[Común] Las costumbres jamas se pierden [Priv. Noelia]

En los adentros del país de la nube, en aquella aldea que parecía que era capaz de elevarse hasta el cielo, existían clanes de gran peso en su historia, como el Yotsuki, Arashi, otros que tienen una gran historia que va cambiando su rumbo a lo largo del tiempo, como los chinoike, clanes que descendieron de guerreros formidables, como el Tajuken y muchos otros más con habilidades increíbles e interminables que formaban parte de la gran familia de la aldea de la nube.

Yamuro es curioso por naturaleza, lleno de deseos de experimentar nuevas cosas y observar algo nuevo cada día, hoy, se encontraba en estas tierras no para descifrar sus secretos, no para recrear males pasados, sino para aprender sobre ella aún más de lo que ya sabía por defecto desde nacimiento.

Encontraría una forma de investigar sobre este nuevo descubrimiento, algunas personas al pasar lo miraban como un hombre normal y corriente, aunque se debía destacar su altura, estaba muy cerca de medir 2 metros y bueno, eso se tenia en cuenta que era antinaturalidad no?.

Sin saber que rumbo tomar se dio a la tarea de ver un templo, no tenía idea de que era, dependía mucho de hecho, las creencias de la humanidad varían desde santos y esculturas sin significado hasta dioses y seres que ellos creían primordiales. Sin embargo le entro la curiosidad y como vio la puerta medio abierta entró sin hacer mucho ruido y se dispuso a ver las maravillas. -Esta hermoso-. Admitió sonriendo un poco y olfateando como ellos mantenían una temática culta y sagrada.

Noelia está vivía casi a las afueras de Kumogakure no sato, un poco más específico en las montañas negras donde era complicado llegar a ese lugar pero algunos monjes o sacerdotisa (como en este caso) que salía de aquellas montañas para visitar a unos familiares medio cercanos a ella, después de casi un dia de viaje llego a la ciudad donde algunas personas la miraban por su atuendo aunque está solo ignoraba las miradas, ella solo sostenía un pequeño papel con la dirección que apenas lograba entender.

Está caminaba por la ciudad hasta que vio un tembló donde vio como un chico bastante alto entro, supuso que el era residente de aquel templo por lo que lo siguió hasta adentro y topo un poco la espalda pues no hubiera llegado al hombro con su humilde estatura de 1,65.

-disculpe..sabe el nombre de este templo?..creo que ando perdida...-dijo mientras miraba a su alrededor como todo estaba bien ordenado y con un olor bastante agradable, está aún conservaba su papel en mano por cualquier cosa.

Kumo está plagada de templos, el conocimiento que tenía Yamuro de aquel era simplemente nulo, no tenía conocimiento de dioses tampoco además del sujeto que se autoproclamó kami-sama hace mucho tiempo atrás, los únicos conocimientos que tenia era lo que significan esos lugares para los devotos.

En ese templo había un aroma a...canela?, especias?, flores?, justamente las 3, tal ves en rituales o ceremonias?, ni el mismo sabía la razón de porque se había metido allí, le había picado la curiosidad y no tenía la menor idea de quien estaba allí o quien se encontraría en el trayecto. Sumido en sus pensamientos sobre el lugar no pudo notar la presencia de una chica acercándose, muy raro de el sabiendo que sabe todo lo que pasa a 10 metros alrededor de el, aunque safarze una vez de aquella percepción no era nada malo, es más, era un recordatorio de no meterse tanto en sus pensamientos, lo tocaron y se volteó. -Buenos días señorita, no, no me sé el nombre del templo, nisiquiera pertenezco aquí, entré por curiosidad y su situación no se diferencia mucho de la mía-. Admitió teniendo una pequeña sonrisa en el proceso.

-Disculpe, usted vive en un templo?, es que sus ropajes son muy característicos de las sacerdotisas-. Preguntó esperando una respuesta, igualmente no iba a sacar nada de allí porque la chica había demostrado que no sabía nada de aquel templo.

Está tuvo que alzar la mirada cuando el chico se volteo para responder a su pregunta, realmente era alto..decidió quitarse aquellos pensamiento de encima y se dedicó a escuchar lo que el decía.

-Buen día..disculpe por haberlo interrumpido -esta se disculpo por lo de hace rato aunque no fuera nada, pero sentía que debía hacerlo, está mantuvo un semblante serio- y si..respondiendo a su pregunta si, creci en un templo y soy una sacerdotisa del Clan Miroku..

Está noto en el aire aromas de inciensos de canela, lavanda, flores entre otro más pues eso era comun en los templos, muchos venian a los templos a rezar por seres queridos, por algun milagro o simplemente adorar a sus dioses. La chica desvío un poco la mirada del chico para poder visualizar de mejor manera y lograr ver así sea algo familiar para saber que ese templo era de su familia, pero no logro ver nada, se puso a pensar si deberia entrar o en salir y preguntar a algunas prendas que caminaran cerca.

Última modificación: 25-04-2024, 06:03 PM por Yamuro.

La chica era bastante baja, no sabía si edad pero debía ser...18-19 años?, no tenía idea pero su educación era avanzada, debía estar en una familia de alta clase o de gran importancia para la aldea, y efectivamente pertenecía a un clan, al Miroku, ni una simple palabra de este.

-Se nota, clan Miroku...emmm...ni idea querida, no se de cuál clan hablas-. Comentó tratando de indagar en sus recuerdos pero nada le salía. -Peeero, debe ser divertido tener un clan en el cual confiar no?-. Le pregunto para ver si había alguien cerca de allí.

Visiblemente no había nadie, pero Yamuro tenía dotes de percepción de chakra, encontrarlos no sería difícil. Desplegó una técnica sensorial para poder encontrar presencias y efectivamente, encontró una cerca en los adentros del templo. -Estan por allá, vente, hay que ver de quien se trata-. Dijo tomando la muñeca de Noelia y yenvandola hacia los adentros del templo, como si conociese el lugar podía divagar tranquilamente por el. -Por cierto, no me presenté, que grosero, mi Nombre es Yamuro y el tuyo sacerdotisa?-. Preguntó tratando de saber el nombre de su acompañante.

Kanchi no Jutsu

Rango B

Aprendida en 2024-01-08 16:39:24

ID: TAN301

SELLOS: UNO

TANSAKUJUTSU

Tras concentrarse y mantener un sello, el shinobi es capaz de detectar el chakra acumulado en un radio en metros igual a a la mitad de su Presencia (redondeando hacia abajo). Así, el ninja puede distinguir a los individuos dentro de su rango de acción según su cantidad de chakra y el color, así como la dirección en la que se mueven.
Rango A: No necesita mantener un sello, pero sí concentrarse durante el proceso pudiendo sólo realizar el esfuerzo de caminar. El rango pasa a ser el atributo Presencia.
Rango A+: Puede utilizarse sin necesidad concentración absoluta (se pueden hacer otros usos de chakra), pero el rango es un cuarto de la Presencia.
Se puede detectar un rastro de chakra y seguirlo, dentro de una línea temporal.

Coste: 20 Chakra por turno

Última modificación: 25-04-2024, 06:29 PM por Noelia.

Era de suponer que su clan no era tan conocido igual solamente los más religiosos tenían un leve conocimiento de ellos pues la mayoría de su clan se encontraba en las montañas negras, pocos (como a la familia que iba a visitar) lograron a sentarse en la ciudad.

-si supongo..aunque debes seguir con las tradiciones e educación que los mayores enseñan..

Cuando terminó de hablar, el chico hablo diciendo técnicamente que si había personas en ese lugar y enseguida la sujeto de su muñeca llevándola más adentro del templo, no supo cómo reaccionar solamente lo siguió en silencio esperando que la gente que se encontraran adentro fuera su familia y no algún otro clan.

-me llamo Noelia Miroku mucho gusto en conocerlo -hablo respondiendo a la pregunta del joven Yamuro.-

La chica dijo que estar en un clan significaba estar de acuerdo con todo lo que se haga dentro de el, seguir tradiciones y educación que los mayores instruyeran, palabras que dejaron en el joven un pensamiento bastante alturista sobre la ideología de estos. -Aunque debes tener en cuenta algo...toda tradición familiar se rompe, y nunca es malo, siempre es bueno un cambio para ustedes, como personas-. Dijo sonriéndole un poco procurando el entendimiento en sus palabras.

El chico la tomó de la muñeca y fue a los adentros del templo, fue una actitud bastante apresurada, incluso el lo entendía, pero descubrir de quién era tal estructura le interesaba más que dus propias acciones, aunque algo aue le llamo la atención fue que no se había presentado, lo hizo, y al final la chica reveló su nombre también, el cual era Noelia. -Noelia...hermoso nombre-. Dijo siendo amigable y positivo.

Una vez adentro de vio a un hombre con una bata, un atuendo de sacerdote que en cuanto vió a Noelia se sorprendió y fue directamente a atender a los recién llegados. -Noelia?, estás aquí, hay te extrañe bastante-. Dijo aquel sacerdote para abrazarla, el mismo Yamuro no sabía de quién se trataba pero podría ser que la chica sí. -Mi niña que te trae por aquí hoy?-. Preguntó, aunque por respeto también saludo a Yamuro, quien le respondió el saludo con una sonrisa.

PD: El NPC lo puedes usar tu también, es porque no conozco a tu familia y puedes perfectamente utilizarlo

Está sonrió un poco cuando esté dijo que su nombre era hermoso, no sabía que decir así que solo asintió con la cabeza y siguió el camino que poco a poco se le hacía algo familiar, recordaba estar corriendo y riendo siguiendo a su tío el cual era más divertido que su aburrido padre que solamente los miraba jugar desde lejos, pero no paso mucho tiempo cuando lo reconoció y el a ella r lo que se soltó suavemente del agarre del joven para abrazar a su familiar.

-Tio Shinsuke..yo igual lo extrañaba mucho -dijo sonriendo por un pequeño momento se olvidó del joven que la acompañaba pero realmente tenía muchos años sin verlo- vine de visita, mamá al fin me dió permiso para que pueda viajar yo sola, y bueno el es Yamuro tal vez debería darle un recorrido, lo encontré en la entrada del templo -presento al chico ante su tío que ya estaba algo mayor (alrededor de casi unos 48 años) pero que aun asi se veia fuerte.- Muy bien..vengan pasen, les invitare una taza de té -hablo el señor señalando una puerta, realmente la visita de la hoven le habia alegrado el dia al señor.-

El hombre parecía bastante amable con Noelia, desprendía un calor reconfortante de paternidad?, bueno, es algo bastante característico de los tíos con sus sobrinos pero tanto?, debía aprender más de cómo simpatizar con seres queridos, a pensar de no tener ni uno. 

Soltó a Noelia de manera rápida para que el sacerdote la pudiese abrazar, según sus palabras hace tiempo no la veía y en su mirada estaba el reflejo de querer compartir más con ella. Yamuro no quiso hablar para no romper el momento familiar pero al ser presentado no podía dejar pasar que estaba frente a alguien mayor. -Gusto en conocerlo señor-. Dijo dando una reverencia en señal de respeto hacia su persona, Yamuro no tenía relación alguna con los templos o religiones más allá de lo que dijeran sus ropajes que se parecían un poco a los de un monje, el sujeto les invito a tomar té adentro del templo, sin embargo, el albino no quería cruzar la puerta, no sin antes que ellos pasarán primero. -Lo siento, pero Damas y señores primero-. Dijo amablemente defiendo el paso, cuando entraran ya posteriormente lo haría el, se quedaría admirando el lugar con detenimiento una vez entrar.


El era un sujeto generalmente amable, sabía lo más profundo de los modales, fue creado con eso en mente, no querían que fuese una máquina exterminadora sin más, sino, un ser consciente, que fuese amable con los demás y que defendiera los ideales imperialistas por convicción propia, no porque otros se lo dijeran, al final cumplió todas menos una, la respuesta es la que ya todos sabían.

El mayor solo sonrió ante los excelentes modales del chico- Que buen muchacho vengan apuren..-dijo mientras entraba primero seguido por Noelia y ya de suponer al ultimo Yamuro, la joven solo empezo a mirar a su alrededor con nostalgia recordando como corria siendo seguida por su tio mientras su madre sonria mirandolos de lejos, buenos tiempos aquellos, en fin una vez llegaron a la sala el señor con rapidez empezo a hervir en una cantina agua, para poder preparar el te- Realmente fue una gran sorpresa tu visita..

-si tío..quería venir antes pero mamá no dejaba, ya sabes..tenía miedo de que algo me pasará en el camino -le respondió con una sonrisa que pocos veían en su rostro, pero a decir verdad a ella no le incomodaba la presencia del chico- y dígame..cómo estás las cosas por aquí? Si cuida de su salud? -pregunto la joven a su tío, el cual asentía con la cabeza ante sus preguntas dando a entender que todo estaba bien y en orden. Al poco rato el agua  (ya con el té) empezó a hervir y el sirvió en las tres tazas un poco a cada quien y dejo la cantina en medio de la mesa- Es té negro, muy saludable.u

Después de cederle el paso a aquellas personas dedicadas en cuerpo y alma a sus templos a aquella habitación donde podrían descansar suficientemente, Yamuro aceleraría un poco el paso después de que pasaran la puerta, cruzando la y cerrandola en el proceso. -Tiene buenos gustos minimalistas señor-. Admitió mirando el lugar donde al parecer las memorias de Noelia reposaban por allí, momentos en su niñez de pura felicidad que deseaba volver a sentir.

El hombre puso a hervir agua en la cantina, intentando preparar plácidamente el té para ambos jóvenes, el té era la bebida favorita de Yamuro, a pesar que del resto de personas les gustara la cerveza o el vino el no era de beber alcohol, a pesar de que los efectos por beber de manera excesiva no le hicieran efecto por como estaba compuesta su biología. -Supongo que de verdad quiere verte segura-. Comentó, viendo que Noelia parecía algo feliz por eso mismo.

Una vez servido el té negro, el chico lo miro un momento, nunca había probado té negro en su vida, pero por las palabras del hombre comentaba que era salubre, así que sin pensar mucho tomaría un sorbo, le encantó su sabor de manera inmediata. -Es delicioso señor, me encanta su sabor, que contiene?, me gustaría probarlo de vez en cuando-. Preguntó amablemente por el secreto del sabor del té, queriendo probarlo una vez más más tarde.

Cuando el joven le pregunto a al señor sobre el té no dudo en darle uno poco de información- el té negro está elaborado de hojas fermentadas de la planta Camellia sinensis, que a su vez está planta también es utilizada para hacer tés verdes o de Oolong -explico con una sonrisa aunque hay no pararía su explicación - y además de aquella planta tiene entre el 2 y 4% de cafeína lo que ayuda al pensamiento y para estar alerta, tambien como algunos antioxidantes y otras sustancias que ayudan a proteger el corazón y los vasos sanguíneos -al terminar la explica tomo un poco de té.- 

Noelia escuchaba con atención y con algo de admiración a su tío, aunque no era tan fanática del té ella comería y tomaría cualquier cosa que su familiar le diera, por lo que también tomaba poco a poco- si es verdad esta delicioso -sonrio levemente mientras miraba su taza, realmente este viaje le estaba haciendo bien para olvidar lo ocurrido años atrás, agradeció que su traje fuera ancho y grande oara ella si no su tio seguro la llenaría de preguntas y no quería otro sermón-

El joven escucho cada palabra del hombre sobre el método de preparación del té, sus ingredientes, la materia prima de aquel buen sabor necesitaba que necesitaba para volver a saborear el té estaba siendo liberada en forma de instrucciones por aquel sacerdote que agradaba su colaboración.

Estaba elaborado de hojas fermentadas de una planta que su nombre científico era Camellia Sinensis, si la conocía bien debido a que la recogía cada ves que veía una para hacer té verde, una gran forma de dar sabor a los líquidos, no sabía eso, generalmente la Carmellia se combinaba con otras plantas para hacer té de diferentes tipos, no tenía idea que podía hacerse uno tan delicioso con solamente esa, es como si por su consistencia y salubridad sacrificara una parte de su sabor. -No pensé que esa planta diera tanto sabor por si sola, es increible-. Dijo tomando otro sorbo y procediendo a escuchar el resto de la conversación.

-A que si?, a veces esta bien un té para desestresarte y dejar pasar algunos problemas de tu vida, lo hace mejor que cualquier bebida-

-Disculpen la pregunta pero que hacen exactamente?, tienen templos y eso pero con tantos dispersos por el país del rayo es difícil saber a qué se dedican adorar-. Preguntó mientras la curiosidad lo invadía, era cierto que habían muchos templos dispersos por el país y de paso en el mundo eran muchísimos, algunos dedicados a dioses, espíritus ect ect, dispersar esas dudas no estaba mal, aunque el atrevimiento a veces era excesivo.

El señor solo sonrió mientras tomaba su te, le era agradable hablar de ese tema y además de conocer al chico, en cambio Noelia solo asintió con la cabeza ante la afirmación del joven, está casi no hablaba pues prefería hablar cuando alguien necesitaba de su opinión, oh bueno...así fue criada por los monjes.

-bueno los Miroku respetamos las creencias de los demás y preferimos mantener nuestra creencias en secreto pero si alguien más le viene a rezar a otro dios, oh a rezar por el bienestar de su familia o por amor o suerte está en todo su derecho -hablo el señor explicando un poco- pero nosotros más nos especializamos en el exorcismo de espíritus e entidades malvadas con nuestro poder espiritual -sonrio orgulloso de su clan, pues era agradable ayudar a las demas personas.- y usted joven, en qué se especializa? por si se puede saber claro está -le pregunto amablemente mientras terminaba su primera taza de té y ya se iba sirviendo una segunda taza- 

Noelia solamente los escuchaba hablar, como dije ella era más de escuchar no tanto de hablar.

Respetaban las creencia de las personas, su templo al parecer era mixto para las religiones, no era una iglesia que fuese extremista sobre a que Dios se debía adorar o algo parecido. -Me agrada, las personas pueden tener la religión que quieran, es bueno ser equitativo para todos ellos-. Comentó tomando otro sorbo del té.

Por cualquier cosa se puede rezar en los templos, familias, parejas, conocidos, fortuna, salud ect ect, las creencias de la humanidad son más que infinitas y había que respetarse sus desiciones y costumbres. Los Miroku según las palabras del sacerdote estaban dedicados al exorcismo de entidades malévolas o espíritus malévolos, poder espiritual?, ni el había entendido que era eso, chakra tal ves?. -Un clan que ayuda a la gente, es...fascinante, nunca había visto un espíritu en mi vida, como son?-. Pregunto abiertamente, curioso de saber cómo eran las leyendas locales, pero una pregunta género un pensamiento que había tenido mucho atrás con una amiga suya llamada Kaname, puesto que ella le pregunto lo mismo, pero gracias a sus palabras se había dado cuenta de que su pasatiempo era de enorgullecer. -Soy investigador, podría decirle que viajero, pero quiero conocer lo ancho y alto del mundo, para mí, todos ustedes tienen algo que debo conocer y descubrir, el mundo tiene una especie de pizca de variedad y misterios que me encantan...oh y puedo hacer esto-. Comentó inocentemente para chasquear los dedos y de la misma nada aparecieron en el cuello del hombre un collar de flores hechas de chakra, este mismo estaba compuesta de esta misma energía, aunque no las podía tocar ni sentir era bonito a la vista ver algo etéreo manifestarse de esa forma, en el caso de Noelia el mismo collar apareció pero además de eso en su cabeza tenía una especie de corona de flores.

Yamuro se quedó mirando un momento la decoración que había creado. -Perdon por eso jejeje, son trucos fiesta que me se por ahora-.  Se disculpó, aunque se veían ambos adorables con esos detalles.

La pregunta del joven sobre como eran aquellos espíritus era algo compleja de explicar pues cada espíritu es diferente según la persona o en el ambiente donde se encuentre- es algo difícil explicar esa pregunta jeje -se rio levemente el hombre mientras rascaba su cabeza, la explicación del chico sobre a lo que se dedicaba le agrado mucho- es interesante..yo si pueda volver a hacer joven me dedicaría a viajar por los países y ayudar a quienes más lo necesitan -hablo el señor con todo su corazón pero ya tenía su vida aquí en esta ciudad y el templo ahora era su vida, una muy pacifica y lejos de problemas y peleas. 

Pronto el chico hizo un truco donde le había hecho aparecer un collar flores hecho de chakra algo que le gustó mucho al señor, con Noelia está sonrió levemente mientras miraba el truco del chico, supuso que lo mismo había hecho el chico en ella- ese truco está muy bueno, se ve increíble -hablo mirando al joven con una leve sonrisa-

El sacerdote no sabía cómo explicarse sobre como eran los espíritus, tal ves se habían pasado de descripciones y formas después de tanto tiempo que atribuirles una apariencia como tal no era posible. -Mmm siempre pensé que eran como los fantasmitas que tantos pueblos dicen sin piernas y con formas etereas-. Dijo dando una estimación y haciendo un fantasmita clásico con su chakra para dar una visión de lo que decía, se podía mover y todo.

El chico pensó la pregunta sobre cuál era su especialidad, admitió que se trata de un investigador/viajero/aventurero, que se dedicaba a explorar el mundo para aprender más de el, sus secretos y misterios. Después de hacer su truco y parecerse adorables ambos no resistió la tentación -Son perfectos así- Dijo para que como por arte de magia en sus manos se hizo una camara de tomar fotos clásica (como la de los 90s) hecha de chakra y saco una foto a el señor en el ángulo correcto y hacer lo mismo con Noelia después de encontrar un buen angulo para la foto. Aunque las fotos en si no pudiesen crearse solamente tenía que crear replicas de la imagen con su chakra y sacarlas de la cámara etérea. -Foto para el recuerdo-. Dijo haciendo desaparecer la camara y la foto ya que no eran reales como tal aunque le encantaba hacer ese tipo de cosas porque siempre quedaban grabadas en su mente esas imágenes. -Aunque... Si hay algún exorcismo o algo parecido podría verlo, o solamente ustedes serian capaces?-. Preguntó curioso, ante las palabras que había escuchado anteriormente de cosas espiritistas.

-si hay algunos espíritus que se parecen a los fantasmas que todos imaginamos pero hay otro que la verdad son muy aterradores...esos son los más difíciles de exorcizar -hablo Noelia, al menos debía decir algo para también integrarse en la plática.- 

La joven cuando le tomo la foto se sintió algo avergonzada pues no se creía tan bonita como para ser fotografiada aunque igual sabía que solo llegaría a hacer un recuerdo, en cambio su tío cono siempre estaba a todo animo con una sonrisa, típico de el, al contrario que su padre era todo serio y "ocupado" cuidando del templo, pero bueno problemas familiares.-eres muy interesante jovencito, nunca habia conocido a alguien que pudiera hacer tan maravillosos trucos con su chakra -dijo aplaudiendo un poco y a la vez alagandolo-  y respondiendo do a tu pregunta, creo que sí podrías, aunque solamente ver de lejos.

El chico después de preguntar escucharía atentamente hablar a Noelia, era raro, no había hablado mucho desde que llegaron allí pero agradecía que se metiera en la conversación, tal ves era una chica...sumisa?, callada y reservada?, serían signos normales de antisocialidad, explicó que esa apariencia la tienen los espíritus se parecen a los fantasmas de siempre sin embargo tal ves eran faciles de exorcizar?, habian otras apariencias para ellos, que dependiendo de ella, serian mas o menos difíciles de tratar. -Oh entiendo, existen las leyendas de onis y esas cosas, así que tiene sentido-. Dijo terminando su té.

El chico se dispuso a tomar fotos a ambas personas, dónde el sacerdote emboso una sonrisa cálida, mientras que su sobrina se le notó algo nerviosa. -Tranquila, son simples recuerdos...o bueno, te incómoda ser el centro de atención?-. Preguntó, era una persona que analizaba las emociones por naturaleza y los rasgos que la sacerdotisa estaba mostrando era de alguien que no estaba acostumbrada a que la prestarás mucha atención.

El señor lo alago con su habilidad en manifestar objetos etéreos de esa forma, sinceramente lo tenía desde nacimiento, era básico para el ya que se trataba de meras cosas visuales, no tenían impulsos dañinos ni nada por el estilo, sin embargo, esos trucos de fiesta era un recordatorio de que el precio por hacerlos es uno muy grande, que efectivamente le perjudicaba aunque no se viese a simple vista. -Es algo que sé usar desde que tengo memoria, sin embargo necesitas cierta cosa para realizarlo, que no es algo que me hace muy feliz que digamos-. Dijo siendo sincero ante todo, miro hacia abajo un momento, no estaba cabizbajo, pero ese requerimiento de carecer de un alma reencarnable o tan siquiera para poder pasar al otro lado, era algo doloroso, más si sabes que puedes tener una familia, solo en esta vida los podrás ver. -Supongo que son peligrosos jajaja-.

-Amm y Noelia, una pregunta, dijiste que este es el templo de tu tío y no lo conoces no?, entonces dónde resides?, o mejor dicho, dónde vives?-. Apenas fue directo en la pregunta pero le había picado nuevamente la curiosidad por saber más de esa familia.

La joven solo asintió ante lo dicho por el chico, no pensaba hablar mucho pues ella era mas de escuchar y de técnicamente ser casi invisible para los demás, pero luego el chico le pregunto algo que se quedo callada por un corto tiempo pensando en que decir. 

-Ella es asi...es bastante tímida y casi no habla, aunque de pequeña parecía loro hablando cualquier cosa que se le cruzara por la mente, no había quien la callara - comento el tio de la joven que hizo que esta se ruborizara un poco pero al poco tiempo hablo- No es que incomode...solo que no es algo que me agrade, me gusta estar sola y solo suelo hablar cuando me lo piden...así mismo no me acostumbro tanto a la atención. Aunque eso cambio por cierto incidente que hubo hace algunos años-dijo la joven acomodándose su flequillo y trataba que el sonrojado de su piel se quitara pensando en otra cosa, aunque por la reacción que hizo su tio solamente miro al suelo y escondió sus manos en sus largas mangas por el nervio que empezó a sentir- pero el pasado pisado, verdad tio? -este solo asintió con la cabeza y rápidamente trato de cambio de tema- Bueno, los exorcismo si son difíciles pues uno nunca sabe si va a funcionar o no por eso siempre hay que tener cuidado. 

La chica solamente miro a otro lado disimulando que veía la decoración del lugar aunque no había cambiado nada desde la ultima vez que vino- bueno..yo vivo en lo alto de las Montañas Negras, algo lejos de aquí, por eso estaba perdida pues según recuerdo vine hace años..ahora esta un poco cambiado y no sabia por donde mismo ir-Le respondió a la pregunta para luego mirar su taza de te y tomar un pequeño sorbo.-