Rango C: Interceptando el cargamento
LinkIcon Enlace al Post
 03/03 Interiores de la Aldea 


18:00 horas. País del Agua. Coordenadas 20°54'45.54''N 156°14'35.76''W. El punto de encuentro había sido determinado de antemano para que los tres integrantes designados a realizar la misión se reunieran y alistarán los detalles estratégicos de la misma. Bosenmori Mei, Asahi Heizu y Katsuki Kaguya eran los ninjas en cuestión, tres genins de la niebla. No existía alguna especie de jerarquía en cuanto a quien tomara el mando o el liderazgo, todos deberían cooperar en igualdad de condiciones desde sus respectivas trincheras, después de todo, cada uno tenía diferentes áreas de expertise.

Queda poco tiempo de luz solar —. Una afirmación no del todo precisa era realizada por el miembro del clan poseedor del Kekkei Genkai afín de los huesos. En su mano derecha el joven hombre portaba un abanico ornamental, mismo que abría y cerraba cada pocos segundos, señal de que sentía algo de inquietud o, quizás, hasta ansiedad gallega. El chico había llegado una hora antes de lo pactado, en teoría, tendría que esperar un largo rato para que sus dos compañeros llegasen antes de afinar detalles para pasar a la acción. 
 
El departamento de inteligencia les había dado toda la información importante de antemano. El cargamento de drogas llegaría vía marítima, camuflado entre los múltiples contenedores de comercio. La zona portuaria recibía alrededor de 3 ó 4 barcos por noche, el único detalle faltante era precisar en cual de esos barcos se encontraba el objetivo, pero ese deber ya correría a cargo de los solicitados.
 
Supongo que me apresuré demasiado — Concluyó Katsuki. — Ni hablar... a esperar —. Un suspiro de queja acompañaría su oración. Su impaciencia era uno de sus puntos débiles, normalmente despotricaba por tener que esperar pero, ahora, había sido culpa suya el llegar mucho antes de lo pactado. Sin embargo, no hacer nada tampoco era una opción, el Kaguya aprovecharía el tiempo disponible para alistar todos sus utensilios y echar un vistazo, desde su posición en una casa de inteligencia, hacia el muelle. Dicha casa era el punto de reunión, contaba con dos entradas, la principal que quedaba de frente al puerto, y una entrada oculta en la parte posterior, de la cual solo se podía encontrar si conocías su ubicación exacta de antemano.
LinkIcon Enlace al Post
¿Coordenadas? La última vez que Asahi tuvo que leer, entender o ubicarse mediante el uso de coordenadas fue en vidas pasadas. Incluso, podría decirse que estábamos ante un caso aparentemente extraordinario. ¿Quién era el remitente del encargo? ¿Un tryhard, quizá?

El Heizu cruzaba las calles con suma paciencia. No había apuro. La hora y el lugar habían sido determinados con antelación y, como era costumbre para Asahi, se tomó la delicadeza de ser puntual y organizar su llegada. — Mis encuentros cada vez son más variados, variados — comentó al aire con las manos descubiertas. Con cada paso que daba, el clima se volvía un poco más frío. Sus manos se frotaban entre sí para menguar aquella incómoda sensación.

El comentario anterior hacía énfasis en que pasó de encontrarse por las mañanas con Miku y Nao a ver los atardeceres para encargos del imperio. Un cambio bastante drástico; sin embargo, el contexto no siempre era el mismo. Los dos encuentros anteriores no fueron más que actividades meramente sociales, mientras que ahora debía encontrarse con dos personajes más para llevar a cabo una misión de rango B.

¿Quiénes eran estos individuos? Su gran amiga de antaño, Bosenmori Acheron Viajera Mei, y un desconocido. Un tipo de aspecto un tanto dudoso, podría ser un… ¿cueco? La idea aterraba a Asahi con solo pensarlo, pero intentó no ahondar mucho en aquello. Quería mantener su serenidad tanto como pudiese. Finalmente, los pasos del Heizu lo llevaron al punto de encuentro; allí, observó la cabellera rubia del joven Katsuki, quien parecía ser el primero de los tres en llegar.

— Buenas… ¿noches? ¿tardes? — No estaba seguro de qué palabra utilizar. El Heizu hizo una ligera reverencia y tomó asiento posterior a su ingreso a la casa de inteligencia. Allí, solo quedaba esperar por la chica más codiciada de toda Kirigakure, después de Noa, claro. — Soy Asahi Heizu, un placer, placer.

Casi sin saberlo, la crew legendaria estaba por reunirse por décima vez. ¿Sería esta la versión definitiva?
LinkIcon Enlace al Post
Última modificación: 15-06-2024, 03:17 PM por Bosenmori Mei.
Otra vez Asahi, al menos así no volveré a olvidarlo. — Con el otro integrante de la misión tal vez pase algo similar como con el Heizu. Le suena su nombre de algo, pero no es capaz de saber algo concreto de él. Esto pasa ya que tiende a olvidar a personas del pasado si es que no las frecuenta con continuidad. Solo espera sea cómodo trabajar con él.

Tras preparar todo lo correspondiente de su equipo ninja, se marcha de casa. No es de esas personas que tiende a llegar con mucha anticipación, pues cree que esperar es igual a perder el tiempo. Prefiere mantenerse ocupada y aprovechar cada minuto, por lo que tiene todo calculado para aparecer a las 18:00. Más adelante, a lo lejos, es capaz de observar la figura del Heizu, pero no se apura para alcanzarlo. Mientras vaya bien en horario, todo estará bien.

Puntualmente ingresa a la casa de inteligencia por la entrada secreta. Sus compañeros solo pueden verla cuando emerge desde la oscuridad de uno de los rincones. Probablemente utilizó un jutsu de alta velocidad que algunos reclaman la facilidad que otorga para ganarle la espalda al enemigo en un combate, siendo una técnica de fácil aprendizaje pero con resultados letales. Menos mal Mei se aseguró de entrenarla alrededor de seis horas.

Buenas tardes. — La norma educativa indica que esa frase debe usarse con cierta exclamación, pero Acheron no es de estilo. Lamentablemente, en ella no se le puede notar semejante emoción al momento de saludar al resto. Además, supuestamente, aquí solo se encuentran personas serias que quieren completar una misión y subir en la jerarquía shinobi con todas las de la ley, sin atajos.

Así que tú eres Katsuki… — Coloca la diestra en su mentón, analizando al nuevo genin que aparece en esta serie de misiones que está realizando la fémina.

Piensa, piensa y piensa… En un momento, dirige una mirada a Asahi, quien tiene mejor memoria que ella para recordar personas. Por lo tanto, decide solicitar su ayuda en esta oportunidad. — Tengo la ligera sensación de que alguna vez cocinó para nosotros en la playa. ¿Tú recuerdas algo de eso, Asahi? Quizás es un invento involuntario de mi mente.

Con eso es suficiente de presentaciones. Katsuki ya debe saber que ella tiene de nombre Mei. Durante mucho tiempo se negó a dar su nombre real en el ambiente ninja, pero se enteró por ahí que Noa con Asahi ya descubrieron su verdadero nombre de alguna manera poco honesta y lo anduvieron mencionando. Por lo mismo, ya prefiere simplemente darse a conocer como Mei.
[Imagen: ache.gif]
LinkIcon Enlace al Post
No pasaría mucho tiempo antes de que el resto de los integrantes para la misión se presentaran. El primero en hacerlo sería un joven bastante singular, tenía un color de cabello rosado demasiado llamativo, mismo que llevaba trenzado de forma poco masculina, sus ojos eran también del mismo color. En definitiva, era un personaje que llamaba mucho la atención y que daba ciertos aires de afeminado. ~ Ese sujeto.... ¡Es como yo! ~ Una vez que Asahi hubo ingresado en la casa de inteligencia, Katsuki al fin le conoció y el primer pensamiento que pasó por su cabeza es que el joven genin transmitía las mismas vibras cuecas que él.
 
Su contraparte se presentaría como un miembro del clan Heizu, aquellos que eran famosos por su poderosa técnica de pupila. El joven Kaguya le miraría un par de segundos antes de acercarse un par de pasos hacia él con tal de no estar tan distanciados durante su presentación. — Un gusto, Asahi Heizu. Mi nombre es Katsuki Kaguya — Se presentaría para con su par. Justo en ese momento, un suceso inexplicable para toda lógica pasaría en el universo. Era como si el tiempo se hubiera detenido para todos y un par de engranajes se hubieran acoplado a la perfección, sin embargo, aún faltaba faltaba algo, todavía no había logrado una armonía perfecta. 
 
De nueva cuenta, el flujo del tiempo tomaría su cause normal y lo anterior solo quedaría como una extraña sensación para los presentes. No obstante, ninguno de ellos tendría el tiempo suficiente para dedicarle atención a ese inusual acontecimiento, puesto que una nueva voz resoplaría en el interior de la habitación. Katsuki desviaría su mirada y fijaría su atención en la dueña de aquellas palabras, una kunoichi de altura respetable y cabello oscuro. Sin duda alguna era la primera vez que se reunía tanto con Mei como con Asahi, no obstante, una cierta sensación de familiaridad le achacaba su ser. — ¡Buenas tardes! — Justo como el inventor de la speedforce, el Kaguya respondería a su saludo de manera enérgica. Ahora que los tres estaban presentes, el rubio cenizo daría un último golpe a su abanico para cerrarlo por completo y guardarlo dentro de sus vestimentas. 
 
Las siguientes palabras pronunciadas por la Suzume desencadenarían nuevamente el inusual fenómeno de apenas hace algunos instantes. De nueva cuenta el flujo del tiempo se detuvo de manera universal, y junto a aquellos engranes que se había unido recién, se añadía uno más para completar la trinidad. Un sonido como de "click" se manifestó, señal de que había encajado de manera perfecta. Todo había vuelto a su cause natural, las leyes de las física se habían reestablecido y los petes corrían nuevamente peligro. — Así es, soy Katsuki — Afirmó ante el comentario de la fémina. — Entonces tú debes ser Mei... ¿cierto? — Dado que todos habían recibido información de antemano acerca de quienes serían sus compañeros, era normal identificarlos.
 
— ¿Es así? — El Kaguya no sabía exactamente a qué se refería la chica con sus palabras, él nunca había tenido algún puesto de comida en la playa o algo parecido, pero por alguna razón el comentario lo hizo dudar y cuestionarse si realmente estaba hablando con la verdad.
 
Dejadas atrás las trivialidades, era momento de enfocarse más en la misión. Para ello, Katsuki caminaría hacia una mesa cuadrangular que estaba situada en el centro de la habitación. Allí sacaría un pergamino del interior de su holgada camisola y, tras extenderlo, lo desplegaría sobre el respaldo de madera. El plano era una representación a escala de la zona portuaria y señalaba con precisión los puntos de desembarque habituales, así como las bodegas inmediatas en donde guardaban todos los materiales importados. Tras unos segundos en los que todos pudieron apreciar los detalles de la ilustración, se dirigió a sus compañeros   — En cuestión de nada estarán arribando los tres buques, así que... ¿Cómo procedemos? —. Desde su punto de vista había dos o tres maneras distintas de afrontar la misión, podían dividirse y cada uno de ellos lidiar con uno de los barcos, tras confirmar cuál era el que tenía el cargamento, dar una señal al resto. El problema ahí, a diferencia de moverse siempre los tres juntos, es que no era certero si todos contaban con alguna técnica o habilidad que les permitiera identificar el objetivo de manera rápida y precisa, moverse en equipo era la opción menos riesgosa, aunque podrían perder valiosos minutos. Por último, estaba también la posibilidad de atacar directamente las bodegas. ¿Qué sugerirían sus compañeros?.
LinkIcon Enlace al Post
“Vaya, sí que se ve raro… ¿Será una trampa?”, pensó al observar a Katsuki recién entrar a la casa de inteligencia. — El gusto es mío, Katsuki. — No hubo necesidad de recurrir a más formalidades; después de todo, ya había ejecutado una reverencia justo al ingresar a la sala. Finalmente, como pretendía, tomó asiento y esperó la llegada de la última integrante de la Santa Trinidad de Kirigakure.

— Mei — El pelirosa no exclamó con todas sus fuerzas, pero sí empleó un tono de voz ligeramente más alto. El rostro del Heizu no denotaba alegría, pero en su voz se podía percibir un claro agrado en el momento en que la joven hizo acto de presencia.

El joven Genin asintió para acompañar el saludo. — Como sea. — Posteriormente, observó el reloj; la hora marcaba justamente la indicada en la documentación que se les había otorgado, ni un minuto más ni un minuto menos, pero nunca estaba de más un poco de humor. — ¿Eh? — El Heizu se mostró genuinamente sorprendido ante el comentario de Acheron. ¿Ella? ¿Reconocer a alguien? Imposible. — No lo creo. No eres la mejor para recordar personas, personas. — Sonrió ligeramente, aunque muy en su interior, sí que sentía una extraña sensación de haber visto antes al rubio.

— Concuerdo en lo del invento. — Afirmó y calló. Las manos de Asahi se fueron hacia su espalda y elongó un poco los mismos antes de apoyarse sobre la mesa en la que había tomado asiento, acercándose hacia el centro de la habitación. Allí reposaba la información necesaria con respecto a la misión.

— No soy main líder. Ya tuve que hacer de líder en mi misión anterior, le toca a Mei o a ti, si gustas, gustas. — Se limpió las manos. Fue tan rápido que podríamos decir que fue la limpiada de manos más rápida que nunca antes se hubiese suscitado; es más, casi que podría romper un récord logrado por un compatriota del País del Pasillo.
LinkIcon Enlace al Post
El encuentro entre los tres genins fue bastante peculiar, pero también reconfortante. Posiblemente puedan trabajar bien juntos, aunque nunca se sabe, siempre incorporarse a nuevos equipos tiene cierta cuota de dificultad. Hasta ahora fue el personaje de Yusuke quien estuvo colaborando con Mei y Asahi, pero parece que, últimamente, se ha visto en vuelto en un nuevo grupo, aunque aquel solo consta de dos integrantes, él y alguien más. Mei espera que Katsuki pueda ser un buen reemplazo, y quien sabe, capaz hasta sea definitivo. Pero confiarse es un error, los altos mandos de la villa siempre sorprenden en ese tipo de cosas.

Tienes razón. — Es la única respuesta que le da al de cabellos rosas. Ella es consciente de su mala memoria en este tipo de situaciones. Por lo tanto, asume que su creencia es solo producto de su imaginación. Una lástima.

Ya entrando de lleno en lo que es la misión, Katsuki enseña un mapa de la zona portuaria, indicando que se trata de la llegada de tres buques. Es ahí donde está la primera cuestión a resolver. — ¿En todos viene esa droga? Si no, se nos complicará el saber en dónde se encuentra. — Espera que el Kaguya sea capaz de responder esa interrogante. Mientras tanto, piensa en posibles planos a la vez que Asahi se descarta totalmente de ser el capitán del tridente. A la situación que se refiere debe ser a la misión del lago, aunque, si somos sinceros, no es que ahí haya tomado la batuta necesariamente. Tampoco es que vaya a recriminarlo.

Dejemos que Katsuki sea quien nos guíe entonces. — Curiosamente, tal como en aquella oportunidad, se hace a un lado en temas de liderar. Eso sí, la historia se repite, pues eso no significa que no vaya a dar su opinión al respecto.  Al ser tan recta como kunoichi, no le gusta sentirse desplazada, sino que intenta tomar protagonismo y aportar, cree que solo así será capaz de mejorar en su labor como ninja. Es así como le indicó su maestro. Aquellos que simplemente se hacen a un lado y observan, tarde o temprano se estancan y no son capaces de liberar todo su potencial.

Es como si en una guerra, te dedicaras a dar un paseo mientras todo explota a tu alrededor. Imposible de suceder, ¿no?

Quizás podamos ir directamente al mar e infiltrarnos en los buques. Si logramos transformarnos en trabajador y que nos permitan participar en el desembarque, podremos arrebatar la droga de los contenedores en la bodega. — Esto haría que deban dividirse. Pero claro, si es que solo uno de los transportes marítimos tiene la mercancía, todo será más sencillo.

Por último, toma el mapa y lo guarda para ella. — Puedo quedármelo, ¿verdad? — Una debilidad que Acheron posee es baja capacidad de orientación. Le resulta muy fácil perderse, por lo que tener una referencia o algo con lo que guiarse le puede ayudar mucho. Espera que a Katsuki no le moleste, pues, es quien trajo tal documento.

¿Utilizarán su plan? Quizás atacar de forma directa sea más simple, pero podrían involucrar a inocentes.
[Imagen: ache.gif]
LinkIcon Enlace al Post
Una vez que los tres estaban dispuestos a abordar el tema central, el pelirrosa sería el primero en deslindarse de la posibilidad de "liderar" la misión. Claro, como tal no existía la figura de líder en un escuadrón donde todos tenían la misma jerarquía y cada uno de ellos tendría que actuar por igual, pero siempre se agradece el que alguien tome la iniciativa de presentar las ideas y consensuar todo.

No, solo en uno de ellos — Señalaría el rubio ante la pregunta de su compañera. Las primeras impresiones de Katsuki para con los integrantes de su equipo es que parecían ser algo despreocupados, eso le agradaba. No era precisamente muy compatible con aquellos intensitos, además, confiaba en que la tranquilidad que mostraban se debía a una confianza en sus habilidades. 
 
Con la kunoichi delegando también el rol de guía, el Kaguya tendría que asumirlo entonces. No obstante, no sería de cero, Mei compartiría su opinión acerca de cómo encontraba mejor proceder. — También opino que ese es el mejor curso. Si nos confiamos y esperamos a que descarguen todo, podría ser demasiado tarde —. Ya que habían acordado el plan, estaba implícito que tendrían que separarse y que cada uno de ellos iría a infiltrarse en un buque para participar en el desembarque. Aquel que logre infiltrarse y dar con el cargamento de drogas, tendría que dar una señal al resto para que estos acudan a dar soporte y aseguren el objetivo de la misión.
 
Adelante, no hay problema — Katsuki no necesitaba exactamente el mapa, puesto que lo había estudiado lo suficiente durante la hora que estuvo esperando, además, no era precisamente algo complejo de analizar. Con el tiempo apremiando, los ninjas tendría que darse prisa para salir de la casa de seguridad y dirigirse a cada uno de los tres puntos señalados. — Partamos antes de que lleguen los barcos. Recuerden ser discretos y aquel que encuentre el cargamento, tendrá que dar una señal al resto —. Tras remarcar las últimas indicaciones, el Kaguya sería el primero en partir hacia el sitio, no sin antes haber hecho lo necesario para ejecutar un jutsu de transformación y hacerse pasar por un trabajador promedio de la zona portuaria. — Yo iré al punto Norte —. Señalaría para finalizar. 
 
Quedaban alrededor de 3 minutos para que los barcos llegasen al muelle. De hecho, ya se alcanzaban a ver en la lejanía. Con Katsuki tomando el punto Norte, el más alejado de los tres, quedaban el punto medio y el punto sur para repartirse entre el Heizu y la Suzume, quienes debían abordar los respectivos puntos y comenzar con la infiltración.
 
Off Rol
LinkIcon Enlace al Post
— Cargamentos…  — ¿Quizá otra memoria ajena? El Heizu no pudo evitar sentir lo mismo que Mei expresó justamente hace un par de segundos. En su memoria podría recordar parajes nevados donde él y un grupo de personas parecían estar detrás de cargamentos… “Solo debe ser la imaginación, una muy mala jugada”.

Con aquel pensamiento se dispuso a dejar aquello en segundo plano y centrarse sobre la conversación en cuestión. Tanto Mei como Katsuki parecían ser bastante técnicos en cuanto a sus suposiciones. La primera de ellas vino por parte de Mei, era un dato clave. ¿Todos portaban droga o solo algunos? Identificarlos sería el punto más importante de la operación.

Por el momento, el consenso más claro y directo fue el del liderato. Asahi se negó a tomar nuevamente el papel de líder y Mei daba el pase del balón a Katsuki, el chico “nuevo”. Todo estaba decidido, sería el quién guiará al equipo a través de la operación de recuperación de cargamento.

La última intervención de Mei fue importante. Era una idea bastante sólida, aunque Asahi no dudo en tomar la palabra y aportar un poco de sustancia al asunto.  — Escuché de un caso similar…  — Hizo una ligera pausa y señaló ciertas zonas indicadas en el mapa.  — La vigilancia de este tipo de cosas poseen protocolos irregulares. Creo que transformarnos no será suficiente, tengan cuidado con preguntas específicas o algún tipo de protocolo especial.  — Ese fue su añadidura y nuevamente, regresó al silencio para observar a sus compañeros.

Katsuki no tuvo mucho más que aportar. Sin duda, Mei se llevaba la estrella en esta organización. Dicho aquello y con un plan bastante claro y simple, partieron en dirección al puerto. Asahi tomó el aspecto de un trabajador más ¿Quién era exactamente? ¿Le conocía? Y sí, se encargó de enviar al chico de días libres con una pequeña lesión “accidental”. Le favorecía, después de todo ese mismo sujeto había colocado escenas un tanto indebidas en una de las pantallas del centro administrativo del puerto, una vergüenza sin
duda.

— Tomaré el sur.  — Comentó en voz baja, pero llevaba la suficiente fuerza como para que sus compañeros le escucharan. Tal y como dijo, partió hacia el muelle sur, donde a lo lejos pudo ver como su barco se aproximaba.

Datos Off-Rol
LinkIcon Enlace al Post
Ambos compañeros expresan estar de acuerdo con la idea de Mei. Deben dividirse para encontrar cuál es el barco que tiene el cargamento de droga y así no evitar que llegue a los contenedores del puerto. Además, el Kaguya accede a darle el mapa a la muchacha, por lo que esta se queda más tranquila. No lo necesita para abordar el navío en mar abierto, pero sí luego en caso de tener que moverse por tierra firme.

De acuerdo, iré al que está en el centro. — Es el más complejo de interceptar, pues significa que pueden verte los transportes de los costados, aunque, afortunadamente, cada barco no se encuentra demasiado junto, así que tiene chance de infiltrarse.

Los tres se separan y Mei se lanza al mar. Primero solo corre por sobre el agua concentrando chakra en sus pies, pero una vez ya ve a lo lejos el buque, realiza sellos manuales y crea aquella esfera alrededor de su cabeza que le permite respirar bajo el agua. Es imposible que no se sienta algo intranquila al hacerlo, pues recuerda la anterior misión en donde fue atacada por el monstruo del lago mientras buceaba, quedando fuera de combate por el resto del día. Sin embargo, no puede dejarse vencer por un leve temor, así que desciende y avanza hasta su objetivo.

Tras largos minutos, logra infiltrarse sin ser vista en la zona trasera del barco. Concentra chakra en sus extremidades para escalar y abordarlo. Rápidamente identifica a un trabajador que también funciona de guardia. Lo toma por sorpresa y le golpea el rostro, buscando impactar su cabeza contra un cargamento, dejándolo fuera de combate. Sin perder ni un segundo, utiliza hilos ninjas para amarrarlo y dejarlo colgando por fuera del navío, casi como si de Spiderman se tratara.

El ruido ocasionado por el golpe llamó la atención de otro que se encontraba cerca, pero cuando aparece en escena, se encuentra curiosamente con su compañero. Este se trata de Mei, quien ha utilizado el jutsu de transformación para imitar su apariencia. Además, el hilo que usó para colgar al otro es demasiado fino, por lo que le resulta imposible verlo amarrado a la baranda.

Disculpa, tropecé y me golpeé. No ha ocurrido nada más. — Su voz no suena muy similar a una. Recordemos que este jutsu no imita la voz, por lo que le toca fingir. Aparentemente, el contrario confía y no ve nada raro. Se va y nuestra protagonista respira tranquila.

Ahora, la idea es movilizarse y buscar el supuesto cargamento. ¿Cuánta gente se encuentra a bordo? ¿Habrá solo humildes transportistas marítimos o estarán los infiltrados que quieren asegurarse de que la droga llegue a puerto? No soy yo quien debe dar esas respuestas.

Off Rol
[Imagen: ache.gif]
LinkIcon Enlace al Post
Katsuki había tomado el punto Norte, Asahi el Sur y el Medio sería tomado por Mei. Cada uno de estos partió siguiendo lo acordado previamente y tomando sus respectivas precauciones, siendo la fémina la que actuaría más como se espera de un ninja en labores. En cambio, ambos chicos habían sido más displicentes, el Heizu al menos tuvo el detalle de dejar incapacitado temporalmente a un trabajador y hacerse pasar por él para cubrir ese espacio, pero el Kaguya tan solo se había adoptado una apariencia al azar, sí, muy común a la de un trabajador promedio, pero no dejaba de ser un físico random, afortunadamente su falta de experiencia no tendría mayores repercusiones pues, en su barco, no pasaría la gran cosa.
 
Habiéndose infiltrado en la tripulación, el rubio escucharía como la persona encargada de logística daba las instrucciones correspondientes para empezar a descargar el cargamento y llevarlo a la bodega número 12. Eran cerca de 50 contenedores en forma de cubo, todos con un tamaño de 2 metros de lado. — ¡Venga, rápido!. ¡Entre más pronto descarguemos esto, más pronto estaremos bebiendo en el bar! — Clamó el encargado y todos los trabajadores replicaron con ánimo a sus palabras para ponerse manos a la obra. El descenso de la mercancía se produjo tan rápido como se lo permitían los obreros, ninguno de ellos era particularmente cuidado, de hecho, hasta parecían algo burdos en su labor. Tampoco parecía haber alguna actitud sospechosa de ningún tipo, pero Katsuki no podía fiarse solamente en lo que veía. A cada contenedor que tuvo la oportunidad de trasladar, medio levantaba una de las paredes para verificar el contenido y en todas había mercancía textil, ropa, sábanas, cortinas y demás cosas afines. — Parece que el objetivo no está de mi parte —. Concluyó para si mismo.
                                                                                                                                                                                                                                               
Dale, Waterman. Deja de tontear y apresúrate que el barco casi llega —. En el muelle Sur el encargado se dirigía hacia el pelirrosa recién transformado en su nueva apariencia. El buque correspondiente estaba a punto de llegar. Este se trataba de una embarcación de pesca y desde luego contaba con un gran número de trabajadores. La mercancía se trasladaba en unos contenedores especiales cubiertos de hielo y, desde luego, la droga no se encontraría ahí, pero eso es algo que el introvertido genin tendría que descubrir por su cuenta.
 
Por su parte, en el muelle medio. La Bosenmori ya infiltrada a la perfección, tendría su primera interacción con un miembro de la tripulación. — Que no se repita, no hay espacio para los descuidos. Especialmente hoy... — El hombre a cargo no dijo más palabras que esas, al menos no en ese momento y simplemente se dirigiría hacia la parte delantera del buque, donde ya aguardaban el resto de los trabajadores. No sin antes indicarle con un gesto de la cabeza a la kunoichi, transformada, que lo siguiese. En este barco había un total de 16 obreros, contando al encargado y a la ninja infiltrada. No había ningún civil extra y aunque la atmósfera no parecía ser particularmente diferente a los otros dos navíos, nadie decía nada fuera de la comunicación básica. El hombre a cargo se encargaría de dar las instrucciones finales una vez que el buque llegara a puerto. — Tan rápido como se pueda y sin errores. Terminamos y nos vamos todos ¿entendido? —. Además de esas palabras, también daría algunas indicaciones especiales. En total eran solamente 12 contenedores los que tendrían que colocar en la bodega número 6, pero era particularmente detallista en el orden en que se acomodarían. Las cajas d, e ,f y g serían transportadas y colocadas al medio de todo, mientras que el resto de las cajas las rodearían o se colocarían por sobre encima de estas. Otro aspecto importante es que todas estaban selladas y acordonadas, había que ser muy ingenioso o impetuoso para verificar el contenido. ¿Cómo lo averiguaría la Suzume?.
LinkIcon Enlace al Post
Los dos Shinobis y la Kunoichi se separaron después de aquel corto intercambio de palabras. Asahi dirigió sus pasos hacia el puerto sur, donde no tuvo muchas dificultades para pasar desapercibido debido al plan que armó con antelación. — Buenas tardes. — Saludó con firmeza y avanzó entre los pocos cercos de seguridad que rodeaban la entrada principal del muelle.

El barco no tardó en dejar caer sus anclas y detenerse a un costado del muelle sur. La tripulación se movilizó con rapidez y rodearon el cargamento respectivo de dicho navío. El capitán de obras a cargo de la logística en dicho turno alzó su voz por encima de los demás tripulantes y colaboradores, claro está, después de haberle llamado por su nombre: “Waterman”. — Señores, quiero una descarga limpia y sin errores. — Solicitó con un tono de voz amenazante. — Cualquiera que tenga la osadía de ser lo suficientemente torpe como para hacerme salir un minuto más tarde de lo que indica mi turno pagará con su plaza de trabajo. ¿Entendidos? — Toda la tripulación asintió y pisaron al unísono, menos Asahi, claro, que no comprendía del todo las costumbres en aquel muelle.

El encargado dio una ligera mirada al de cabello pelirosa, pero no fue más allá. — Eso estuvo cerca… — Susurró casi para sus adentros. El Heizu entonces avanzó hacia los contenedores que debían descargar. Uno de los tantos tripulantes dio acceso a los miembros de logística del puerto, quienes revisaron la carga casi de inmediato.

Las cajas cubiertas de hielo se deslizaban con suma facilidad y solo era cuestión de aplicar un poco de fuerza para dirigir la trayectoria de las mismas. El primer miembro del muelle detenía la carga con ambas manos y revisaba las etiquetas; a los costados del contenedor yacían etiquetas pegadas a láminas de zinc que contenían toda la información. — ¡Comida! ¡Muelle 8 y 7! — Exclamó y empujó la carga rampa abajo hacia el siguiente manipulador.

Consecuentemente, la carga finalmente llegó a Asahi, quien manipulaba la carretilla de carga. Echó un pequeño vistazo a las etiquetas y al contenido, pues previamente había sido “abierto” por uno de los miembros para realizar una verificación visual. — Está vacío. — Pensó en voz alta mientras empujaba la carretilla en dirección a los muelles indicados. Para suerte del pelirosa, aquellos muelles estaban de camino hacia el Muelle Central y, posteriormente, el sur, así que allí podría toparse con sus compañeros de ser el caso.

Off-Rol
LinkIcon Enlace al Post
Última modificación: 29-06-2024, 08:29 PM por Bosenmori Mei.
Tan solo recibe un pequeño aviso por parte del nuevo personaje, lo cual tranquiliza a la fémina. Esta obedece a la señal y sigue a aquel hombre, entendiendo que puede tratarse de alguien alto en la jerarquía, pues rápidamente se caracteriza por dar órdenes al resto. — Así que tú serás mi fuente de información… — Podría decirse que es algo incómodo que la comunicación sea tan estricta, pero en verdad es algo que le acomoda mucho a ella en particular. Mientras menos le hagan hablar mientras finge ser otra persona, mucho mejor. Además, desconoce si entre ellos se conocen de antes y ubican más o menos sus formas de hablar, palabras más usadas, metodologías de trabajo.

Por lo mismo, debe actuar rápido. Escucha atenta todas las indicaciones, no dejando pasar el detalle de que sean tan específicas. Ella nunca ha trabajado en algo así, así que no puede simplemente descartar que así sea todos los días. Dudar para ella en esta oportunidad es lo normal, no tratándose de un poder peligroso que en ocasiones ayuda a los personajes a hacer siempre lo que más les conviene. No, diría que ninguno de los tres protagonistas de esta misión haría algo como eso. Bueno, quizás cierto pelirrosa sí… Quién sabe.

A la orden. — Indica, pero no es más que una vil mentira. Hace el amago de seguir al resto de trabajadores para comenzar a mover los contenedores debido a la inminente llegada al puerto.

Pero no, solo quiso despistar, pues nuevamente sus pasos la llevan hasta el tipo de la orden. Escucha por ahí que algunos tienden a llamarlo “El Demandante”, aunque no habrá tiempo para que Mei descubra si es digno de ese apodo o no. Su trabajo aquí es otro.

Quizás el otro se sorprenda al ver como uno de sus trabajadores se posiciona a su lado y no está haciendo lo que debe. Pero de manera muy cautelosa, un cuchillo presiona la caja toráxica del interrogado, en señal de amenaza. Con solo presionar un poco, podría apuñalarlo. ¿Querrá alzar la voz y tentar a la suerte? Mei se caracteriza por ser una kunoichi que, debido a su enseñanza en cómo ser un ninja, no tiene pizca de piedad con aquellos que considera “los malos”.

Una de las cualidades que ella posee es el de utilizar su voz de distintas maneras. Sin la necesidad de realizar algún sello manual, es capaz de elegir quién escucha su voz y quién no. Aunque mueva sutilmente los labios, solo el amenazado al lado suyo es capaz de oírla. Por lo tanto, el resto de individuos que se mueva por los alrededores solo verá a un jefe y un subordinado juntos, quizás charlando del trabajo o solo observando el mar.

Dime específicamente qué escondes en los contenedores. ¿Por qué tanto énfasis en cómo deben ser colocados? A simple, vista todos sin iguales. — Acto seguido, presiona un poco el kunai, amenazando de forma más severa. — Y no se te ocurra mentir.

De más está aclarar que esto es peligroso. Recordemos que un solo barco es el elegido. Si llega a ser ese, quien sabe con cuántos enemigos estará rodeada la Suzume. Sin embargo, miedo es una palabra que su vocabulario tiende a desconocer.
LinkIcon Enlace al Post
A veces las cosas no resultan como uno lo planea. El retiro tranquilo para prevenir la tempestad que no tardaba en avecinarse era una opción muy sabia por parte de aquel que estaba detrás del personaje, no obstante la presión ejercida por los medios andinos truncaron sus planes. Aunque eso sería historia para otra ocasión, así que mejor regresemos al escenario protagonizado por la tercia de genins de la niebla.
 
En el muelle Norte no se había presentado novedad alguna, Katsuki seguía apresurado en sus labores de carga y descarga de contenedores y cada vez que le tocaba apilar alguno en la bodega, se las arreglaba para dar un vistazo al interior, pero en ningún caso encontró algo siquiera remotamente sospechoso, todo estaba en orden. « Supongo que no vale la pena perder más tiempo acá. ¿Debería apresurarme a apoyar a otro lado? ». Habiendo descartado la posibilidad de que el cargamento de droga se encontrara en su sector, ahora se debatía si abandonar su posición para apoyar, o esperar alguna señal de sus compañeros.
 
Prácticamente la misma situación se presentaría en el sector Sur, donde Asahi completaría con éxito su infiltración y sus labores de reconocimiento. Tampoco había algo que fuese particularmente destacado o que le hiciese pensar que las drogas infiltradas se encontraban allí. Habiendo descartado dos de los tres lugares, la respuesta de cual era el verdadero objetivo resultaba obvia. Ni el Heizu ni el Kaguya sabían de la situación en los otros barcos, pero, para ventaja de ellos, ambos se encontraban en los extremos, así que si decidían partir hacia el siguiente objetivo, llegarían para apoyar a Mei en el muelle central.
 
Precisamente hablando de la Bosenmori, sería esta quien se encargaría de tomar la iniciativa para esclarecer el paradero del objetivo. Como si de alguna especie de habilidad pasiva producto de su clan se tratase, se dirigió hacia el sospechoso comandante para interrogarlo a la par que le amenazaba con un arma blanca.

¿Qu- Qué diablos estas haciendo? — Sorprendido por la repentina situación, el hombre expresó en voz baja, pues era consciente de que su vida estaba siendo amenazada. — No sabes en lo que te estás metiendo Bellingham —. Un poco más calmado, trató de voltear la situación amenazando a su contraparte.  — Si hacemos mal este trabajo, el cartel tomará represalias —. Esa era toda la información que la Suzume necesitaría para hilar los cabos. Ahora ella decidiría el como proceder.
LinkIcon Enlace al Post
Apenas el otro comienza a hablar, Mei presiona un poco más con el kunai, siendo este un pequeño aviso de que utilice un tono bajo, nadie a excepción de ella puede oírlo. No es muy directo en sus palabras, pero da a entender que ese es el barco correcto. — Solo relájate y respóndeme. Si cooperas conmigo, me aseguraré personalmente de que nadie pueda hacerte daño. Pero si no, no podré prometerte de que yo no te haré vivir el infierno. — El muelle ya se ve a lo lejos, intenta ver a sus compañeros en los alrededores, pues obviamente necesitará refuerzos.

¿Cuántos de los trabajadores aquí son peligrosos? ¿Trabajas con ellos? — No sería raro que alguien o más de uno se dé cuenta de que algo anda mal con el comandante del navío y un humilde obrero. Normalmente se tiene cierta envidia cuando un compañero de trabajo puede holgazanear mientras uno trabaja, por lo que Mei intenta ser rápida en la recolección de información. Solo necesita un dato más antes de empezar con la acción. Ser pasiva a la hora de hacer misiones no es su fuerte, siempre intenta destacar.

Por último, dime los contenedores en donde está la droga. No intentes engañarme, no estoy sola. Si crees que me superarán en número, estás equivocado. — Esto es solo una mentira, pues solo tiene a dos genins consigo, pero obviamente no le dirá la verdad. Hay oportunidad en que una palabra bien usada es mucho más efectiva que técnicas con efecto de muerte o pasivas de sentencia. Ser un ninja va más allá de solo realizar ninjutsu, genjutsu o taijutsu, se necesita mucho más e ignorarlo puede ser motivo de derrota.

Una vez haya escuchado lo necesario por parte del interrogado, toma una bengala de sus bolsillos y la lanza al cielo, queriendo dar un aviso a sus compañeros. Debería ser suficiente para que entiendan que ese es el barco objetivo del cual deben evitar se lleven el cargamento.

Lo siguiente es rodear el cuello ajeno con el brazo izquierdo, tomándolo de rehén. La otra mano, aquella que sostiene el kunai, apunta directamente el rostro del pobre hombre. Aquí es donde Mei alza la voz, queriendo que todos se fijen en ella. De hecho, no tiene problema con desactivar su jutsu de transformación, dándoles vistas de su verdadera apariencia. — Que nadie se mueva, o este tipo conocerá a sus antepasados antes que todos. — ¿Servirá la amenaza? Desconoce cómo trabajan ellos, por lo que hay chance de que haya tipos que tengan cero vínculo con el rehén y no les importa su pérdida.

Las cajas donde pueda verlas, ¿les queda claro? — La pregunta va unida a una especie de grito que expulsa chakra directamente desde sus cuerdas vocales, ejerciendo presión en el cuerpo de todos los presentes y ocasionándoles cierto dolor. Es una ninja, ya todos pueden saberlo, pues ella lo usa como método de intimidación.

La pregunta es, ¿con qué gente está tratando abordada en ese barco? Ya pronto lo descubrirá.
[Imagen: ache.gif]
LinkIcon Enlace al Post
— Muelle 7… Muelle 7… ¡Muelle 7! — exclamó con facilidad el Heizu al ver el letrero por encima del acceso de aquel muelle. Definitivamente, era el 7 de aquel sitio.

— Buenas tardes, traigo una carga para el muelle número 7, se trata de comida. — Expuso el Heizu mientras, a paso lento, continuaba empujando la caja de suministros hacia el interior de la bodega correspondiente. Los colegas allí le sonrieron y, extrañamente, se burlaban de él sin aparente razón. — ¿Qué es tan gracioso? — preguntó el Heizu disfrazado.

A lo que sus compañeros simplemente negaron con la cabeza y ademanes, mientras entre risas respondían. — Nada, Ethson, nada. — Sin mucho más que dialogar, el grupo dentro de la bodega en el muelle número 7 tomaría las cajas y las llevaría a su respectivo sitio. Ahora, con las manos libres, se dio media vuelta y continuó por las líneas enmarcadas hacia el muelle central, que de seguro debería ser el 3 o 2, quizá.

A pocos metros de haber partido desde el muelle 7, la bengala se alzó por encima de los contenedores que, desde allí, tapaban un poco la vista del panorama para el Heizu. “¿Tan pronto?” Pensó con cierta preocupación Asahi, quien aceleró el paso e intentó acercarse al muelle central lo más rápido posible. De hecho, era su especialidad caminar a una velocidad moderada sin levantar sospechas de que, en efecto, era un Shinobi.

La situación parecía apuntar a que todo escalaría rápidamente, por eso, tomó una vara de metal que se encontraba reposando a lo largo del camino y la resguardó sobre la carretilla ahora vacía. El barco de Mei de seguro encallaría dentro de poco y debía estar allí para brindar ayuda, sin embargo, los demás colaboradores de los muelles más cercanos tanto del propio muelle central ya empezaban a agruparse a lo largo y ancho del muelle central, justamente en la sección designada para el desembarque de aquel barco. ¿Acaso Mei había hecho una mala jugada? Era dudoso, ella no era alguien que solía equivocarse así sin más.
Salto de foro:

Usuarios navegando en este tema: 6 invitado(s)