estaba ansioso por descubrir más sobre su nuevo maestro: sus habilidades, su estilo de enseñanza y sus valores como ninja. Sabía que la relación entre un maestro y su alumno era fundamental para el éxito en el mundo ninja, y estaba determinado a establecer una conexión sólida y mutuamente beneficiosa con Satoru.

Mientras tanto, el viejo Jojo continuaba ocupado en la cocina, preparando comida para los clientes del motel. El murmullo de los utensilios y el aroma tentador de la comida añadían un telón de fondo reconfortante a la conversación entre Shikagetsu y Satoru, creando un ambiente acogedor y familiar en el motel Jojo's.

Oh! por favor, el gusto es mío
ambos aprenderemos el uno del otro. Respondió algo avergonzado, no estaba acostumbrado a recibir halagos.

Sin duda una petición particular, pero mira! ha dado resultado

Ambos se sentaron y al cabo de unos minutos el anciano Jojo serviría una jarra de Te de jengibre y miel junto a unos panecillos de avena. Satoru sirvió las tazas de té y continuo con la conversación.

Coincido contigo Shikagetsu, a la academia le hace falta una renovación,
en su tiempo tuve la suerte de encontrarme con un Maestro que me guiara,
siendo la academia poco desafiante para lo que yo buscaba...

El aroma de la cocina llegaba hasta la sala revelando la cena de la noche, por el aroma parecieran ser mariscos, probablemente un guisante.

Dime, ¿En que te especializas?
aunque no me quiero adelantar,
podría enseñarte un poco mi estilo y a partir de allí tu decides...
solo el tiempo hará rendir frutos...

Shikagetsu asintió con gratitud ante las palabras de Musacus, sintiéndose un tanto sorprendido por la humildad del anciano maestro. Él apreciaba la oportunidad de aprender y crecer junto a alguien tan experimentado como el Hyuga

- Sin duda, sería todo un honor aprender de usted - respondió, tratando de transmitir su agradecimiento y respeto hacia su futuro maestro.

Ambos se sentaron y disfrutaron de la hospitalidad del anciano Jojo, quien les sirvió una jarra de té de jengibre y miel junto con unos panecillos de avena. Satoru continuó la conversación, expresando su acuerdo con Shikagetsu sobre la necesidad de renovación en la academia.

El aroma de la cocina llegaba hasta la sala, revelando la cena de la noche, lo que parecían ser mariscos. Shikagetsu escuchó atentamente mientras Musacus le preguntaba sobre sus especializaciones.

- Me especializo en las técnicas de mi clan, ninjutsu en general, me gusta el taijutsu sin embargo me va mejor contra él que usándolo, especialmente gracias al Kagemane no Jutsu - respondió el joven genin, reflexionando sobre sus habilidades y deseos de mejorar.

- Estoy ansioso por aprender y explorar nuevas técnicas. Aprecio mucho tu disposición para enseñarme, Musacus-sama. Estoy seguro de que juntos podremos lograr grandes cosas - concluyó Shikagetsu con determinación y gratitud.

Con que ninjutsu, ya veo...
Sin duda esto supondrá un desafío para ambos
Ya quiero ver de lo que somos capaces...

El peliblanco dio otro sorbo a su té mientras reflexionaba los futuros entrenamientos para con el Nara.

Se me ocurren algunas ideas para comenzar el entrenamiento...
Dime Shikagetsu, ¿Qué te parece comenzar mañana mismo?
El tiempo apremia y no estoy seguro de cuanto tiempo más estaré en la Aldea...
A menos claro estés dispuesto a acompañarme...


Nada mejor que pasar tiempo juntos para desarrollar a fondo sus habilidades, estaba seguro que con tiempo y paciencia aquel shinobi podría heredar sus habilidades sin problema, más aun al notar su amable predisposición. En la mente de Satoru el primer entrenamiento ya tomaba forma, el primer desafío seria una practica shinobi en un lugar alejado de la Aldea para tener privacidad, de esta forma sería mucho mas fácil analizarse mutuamente.

Si estas libre, mañana mismo a primera hora podemos empezar el entrenamiento en el Bosque de la Muerte...
¿Qué te parece Shikagetsu?
Sería un placer que te quedes a cenar con nosotros...! Así conversamos un poco de nuestras vidas! Exclamó con amabilidad

Shikagetsu sonrió con entusiasmo ante la propuesta de Musacus. La idea de comenzar el entrenamiento al día siguiente lo llenaba de emoción y anticipación. Sabía que tenía mucho por aprender y estaba ansioso por aprovechar al máximo la experiencia de entrenar junto a alguien tan experimentado como el Hyuga.

- Estoy totalmente de acuerdo, Musacus-sama. Sería un honor comenzar el entrenamiento mañana mismo... Y acompañarlo.... -El joven nara se detuvo un segundo tragando saliva, ni el mismo sabpia si era miedo o emoción -no puedo siquiera a imaginar lo mucho aprendería saliendo junto a alguien como usted - respondió con energía, mostrando su disposición para embarcarse en esta nueva etapa de aprendizaje.

El joven genin asintió con gratitud ante la invitación de Musacus a cenar. Era una oportunidad perfecta para seguir conociéndose y estrechar lazos como maestro y alumno.

- Me encantaría quedarme a cenar con ustedes. Será un placer compartir nuestras experiencias y continuar aprendiendo juntos - expresó con sinceridad.

Con una sensación de expectativa y determinación, Shikagetsu esperaba con ansias el inicio de su entrenamiento con Musacus y el comienzo de una nueva y emocionante etapa en su camino como shinobi.

La noche continuo por horas, luego de que el anciano se sentará junto a ellos a disfrutar de un delicioso ramen, ambos shinobis conversaron unas cuantas horas respecto a sus vidas y cotidianeidades. En ocasiones Satoru llegó a mencionar sus viajes por el mundo: Hoshigakure, junto a una caravana, y un extraña anécdota de su infancia en las montañas de Kumogakure con su primer Maestro. El principio de un vinculo y el comienzo de una alianza.

Típico de Satoru, como joven ermitaño curioso que es, le encontraba un sentido a cada cosa en su vida. Quien tenía frente a El sería su promesa, a partir de entonces, con tiempo y carisma, lograría llamarse a si mismo Maestro. Esto estaba por verse, Satoru tenía varías ideas en mente.

Luego de finalizar el té ambos se despidieron acordando encontrarse al día siguiente en el Bosque de la Muerte para un primer encuentro. Allí se pondría en juego los primeros pasos a seguir y por sobre todo comprobar las habilidades de cada uno.

Gracias por venir Shikgatesu,
nos vemos mañana

Shikagetsu consideró las palabras de Musacus con seriedad. El expirmentado maestro parecía estar ansioso por comenzar el entrenamiento, y el joven Nara compartía ese sentimiento de anticipación. -Mañana suena perfecto, Musacus-sama -respondió con decisión-. Estoy completamente comprometido a aprender y mejorar, y no hay mejor momento que el presente para empezar.
La sugerencia de Musacus de llevar a cabo el entrenamiento en el Bosque de la Muerte resonó en la mente de Shikagetsu. Sabía que ese lugar ofrecía desafíos y oportunidades de crecimiento únicas, y estaba preparado para enfrentarlos junto a su nuevo maestro. Estoy listo para acompañarte, Musacus-sama -agregó con determinación-. Será un honor aprender de ti y explorar juntos todo lo que este entrenamiento tenga para ofrecer.
Con una sonrisa de anticipación, Shikagetsu aceptó la invitación a cenar, agradecido por la generosidad y hospitalidad de su futuro maestro.

A la mañana siguiente

La mañana siguiente llegó con un fresco aire que traía consigo la promesa de un nuevo día lleno de desafíos y aprendizaje. Shikagetsu se levantó temprano, preparándose meticulosamente para el entrenamiento que le esperaba en el Bosque de la Muerte junto a su ahora maestro. Con su equipo ninja ajustado y su determinación en alto, se dirigió con paso firme hacia la entrada del bosque.


El Bosque de la Muerte se erguía imponente ante él, sus árboles retorcidos y su espesa vegetación parecían susurrar historias de antiguas batallas y desafíos superados. Shikagetsu se detuvo frente a la entrada, observando con atención el denso follaje que se extendía más allá. Aunque sabía que el bosque albergaba peligros, también representaba una oportunidad única para fortalecerse y crecer como shinobi.

Con una mezcla de emoción y anticipación, Shikagetsu aguardó en silencio la llegada de su maestro, Musacus. Sabía que el hábil Hyuga llegaría pronto, listo para guiarlo en este nuevo capítulo de su entrenamiento. Mientras tanto, el joven Nara aprovechó esos momentos de calma para enfocar su mente y prepararse para los desafíos que les aguardaban en el interior del bosque.