[Misión Saga S] Nupcias Imperiales
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GUARDIANES
Unos días atrás...
Kirigakure no Sato
Sede Imperial

Cuatro shinobis fueron convocados en días y hora separadas a la sede Imperial de Kirigakure. Todos en una primera instancia entraron de forma convencional a un despacho donde tan solo les debía esperar un funcionario que les asignaría una misión rutinaria, más dentro de la estancia encontrarían un pequeño grupo de oficiales imperiales con importante documentación para cada uno de los shinobis convocados. A todos se les daría la siguiente información y misión:

- Se te convoca a una misión de vital importancia y extremo secreto. El día 1 del próximo mes deberás escoltar al hermano menor del excelentísimo Shodai Sencho, Onmyōji Tetsuya hasta el templo en el que se oficiara su boda en el País de los Fideos - Se haría hincapié repetidas veces por parte del resto de oficiales a la importancia vital de esta misión, puesto que el matrimonio que se va a contraer supondría la unión definitiva del País de la Lluvia y el País del Agua en los tratados de paz y comercio que se están llevando a cabo - Tu, junto a tus compañeros estaréis a cargo de llevar por la ruta que el propio Onmyōji Tetsuya tendrá consigo mismo, tanto en los días previos como en los posteriores otros grupos saldrán con cebos tomando otras rutas alternativas, en vuestro caso dispondréis de 7 días desde el momento en que partís para llegar al templo, dado que la ceremonia se realizara en el octavo día - Todo el asunto estaba siendo tratado con la máxima de las precauciones. Al fin y al cabo no eran pocos los interesados en que esta unión no se realizara. Los rebeldes, algunos opositores dentro del propio imperio al matrimonio, algunos criminales en busca de dinero. Pero ya no era posible tomar más precauciones, por parte de Kirigakure todo ya estaba en manos de los shinobis. Incluso incluyeron a un shinobi de bajo perfil y rango para disimular un poco y que no consistiera la comitiva íntegramente en un conjunto de shinobis de elite. Era una medida tomada en todos los grupos con señuelo tambien. En este caso se trataba de un shinobi seleccionado por otro miembro de la comitiva Kiyoko, a petición del maestro del genin Saito, que había sido convocado recientemente para otra misión en fechas próximas.

1 de Mayo
Kirigakure no Sato
Puerto, 7 AM

Los preparativos estaban listos. Una embarcación relativamente grande estaba preparada en el puerto, se trataba de un navío mercantil lo cual daba la impresión de una misión de escoltar suministros de ver a Shinobis subir a bordo. En su interior estaba diversos marineros alistando el barco, aunque todos ellos se bajarían de la embarcación al concluir las preparaciones, salvo un pequeño grupo de tres hombres que consistirían en el capitan del barco, su segundo al mando y el novio. Mientras aguardaban la llegada de los guardianes manteniendo todos un perfil bajo.

Por su parte en Amegakure ya estaba partiendo una comitiva también, liderada por la propia Amekage. En dicha nación no tomaron tantas precauciones buscando ocultar al contrayente, sino que optaron por un método más radical y poderoso de escolta en manos del shinobi más fuerte del lugar. Aunque eso es una historia que no nos incumbe. Dado que la prioridad para los shinobi de Kirigakure era seguir el perfecto plan sin fisuras que los magistrados y oficiales habían orquestado. Lo más seguro es que les deparaba un viaje tranquilo.


ASALTANTES
Unos días atrás...
Diversas Naciones
???

Una misteriosa convocatoria llego a diversos shinobis de todo el continente. Desde mercenarios, hasta criminales, incluso una carta fue entregada por alguien a la base de Yugure. La convocatoria citaba a los interesados a un trabajo poco ortodoxo y fuera de la ley, pero muy bien pagado, se precisaban shinobis experimentados en el combate y las artes del asesinato. La convocatoria decía lo siguiente:

"Trabajo de Asesinato, objetivo un miembro de la nobleza imperial, 20 mil Ryos de recompensa"

Una citación sencilla pero funcional, puesto que tampoco fue enviada a diestra y siniestra a cualquiera, todos los candidatos eran un grupo meticulosamente seleccionado por alguien que prefería mantenerse en las sombras. De hecho en el dorsal del mensaje detallaban el primer lugar de encuentro:

"Interesados en reducir a cenizas el imperio acudan a villa Fosha en el País de las Aguas Termales en la fecha indicada"

La fecha no seria mostrada salvo que se quemara la hoja de papel. Puesto que ya se quería filtrar algunos poco espabilados con dicho mensaje. De hecho esa cita era el segundo filtro, ahí un intermediario del contratante dio información falsa del golpe que se pretendía dar a los que descartaba tras escuchar de sus habilidades y méritos, mientras que daba el siguiente mensaje a los que pasaban - La operación se realizara el día 1, te esperara un ultimo informante en las afueras de Kirigakure dos horas antes del amanecer - Junto a ese ultimo mensaje se les entregaría a los seleccionados una bolsa con unos fondos económicos no muy elevados en concepto de gastos que surjan durante la misión.

1 de Mayo
Kirigakure no Sato
Afueras de Kirigakure, 5 AM

La niebla estaba alzada, como era costumbre allí. Los seleccionados por el intermediario tenían como destino un pequeño muelle en desuso el cual tenia en el día de hoy una pequeña embarcación a vela, respetablemente rápida. Eran unas horas en las que no era propicio que nadie anduviera por aquel lugar inhóspito y abandonado. Con la densa niebla se dificultaba que cualquiera pudiera ver a más de una decena de metros de distancia.

Allí entre la niebla una figura encapuchada aguardaba a los seleccionados para la misión de asesinato. Sola, imperturbable como una estaca de hielo aguardaba en el lugar. Esa persona era la prueba que entre los oficiales de Kirigakure había una manzana podrida, no había nadie más que pudiera haber interceptado un plan tan meticuloso como paranoico que se estaba realizando en aquella escolta. No quedaba mucho para la partida del navío que portaba al novio. La hora de la verdad estaba cerca.

Objetivos
Notas

Contenido Oculto
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Última modificación: 17-05-2023, 01:57 PM por Hozuki Jinta.
—Ja... ja ja... —aquella penosa risa, llena de incertidumbre y resignación, fue la única reacción que pude presentar ante el anuncio de los oficiales imperiales. Verdaderamente, sentía que me acababan de contar un chiste de mal gusto, lleno de ironía y mala leche, de esos que yo mismo gustaba de relatar a veces.

Todo había sido culpa de Saito. Aparentemente el chico fantasma había solicitado que yo fuera el genin que cumpliera el papel de aquel que, debido a su bajo rango, debilidad y falta de fama, lograra camuflar el operativo al mezclarse con shinobi de élite para que, a los ojos ajenos, la operación careciera de la importancia que realmente tenía. 

La parte cómica de todo el asunto era que el mismo Saito no serviría en aquella misión, y en su lugar había pedido a Kiyoko Kurama, a quién el chico fantasma me había presentado unas semanas atrás, que me llevara con ella en este operativo de rango S. ¡RANGO S! ¡SI HASTA LA FECHA YO NO HABÍA PASADO DE MISIONES DE RANGO B! Estaba claro que me mandaban al muere. 

Yo era carnada que los oficiales imperiales habían colocado en el anzuelo para, simplemente, aumentar de forma mínima las posibilidades de éxito de la misión. Una vez más, mi debilidad me impedía resistirme a la voluntad del imperio y a los deseos de los shinobi más fuertes y grandiosos.

Que se vayan a la mierda...no pienso morir escoltando al hermanito menor hacia su grandiosa boda. Regresaré con vida y regresaré más fuerte. Poco a poco...más fuerte...

El primero de mayo llegó y yo me presenté en el puerto, resignado a mi debilidad y con la convicción de que esta sería solo temporaria. Observé el gran navío y a los hombres y mujeres que trabajaban sin descanso preparándolo todo para nuestro viaje. Se me había informado que aquellos marineros no estarían acompañándonos. 

Dentro del colosal barco solo estaríamos el capitán, el segundo al mando, yo, los tres shinobi de élite y el novio...el Shodai Sencho: Onmyoji Tetsuya. Recordé que Saito también era un Onmyoji.

Fui el primero de los cuatro en llegar e, intentando calmar mis nervios, esperé.

Resumen
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Inmutable y firme como siempre, Kiyoko mostró su característica sonrisa a la petición de la aldea. No tenía muchas opciones, pero ella lo tomaba como una petición. Si quería negarse, probablemente hubiese podido, pero Rō reclamaba por algo de protección para su hermanito, y debía auxiliar a una compañera. Entre shinobis de la Niebla se conocían, y cuando la Kurama ingresó a la Academia, Rō era de la primera generación de genins que se egresaba. Sin duda la veía como una referente, y con el paso de los años logró escalar demasiado en la jerarquía militar del Agua. Pero la demonio del parche ya estaba mordiéndole los talones, y pronto la Shodai Suijin empezaría a hablar de ella... y de algunos de quienes la acompañarían en aquella escolta.


1 de Mayo, 15 DK
7:00 AM

La kunoichi se presentó aquella mañana, kimono negro y sandalias, haori blanco por encima y su confiable "Tetsu", aquella bella katana de guarda de estrella y filo rosado, forjada bajo el fuego de la Isla del Oeste por una experta herrera. Saludó a los marineros que salían del muelle cuando ella llegaba. Acomodó su cabello que comenzaba a volarse un poco por la brisa que acompañaba a la sombría niebla, y tras acercarse finalmente a la embarcación, divisó al pequeño Jinta subiendo. Lo siguió varios metros detrás. El capitán, el sub-capitán y el novio, hermano de Rō, estaban más alejados, cerca de una entrada a los camarotes, o al menos era lo que Kiyoko suponía.

Se posicionó detrás del Genin y le colocó la zurda en el hombro. La kunoichi no era muy alta, a duras penas llegaba al metro sesenta, de hecho, por lo que el adolescente sin duda no le quedaba pequeño. — Buenos días, Jinta-kun. ¿Listo para viajar? — Comentó con una amplia sonrisa. Sus dientes no eran tan aserrados como los del Hozuki, pero si que se acercaban un poco. — El pequeño demonio de la niebla, qué honor. Me han dicho que tienes potencial. Estaré esperando que crezcas para pelear, así que intenta no morir pronto. — A la ligera, como quitándole importancia al asunto y minimizando a la muerte misma, la joven Kurama bromeó sobre la peligrosidad de aquel encargo, aunque en realidad sus palabras no eran un chiste: en verdad esperaba que él no muriera para poder tener un buen combate a futuro.

Kiyoko se acercó al resto de presentes, y con una sonrisa los saludó. — Ara, ara, ¿tú eres el hermano de Rō? Un gusto. — Le echó un vistazo al novio. No daba el perfil de shinobi, pero sin duda tenía cierto parecido a la Oficial.

RESUMEN
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Oh, esto puede ser divertido. Cuenta conmigo, no sucederá nada. — Aseguró con una confiada sonrisa. En el fondo, esperaba que algo fuera de la norma acontezca. Si el viaje se torna aburrido, habrá sido una pérdida de tiempo para él. Luego, simplemente se limitó a esperar la fecha concreta.

...

Temprano por la mañana. El bostezo fue obligatorio en su caminata. No le gustaba despertarse en ese horario, pero a veces estaba en la obligación. Normalmente huía de las actividades que requieran reducir sus horas de sueño. Los superiores con el tiempo y en base a cansarse de regañarlo, ya lo estaban entendiendo. Pero esta fue una de esas veces donde se vio motivado a participar, claro, si no tomaba en cuenta el sueño que sentía.

Se le informó sobre sus compañeros y al menos tenía buena relación con dos de ellos. Eso haría más ameno el trayecto. Aunque sea un trabajo serio y de extrema importancia, Nagi jamás estará por completo serio y no buscará charlas o bromas. Es algo que está en su ser.

En cuanto a su vestimenta para la misión, podríamos decir que estaba usando un traje estándar. Pantalón largo y camiseta manga larga, ambos de color gris. Por encima portaba el chaleco clásico de la villa, aquel que en el pasado se le vio a importantes ninjas como Zabuza.

Llegó a la embarcación de una manera peculiar. De un salto cayó de pie detrás del ninja de más bajo rango entre los implicados. Incluso optó por hacerle una pequeña broma de iniciación. — Vaya, Kiyoko, así que este es el niño que usaremos de carnada, ¿no? Espero no grite mucho cuando lo embosquen. — Su tono dejaba clara su intención cómica, además de que también rio.

Miró a su alrededor y no vio a Shokan, por lo que asumió que sería el último en llegar. Respecto al resto de presentes, solo los saludó con un ademán del brazo y una sonrisa. Reconoció al instante al hombre que debía proteger. Sin embargo, esa tarea no era del todo de su gusto o especialidad, así que decidió idear un pequeño plan o modo de trabajo. Probablemente, para estas alturas el integrante restante ya habría llegado y también escuchado a Nagi.

Pues si hay problemas, confío en que me dejarán ir al frente. Le dejo a alguien más la tarea de pegarse al señor. — Con esto terminaba de desmentir lo de Jinta como cebo, sino que él mismo sería una especie de pieza ofensiva que vaya al peligro. Sí, eso le entretenía.

Resumen
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Última modificación: 18-05-2023, 02:16 AM por Rohan Mercer. Razón: Olvide el resumen
Dias antes de la mision, en un pequeño poblado perdido en la carretera.





Tras un largo viaje a pie caminando por extensos bosques, llanuras, caminos de tierra e incluso carreteras, Mercer habia llegado a un pequeño pueblo que estaba de paso en aquel camino, alejado de los ojos de dios, a cientos de kilometros de las grandes ciudades y paises importantes. Era de noche, una noche cubierta de neblina por doquier, era casi imposible ver fuera, quizas la vision alcanzaba unos dos metros a tu alrededor como maximo. Una noche perfecta para quedarse encerrado, refugiado en algun sitio calido y en lo posible bebiendo alcohol para mantener caliente tu cuerpo, tal vez frente a una chimenea o abrazado a tu amada o tu amante, al menos eso es lo que suelen decir los transeuntes alrededor de Mercer, quien se encontraba en el bar del pueblo, bebiendo whisky y fumandose un cigarrillo como todo un pobre diablo. Como dije, a su alrededor habian algunos transeuntes y gente residente del pueblo, cada grupo aislado en sus propios asuntos, los transeuntes jugaban al billar mientras que los pueblerinos jugaban a las cartas mientras bebian y conversaban de cosas cotidianas de la vida.

Mercer llevaba dos horas alli bebiendo sentado junto a la barra y nadie se le habia acercado en todo ese tiempo, tal vez emanaba alguna mala vibra o algo asi ya que la gente lo veia con cautela, como si naturalmente quisieran tomar distancia de él como si de un animal de cuidado se tratase. Mercer no les presto la mas minima importancia, sin embargo luego de tomar su vaso y hacer fondo blanco de su whisky, al bajar la cabeza y apoyar el vaso notaria que un hombre cubierto por una gabardina negra se habia sentado a su lado, con ambas manos apoyadas sobre la barra. Mercer noto de inmediato que algo raro ocurria, ese tipo emanaba un aura de misterio casi palpable, lo miro de reojo y volteo la cabeza ligeramente en su direccion, pero no dijo nada hasta que aquel sujeto le hablo primero.

Tu debes ser Rohan Mercer, te ves tal y como te describieron, un monstruo. Aunque mas bien serias un monstruo oculto en la neblina... Debo admitir que crei que seria mas facil encontrarte, me tomo bastante tiempo rastrear tu posicion. — Le decia con total calma. Mercer lo escuchaba con atencion pero si bien estaba alerta ante cualquier accion hostil, no sentia ninguna mala intencion u hostilidad de parte de aquel hombre.

¿Quien eres? — Le pregunto Mercer mientras fumaba su cigarrillo. 

No importa quien soy, importa lo que tengo para ti. — En ese momento llevo su diestra bajo su gabardina y de alli saco una carta, la cual le entrego a Mercer. Este ultimo la sujeto y la vio de frente y de atras, no decia quien la enviaba, por lo que Mercer simplemente procedio a abrir la carta y leer su contenido.


Cita:"Trabajo de Asesinato, objetivo un miembro de la nobleza imperial, 20 mil Ryos de recompensa"


Mercer volteo a ver al sujeto misterioso sin embargo ahora a su lado ya no habia nadie, aquel hombre habia desaparecido por completo. Mercer leyo con atencion la carta, se trataba de una mision de asesinato, tenia un muy buen pago y ademas una ubicacion de adonde dirigirse, aunque esta era falsa. De hecho Mercer no se habria dado cuenta de no ser porque el fuego de su encendedor con el que jugaba apagandolo y encendiendolo a cada rato, se lo habria revelado en el papel. Mercer se pidio una copa de whisky mas, y procedio a marcharse de alli, en mitad de la noche y adentrandose en aquella espesa niebla. "Con que Kirigakure otra vez, ha pasado un tiempo desde que fui alli" Esto quizas le podia dar una pista de quien lo habria contratado, puesto que la ultima vez que fue a kirigakure fue para cumplir una mision, no seria raro que alguien que se hubiese enterado de esto haya puesto el ojo sobre el.






1 de Mayo
Kirigakure no Sato
Afueras de Kirigakure, 5 AM




Mercer se encontraria en el punto de encuentro mencionado en la carta, un pequeño muelle abandonado en las afueras de Kirigakure, alli podria ver al contacto encapuchado, solo e imperturbable, pero no se acercaria a el ni le dirigiria la palabra, por el contrario Mercer se mantuvo de pie frente al bote, mirando el agua y la neblina que lo cubria todo, cubierto por su capucha y con las manos en los bolsillos, esperando a que los demas llegasen al puerto.








Resumen: Mercer recibe la carta y se dirige al punto de encuentro secreto, alli espera a que lleguen los demas.
[Imagen: 5pxvtPC.jpg]
Narro - Hablo - Pienso
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— La tranquilidad de las noches en Kirigakure sin duda son algo de envidiar... — Comentó el extranjero que compartía tragos en aquella barra con el joven Shokan. El de cabellos rubios tan solo alzó su vaso y asintió al comentario del desconocido y reposó su cuerpo casi en totalidad sobre la barra de madera vieja.

El tendedero se acercó al joven Jounin y extendió una carta de aparente contenido relevante. ¿Cómo lo sabríamos? Sencillo, Shokan pudo reconocer el sello del Imperio casi al instante, ya era costumbre para él ver aquel sello en mensajería debido a sus últimas acciones pro imperiales.

Sin mediar palabras y más que un cruce de miradas, Shokan sabía aquello que tenía entre manos; Shokan, conocía ya la relevancia del asunto, así que volteó el vaso sobre la barra y dejó un pequeño puñado de ryos mientras se retiraba hacia su apartamento para la debida lectura de la correspondencia...



A temprana hora, como se había citado en la documentación; Shokan yacía entre los tejados más cercanos del punto de encuentro. El joven Sin Clan se mantuvo al margen del encuentro, incluso desviando su total atención de los ya presentes Kiyoko y Jinta, pero supo que era el momento de acercarse al percibir la presencia de una marca de chakra mucho más familiar para él.

Se trataba de su compañero recurrente de misiones, Nagi. El joven Shokan descendió con gracia y agilidad para aterrizar a tan solo un par de metros del encuentro. Para suerte del joven Jinta, Shokan pudo escuchar parcialmente la parte final de la conversación y claro, meter su cuchara en la sopa.  — No te preocupes, Jinta.  — El joven Sin Clan reiría por lo bajo antes de culminar su frase.  — Nagi no suele abandonar a sus camaradas.  — Dio una ligera palmada al hombro del chico y desvió su mirada hacia otra zona mientras respondía el último comentario del joven de mechones amarillos.  — Déjenme el trabajo sucio, me encargaré de cuidarle de cerca.  — Sus habilidades ya le asignaban un papel directamente, no había forma de negarse a la protección cercana del VIP.
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Última modificación: 18-05-2023, 08:13 PM por Hozuki Jinta.
Sentí en mi hombro izquierdo reposarse una mano pequeña pero pesada y, acarreando el mal humor que me provocaba toda aquella situación nacida a partir de una misión en la que yo no pintaba, volteé el cuello para divisar a Kiyoko y encontrarla con mis ojos y mi ceño fruncido y mi malgenio.

—Kiyoko-san, yo no voy a morir —hablé de hechos. —Y no peleo por diversión, ni para medir fuerzas. Si algún día cruzamos espadas, será porque vienes con la intención de darme muerte. 

Continué mi camino mientras Kiyoko conversaba con los tripulantes e intentaba hacer buenas migas con el protegido, Onmyoji Tetsuya. Sin embargo, la paz que la partida de Kiyoko me había devuelto no duraría demasiado. Escuché la madera del barco retumbar y crujir detrás de mí y cuando me di vuelta, un hombre de contrastados mechones rubios, vistiendo con uno de los antiguos uniformes militares de la niebla, se hallaba de pie ante mi y hacia chistes a mi costa. Era Nagi Yuki, uno de los shinobi de élite que servirían en la misión y alguien con quien nunca había cruzado palabra. Tras observarlo, volví a darme la vuelta y continuar mi marcha.

—Cuando me embosquen, usaré estos dientes para destrozarme la lengua, senpai. Con suerte mis alaridos se volverán tan monstruosos que acompañarán a mis ejecutores en sus pesadillas hasta el día de sus muertes. A ti te pido que ese día les llegue pronto.

Es cierto que no puedo enfrentarte, pero hacerse de enemigos no es sabio. Puede que, durante estos siete días, aparezca alguien capaz de detener tu corazón, y no querrás que yo sea la piedra en el zapato que te impida esquivar la puñalada.” Fueron las palabras que más tarde quedarían grabadas en mi pequeña bitácora de viaje a raíz de mi primera interacción con Nagi Yuki. A pesar de haberme llamado carnada, él parecía el más entusiasmado por ocupar las posiciones de mayor peligro.

En comparación con Nagi, Shokan fue más amable y hospitalario. No pensé mucho de ello.

—En ese caso yo actuaré como un estorbo —repliqué a las palabras de Shokan — Seré la molesta piedra en el zapato de cualquiera que intenté frustrar la misión. En combate, no estoy a la altura de ninja de élite como ustedes, pero hasta la más mínima brisa puede desviar el rumbo de una shuriken en medio del huracán y guiarla hasta la yugular del enemigo. Ese será mi papel. 

Resuelto a regresar con vida y habiendo sido una parte fundamental del éxito de la misión, caminé hasta el hermano menor del “excelentísimo” Shodai Sencho.

—No dejes que te robe a la novia —me burlé mientras hacía sellos de mano. Segundos más tarde había adoptado por completo la apariencia de Onmyoji Tetsuya. Protejan a los gemelos a muerte, shinobi de élite— me sonreí observando a Kiyoko, Nagi y Shokan —De lo contrario, esta fachada no será de mucha ayuda.

Estadísticas de Hozuki Jinta


Técnicas utilizadas y gasto de recursos


Pasivas


Resumen
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Última modificación: 19-05-2023, 11:55 PM por Izanami.
GUARDIANES

Los shinobis irían alcanzando la embarcación mientras los marineros que alistaban el barco iban retirándose dejando en el lugar tan solo a tres personas. En general era un ambiente calmado sobre todo por parte de los shinobis veteranos que bromeaban mucho sobre el asunto, claramente era una misión sencilla y fácil para ellos. Al fin y al cabo era una operación tan estudiada y preparada que era imposible que alguien los interceptase, aunque el joven genin Jinta no lo tenia tan claro y estaba en medio de una lucha mental entre odiar a los altos mandos por lanzarlo a los tiburones y un crecimiento personal en el que pensaba demostrar su valía al mundo. 

De las tres personas en el navío el primero que se presentaría frente a los Shinobi seria como es evidente el capitán de la embarcación, el cual claramente era muy joven para dicho puesto aun así su temple y porte eran finos y elegantes en todo momento mostrando una gran confianza y seguridad - Encantado de conocerles, mi nombre es Fukuro, es un placer recibirlos como escolta para este transporte de suministros - El hombre esta informado de la coartada que se estaba usando y que aquel era un barco mercante, que en verdad tenia las bodegas cargadas de suministros - Aunque pueda parecer joven les garantizo mi habilidad y que tendremos un viaje confortable y seguro - Ahora haría un momento de silencio para dar pie a su segundo al mando.

Capitán Fukuro


El mismo era un hombre que claramente tenia sus años en el mar, el peso de los años se notaban en sus hombros y rostro, era claramente un anciano, lo cual hacia muy raro que fuera el segundo al mando tan solo - Hohoho un gusto tenerlos a bordo grumetes, espero que tengamos un viaje tranquilo - El hombre claramente tenia menos modales, pero aun así se mostraba simpático - Espero que tambien nos protejáis al capitán y a mi mismo hehehe - El hombre se mostraba muy vivaracho sin duda - Ay que se me pasaba, soy Hotetsu - Ahora desde el fondo de la embarcación iría emergiendo la figura principal del día.

Segundo al Mando Hotetsu


Él era un joven de cabellos rubios casi platino muy similares a los de su reputado familiar, sus andares eran firmes y sobrios y exhumaba confianza en su rostro y gestos - Un placer recibiros shinobis, creo que no son necesarias las presentaciones - Aunque él como tal no había sido una figura publica hasta prácticamente ahora, era evidente que era mejor no mencionar su nombre por ahí como si nada, principalmente por sus vínculos políticos y familiares - Me han informado nuestros navegantes que parece ser que tendremos una buena partida en este viaje, aunque tambien me advirtieron que en alta mar el tiempo puede cambiar en un instante, así que tambien confió en vosotros para preservar la integridad del navío y su mercancía hasta llegar a su destino - El hombre sentenciaría su presentación chasqueando los dedos extendiendo el dedo índice y corazón juntos.

Onmyōji Tetsuya


El ilustre Onmyouji se mostro muy interesado por la actitud de los shinobis, empezando por la de Jinta en aquel aproximamiento que le hizo - Oh, veo que eres un joven muy aguerrido y valeroso, eso es digno de admiración, agradezco sin duda el riesgo que estas tomando - Diría al ver que el chico se transformo en él mismo y dando un poco de largo aquella pequeña insinuación hacia el robo de su prometida - Bueno en general todos parecéis un grupo de indudable valentía y con agallas para enfrentar cualquier batalla, aunque no creo que tengamos tales problemas - El noble se mostraba muy confiado y animado con la situación - Si nos acompañáis al interior, os mostrare la hoja de ruta que seguiremos - Indicaría el capitán.

En el interior del navío habría una mesa con un mapa extendido, como el experto el capitán seria el que se pondría a explicar con detenimiento la ruta - Partiendo de inmediato nos tomara entre dos y tres días según como este la mar cruzar a través del abandonado País de los Remolinos hasta alcanza el País Helado, ahí empezara un tramo peligroso en el que se deberá cruzar un país en el que el imperio no cuenta con muchas simpatías, no obstante es una ruta poco esperable, cruzar el país debería tomar otros dos días hasta alcanzar el puerto Tokage entre la frontera helada y del rayo, desde allí se nos informo que una nueva embarcación estará esperando para el viaje hasta el país de los Fideos en un viaje que no debería tomar más de un día, es decir entre 5 y 6 días de viaje - El joven capitán iba señalando guiando su índice sobre el mapa como si trazara de nuevo la ruta con el tintero - Se nos informo de que si lo requerís os debemos acompañar a través del país helado para llevar de nuevo el navío del puerto Tokage hasta el puerto Oden en los Fideos, salvo que os veías con la capacidad de dirigir el navío en ese ultimo breve tramo en cuyo caso la costa del país Helado será nuestra despedida - El hombre se reincorporaría manteniendo una pose erguida y señorial llevando su índice y pulgar al mentón meditando.

- Yo en lo personal optaría por que nos acompañéis, puede ser impredecible el mar y según como vayan las cosas el tiempo puede ser muy justo, nos irían bien vuestras manos - Serian las palabras del novio, parecía muy decidido, aunque el capitán no tanto - Pero como es un asunto de seguridad y tiempo, dejare la ultima palabra a nuestros confiables escoltas - Diría dando paso a los shinobi - Capitán, tripulantes, el barco esta listo, en cuanto deis la señal podemos embarcar - Entraría en la sala Hotetsu para avisar que todos los preparativos estaban listos.


ASALTANTES

No quedaba mucho para el amanecer y seis sombras se reunían entre la niebla alrededor de una séptima poco a poco acudiendo a la convocatoria de la misión de asesinato. Estos invitados de honor a las nupcias imperiales habían sido cuidadosamente seleccionados para teñir aquel hermoso enlace de sangre. Estos eran Mercer el Monstruo, Airine la Montaña, los tres hermanos Shirokumo y Night Crow. Todos ellos reunidos alrededor de una persona, Izanami Yuki.

La mujer de cabellos blancos y negros se giraría para observar a todos los recién llegados - Bien, todos los que se me notifico que acudirían ya estáis reunidos, tan solo soy una mera intermediaria así que tratare de ser breve - La mujer sacaría de sus bolsillos un grupo de seis pequeños pergaminos que lanzaría a todos los miembros ahí reunidos, en los mismos se detallaba cierta información - La operación es sencilla, alcanzar la escolta de Onmyōji Tetsuya y acabar con su vida, en el pergamino tenéis detallada la ruta que tomaran, si alguno se pregunta la veracidad de dicha ruta es absoluta puesto que de todos los viajes falsos que se están realizando solo restan dos, el penúltimo se realizara en un par de horas tras el amanecer dese Kirigakure y el ultimo será mañana escoltando al sacerdote Zeng a la ceremonia, eso lo podemos confirmar porque yo misma soy la escolta del sacerdote y nuestro contratista confirmo que el novio aun no había partido - El resto de detalles importantes sobre el viaje que se iba a realizar, así como información técnica de los cuatro shinobi que habían sido designados para la escolta estaba en los pergaminos, principalmente se notificaba su rango militar y un poco de información publica de sus habilidades - El jefe me dijo que sois libres de interceptar al objetivo en cualquier momento de la ruta, lo importante es que no llegue al País de los Fideos si no es en un ataúd y os facilita esta embarcación para que los podáis seguir sin problemas, es pequeña y angosta, pero es una embarcación muy veloz - Señalaría la barca de velas que había en el muelle, la única, era pequeña pero una decena de personas podían abordar sin problema, eso si dormir no seria muy confortable - Como extra se me informo que si se completa la misión todos cobrareis lo acordado previamente, pero premiara a quien de el golpe de gracia con el doble de lo acordado - Sentenciaría como aditivo para la motivación de los integrantes, aunque su rostro se mantenía en todo momento impasible e inexpresivo.

- Bien, si no hay más preguntas procederé a retirarme - La chica se prepararía para partir cuando la risa de uno de los tres hermanos irrumpió en el lugar - Bien, me gusta como piensa el jefe, el resto podéis estar tranquilos nosotros nos encargamos, podéis relajarlos un poco y disfrutar del dinero gratis que os darán igual - Diría de una forma muy relajada y confiada mientras comenzaba a caminar alejándose de la barca - Nosotros tenemos nuestros propios métodos para viajar, así que no os preocupéis, shashasha - Tanto él como sus dos hermanas se comenzarían a perder en la niebla - Bien, nunca se dijo que debierais colaborar entre vosotros - Diría Izanami quitándole importancia.

Hermanos Shirokumo


- Puedo entender el placer de trabajar en solitario, pero creo que pecan de confianza - Proclamaría el hombre de cabello oscuro y semblante calmado y siniestro - Yo ya he dicho lo que hacia falta, el patrón no se interpondrá en los métodos o recursos que utilices para la misión - Diría Izanami, ahora si procediendo a irse - ¿Y vosotros dos, que queréis hacer? - Les preguntaría el sujeto ahora que se quedarían tres personas en el lugar mientras sacaba un reloj antiguo de su bolsillo - Aun nos quedan dos horas para la hora de partida...

Night Crow


Tenían la ventaja en la información y el tiempo, plena libertad y capacidades, solo el tiempo diría si estas nupcias se teñirían de rojo o procederían de forma natural.

Misión
Mapa
OFF
Notas

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No pudo evitar soltar una risa ante las cosas que decía el ninja de menor rango. No fue una reacción burlesca, sino que una más entretenida, demostrando que le agradaba esa forma de ser. — Me caes bien. Sin duda no podemos fallar la misión si tenemor entre nosotros a alguien con tu motivación. Y no te preocupes, antes de que el enemigo te atrape, primero deberán de haberse encargado de mí. — Lo cual iba relacionado a lo dicho por Shokan, quien también apareció en escena. No es que Nagi tenga el espíritu de líder y protector, pero es alguien que le gusta ser el primero que da un paso al frente. Tampoco es de esos que no les importa la vida de los demás, así que sus compañeros podían tener por seguro que el espadachín sería su principal escudo.

El restro de los tripulantes se presentaron. La figura más importante, aquella que debían proteger, y dos más. Ninguno pareció ser una persona pesada y que no sea cómodo tratar, por lo que se podía intuir que el viaje, al menos en lo que a relaciones personales se refiere, se llevará con tranquilidad. — ¿También proteger la mercancía? — Muchas cosas a tener en cuenta. Asumía que, en caso de crisis, la vida del noble será lo primordial. Igual, tampoco es que debía preocuparse en exceso. La aldea ha tomado muchos resguardos para que todo salga bien. por lo que hay chance de que sea un simple viaje de turismo y nada más.

O quizás no.

Cuando fue la hora de escuchar y entender el plan, tantos lugares con transbordo incluido comenzaron a marearlo.  Confiaba en que el resto entendería mejor que él lo que debían hacer. Kiyoko era algo de su estilo, pero confiaba más en ella que en él mismo en este tema. Shokan se caracterizaba más por pensar, así que el peso de guiarlos recaía sobre sus hombros. Jinta aún era muy joven y, por la forma en que se relacionó antes, tampoco parecía ser de la clase de ninjas superanalíticos.

Respecto a la decisión de si los tripulantes debían seguir en el último tramo, permitiría que el resto decida. Si fuera por él, preferiría que sigan. La verdad es que no entendió del todo, así que puede que cualquier cosa que esté pensando sea errada. Guardó silencio y ya está.

Luego de que ya se haya dado por sentado, Nagi optaría por abrir la boca. Sería para hablar con Shokan. Al ya haber trabajado con él en el pasado, estaba al tanto de sus capacidades y de cómo podía usarlas para su propio beneficio y, por consiguiente, el de la misión. — Si te quedarás cerca del señor Tetsuya, puedo adelantarme con tu clon y asegurar el área. Como también debemos darle protección al navío, es mejor deshacernos de posibles problemas lo más lejos posible. — La réplica de Shokan podía obtener información de manera sensorial y así mantenerlo informado al original y a Nagi, creando una cadena de comunicación eficiente.

Podría Kiyoko o Jinta también ir conmigo para abarcar más terreno, aunque no sé si consideran bien dejar solo a dos de nosotros en el barco. — Claro, puede ser peligroso. La idea sería no alejarse mucho tampoco, ya que si van muy lejos y un peligro logra acercarse al transporte, luego podría tomarles mucho tiempo regresar. También podía ser inseguro que Jinta vaya con él a buscar directamente los problemas, pero prefería que él tome la decisión y no ser el Yuki quien lo mire en menos, asignándole tareas sencillas.

Una vez todo esté hablado, cuya estrategia será confirmada en un final por el resto, (por lo que se explicó antes de que el pensar no es su fuerte), zarpar sería cuestión de segundos y la misión daría inicio.

OFF Rol
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Última modificación: 21-05-2023, 03:58 AM por Hozuki Jinta.
No pensé demasiado ni de los miembros de la tripulación ni de Onmyoji Tetsuya y simplemente me limité a escuchar con atención las palabras del capitán Fukuro y hacer un esfuerzo por memorizar nuestra ruta y plan de acción tan al detalle cómo me fuera posible. Para cuando Fukuro había terminado de hablar, yo tenía confianza en haber retenido toda la información y estaba particularmente satisfecho con el hecho de que durante la mayor parte del viaje nos mantendríamos en la cercanía de fuentes de agua naturales. La cuestión ahora era si Fukuro y Hotetsu nos acompañarían hasta el puerto Oden en el País de los Fideos o si nos despediríamos de ellos en el puerto Tokage del País Helado para continuar la travesía por nuestra cuenta. Onmyoji Tetsuya emitió su opinión: la tripulación debía de acompañarnos durante todo el trayecto, y yo estaba de acuerdo. 

—Es como Testuya dice — intervine —Navegar la embarcación es trabajo de la tripulación. Nuestra labor es escoltar al novio hasta su boda, asegurándonos de que llegue con vida y, sí es posible, de una pieza. Mantener el control del navío no nos corresponde. —pronuncié estas últimas palabras observando fijamente a Fukuro, quién se había mostrado un tanto disgustado ante la idea de permanecer a bordo hasta Oden. —Además — continué, ahora dirigiéndome a Tetsuya. —Algo de lo que dijiste me ha estado molestando: nosotros no estamos aquí para cuidar la mercancía ni el navío, vinimos a procurar tu bienestar y nada más que tu bienestar. Nagi, eso también va para ti. Protegeremos el barco en tanto medio de transporte para el novio, pero nada más. Si por algún motivo la misma embarcación se transformara en un estorbo, la abandonaremos a su suerte. 

Hice una pausa y bebí de mi cantimplora. 

—En cuanto a Nagi adelantándose al navío para explorar los porvenires de la ruta, no me opondré. Pero creo que es necesario mantener una formación de tortuga alrededor de la embarcación y de Tetsuya. Cuantos más de nosotros nos encontremos dentro de esta fortaleza marina y ambulante, más difícil será de penetrar. Nuestra labor es defensiva, no hay necesidad de salir a buscar conflictos. Dejemos que vengan a nosotros y se den contra una muralla inderrumbable. Creo que, si nos atacan, será rápido y sorpresivo. Intentarán asesinar o raptar a Tetsuya antes de que podamos reaccionar, por lo que cuanto más cerca de él estemos, mejor. Si de todas formas deciden adelantarse a la embarcación, quiero que por lo menos tres de nosotros nos quedemos aquí. Nagi puede ir acompañado de un clon de Shokan, como él mismo dijo. 

Hablaba con una autoridad que no poseía, pero al fin y al cabo yo era tan miembro del equipo para esta misión como los tres shinobi de elite que tenía a mi lado y no tenía intenciones de silenciar mi opinión. 

—Quiero asegurarme de que todos estamos en la misma página.


Técnicas utilizadas y gasto de recursos


Pasivas


Resumen
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— Cada quien tendrá una función que cumplir, Jinta.  — Explicó el Sin Clan intentando calmar el ímpetu del joven Genin. Antes de que el diálogo pudiese continuar, los hombres que realizaban los preparativos fueron desapareciendo poco a poco para tan solo dejar a los 3 presentes allí.

Shokan elevó su diestra en un saludo distante a lo que parecía ser la cabeza al mando. Fukuro, un hombre quizá igual de joven que él y algún otro miembro del grupo de la operación, pero quien indicaba que sus habilidades sí que eran reales. Aquello alivió un poco esa sensación de extrañeza naciente en el joven Sin Clan, quien dudaba un poco de la veracidad del rol de Fukuro...

El segundo al mando no tardó en hacerse presente, aunque con una presentación muchísima más corta y directa que su comandante.  — Es un placer conocerlos a ambos y claro, intentaremos extender la protección a quien nos sea posible siempre y cuando garantice la seguridad de la operación. — Shokan se habría adelantado para comentar aquello, después de todo ninguno de los presentes parecía estar animado por tomar el liderazgo de la operación.

Ante la invitación de Fukuro, Shokan se adelantaría, pues tenía un interés bastante alto en conocer en profundidad la logística de la operación.  ¿Por qué tomar una ruta donde tenemos tan poca influencia? ¿Por qué siendo el caso no llevamos más personal?; Se preguntó Shokan de forma interna, pues esos detalles le causaban cierta inquietud al Jounin.

— A menos que estemos seguros de poder distribuir el tema de la seguridad a todo los presentes, pues no veo razón alguna para no recibir un poco de ayuda.  — Comentó Shokan intentando apoyar la decisión del novio justo antes de recibir la compañía de Nagi.  — Es un placer verte, compañero.  — Saludó nuevamente al Yuki y escuchó atentamente su oferta.  — Me parece un buen movimiento.  — Su diestra se movió a su barbilla y se mostraba un tanto pensativo, pero aquello no evitó que aceptará la oferta del Yuki.

— Entre más seamos, mejor.  — Sonrió ligeramente mientras separaba su diestra y realizó un gesto de victoria, se le notaba bastante animado. La voz de Jinta captó la atención del Jounin quien escucho con atención a toda su sugerencia...  — Ciertamente, Jinta, tienes mucha razón, no obstante, estar todos dentro de la embarcación nos hace un blanco grande y muy fácil de digerir.  — Allí tuvo que diferir al Genin quien se mostraba con bastante carácter, algo que no le terminaba de agradar a Shokan, pero no podía simplemente oponerse a ello.

El Sin Clan meditó un poco al respecto de todas las posibilidades y guardó silencio por un par de minutos antes de volver a retomar la palabra.  — Jinta y yo cuidaremos del novio. No podemos exponerte a los peligros que puedan afrontar los de más alto rango.  — Shokan ejecutó una ligera pausa y se acercó al Genin para finalizar.  — No estoy quitando mérito a tu valor, simplemente debemos ser realistas.  — Gesticulo intentando restar peso a sus palabras.


Información
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Tras ingresar a la embarcación, todos los presentes hicieron su presentación, y especialmente las fuerzas no-shinobi de aquel viaje: el capitán, sub-capitán y el novio, aunque desde temprano se notaba que la idea de la misión era mantener la fachada lo más posible, y Kiyoko se fastidió con rapidez cuando algunos de los presentes comenzaron a romper con el juego de roles.

Tras ingresar al interior del navío, todos escucharon con atención el plan y la hoja de ruta planteada por Fukuro. Kiyoko escuchó con atención y atendió especialmente a las rutas, las cuales logró comprender. Si bien no había recorrido todos esos países, sí que los conocía, y al menos había pasado por el País Helado. Lo único nuevo era aquel tramo del País de los Remolinos, del cual había oído numerosas historias pero que guardaba una mística que le valía una gran fama. Sólo esperaba que dicho punto no fuese problemático. Hubiese propuesto desviarse de la ruta y atravesar la zona por otra parte, pero tampoco era experta en navegación ni controlaba los tiempos, y si hay algo que no podían hacer era llegar tarde a la ceremonia. — Sí, lo requerimos. No sé si tanto por cómo esté el mar, pero si desde Kiri salimos siete personas, al destino debemos llegar siete personas. No aceptaré nuevas incorporaciones en el camino. A partir de aquí sólo confío en las personas a bordo. — Comentó a todos los presentes. — De todos modos, confío en que será un viaje tranquilo. La mercadería debe llegar a destino en condiciones, así que es la prioridad número uno.

Jinta comenzó a hacer planificaciones y plantear posibles escenarios, poniendo prioridades y tomándose atribuciones demasiado altas para un novato. Kiyoko, lejos de enfadarse demasiado, entendió que era la emoción propia de un novato en una misión de tan alta dificultad. — Jinta. — Le llamó la atención simplemente, dándole una mirada que le transmitiese calma, para que le aflojase a la lengua y dejase que los shinobis de rango alto se encargaran de la estrategia. — Mientras menos hablemos mejor. A partir de ahora cualquier bandido puede intentar interceptarnos. Este es un viaje mercantil, a bordo de un barco mercante, deja de hablar de novios y bodas de una vez. — Le comentó al Hozuki intentando hacerlo entender el doble sentido detrás de la coartada. Quizá, siendo tan joven e inocente, no había logrado captar el mensaje. — Me agrada tu actitud, kiddo. Usa esa energía para mantenerte alerta. Será un viaje largo.

Nagi planteó una idea, y ciertamente no le disgustó. De hecho, sus pensamientos eran bastante similares a los del Yuki, pues ambos disfrutaban de la frontalidad en ese tipo de situaciones. Sin embargo, pese a su atrevimiento, Jinta tenía algo de razón en sus palabras. — Esto ya forma parte de nuestro modo de trabajo, mejor si lo discutimos aparte. Discúlpennos, eh. — Dijo a Fukuro, Hotetsu y Tetsuya, e invitó a los shinobis parte de la comitiva a salir del interior para charlarlo a solas. Si el grupo decidía hacer caso a su propuesta, allí recién opinaría sobre el plan. — Lo de peinar los alrededores e ir adelantados es un buen plan, no me disgusta en absoluto. Y con las habilidades de Shokan, ese clon puede de inmediato transmitir la información a quienes estemos a bordo para movilizarnos. — Realizó una pausa y se llevó el índice al mentón, pensando un momento. — Si hay alguien que debería ir contigo, pese a que me encantaría ir al frente, ese es Jinta. Eres Hozuki, supongo que sabes nadar muy bien y moverte en ambientes acuáticos, ¿no? — Le preguntó al Genin con verdadero interés. — Creo que los puntos más peligrosos son la zona de los Remolinos y el tramo entre el País Helado y los Fideos, así que nuestra alerta debe ser máxima en esas zonas.

— Sin embargo, quizá Jinta en lugar de ir a la vanguardia podría cubrir uno de los laterales del barco. Al pasar por el viejo País de los Remolinos, pueden flanquearnos por cualquiera de los dos lados: por el Este viniendo del País de las Montañas y del Oeste viniendo del Fuego o de las Aguas Termales, desde el continente. Para ese entonces, nos servirá haber llegado antes con un grupo de avanzada que analice la zona y nos asegure si no están emboscándonos. Ante cualquier duda, siempre es mejor desviar y evitar la confrontación. Podemos preguntar al capitán si es posible por los tiempos realizar el desvío. Si no es posible, podemos encargarnos de los posibles enemigos antes de acercarnos con el barco. — Kiyoko dio a conocer su opinión sobre la peligrosidad del trayecto. — Serán días largos, así que podemos turnarnos para descansar. Dos pueden montar guardia y dos dormir. Especialmente Nagi y Shokan deberían descansar hasta que estemos por ingresar a la zona de peligro. Él y yo podemos quedarnos despiertos. Espero ya tengas edad para beber café. — Bromeó sobre la juventud del Hozuki, con una sonrisa en su rostro.

OFF
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Paso muy poco tiempo desde que Mercer aparecio y se posiciono frente al bote contemplando el mar, detras suyo varias siluetas comenzaron a surgir de entre la neblina, un grupo de hermanos muy parecidos entre ellos tan blancos como la nieve misma y un joven de cabello oscuro con ropajes negros, Mercer por su parte se volteo a verlos por encima del hombro para al final darse la vuelta y acercarse al grupo. Aquella mujer encapuchada y misteriosa comenzo a hablarles, explicandoles en que consistiria el trabajo. La joven le lanzo un pergamino a cada uno de los integrantes, Mercer atajo el suyo con la mano derecha y lo abrio para leer su contenido, alli decia practicamente lo mismo que la joven explicaba. Se trataba de una mision de asesinato, Onmyōji Tetsuya, al parecer seria escoltado por una guardia hasta llegar a su propia ceremonia la cual se trataba de nada mas y nada menos que su propia boda. "Una boda..." Al venirse la palabra boda a su mente, Mercer tuvo una extraña sensacion, algo le quedo dando vueltas en su cabeza aunque no le prestaba atencion puesto que estaba enfocado en lo que ocurria en ese momento.

¿Quien es exactamente este tal Onmyoji Tetsuya? — Le pregunto Mercer por curiosidad, debia conseguir tanta informacion como sea posible para llegar a cabo el trabajo de la forma mas limpia posible.


Cita:Como extra se me informo que si se completa la misión todos cobrareis lo acordado previamente, pero premiara a quien de el golpe de gracia con el doble de lo acordado


Mercer arqueo una ceja, algo sorprendido de que un cliente haga una oferta asi, le parecia un tanto "infantil" buscar incentivar a sus empleadores con esta jugosa recompensa, puesto que una vez se ha aceptado un trabajo, el no se detendria hasta completarlo, pero en fin, si el cliente queria perder mas dinero para asegurarse de que vayan motivados pues bien por ellos. El joven muchacho que se encontraba rodeado por sus hermanas parecia el mas energico y confiado, no se le veia nada debil pero por experiencia Mercer no pudo evitar pensar que esa clase de sujetos suelen ser los que mueren primero en las misiones.

Por su parte Mercer encendio un cigarrillo en lo que ese pequeño y sus hermanas se marchaban del sitio desapareciendo entre la neblina de la misma forma en que llegaron. Luego se acerco al bote y se subio al mismo, preparando el motor y todo lo que haga falta antes de partir. — Ellos pueden trabajar como quieran mientras no frustren nuestros movimientos. Yo tomare el bote y partire cuanto antes hacia donde se supone estara nuestro objetivo, si quieren acompañarme podemos preparar un plan durante el viaje para emboscarlos aprovechando que tenemos el tiempo a nuestro favor. — Les propondria Mercer a los que quedaron alli. independientemente de que respuesta le diesen el joven Tenbin pondria en marcha el bote y partiria hacia alli lo antes posible.




Resumen: Mercer escucha las instrucciones y lee el pergamino, luego se dispone a marcharse en el bote invitando al resto a acompañarle para planear la estrategia a seguir.
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Narro - Hablo - Pienso
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GUARDIANES

Los miembros civiles de la tripulación escuchaban atentamente las conversaciones de los guardianes sobre la estrategia a tomar. No se oponían a nada puesto que los expertos en seguridad eran ellos. Por suerte el estar en el puerto de Kirigakure aun les brindaba una cierta seguridad para que pudieran planificar la estrategia en lo que el vice capitán salía a levar anclas y alistar las velas para dejar todo preparado.

Evidentemente que la mercancía, incluso el propio barco eran cosas prescindibles, los tres miembros de la embarcación lo sabían. De hecho el capitán y vice capitán tambien lo eran y lo sabían, por eso afrontan esta misión en solitario sin toda su tripulación, de hecho el capitán tambien quería que su leal segundo al mando se bajara del navío, aunque este se negó a dejar que se hundiera solo con el barco.

Pero aquella coartada que estaban interpretando todos como mercantes y que los shinobis eran la escolta del cargamento se había roto por el momento con una facilidad asombrosa. Puesto que los guardianes no estaban logrando captar mucho. Por suerte antes de que el novio tuviera que intervenir dando la explicación la joven de cabellos violeta intervino poniendo a todos al tanto de la tapadera y el guion que los tripulantes estaban interpretando. Seria tras de ella cuando el novio bajaría el tono y apoyaría sus palabras - En efecto... Una decena de viajes similares a este han salido con otras rotas y de hecho aun saldrá una más, todas con rutas diferentes y tapaderas parecidas, con tal de dificultar que oídos indeseables distingan fácilmente que grupo no es el señuelo - El novio tuvo que pausar un momento dado que lo que estaba por decir se le hacia duro - Incluso en la propia aldea hay intereses contrarios a este enlace, no podemos fiarnos ni en el puerto de que se filtre información - Culminaría el novio volviendo a su pose normal y tratando de relajar su semblante.

- Eso es - Proseguiría el capitán mientras avanzaba hacia la puerta para ir al timón tras escuchar a su segundo al mando sobre que todo estaba alistado -  Nuestro trabajo es llevar este cargamento hasta su destino - Conforme decía eso, el dedo índice señalaba al novio, refiriéndose a él por cargamento. Toda la tripulación empezaría a tomar posiciones para zarpar, su trabajo al fin y al cabo era llevarlos a todos a tiempo al lugar y no podían perder tiempo porque nunca se sabia que podría pasar. Depositando toda su confianza en los cuatro shinobis para que terminaran su reunión a su gusto para formalizar entre los cuatro un plan, si debían de ser informados de algo ya lo serian.

Con el capitán al timón, el vice capitán controlando las velas y el novio a salvo en el camarote que conducía hacia las bodegas del barco. El grupo zarparía del puerto de Kiri lentamente, conforme el viento hinchaba las velas de la embarcación, guiándola buscando las corrientes de viento y mar adecuadas para tomar tumbo hacia su primer punto clave en el camino, la costa del Remolino.


ASALTANTES

Por su parte el grupo de los asaltantes se había divido. Eso según se mire podía ser una mala señal, la falta de trabajo en equipo podía jugar en contra ante unos guardianes bien organizados, no obstante seguían teniendo una cierta superioridad numérica, lo cual si les permitía dividirse con eficiencia, creando un mayor abanico de oportunidades para asaltar la embarcación nupcial.

La suerte estaba echada, los asesinos seleccionados y en movimiento. No obstante uno de ellos pregunto algo a la intermediaria antes de que se retirara del lugar, se trataba de Mercer, quien buscaba saber más sobre el objetivo - Se trata del hermano menor del Shodai Sencho de Kirigakure, Onmyōji Rō, su boda no es más que un enlace político para fortalecer la alianza con Amegakure, consolidando la misma - Con eso dicho, proseguiría su camino, dejando a los 3 asesinos restantes en el lugar.

Mercer tomaba la iniciativa subiendo al bote, tenían un par de horas de ventaja para buscar una mejor forma de asaltar a los escoltas, pero aun así estaba bien no distraerse. Los dos sujetos restantes Airine y el sombrío Crow tambien embarcarían. Seria este ultimo el que primero hablaría allí - Bueno, lo dejo a vuestro criterio un poco, pero como lo veo ahora tenemos las siguientes opciones optimas - Entonces levantaría su mano derecha con los dedos cerrados para ir desplegándolos uno a uno conforme decía lo siguiente - Uno, infiltrarnos en el navío de alguna manera para sorprenderlos, tenemos tiempo; dos el punto cruzando el estrecho del Remolino, es sin duda otro buen punto; y por ultimo interceptarlos en alta mar, sin tierra próxima, dificultando el combate al tener que proteger el barco y no tener un lugar en el que ocultar al objetivo o llevárselo como tendrían en tierra - Eso seria todo lo que les diría - Son buenas opciones, me puedo adaptar a todas ellas, cual es tu opción - Airine desviaría su mirada con una sonrisa tan agradable y apacible - ¿O... acaso tienes alguna idea? - Dejo entre abrir los ojos transformando la agradable sonrisa en una un poco más viperina y cínica.

Los tres alistarían juntos la pequeña embarcación, haciéndola zarpar del puerto perdiéndose entre la niebla vespertina. El rumbo aun no estaba fijo, pero era mejor estar en altar mar que en la costa próxima a Kirigakure.

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Notas

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Dios, a esta gente le gusta hablar demasiado, incluso más que yo... — Él podía ser una persona hiperactiva y un hablador, pero tenía sus límites. La mitad de las cosas que se estaban diciendo no las entendía, o más bien le aburrían y prefería no poner del todo su atención. De una forma no vistosa, le hizo un pequeño gesto a Shokan, indicándole que necesitaría un resumen después. Al menos sí captó que no debieron llegar hablando sobre la misión, sino que fingiendo desde el principio que eran simples mercaderes. Bueno, si querían que Nagi hiciera eso, los altos mandos debieron haber escogido mejor a los participantes del equipo. Si a él lo enviaban era para ser el frente de ataque, no para andar de actor. Factores.

Shokan estaba de acuerdo con que Kiyoko vaya en el puesto de avanzada, pero la fémina quería mandar a Jinta. Podía ser peligroso para él, sobre todo porque la idea era separarse. Por consiguiente, el de menos rango podría quedar expuesto en caso de encontrarse con un peligro. Esto podría ser solucionado si el clon iba cercano de él y era Nagi quien luego tendría que moverse para obtener información del sensor. Tardaría y se le complicaría más la labor, pero sería la opción más segura. Ya luego se verá cómo proceden al final. Dejará que sean los jounin quienes se encarguen de eso.

Siempre puedo dejar un clon en el puerto para que golpee a quienes andan cerca merodeando. - Fue una idea que llegó a su cabeza mientras el resto seguía dialogando, pero prefirió no exteriorizarla en palabras. Además, no había ni tiempo para comer e interrumpir no le parecía lo más oportuna.

Oh, eso sí lo entendí. Significa que puedo dormir hasta que me necesiten. Me parece perfecto. Me avisan luego qué sucede. — Y antes de que pudiera impedirlo, al mismo tiempo en que los marineritos colocaban en marcha el barco, el Yuki se retiró de la sala de reuniones y se fue a recorrer el transporte. Quería encontrar la supuesta mercancía a transportar y proteger, al menos para tener más información sobre el sitio en que estaba. Luego, buscaría una habitación con una cama para largarse a dormir.

Una vez hecho esto, no tendría problemas para ir a conocer a Morfeo. Como vio que había estrategas calificados para decidir, simplemente esperaría a que lo despierten y le digan a dónde ir y qué hacer. 
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— Aunque como digo, esto es solo una opción. No me molestaría, y de hecho me emocionaría más ir al frente, por si algo sucede. — Hizo una pausa y lanzó una media sonrisa. — No quisiera perdérmelo. — Hacía referencia a su anterior idea de que Jinta fuese en un equipo de avanzada, dada su habilidad especial para combatir en altamar.

— Bien, entonces... ¿Hacemos eso? Digo, para ir a hacerme un café mientras ustedes dos descansan. — Observó a Nagi y a Shokan. El Yuki ya parecía estar de acuerdo con ir a dormir. — Ya me encargaré yo de llamarlos cuando estemos acercándonos a la zona de peligro. — La idea de Kiyoko era alertar de esta circunstancia a Fukuro, para que les avisase cuando estuviesen aproximándose al estrecho de los Remolinos. Así, podrían llevar a cabo su estrategia, si Shokan y Jinta estaban de acuerdo. A pesar de ello, todavía no habían tomado una determinación.

Así, si nada más sucedía y se decidían por ese plan de acción, Kiyoko se largaría a recorrer un poco el barco y buscar la cocina, que esperaba que cuente con una cafetera. Le parecía lo lógico, porque sino desconocía cómo esos tipos se mantenían activos en un barco durante días y días. Ya no era su primera travesía, así que las náuseas no existían para ella, pero sin dudas era un trayecto para nada corto, y eso le fastidiaba. Si sucedía algo, esperaba no se tardase tanto.

RESUMEN
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El Jounin se sintió un tanto avergonzado con la corrección del VIP y es que, con tan pocos términos técnicos, acabó olvidando que debía ser discreto.  — Vaya... — Espeto en voz baja al percatarse de dicho detalle.

El resto de la plática no tuvo mucha relevancia más allá de aquel gesto realizado por Nagi, era claro que necesitaba un resumen y su compañero Shokan ya se habría percatado de ello. 

El Sin Clan no pudo evitar sonreír y se mantuvo unos minutos más antes de dar por finalizada su participación en dicha reunión.  — Regresaré en unos minutos para hablar con usted, capitán. Me gustaría retocar los temas del transporte de la mercancía y la ruta a utilizar... — Utilizó un tono más bajo, se notaba que ahora si estaba siendo más cauteloso que en momentos anteriores.

Keiko también intervino por última vez y sin más oposiciones, era más que claro que la estrategia a seguir ya estaba planteada. Shokan, por el momento, no pretendía hacer uso de sus habilidades sensoriales, dando más prioridad a tomar un buen descanso, pues el tiempo en alta mar era más que difícil.  — Creo que está decidido.  — Comentó en voz alta para confirmar la idea de Kiyoko. 

Finalmente, Shokan se retiró a la zona de dormitorios sin siquiera prestar atención al joven Jinta o al resto de la tripulación, una vez allí decidió pegar el ojo por unos instantes, aunque claro, en su mente había cierta inquietud que lo mantendría ligeramente "despierto", quizá para presenciar mucho antes la llegada al país de los remolinos...
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Cita:Se trata del hermano menor del Shodai Sencho de Kirigakure, Onmyōji Rō, su boda no es más que un enlace político para fortalecer la alianza con Amegakure, consolidando la misma


"Es un pez bastante gordo, ¿Acaso nuestro cliente es un miembro de los rebeldes? O tal vez sea un miembro de la Yakuza... o quizas alguien dentro del propio imperio." Mercer barajaba distintas opciones, intentando analizar este gran misterio. Sin embargo no tenia porque darle mucha vuelta ahora mismo, lo que importaba era como iban a proceder de ahora en adelante, ellos tenian la ventaja de poder anticiparse en el tiempo, sin embargo el hecho de que los tres hermanos se fueran por su lado y actuaran de forma independiente al grupo podia ser una molestia y hechar a perderlo todo, causando el fracaso de la mision que de por sí tenia pinta de que iba a ser en extremo dificil. 

Ya en el bote, el trio partiria adentrandose en el mar, asi no seguian perdiendo el tiempo, mientras tanto podian ir haciendo sus planes de ataque. Mercer escucho la opinion del pelinegro, parecia experimentado y centrado, no parecia de esos que se confiaban en una mision, explayando buenas alternativas de ataque. Por otro lado la tal Airine se veia un poco mas confiada, aceptando acomodarse a cualquier estrategia, eso podia significar exceso de confianza o una gran eficiencia en cualquier problematica, como sea todo parecia que se definiria con la opinion de Mercer. — Hay algunas cuestiones a tener en cuenta. En primer lugar no sabemos que planean aquel trio que se fue por su lado, tal vez ya estan en camino hacia el navio o tal vez les esten esperando en el remolino o el pais helado, no lo sabemos, sus acciones podrian entorpecer nuestros planes. — Mercer miraria a los ojos a ambos compañeros antes de seguir. — En segundo lugar, atacarlos en altamar es peligroso, puesto que son ninjas de Kirigakure, el agua es su especialidad y podria ponernos en desventaja, aunque al mismo tiempo si ellos son conscientes de eso tal vez no se esperen un ataque alli precisamente por lo que acabo de decir. Infiltrarnos en el barco tambien es buena idea, aprovechariamos nuestro tiempo a favor y antes de que ellos siquiera piensen en un plan de defensa nosotros ya la habremos penetrado, pero si las cosas salen mal, estaremos encerrados con ellos en el barco y a no ser que nuestra especialidad sea el combate cuerpo a cuerpo entonces podriamos estar en graves problemas rodeados de enemigos. — Explicaria el Tenbin ¿Pero entonces cual podia ser la solucion?

Contenido Oculto

Una vez orquestado el plan, el grupo partiria hacia su destino, esperando que las piezas se moviesen y se colocasen donde esperaban que asi fuera, y si todo salia segun lo planeado, entonces se posicionarian como lo habian planeado desde un comienzo, priorizando siempre el mantenerse ocultos y a una distancia prudente para no ser descubiertos con facilidad, aprovechando el extenso e inquieto mar para ocultarse debajo.



Resumen: Mercer planea con sus compañeros la emboscada, luego si todo marcha segun lo previsto se posicionaran como lo han planeado.
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GUARDIANES

Los guardianes se tomaban la situación con calma, de nada serbia ser extremadamente precavidos o malgastar recursos y llegar cansados al momento de la verdad. Por eso decidieron dividir los turnos en dos equipos. El primero seria el formado por Shokan y Nagi, que tras dar una vuelta por el navío descansarían en uno de los camarotes que normalmente estaría lleno de marineros; nada por el navío llamo la atención especialmente de los shinobi. Descansar era importante, puesto que por la noche tendrían que cubrir el turno de sus otros dos compañeros. Compañeros los cuales estaban atentos en todo momento.

Jinta se quedo en la cubierta del navío, observando como un centinela la retaguardia de la embarcación a la espera de cualquier inconveniente que pudiera acontecer. Mientras por su parte Kiyoko había accedido a la cocina del barco, que estaba adyacente a la sala común, que en ocasiones ejercía de comedor, en la que el novio se mantenía a la espera, aunque se le notaba sereno, pues no estaba inquieto, se le podía notar un semblante preocupado. La kunoichi de cabello morado podría prepararse un café tranquilamente para despejar la mente durante la mañana.

El capitán y su segundo al mando estarían en la cámara del timón manejando el navío, ellos tambien habían pactado turnos para dividirse mejor la noche y poder descansar un poco. En muchas ocasiones por las noches se optaba por tirar el ancla y aguardar hasta la salida del sol, pero iban con el tiempo justo.

Con la caída del sol se podrían ir produciendo los cambios de turno. Los shinobis irían despertando y relevando a sus compañeros con normalidad, mientras que el capitán aun aguardaría un rato más al mando del timón, hasta dejar más entrada la noche el mando a su oficial para poder descansar un rato, hasta que al amanecer volviera a relevar al buen hombre.

El primer día había sido tranquilo, sin ningún incidente, la planificación de parte de Kirigakure parecía estar siendo exitosa. Los miembros de la comitiva habían podido descansar durante el día y la noche, así como ir charlando entre ellos y la tripulación. No obstante... Un aviso del vice capitán Hotetsu pondría en aviso a todos, aun no había salido el sol, pero poco le faltaba - ¡Atención, estamos a punto de cruzar las costas del País del Remolino, repito, estamos a punto de cruzar las costas del País del Remolino! - Un aviso por prudencia, especialmente por dos razones. Ya la tripulación sabia que la zona cercana al remolino podía ser peliaguda y el barco haría maniobras más bruscas con tal de evitar los arrecifes.


ASALTANTES

El grupo de asesinos se había organizado, por lo menos la mitad de ellos puesto que la otra mitad estaban en paradero desconocido. El que habría terminado de tomar la batuta en la toma de decisiones habría sido Mercer, quien ya con el barco en alta mar comenzaría a organizar el plan de asalto.

- Es un plan sencillo, pero funcional - Comentaría Crow tranquilamente mientras se relajaba controlando el timón de la pequeña embarcación para poder ir poniendo rumbo al punto marcado por Mercer - Bueno podéis dejarme eso a mi, ese tipo de planes son mi especialidad - Recalcaría Airine mostrando una gran confianza en sus capacidades y el plan del propio Tenbin. 

El escuadrón de asesinato no tardaría en pasar por la costa del Remolino con un poco de margen de ventaja a la comitiva del novio. Para cuando cruzaran el estrecho del Remolino el plan se comenzaría al empezar a preparar los jutsus acordados - Seria mejor desplegarnos un poco por los alrededores de la ruta que nos dieron - Comentaría Crow - No creo que la varíen en gran medida, pero tampoco podemos fiarnos de que siguán la ruta con precisión, en el mar pueden haber fácilmente muchos desvíos y variar un poco la ruta, no podemos dejar que pasen por nuestro lado sin que nos demos cuenta - El grupo tenia ciertas facilidades y ventajas para moverse, pero el plan ya estaba en ejecución, el contacto seria inminente. 

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Shokan obtuvo el reposo que tanto estaba necesitando. Ahora, más energizado, se dirigió hacia la cubierta del barco; el anunció de uno de los tripulantes lo tomó por sorpresa a mitad de camino, ocasionando que acelerara el paso para llegar a la zona deseada.

Una vez allí observó toda la cubierta y notó la cercanía de las tierras y que ya estaban próximos a "aquel punto". Las maniobras arriesgadas estaban por comenzar y los indicadores de peligro, claramente, se elevarían. Lo más probable es que Nagi no tardase en llegar también a su lado, por lo cual fue realizando los preparativos de antemano.

Una cadena de sellos sumamente ágil y corta, generó una réplica de sí mismo que sería la encargada de escoltar al joven Nagi hacia un punto es específico; para él no tuvo que dar indicaciones ni mucho menos, pues, de cierta forma, compartían las ideas...

— Sigamos la estrategia al pie de la letra. Nagi ve y explora la zona, no queremos sorpresas. Jinta y yo nos mantendremos cuidando al VIP... — Explicó el Sin Clan, antes de retirarse nuevamente hacia los interiores del barco, una vez allí pretendía designar al joven Jinta la cercana protección del novio, mientras él buscaba una zona con un poco más de visión que pudiese serle de utilidad. — Señor, estamos próximos a llegar al país del remolino. Jinta y yo nos mantendremos cercanos a usted por si las cosas empeoran, pero no lo creo. — Añadió, Shokan a partir de aquella interacción se retiraría de la alcoba para buscar un punto más abierto donde pudiese observar la situación de los alrededores, pero sin crear mucha distancia con el VIP; siempre y cuando fuese aquello posible, de lo contrario, se mantendría en las afueras de la alcoba custodiando el acceso, siendo Jinta el unico con la posibilidad de acceder y salir de ella.


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