El inicio de la ambición Priv.Saito
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Ser ninja... ni siquiera podría decirse que eso se iba a tornar mi ambición, de hecho, era la ambición de dos personas que llevaban tiempo muertas, un lustro para ser exactos, eso sí, me iba a tornar una ninja y la respuesta era sencilla, el imperio de Boshoku era todo lo que aspiraba a ser tras defenderme por ese asesinato que supuso mi liberación de cuerpo y mente.

La academia no era el lugar que más me llamara la atención en realidad, debo admitir que la única razón por la que aún me atrevía a pisarla era mantener la esperanza de ver el cabello de mi hermano, algo que en estos 5 años se me ha sido vetado, es como si el destino no quisiera que aún me encontrara con él, en absoluto.

Suspiré poniendo las manos en los bolsillos holgados del pantalón negro y empecé a caminar con decisión hasta la salida, perdida en mis pensamientos, quizás demasiado distraida para darme cuenta hasta que me choqué con alguien.

- Disculpe, andaba distraída- comenté sin darle demasiada importancia para seguir mi camino y aun con la mente distraída sobre que hacer. Quizás debiera dirigirme a entrenar algo más o quizás solo esperar y comer algo tras unos videojuegos, aunque la verdad no quería pensar mucho.....
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Tras volver de Iwagakure a Saito le pidieron asistir a la academia, tecnicamente huyó ante su responsabilidad de arreglar aquel salon de entrenamiento donde luchó contra Kiyoko y aunque ya estaba reparado debía al menos cumplir con algunos dias de limpieza y de ser posible, con clases para las nuevas generaciones... Aunque casi nadie quería estudiar con él conociendo lo devastador que podía ser.

Bueno solo es una semana y ya este es el tercer dia no me puedo quejar-el Onmyõji fue a doblar por un pasillo cuando depronto en su pecho golpeó una chica, la diferencia de estatura hizo que el rostro de aquella distraida chica se estampara con el pecho del muchacho como si de una pared se tratara-¿Estas bien?-la chica solo se disculpó y sin nisiquiera verlo se dispuso a retirarse.

Saito daria unas zacanadas para alcanzarla y pondría su mano al frente de ella para moverla como si la saludara, pues, su intención era ver si tenía la cabeza en este mundo-Holaaa-buscó contacto visual para poder sonreir, era una chica bastante lugubre y le daba penita verla por lo que se propuso en voltear su mundo hoy.

¿Que tal te va? ¿Por que esa cara? El unico muerro aquí se ve con mucho mas animos que tu-gracias a su vista, Saito podía ver como un alegre espiritu jugaba con el cabello de la chica, para ella era solo una brisa casual por el pasillo pero Saito sabía que en realidad no era algo tan natural como el viento y ya.
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Para mi ¿Sorpresa? El chico no se molestó ante mi imprudencia, al contrario, se podía tirar de alguien amable, incluso feliz… Podía llegar a pensar que era alguien bastante patético en realidad ya que en este mundo la felicidad no era algo que pudieras precisamente permitirte, o al menos así había sido entrenada, un ninja no debía tener emociones ni mostrarlas, y si eso significaba ser lúgubre para algunas personas, perfecto, yo era entonces la chica más lúgubre del lugar.


- Temo que el ánimo no es algo que me resulte relevante- comenté- Creí que eso era algo que los ninjas debían tener en claro ¿no?


No me salían otras palabras de mi boca incluso si esas mismas se pudieran considerar hirientes, claro que en una vida claustrofóbica como había sido la mía, era evidente que el asunto de la socialización no fue algo que hubiera entrenado, incluso si lo hubiera hecho también era algo que me resultara de hecho bastante irrelevante, al final, éramos meras herramientas al servicio del gobierno y ya está, vivíamos y moríamos como armas, así que ¿Para que intentar amistarme con alguien si luego iba a sufrir por mis heridas o mi muerte?


- De todos modos, me llamo Olielle, Olielle Kurama- Eso era ser educado ¿no? Al menos eso que podía llegar a permitirme.
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Las palabras de aquella chica cortaban el aire como cuchillo, Saito soló bufó divertido y negó con la cabeza-Te pareces a Izanami. Aunque bueno, no la conocí bien por lo que no puedo comparar-mencionó mientras miraba a otro lado.

Si, si muy en claro ¿como un chunin como yo pudo olvidarlo? Bueno, posiblemente por que sé diferenciar entre el trabajo y lo cotidiano-para Saito trabajar de ninja es una cosa y otra era vivir como maquina.

La chica pasó a presentarse a lo que Saito abrió los ojos con algo de sorpresa, pero una sorpresa divertida-Parece que todas la kuramas poseen cuerpos delgados y un tonto parche-pensó recordando a cierta piratita con problemas sociales.

Soy Saito Yamamoto. Oye ¿por que tu clan usa uj parche? ¿Todos se creen piratas o que?-el muchacho le quitó el parche a la chica, su fuerza era demasiada como para que ella se negara y cuando vio su ojo sonrió-Hey eso es lindo. No creí que eso fuera verdad. Deberias dejar tu ojo a la vista mas seguido-el muchacho acabó regresando el parche a su dueña y miró el salon.

Y... ¿tienes algún plan para hoy?-se cruzó de brazos y con una sonrisa esperó la respuesta curioso.
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¿Inazami? Ignoraba quien era, claro que ignoraba quien era todo el mundo salvo yo misma y otros rostros borrosos de cuyo nombre no me acuerdo, ni siquiera era consciente de haberlos escuchado nunca.

-¿Izanami? No recuerdo haber escuchado ese nombre en mi vida, aunque si me parezco a ella, genial- comenté sin darle más importancia, al final tampoco tenía mucho más que decir a ese respecto.


Al final sin embargo el chico me dio la razón aunque, su tono alegre ¿Se estaba mofando de mi? Me daba igual, que una panda de ninjas idiotas tuvieran sus emociones me hacían parecer débiles a mis ojos, aunque si que quería ahondar en lo que pensaba por si acaso ¿Trabajo y cotidiano? Debo admitir que en mi mente lo cotidiano no era tampoco relevante, solo un tiempo que había sido ganado.


- ¿Que diferencia hay?- pregunté, admito que con un cierto atisbo de curiosidad sin dejar que eso opacara demasiado mi frialdad habitual- Si mueres en una misión, da igual cual haya sido tu vida cotidiana, ¿No es que acaso si le importas a alguien buscará venganza? ¿No ha sido siempre así?


En eso último hice cierto énfasis, al final, lo que yo hice podía catalogarse como cierta venganza en parte por el odio que despertaron mis padres adoptivos en mí, yo era un claro ejemplo que los lazos emocionales no eran la clase de privilegio a los que los ninjas tuviéramos acceso, sin embargo me parecía curioso que un Chunin tuviera una opinión que tan fácilmente contrastaba con la mía siendo yo una Genin.


- Encantada, Olielle Kurama y, sobre el parche. En mi caso lo uso porque en el otro ojo es donde estoy practicando para usar Genjutsu, sobre el resto, no lo sé, supongo que por el mismo motivo- comenté casi sin pensar pero, al ver que el chico me quitaba el parche, una gran oleada de ira incrementó mi interior- ¡¡Devuélveme eso YA!!- comenté con una gran ira creciente, y luego pensaba que si tenía un plan para hoy


- No, pero devuélveme ese maldito parche- comenté tapándome el ojo heterocrómico con la mano- ODIO MI OJO.
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Hablar sobre Izanami fue un pequeño error, fue algo que hizo por reflejo en realidad y obvio la Kurama no entendió de que hablaba, aun así se lo tomó para bien.

La diferencia es mucha. Incluso mas grande que la diferencia entre nuestras capacidades como ninjas-Saito no creía qud Olielle lograra entender su punto por lo cual buscaría la forma de mostrarle.

Je, por supuesto que importa. Fijate, si tu murieras ahora nadie, absolutamente nadie sabria de eso, pues no eres importante. Tu poca vida social te ha impedido cumplir tua deseos mas ocultos. Eso hará que acabes convirtiendote en un. Ayakashi, ub espiritu corrupto que solo Intenta consumir a personas en desgracia, como los que viven dentro de ti por ejemplo-Saito hablaba alrededor de ella, con una sonrisa maliciosa, no, no podía verlos pero si podía sentir si presencia, quizás si ella se quitara la camisa podría ver varios ojos infectando su espiritu o mejor dicho, alimentando sus pensamientos negativos.

Pero bueno, las presentación debian llegar y esto solo le dio a Saito la oportunidad de sacar de quicio a la muchacha-Quien lo diria. Si tienes sentimientos. El odio no es un sentimiento al cual deberias apegarte pero me gusta ver que al menos posees algo-Saito le queria dar su parche a ls chica, de hecho le había contado el por que lo usaba (aunque no sonaba muy creible o logico)

A ver, quitamelo. Muestrame que tan fuerte puede ser un shinobi incapaz de vivir. Te doy una hora. Asi que piensa y deja de estar molesta. O yo te mostearé lo que un ninja con ideales de vida puede hacer-Saito esquivaria, daria saltos. Incluso subiria edificaciones para ver las capacidades de la kurama, supongo que pensar en Kiyoko lo pone de malas.
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Así que hablar sobre aquella chica le sacaba de quicio ¿eh?… poder percibir los rasgos cambiantes hasta la más mínima sutileza resultaba en cierto modo agradable, no por nada sinó porque esta vez fue cosa suya el hecho de haber sacado el tema de esa chica a la que yo ni siquiera conocía ni iba a tener el placer de hacerlo… esperaba.


Independientemente de eso, Saito insistía en que la diferencia era mucha claro que, sentía que en eso estábamos destinados a discrepar y ahondar en el asunto sólo nos iba a llevar a entrar en un bucle sin salida de reiteraciones e intentos banales de convencerme de lo que era o no importante para ambos. Así que hice un ademán sutil de reirme ante el comentario de convertirme en un Ayakashi ¿De verdad? ¿Un espíritu de desgracia? ¿Que ibas a saber tu de eso? Aunque el chico insitió en hablarme y ahora las voces parecían salir de todos los lugares, aunque no pudiera verla, cierto es que me estaba alimentando la ira de mala manera.


- Mi vida ha sido una desgracia desde que tengo uso de razón ¿De verdad crees que me preocupa convertirme en un Ayakashi? ¿Acaso no crees que sea uno ya? Que optimista… Evidentemente que no soy importante, nunca lo he sido, para nadie, me habitué a ello ¿Crees ahora que me importa ser reconocida en un trabajo donde me juego la vida en cada misión? Iluso...- comenté con frialdad para volver a dirigirle la mirada- Si crees que debes ser importante demuéstramelo, al fin y al cabo eres tu quien de un modo u otro me estás intentando inculcar sendas ideas.


Al final, él solo buscaba provocarme y yo misma saqué algunos kunais para lanzárselos, primero necesitaba estudiar sus movimientos y para ello necesitaba ambas manos así que cerré el ojo que tapaba mi parche y me lancé al ataque, mejor dicho, al estudio de mi contrincante.
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Tranquila, aún no te has convertido. Y si, creo que te importa mucho ser reconocida ¡añoras ser importante para alguien! Si lo que digo no fuera cierto tu ni siquiera seguirias viva. En mi opinión, tu corazón tiene un deseo claro pero tu cabezota lo niega por culpa de las desgracias en tu memoria-el muchacho hablaba firme y molestaba a la chica con algunos toques en su pecho y frente al hablar de su corazón o mente, pues buscaba que se diera cuenta de algo tan simple.

Saito esquivaba fácilmente los ataques de la chica y sacó su pergamino de armas para invocar su Kusaragi Fundo (cadenas de acero con pesas en ambos extremos) para que en un parpadeo la joven estuviera retenida y arrodillada, incapaz de cargar con las pesas de la cadena.

Ser reconocido te da recursos. Los recursos te da armas y conocimiento. El conocimiento te da poder-el muchacho rodeó su mano de chakra para formar una hoja, un escarpelo que usó para cortar levemente la mejilla izquierda de la chica, no quería hacerle daño, solo hacerla sangrar levemente.
Chakra no Mesu

Con suficiente poder podrás vivir como quieras. Pero claro, todo eso no importa realmente-mencionó con un suspiro para curar la herida de la joven con su chakra medico.
Shousen no Jutsu

Lo importante son las cosas buenas que haces por lo demás. Ya veras lo bien que se siente ser importante para otros-Saito comenzó a acariciar la cabeza de la chica lentamente mientras la miraba con lastima-Si me dejas puedo llenar el vacío que tienes en el corazón-tener una alumna seria divertido y la verdad Saito sentía el deber de eliminar todos esos espiritus negativos en el cuerpo de la chica pero no por exorcismo, sino por voluntad.
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Tsk... tenía que relajarme, cerré los ojos por un instante para acallar la ira que hervía cada vena y arteria de mi sangre, debía mantenerme concentrada y la ira solo era un elemento distractor que solo hacía meramente que se tomaran decisiones impulsivas y carentes de lógica, frente a un combate que te podía costar la vida, eso era imperdonable.

- No me he convertido aún... bien, perfecto- comenté sin más en lo que observaba el movimiento del chico, era ágil, demasiado para mi nivel actual ¿Conocimiento, armas? y el conocimiento era poder... eso era cierto, sin embargo existen formas de adquirir conocimientos y armas, e incluso formas de mejorar tus propias armas de manera que les puedas otorgar una mayor capacidad ofensiva y defensiva... perfecto pero seguía sin cuadrarme en su totalidad qué pretendía con todo ésto ¿Amedrentarme? ¿Darme una lección? Cierto era que por otro lado, mi familia siempre fue muy partidaria de que no me relacionara y que las relaciones eran importantes ¿Es que acaso se equivocaban? Una parte de mí se negaba fuertemente a creerlo pero, por otro lado, ciertamente odiaba a mi familia por los errores que éstos cometían...  ¿Se equivocaron con ésto también?.

Tan perdida me hallaba en mis pensamientos que, solo pude observar por un instante que el chico se había puesto frente a mí y un dolor se hizo presente en la mejilla sin haber podido ver con qué me lo había realizado, luego me di cuenta que atacó precisamente a la zona donde tenía el ojo cerrado. Natural... Luego vi al chico cerrarme la herida y, yo, suspiré, agobiada.

- Tu ganas...- comenté apartando la mirada- Mira... fui educada en la individualidad, ahora empiezo a ver que me han inutilizado...sin embargo ¿Por qué? Pudiendo adquirir conocimientos en los libros, pudiendo librar a la gente del sufrimiento y la incertidumbre de ver perder a tus seres queridos como ninja al morir ¿Por qué aun así os aferráis a ese "vínculo" y, aún así ¿Por qué me siento tan vacía? ¿Como quieres llenar ese hueco en mi corazón?
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Tras demostrar la diferencia de habilidades entre ambos, Saito logró que aquella Kurama se rindiera y fuera mas sincera en cuanto a las dudas que recorrian sus cabeza de forma natural por la vida que ha tenido hasta ahora.

Esas son preguntas que tu misma le daras respuesta cuando llegue el dia-el Onmyõji pasó a liberar a la chica, guardar sus cadenas y ayudarla a ponerse de pie.

Bueno, sinceramente no lo sé. Alguien no puede llenar el corazón de otra persona solo con decirlo. Pero por ahora solo te puedo dar un adelanto de lo que nos espera: "bollos de canela con crema" vamos yo te invito-Saito no sabía bien que hacer por Olielle por eso le enseñaria lo bueno de la compañia, así es, comida y juegos los esperaban a la vuelta de la esquina ¿y quien sabe? Quizás le enseñaria un truco o dos para hacer la vida cotidiana mas fácil.

Olielle no poseía una visión del mundo erronea, los conflictos belicos están a la vuelta de la esquina y un shinobi puede morir en cualquier momento pero por eso Saito intentaba disfrutar de la vida, de su familia, de sus amigos y loa retos de cada dia. Saito no llevaria a Olielle a una vida mas facil, longeva o llena de paz pero al menos le daria las herramientas necesarias para no seguir siendo devorada por la oscuridad de este mundo.
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No era rival para él, eso lo sabía, aunque tampoco esperaba que el combate fuera tan corto, mejor, creo que Saito no quería hacerme daño sinó, y tal como me imaginé desde el primer momento, quería ayudarme a ¿Abrirme tal vez? ¿Sabía que la frialdad que mostraba era una máscara? Aun en el suelo el chico me dijo que esas preguntas las tendría que responder yo cuando me llegara el modo de hacerlo pero ¿No era demasiado fácil? ¿Que debía hacer yo mientras tanto?

Al final me tendió la mano y se la acepté, no era alguien muy pesada así que tampoco debía hacer demasiada fuerza y yo me restregué el polvo de la camisa y la falda para mirarle y recolocarme el parche en el ojo y miraba mientras él hablaba de invitarme a unos bollos de crema con canela, a lo que sonreí ligeramente.

- Impones, pero creo que se nota mucho cuando vas en serio y cuando no. Podrías haberme matado- comenté mientras suspiraba con alivio- Acepto esos bollos, no me gusta hablar de mi misma, pero los dulces, las hamburguesas y los videojuegos me gustan mucho. Además, lo del parche, es que no me gusta tener elementos distintivos en mi, se alejan mucho de lo que para mi es “Normal” si, suena absurdo.

¿Lo era? Podía ser, lo veía como un elemento demasiado obvio por si me tenía alguien en el punto de mira, era mucho mas fácil que me confundieran si no tenía ningún elemento demasiado evidente como un ojo de otro color.
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Olielle se rindió y aceptó la forma de ver el mundo de Saito, por lo que tomó su mano y se puso de pie. El Onmyõji la invito a comer algo dulce para pasar el trago amargo de este primer encuentro, si, basicamente era una forma de pedirle perdón por molestarla de esa forma.

La Kurama aceptó y expresó cual era el aura que le transmitía Saito. El muchacho se rió un poco u aceptó con la cabeza mientras limpiaba una gota de sangre de la chica con su indice-Si... No tienes idea de lo fácil que pudo ser. Pero me caes bien por alguna razón. Y tengo fé que podrás superarme-algo de animo no venia mal, en cuanto a la sangre... Decidió simplemente ignorarla, no podía caer en sus instintos asesinos aunque le estuvieran gritando "hazlo".

Olielle también decidió abrirse y mencionar sus gustos y el motivo de usar su parche. El Onmyõji sonrío y le dio un suave golpecito en su hombro-Que rapido avanzas. Compartir tus gustos y disgutos es crucial para tener amigos. Ahora. Vayamos a por los bollos y pasemos por el arcade. El perdedor invita las hamburguesas-comentó divertido mientras comenzaba su caminata hasta las afueras de la academia aunque se detuvo un momento para mirar de reojo a la chica.

Y no, no es tonto. He sentido lo mismo que tu alguna vez-si... Desde problemas de identidad por culpa de su clan hasta tormentos insesantes por culpa de Jashin. Saito también ha sentido odio por lo que es pero ¿que mas podía hacer? Esa es la vida que le ha tocado.

La conclusión de ese dia: divertido. Saito se había ganado una amiga nueva con quien pasar el rato y Olielle ahora podía contar con él para lo que fuera. Y posiblemente ese sería un dia que recordarian tiempo después.

Gracias
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Bueno la comida era algo que compensaba en cierto modo los malos momentos y, aunque, entendía la intención, el primer encuentro que tuve con Saito no era algo que fuera a olvidar fácilmente, claro que no estando a su nivel, era obvio que no podía hacerle frente por el momento. No me gustaba nada que hubiera tampoco abusado de la poca confianza que le ofrecí en un intennto de buscar ser, a mi manera, amable pero era mejor dejarlo correr.

- Quedo agradecida por la invitación y te tomo la palabra- comenté volviendo a ponerme el parche en mi ojo- Aunque si, me gusta la idea de la competición, creo que es justo para saber quien es mejor en los videojuegos ya que en combate no tengo alguna posibilidad contra tí, todavía…. Y no es que me guste la idea de compartir gustos de buenas a primeras ¿Y si la persona con la que lo estoy compartiendo me traiciona? No digo que seas tu, pero la información es algo que suelo preferir ir revelando a cuentagotas a medida que avanza la confianza y la relación con la otra persona.

Lo que no me esperaba y, debo admitir que me descolocó por un instante fue que él hubiera sentido lo mismo que yo en alguna ocasión, verle así, sin embargo, tampoco era algo que me agradara especialmente ¿Es que acaso se había rendido a la vida? ¿No iba a enfrentarse a sus fantasmas? ¿Era yo igual?

- Es horrible, pero no me quiero aferrar a vivir la vida que me ha tocado, no… prefiero ser yo quien decida mi propio camino, pase por encima de quien tenga que pasar. -Noté la firmeza en mi voz a medida que decía cada palabra.


Mi día lo había definido como “Extraño” aunque no me sentía tampoco del todo incómoda con Saito, creo que es la primera persona que merece una oportunidad por mi parte.
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Claro, tampoco debes decirle todo de ti a alguien que apenas de saludó. Solo trataba de hacerte entender que la gente aprecia mucho la información que obtiene de alguien mas. Que seas precavida en realidad es una buena fortaleza-Olielle quería seguir el consejo de Saito pero manteniendo algo de su desconfianza fija y eso estaba bien, la gente debía tener algo de desconfianza siempre pues la malicia abunda en todo el mundo.

De hecho, lo doloroso de la traición es que siempre viene de alguien que amas y aprecias. También recordemos que este es un mundo ninja y aveces el deseo de poder logra superar cualquier lazo de amistad o amor, logrando darle paso a la cruel muerte o en el peor de los casos, un corazón roto.

Volviendo a Olielle, Saito se veía feliz de lo rápido que avanzaba al decir palabras como esas-De arma sin espiritu a una chica con firmeza. Un gran cambio en menos de una hora. Soy muy bueno en esto, quizás deba ser psicologo-comentó en tono de broma mientras guiaba a la chica hasta su primera parada.

La panaderia "Los panes de Bollo" era un local pequeño, su dueña era una mujer gordita de gran caracter que posee como sobrenombre Bollo, por bueno... Su cuerpo. La panaderia a pesar de su tamaño humilde deja a la vista una buena variedad de panes y dulces a un precio muy bueno, además de una vitrina con charcuteria, si, te podias comprar un pan caliente, queso y jamon y listo, un sandwich sencillo antes de ir a trabajar.

Buenas-el hijo de la dueña era el unico trabajador del lugar y apenas notó a Saito llegar con Olielle se levantó de su asiento para atenderlos.

Me llevaré dos bollos de crema y dos refrescos de lata. ¿Olielle quieres algo mas?-después de hacer el pedido Saito esperó a que le entregaran su comida para poder pagar y así morder al bollo.

Comamos de camino al arcade-indicó para poder llevar a la chica a su segunda parada. Aquel magico lugar lleno de la mayor tecnologia en el mundo era un lugar de goso para cualquier joven y con distintos juegos era cuestion de cual elegir primero.

Te dejaré elegir. Así te doy ventaja-Saito no era el mejor jugador del mundo pero algo de experiencia tenía, la decisión de Olielle seria crucial.

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