Era un día tranquilo en el país de las aves el cielo estaba libre de nubes, era un excelente día para dar un paseo, sentir el aire la brisa y escuchar a las aves cantar ese canto tan cotidiano tan tranquilo ¿qué podía salir mal en un día como este? Se preguntó el Otenki mientras se alejaba de una aldea en la que estaba y llegaba a una planicie donde todo era llano, por alguna razón no había vida alguna – que hermoso día para entrenar ahh...- dijo mientras el cielo pegaba con fuerza la luz del sol la cual, aunque molestaba un poco al Otenki no se preocupaba tanto después de todo podía cambiar el clima cuando quisiera, después de todo no por nada se apodaba el hijo del clima, era casi como llamarse un semidiós y aunque sabía que existían más como el rara vez había visto alguno después de todo su clan era raro y apreciado por varios, sin duda alguna igual lo era para él.
El otenki se quedaría estático mientras concentraba chakra, mientras miraba a su entorno, después de todo había aprendido a no actuar como la última vez que se había encontrado con un ninja de la nada, al final del día no quería morir o que lo matasen como estuvo la última vez al borde de una posible muerte y si algo pasaba, así como la última vez el shinobi intentaría escapar de algún modo u otro debía de hacerlo por su vida su preciada vida tenía que luchar por convertirse en el mejor ninja posible, ser la mejor versión posible de sí mismo no quería defraudar a sus amigos, familia y seres queridos en general, aunque fuera un mercenario un ninja que cazaba o hacia cosas similares era su forma de ganarse la vida, todo lo que tenía era gracias a aquello y que ayudaba a la gente con sus cultivos era como si fuera enviado a ayudar a los demás y talvez hacer algún otra en esta vida nada estaba escrito.
-si me vuelvo a encontrar con otro ninja como el de la ultima ves intentare dar lo mejor de mi- pensó el Otenki mientras esperaba a que alguien llegara o algo pasara, no quería tener que entrenar por su cuenta o al menos eso quería evitar ya que lo consideraba aburrido, poco real aun que después de todas las caídas que había tenido había aprendido algunas cosas de estas, esperaba no volver a repetir algunas de estas de nuevo.
El otenki se quedaría estático mientras concentraba chakra, mientras miraba a su entorno, después de todo había aprendido a no actuar como la última vez que se había encontrado con un ninja de la nada, al final del día no quería morir o que lo matasen como estuvo la última vez al borde de una posible muerte y si algo pasaba, así como la última vez el shinobi intentaría escapar de algún modo u otro debía de hacerlo por su vida su preciada vida tenía que luchar por convertirse en el mejor ninja posible, ser la mejor versión posible de sí mismo no quería defraudar a sus amigos, familia y seres queridos en general, aunque fuera un mercenario un ninja que cazaba o hacia cosas similares era su forma de ganarse la vida, todo lo que tenía era gracias a aquello y que ayudaba a la gente con sus cultivos era como si fuera enviado a ayudar a los demás y talvez hacer algún otra en esta vida nada estaba escrito.
-si me vuelvo a encontrar con otro ninja como el de la ultima ves intentare dar lo mejor de mi- pensó el Otenki mientras esperaba a que alguien llegara o algo pasara, no quería tener que entrenar por su cuenta o al menos eso quería evitar ya que lo consideraba aburrido, poco real aun que después de todas las caídas que había tenido había aprendido algunas cosas de estas, esperaba no volver a repetir algunas de estas de nuevo.
Narro//Hablo//Pienso
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