Última modificación: 22-10-2022, 09:10 PM por Rohan Mercer.
Aquella tarde el cielo era un completo gris con un tono casi violasceo, se escuchaban relampagos en la lejania sin embargo aun no caian gotas sobre la tierra. Mercer se encontraba en un asentamiento perdido en el vasto Pais de los Fideos, o mas bien fuera de este a unos cien metros escondido entre la copa de unos arboles observando ¿Que observaba? Nada mas y nada menos que a dos bandidos haciendo guardia sobre la puerta de entrada de aquel asentamiento improvisado. Era bastante rudimentario, tenia una muralla hecha de estacas de madera altas y unos edificios que parecian casas de barro, probablemente hechas de ninjutsu doton. ¿Pero porque Mercer estaba vigilando dicho sitio? Bueno no estaba vigilandolo, sino mas bien acechandolo. Al parecer en aquel sitio se habian establecido un grupo de "Rebeldes" sea lo que fuere que significara eso para él quien desconocia aun algunas cosas del mundo, pero fuera por la razon que fuese habian autoridades locales en un pueblo cercano que otorgaban una recompensa a quien se encargase de esos tipos, por lo que era una oportunidad para ganar la paga de la semana para el Tenbin. Normalmente no se pagaba mucho por capturar bandidos de poca monta, pero por alguna razon se pagaba mucho mas por capturar rebeldes, algo que le resultaba curioso a Mercer sin embargo aun no habia investigado mucho del tema.
El joven encapuchado dio un salto hacia la entrada donde se encontraban ambos guardias, aterrizando frente a ellos sin decir ni una palabra y mirandolos estoicamente. Ambos hombres se sorprendieron y alarmaron bruscamente provocando que blandiesen sus armas contra él: — ¿¡QUE RAYOS!? — — ¿¡Quien demonios eres tu!? — Exclamarian al unísono, sin embargo Mercer no diria palabra alguna, y al cabo de dos segundos lo que parecia un hacha se formaria en su antebrazo derecho y velozmente se abalanzo hacia el guardia de la derecha decapitandolo en el acto. El otro sujeto se quedo pasmado del shock pero luego de un segundo intento reaccionar y se lanzo hacia Mercer blandiendo un Tanto contra él, pero este movimiento fue en bano al ser facilmente bloqueado por el hacha de Mercer y con su mano libre tomo del cuello al guardia, levantandolo en el aire y apretandolo con tanta fuerza que con un rapido movimiento termino por romperle el cuello y lo mato al instante. Mercer arrojo el cuerpo a un costado y volteo a ver los dos cadaveres, en su mirada podia notarse una enorme indiferencia.
— Bien, supongo que es hora de entrar... — Susurraria y voltearia nuevamente hacia la puerta doble de la entrada al asentamiento, abriendola de par en par y notando a algunos hombres y mujeres realizando diferentes tareas sin prestarle atencion al mismo hasta que escucharon la puerta abrirse y lo miraron de reojo sin darle importancia por un momento hasta que todos se dieron cuenta que era un desconocido.
![[Imagen: 5pxvtPC.jpg]](https://i.imgur.com/5pxvtPC.jpg)
El joven encapuchado dio un salto hacia la entrada donde se encontraban ambos guardias, aterrizando frente a ellos sin decir ni una palabra y mirandolos estoicamente. Ambos hombres se sorprendieron y alarmaron bruscamente provocando que blandiesen sus armas contra él: — ¿¡QUE RAYOS!? — — ¿¡Quien demonios eres tu!? — Exclamarian al unísono, sin embargo Mercer no diria palabra alguna, y al cabo de dos segundos lo que parecia un hacha se formaria en su antebrazo derecho y velozmente se abalanzo hacia el guardia de la derecha decapitandolo en el acto. El otro sujeto se quedo pasmado del shock pero luego de un segundo intento reaccionar y se lanzo hacia Mercer blandiendo un Tanto contra él, pero este movimiento fue en bano al ser facilmente bloqueado por el hacha de Mercer y con su mano libre tomo del cuello al guardia, levantandolo en el aire y apretandolo con tanta fuerza que con un rapido movimiento termino por romperle el cuello y lo mato al instante. Mercer arrojo el cuerpo a un costado y volteo a ver los dos cadaveres, en su mirada podia notarse una enorme indiferencia.
— Bien, supongo que es hora de entrar... — Susurraria y voltearia nuevamente hacia la puerta doble de la entrada al asentamiento, abriendola de par en par y notando a algunos hombres y mujeres realizando diferentes tareas sin prestarle atencion al mismo hasta que escucharon la puerta abrirse y lo miraron de reojo sin darle importancia por un momento hasta que todos se dieron cuenta que era un desconocido.
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