Técnica insignia del elemento Seiton.
La luz blanca característica imbuye cualquier jutsu que el usuario ejecute, dándole las propiedades de la naturaleza avanzada. Como beneficio, el jutsu envuelto aumenta, al momento de realizar la técnica, su control de chakra o su velocidad en +15 según sea el caso.
Del cuerpo del usuario se liberan violentamente múltiples llamaradas de fuego que rotan alrededor de él para formar una especie de esfera de cuatro metros de diámetro que le brinda protección y, a su vez, hacer daño al adversario si es que se encuentra en el rango de acción de la técnica. También, si el rival atacó cuerpo a cuerpo o desde una distancia no mayor a cuatro metros, y pierde el choque de técnicas, las flamas se liberarán en su contra para hacerle el daño correspondiente (que será igual a la diferencia de daños entre ambas técnicas).
Como observación adicional, la esfera de fuego no rodea de manera absoluta al ejecutor. Deja pequeñas rendijas entre las corrientes de fuego, mismas desde donde podrá ver lo que ocurre fuera de ella.
n dardo de fuego es despedido de la boca del usuario e, inmediatamente salir, adoptará la silueta de un fénix llameante que perseguirá su objetivo a gran velocidad (+10 de control de chakra) con la finalidad de impactarlo y liberar las llamaradas en su contra.
Desde la espalda de Khal surgirán tres pares de alas compuestas de plumas de luz blanca, simulando la divinidad de los serafines.
Esto es meramente estético y no brinda ninguna ventaja adicional con respecto a tener solamente un par de alas. Este jutsu le concede al usuario la capacidad de volar con libertad hasta una altura de cuarenta metros, además de aumentar su estadística de agilidad en 15 puntos mientras la técnica esté activa.
Los jutsus que tengan propiedades del elemento Seiton aumentarán su control de chakra o velocidad en 5 puntos.