[Concurso SV] Chokorēto no namida
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En el mes del amor, en febrero brillante, la dulce romanza de San Valentín, flores y chocolates como prueba constante de cariño sincero, de amor sin fin. En la época de enamorados, los corazones laten al compás, poemas y canciones son entonados, una declaración de amor eficaz. El día se tiñe de rojo apasionado, corazones se intercambian con fervor, un beso robado, un abrazo anhelado, el amor se celebra con gran ardor. Las calles se engalanan con luces brillantes, en escaparates se ven regalos envueltos, un ramo de rosas, joyas radiantes, el amor se expresa en gestos sueltos... de amor sincero... 

 Las parejas se miran con ojos brillantes, se prometen amor eterno, sincero, en esta época donde los amantes demuestran su cariño sin ser austero. San Valentín, patrón de los enamorados, tejiendo historias de amor y fidelidad, en esta época donde los corazones exaltados celebran el amor con felicidad. Que cada día sea como San Valentín, lleno de amor, ternura y emoción, que la llama del amor nunca se extinga, y que florezca siempre en el corazón. Y como siempre pasa con este narrador, que pinta el mundo mas bello y pintoresco para... después integrar a su Uchiha albina sin remordimientos...

 Y es que, la época del Amor se hacia presente, pero como muchas otras festividades y celebraciones alegres, para la albina era el caso contrario pues nunca fue participe de ellas, no sabia que se hacia el día de hoy, y se preguntaba el ¿por que? de esta festividad por lo que aprovecharía su extensa colección de libros para buscar algo relacionado a este curioso día... pues... todo lo que podía recordar de su experiencia en este día, es que era uno como cualquier otro, pues se la pasaba encerrada castigada en la oscuridad de su cuarto por ordenes de su padre.

 Aunque para estos momento no vale la pena extenderse mucho con ese tema, ya será para otra ocasión... Que? Que lo pospongo mucho? Bueno y que? YO NARRO COMO QUIER... perdón perdón, mi esquizofrenia de nuevo jeje... Bueno prosigo, en su extensa búsqueda entre tantos libros, pergaminos, historias y fabulas encontró algo relacionado con esta festividad: San Valentín, día del amor y la pasión, Celebrado con regalos y un chocolates. Siendo una fecha especial para los enamorados, Donde se expresan sentimientos anhelados. Una tradición que esta datada de siglos atrás, Que con sus sensaciones de amor nos puede atrapar, Es un día para demostrar cariño y ternura, Y celebrar juntos la dicha con dulzura. 

 Aquello le dio vueltas por un tiempo pues... era un día para compartir con los seres amados y demostrar tus sentimientos a las personas que amas...- Dia... del amor...- tras decir eso, algo sorprendente que posiblemente nunca, o casi nunca, habia pasado antes, pues las mejillas de la albina se tiñeron con un leve rubor rojizo, posiblemente era la primera vez que Ren se ruborizaba y su propia reacción fue bastante cómica al ver su rostro rojizo en el espejo de su habitación- Pero...- ajam...

 - ¿En que estoy pensando?- se dijo al espejo mientras negaba con la cabeza, pues habia espabilado aserenándose de nuevo, hasta que al abrir los ojos y verse al espejo de nuevo, la imagen de cierta persona paso por su mente haciendo que sus mejillas se sonrojaran de nuevo, Ren intentaría ignorar eso y tomaría en brazos aquel libro que ya se encontraba cerrado para retirarse de la habitación y dirigirse a la sala de estar para intentar leer un rato pero... seria interrumpida para la madre del Uchiha y quien la misma Ren consideraba como su salvadora... Uchiha Miko...

 Aquella sala era bastante estándar, piso de madera, un sofá familiar, dos sofás individuales, algunas fotos decoraban las paredes y un estante lleno de libros y alguno que otro artilugio. Además de tener una ventana que daba directamente con el patio trasero.

 - Buenos días Ren, ¿Cómo amaneciste hoy?- una cálida y amorosa sonrisa siempre era mostrada en el rostro de la mayor cuando hablaba, quizás fue la primera persona en ser amable con ella después de que abandonara su... el lugar donde vivía antes...- Buenos días...- seamos honestos, Ren siempre era alguien distante y poco expresiva, aunque con Kin y Miko era diferente... siempre intentaba responderles con una amable sonrisa aunque siempre era un pequeño gesto labial y sus ojos cerrados, quizás eso era lo cerca que Ren podía llegar a una sonrisa... y esta vez no era una excepción honestamente.

 - Ren... ¿Sabes que día es hoy?- fue una dulce pregunta que salió de los labios de la mayor mientras se sentaba a un lado de la albina en aquel cómodo sofá- 14 de febrero...- murmuraría desviando aquella pregunta, aquello le saco una pequeña sonrisa a Miko, quien ya sabia que Ren actuaba de forma evasiva cuando algo le interesaba, algo normal pues solía ocultarse las cosas ara si misma, pero la perspicacia de la mayor era sorprendente- Es un día muy importante... un día para pasar en compañía de alguien importante- las intenciones eran mas claras que el agua.

 - ¿En serio?... interesante...- la mirada de la albina se habia desviado por completo, al igual que su rostro sonrojado por las palabras de Miko, en un leve intento de disimular ignorancia, algo hipócrita viniendo de alguien cuya fortaleza es el conocimiento... Pero eso solo le saco una pequeña y notable sonrisa a la mayor- Además... también dicen que en este día se regalan chocolates a la persona que te gusta- eso fue un detonador para albina... pese a que seguía con un rostro sereno... pero al mismo tiempo rojo cual tomate... incluso haciendo un desesperado intento de disimular pero simplemente no podía.


 Miko habia conseguido captar por completo la atención de la albina por lo que soltó una pregunta al aire- Dime Ren... ¿Hay alguien a quien le quieres regalar chocolates? ¿un amigo?... ¿un familiar quizás?- una pregunta fugaz con una respuesta con una evasiva poco eficaz- No... nadie...- una respuesta tan falsa como el ¨Mañana te pago de tu amigo¨ o el ¨Entra que no te voy a pegar¨ de tu mama, así como la mentira tiene patas cortas, las evasivas igual- O... quizás... ¿Alguien que te guste?- palabras dichas con un tono algo burlón y juguetón cosa que hizo a la peliblanca soltar el libro entre sus manos y desviar la mirada con el rostro enrojecido.

 - Bingo...- diría la mayor mientras soltaba una pequeña risa- Es raro verte así Ren... supongo que hasta tu tienes alguien especial- a la par de ese comentario la madre de Kin terminaría lanzando la vista por la ventana de la sala en dirección al patio, donde su hijo se encontraba entrenando- Es un buen chico... y tu una buna chica... harían una linda pareja- diría Miko dándole un pequeño guiño a la albina antes de retirarse de la sala, pero segundo antes le diría unas ultimas palabras a la albina- La mejor forma de pasar San Valentín... es obsequiándole chocolates a la persona que te gusta- aquello dejaría pensativa la albina... preparar chocolate...- Chocolate...- murmuro cerrando aquel libro y tomándolo entre sus brazos.

 Después de pensarlo un poco terminaría por decidirse a ir a la cocina para empezar con la preparación de aquello pero... ¿Liquido? ¿Caliente? o quizás... ¿Frio?... ¿Chocolate blanco... marrón... o negro?... Varias dudas inundaron su mente tan pronto puso un pie en la cocina por lo que se quedaría mirando al vacío preocupada...- ¿Que... que debo hacer?- Miko solo le habia dicho chocolates... pero nunca le dijo si habia que hacer un tipo de chocolate en especifico... Por lo que simplemente soltando un pequeño suspiro se decidiría por preparar chocolate caliente- Bien...- Decidió hacerle una deliciosa taza de chocolate caliente, sabía que a Kin le gustaba el chocolate caliente, pues en mas de una ocasión el pelinegro le habia pedido prepararlo. Comenzó rallando trozos de chocolate oscuro con delicadeza y cuidado, luego los puso a calentar junto con la leche en una olla pequeña. Mientras tanto, en otra olla se habia decidido a preparar una mezcla de canela y azúcar para darle un toque especial al chocolate. Cuando la mezcla estuvo lista, la colaría y le agregaría a la olla con la leche y el chocolate derretido. Terminando por revolverlo constantemente para evitar que se formaran grumos. 

 Al esperar un poco terminaría por servir el chocolate caliente en una taza que ella misma le habia comprado al Uchiha durante su viaje a Kumo, era un simple obsequio pero nunca se habia animado a entregárselo pues por alguna razón pensaba que no debía hacerlo... Sin embargo aprovecharía esta oportunidad para ello, no solo para entregarle la taza, sino que para declararle sus sentimientos al contrario... era curioso... era personalidades totalmente opuestas... Un pelinegro con una personalidad extrovertida y un futuro que brillaba mas que mil luceros... y una albina introvertida con un pasado oscuro como el gran vacío... Aquella taza tenia una forma de corazón y tiene diferentes dibujos y detalles con forma de corazón, por lo que no solo serviría el chocolate en esa taza, sino que con una plumilla y tinta roja terminaría por escribir algo en ambos costados.

 Unas palabras que nunca habia dicho... posiblemente era la primera que las escribía o incluso decía en su vida... Escritas con una caligrafía perfecta y elegante... en ambos costados de aquella taza...

 - Kin... te quiero... 

 Ya solo quedaba esperar a que el Uchiha volviera, pues hace un rato que habia salido y llevaba ya mucho tiempo fuera de casa, lo que le daba tiempo suficiente para que la tinta se secara y pudiera decorar aquella taza de chocolate con algo de crema batida y chispa de chocolate incluso poniendo una cereza en almíbar como la cereza del p... chocolate... Y aunque la espera después de terminar de decorar la taza no fue muy larga, pues el Uchiha llegaría a casa y la Albina terminaría por recibirlo con una... buen no cálida, pero si amable sonrisa- Kin... Okaerinasai...- y menos demoraría en entregarle aquel obsequio en el cual tanta dedicación y, por muy raro que sonara viniendo de ella, corazón le habia puesto... - Kin... tu me gust- y aquí termina este relato sobre el primer San Valentín de la albina... aunque si gustas saber lector-san su rostro estaba muy sonrojado cuando siquiera pensó en decirle aquello al Pelinegro...

 En fin... Narrador Offline

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