[Misión D] - Las Vacas Locas

Muuu, muuuu – decía la muchacha mientras caminaba por los prados… ¿qué pasa Ulti-chan? – ¿uh? Narrador, me dijeron que hoy empezaba una misión de las vacas locas – diría la muchacha – oh, ¿y porque siempre terminas mis frases con un “diría la muchacha”? podrías ser algo más original – esbozaría la idiota de mi personaje – no te pases, narrador-kun – dios… porque hice este personaje… ¿podemos centrarnos en la misión? – pero por supuesto, eres tú el que se distrae haciendo cosas que sabes deben ser consideradas off-rol, ni es que sea yo quien te detiene a escribir – pero me distraes Ulti… me distraes… - tú te distraes solito, no me eches la culpa, mira que tus problemas mentales no son culpa mía, ósea mírame, ni si quiera existo – diría aquel montón de letras sin sentido que suelo llamar Ulti… bueno, la verdad no importa, ni siquiera sé si es legal que Ulti sea capaz de hablar conmigo… dios, debo revisar esas guías…

Como sea, esta historia comienza como cualquier otra, un prado amplio y verde en unas montañas maravillosas y una joven parada en la colina observando al infinito horizonte, esta joven aventurera podía ver el recorrer de las aves dispersas por doquier, llamándole la atención el cómo se firmaba el horizonte de nuevas ideas y pensamientos oníricos, todo para un fin más noble que el suyo propio. Aquel aldeano, al que llamaremos Aldeano Numero Uno, se acercaría a Ulti de manera apenada por su costado, claro, estamos en un pueblo, dibujemos en nuestras mentes un poblado con ganado y casas de techos de pajas, ya no es solo prado verde, este poblado se encontraría a las faldas de la colina donde Ulti se encontraba, era ese momento en que aquel aldeano genérico comenzaría a hablar – Señorita Ulti, ¿está segura de esto? – preguntaría el aldeano, inconsciente de que esto pudo haber sido un monotema o una misión individual – pero por supuesto – diría aquella tonta muchacha mirando con decisión al horizonte – no tengo ni una puta idea de vacas.

Y si, para todos los participantes, se les envía cartas a través de pájaros del color que deseen, simplemente deben viajar al país del té y ayudar a esta extraña muchacha a ayudar con la enfermedad de las vacas locas… dios, no sé cómo terminara esto.

— Un día antes —

Eran las cuatro de la tarde y Kishue descansaba bajo un árbol en media pradera, el ruido de las aves cantando se le hacía armonioso y relajante para una merecida siesta después del entrenamiento diario, que en este caso era ligero debido a la naturaleza de su viaje. Cuando su cuerpo ya empezaba a relajarse notó el sonido balbuceante a la lejanía que no lograba distinguir, al menos no tan rápido como lo hicieron las aves que aleteaban para alzar vuelo, provocando otro ruido atemorizante que tensaría el cuerpo del joven al erguirse del tronco para observar como todos los pájaros huían dirección a él. Ignorante del significado de aquella reacción aviaria, se quedó pasmado observando el vuelo tales bellas criaturas, cuando un ventolero lo azotó agresivamente hacia atrás, siendo necesario el apoyo de su brazo sobre la hierba, para no chocar contra el tronco del cual estaba recostado segundos antes.

Producto del agresivo actuar de, lo que él pensó, la naturaleza, una paloma rezagada caería trazando un espiral de túnel de viento frente donde estaba sentado el shinobi del agua, quien al instante tomó entre sus manos para guardarlo de aquél ataque dentro de su túnica de viaje hasta que cesara. En unos segundos más, cuando ya el viento se detuvo, dejó salir a la criatura de entre sus ropas para dejarlo sobre el césped, notaría que este no podía volar debido a una herida en su ala. —Oh... ¿Qué haremos ahora?— el pajarito continuó intentando alzar vuelo, pero sin fruto solo volvería a caer con un quejido, que indicaría dolor de solo intentarlo. En un intento por ayudarla, Kishue volvió a cargar al animalito y lo sostuvo sobre su diestra mientras con la zurda lo examinaba, como si supiera mucho de medicina, notaría que el hueso del ala estaría dislocada, posiblemente del golpe al caer. En un intento de ayudarla usó su poco conocimiento en primeros auxilios e intentó componerlo, y con un crujido el ala volvió a su sitio, aunque este animal aún no lograría alzar vuelo, al menos por unos días.

Después de haber solucionado el problema veterinario, el joven notaría atado en el cuello de su paciente un pequeño pergamino, probablemente era una criatura mensajera. —Veamos qué tenemos aquí.— abrió el mensaje y encontraría en su texto una petición de ayuda con unas vacas en un pueblo cercano. Siendo un mensaje extraviado y una petición de ayuda, le pareció lo más sensato emprender camino al llamado de auxilio para ser el salvador que el destino le puso.

— Presente —

Y así como por obra del mismísimo destino, Kishue terminaría en el lugar citado en las faldas de la mona más curiosa que jamás conoció, alzó su vista hacia la cima para observar la susodicha mencionada y se topó con el autor de las dicha carta, ignorante de ello, pero bien encaminado, escaló de manera no literal, hasta la pareja de personas en busca de dirección, mientras el herido animal descansaba sobre su hombro derecho como un loro, solo que más pacífico (callado). —Buenos días, estoy aquí por un problema de unas vacas. ¿Sabe en qué dirección puedo buscar al dueño de un rancho de vacas?— Su mirada bailaba entre ambos esperando que alguno le pudiese indicar el trayecto a tomar.

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— Narro | Habla | Piensa —

Última modificación: 22-08-2023, 10:20 PM por Maki Yiren.

—Y así fue como este pajarraco al que he decidido llamar McDonald irrumpió en mi despacho a través de la ventana que acababa de abrir porque, bueno, hacía calor.

—Ya...

—¿Ocurre algo, Yiren-kun? ¿Puede ser que no hayas entendido alguna parte de la historia?

—No, no... —gesticulé con la mano. —Pero, señor Ichigi... ¿por qué se ha disfrazado de vaca?

—Por la misión que te estoy encomendando, naturalmente.

—Ya...

«¡Eso no tiene sentido!»

—Y, ¿por qué ha llenado la habitación de peluches de vacas?

—Por la misión, por supuesto. Y antes de que preguntes, los galones de leche son por la misión. También lo son los cómicos cuadros de vacas vestidas como humanos, haciendo cosas de humanos. ¡Mira! Esta de aquí está pagando impuestos. Muy interesante.

—¿Y ese póster?

—¿Cuál póster?

—Ese de ahí, el de la chica con cuernos, vistiendo un bikini.

—¡Ah! Esa es Ulti-chan.

—¿Quién es Ul-?

—¡Es Ulti-chan!

...

...

...

...

—Ya...

—Cómo sea. Serás enviado al país del té y te encargarás de las vacas.

—¿Qué vacas?

—Las que están locas.

—¿Por qué están locas?

—Porque están enfermas.
...

...

...

...

—¿Quién es Ult-?


—¡Adiós!

Y fue así como una anciana, aldeana de un pueblo del País del Té, uso el jutsu de invocación para hacerme aparecer en una colina en cuya falda había un pueblito.

—Señora, ¿acaba usted de invocarme?

—Ji ji ji, ¿acaso no recuerdas el pacto que firmamos?

—No, para nada.

...

...

...

...


—Bueno, nos vemos.

—Sí, hasta pronto.

Después de que la señora se fuera me di cuenta de que la chica del póster en la oficina del señor Ichigi estaba a tan solo unos veinte metros. Camine hasta ella y saludé al aldeano que se encontraba a su lado.

—Vaya, pero si son Ulti-chan y Aldeano Número Uno, ¿cómo están? Espero que hambrientos. A mi, por ejemplo, se me antoja un churrasco. Eh, tú, el de pelo azul, un churrasco vendría bien, ¿no?

OFF: Kishue, aun lo tienes amigo ;)

ON: Hey hey narrador Kun, este niño está rompiendo la 4ta pared, ¿es bueno que más de uno lo haga? – a que te refieres, Ulti… sinceramente no estoy prestando atención – no seas idiota, si yo lo sé es porque tú lo leíste – diría la estúpida… espera… si, tienes razón… este tal Maki esta tan loco como tú, ¿verdad? – si si… deja, voy a hablar con el – diría Ulti, para acercarse al joven Yiren y confrontarlo de frente – enserio, no me gusta que narres todo lo que hago. Ahora falta que narres cosas guarras – diría mientras una ventolera se acercaba en dirección a esas cortas faldas – no me molestes estúpido narrador – diría mientras me levantaba el dedo del medio con una vena rebosante sobre la cien.

Niño, si rompes la cuarta pared, debes tener en cuenta varias cosas, primero, los señores NPC no pueden saber que son simples NPC – diría refiriéndose al pobre NPC – y segundo, este juego tiene sus reglas, no puedes llegar y teleportarte a este lugar o ver una foto mía en uno de tus recuerdos – dijo enojada… espera, ¿Cómo es que viste eso? - ¿eh? Porque lo leí en su post, narrador-kun, pon más atención, pilas hombre – decía la joven en un …

…

…

…

En el mundo real, Ulti estaba con una fiebre bastante densa, recostada a un lado de Maki Yiren, ambos jóvenes habían caído presa de la enfermedad. Si, si hacemos un flash-back veríamos como el grupo de ninjas se reunían en una colina, como Ulti, Kishue y Yiren hablaban con el granjero llamado Oyak, un viejo gruñón, pero bastante simpático, indicando como la enfermedad se propagaba rápidamente entre las vacas y que aún no sabían cómo ni porque lo hacían… sin embargo, a los pocos minutos de esto, los dos jóvenes cayeron inconscientes en un vórtice de locura y demencia, yacían doloridos y con fiebre, las vacas del sector presentaban similares síntomas, altas fiebres y un decaimiento bastante grande… el joven Kiriense, Kishue, en el poco tiempo que estuvo presente junto a los otros genins solo pudo averiguar que él había sido el último en llegar, que tanto Ulti como Yiren llevaban un par de días en el pueblo… pero que ellos eran los únicos humanos afectados por esta enfermedad.

Kishue observaría como la chica y el chico caerían inconscientes de repente mientras pedía indicaciones y en ello entendió que el aldeano era el escritor del pergamino y así el hombre que buscaba, ahora con un percance más en el problema, ya no solo eran vacas, sino las vacas y una chica vaca con un chico extraño que lo llamó peliazul, poco educado para ser sinceros. —Parece que el problema se extendió. ¿Podemos llevarlos a su casa para que descansen mientras averiguo qué sucede con sus vacas?— preguntó en lo que tomaba el brazo de la joven y la alzaba para llevarla a un lugar más adecuado donde pudiese descansar. —Yo llevo a la muchacha, pesa más que el niño.— Con suerte no se habrá dado cuenta que la llamó gorda mientras dormía, lo cuál era totalmente falso, lo que si es cierto es que el otro era un niño escuálido.

—Si le resulta problemático puedo intentar cargar con el niño también.— Aunque eso probablemente no fuese necesario. —¿Por qué no me habla un poco más sobre el problema de las vacas mientras caminamos.? ¿Cuándo empezó y cómo empezó? ¿Le cambiaste la comida o quizás fue un rebaño nuevo que llegó hace poco, compraste alguna vaca nueva?— Cualquiera podría ser la posibilidad de por qué se estaban comportando así, un virus probablemente y generalmente los virus llegaban con algo nuevo del exterior.

En casa del viejo, dejó a Ulti y a Maki (para no llamarlos más chica y chico), en una cama o sillón uno al lado del otro para que descansen mientras Kishue continuaba con el problema primario, la misión. A todo esto, la paloma se quedó con Oyak, al menos hasta que se recuperase y pudiera volver a trabajar de nuevo. —Voy a ir al campo a revisar.— Poco sabía de los animales pero que quedaba, después de revisar un poco el lugar talvez se acercaría a algún veterinario para hacer consultas más apropiadas, pero prefería no ir con las manos vacías, pues no ayudaría en nada a la búsqueda de una solución.

Salió de la casa de Oyak y fue a donde pastorean sus vacas y al granero para ver dónde comían y vivían ellas, era lo único que podía hacer por ahora.

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Vestimenta

— Narro | Habla | Piensa —

Ulti, estas delirando de nuevo – diría el narrador – ahora estas como idiota cambiando los roles – escribiría fervientemente el narrador – Ulti por dios… confundes a los lectores – nuevamente escribiría el narrador mientras repasaba lo escrito sobre su pantalla… oh dios, narrador-kun realmente eres aburrido – diría la estúpida – no, no me narres, yo te estoy narrando, mira que nuevamente estas en esto y no despiertas… despiertas… - despiertas… despiertas… - espera, esto fue una clase de… mensaje subliminal… - si Ulti, tu no despiertas.

Ulti luchaba consigo misma para poder tratar de despertar de ese sueño fatal que estaba sufriendo, la fiebre era intensa y su quejido evidente. El joven Kishue parecía muy atento a la situación, y es así como el joven granjero respondía a todas sus dudas – No joven, las vacas del sector han pastado y han sido atendidos como siempre, hemos cuidado su salud y alimentación, son la principal fuente de alimento de la zona y las mejores ayudantes a la hora de la producción del trigo y abono para nuestro té, no podemos darnos el lujo de perderlas – diría el granjero – sin ellas, el trabajo cada vez se volvería más difícil, además, nos proveen de buenas fuentes de leche… - este hombre realmente amaba su trabajo, tanto que se distraía un poco de la pregunta principal – aunque, no sé exactamente cuándo empezó todo esto, no sé cómo ni donde, solo hemos visto como algunas vacas caen en esta misma fiebre y al poco tiempo desaparecen de los establos.

Al poco rato, cuando llegaron a la casa de Oyak, este dio atenciones de primeros auxilios a Yiren y Ulti, pero nada más que un lugar donde reposar y trapos fríos para sus frentes era lo único que podía ofrecer. Despierta… Oyak tenía una casa muy rustica, era de madera por doquier y un montón de adornos de vacas por todos lados, había fotos de vacas blancas, marrones, negras, incluso, una foto del matrimonio de Oyak con una vaca blanca en el altar… dios, el hombre parecía algo extraño.

Cuando Kishue salió a recorrer el sector, pudo observar como el pasto rojo se colaba por debajo de los muebles, pudo observar un montón de cosas extrañas, pero lo que más le sorprendió, era la risa extraña que Oyak tenía de frente… pero… él debía estar en la casa… ahora Kishue estaba… en el establo… despierta… Kishue… ¿Qué pasa contigo?

Última modificación: 31-08-2023, 06:55 PM por Kishue.

Kishúe asintió a lo contado por Oyak de lo cuál mucha información le pareció irrelevante en cuanto a la misión, sin embargo varias cosas que captó es que parece que algo o alguien está apuntando a las vacas, ya sea para sabotearlas o para algo más, en el primer caso lo entendería si fuese algún competidor, el egoísmo y la envidia humana los hacían realizar actos despreciables. Más sin embargo no explicaría por qué ahora los otros dos chicos fueron también víctimas de dicho problema, y si es por un virus, ¿por qué no le afecta al señor Oyak y a los demás? No es normal que un virus solo apunte a dos personas siendo de las más recientes en llegar, primero le debería afectar a los del pueblo.

La segunda deducción que viene de las palabras de Oyak, las vacas desaparecen, sería que alguien las está matando y/o robando. Si fuese un animal depredador las vacas no simplemente desaparecerían sin rastro, mínimo habría cuerpos tirados en algún lugar a la redonda y habría sangre que indicase la presencia de depredadores, entonces solo podría ser obra humana lo cuál necesita de una razón, un motivo lo cuál expandiría el primer punto, venganza, envidia, competencia, algún ritual satánico. Y de alguna forma Yiren y Ulti cayeron en la trampa porque estaban ayudando al señor, osea que alguien está interfiriendo en la ayuda que está pidiendo el dueño.

Trampa, interferir, Kishue de repente se sintió en peligro y sus alertas se dispararon. El lugar en el que vivía Oyak era bastante curioso, pero no podía juzgarlo, cada quién tenía sus propios gustos, el suyo las vacas, ¿pero para tanto? Kishúe dejó los chicos al cuidado de Oyak y continuó con la investigación, cuando un millar de cosas empezaron a suceder a su alrededor, el pasto no era común, cosas raras no mencionadas por el narrados empezaron a darse y un Oyak de semblante extraño, si se ponía a analizar, un veneno en el aire era poco probable, se dispersaría demasiado rápido en el aire, un virus que ya de por si fue descartado, sería complicado. ¿Un incienso en la casa? Kishúe se habría dado cuenta pues se activa de manera progresiva, cosas raras en la vista, extraños sucesos, irreal. Trampa.

¿Habrá caído en una trampa al entrar en la casa o fue en el establo? ¿Genjutsu? ¿Habrá ninjas involucrados? ¿Por qué se involucrarían en algo tan trivial como ganado? ¿Será ninjas de alguna aldea vecina que desea molestar la economía del país? Es posible, los desgraciados y codiciosos pilares siempre deseaban más y de sacar más sería de los débiles porque les es más fácil y menos riesgoso. Pero sería muy exagerado llegar a esa conclusión, tal vez sean bandidos o renegados con objetivos más realistas, hablando de realista, es hora de volver a la realidad.

—Kai— para efectos dramáticos, acompañado de un sello específico, hizo el aludido para intentar salir de la trampa pisada, la pregunta ahora sería ¿Cuándo? ¿Estarán los otros dos peligrando? O el único apeligrado era él. Kishúe se preparó.

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Estadísticas

Estadísticas de Kaguya Kishue

Estadísticas de Kaguya Kishue:

20 FUE | 15 RES | 10 VEL | 10 AGI | 10 DES | 5 PRE | 5 INT | 5 CCK

Vida: 120
Chakra: 105
Reg. Chakra: 5
Clase: D

Técnicas y Chakra

Kai

Rango E

Aprendida en 2023-08-03 13:12:44

ID: NIN006

SELLOS: UNO

NINJUTSU

Esta técnica capacita al usuario para liberarse de genjutsus realizados por personas cuya inteligencia sea igual o inferior a la del usuario. Para lograrlo, el usuario debe percatarse de que está siendo afectado por un genjutsu.

Además, esta técnica también tiene la capacidad de prevenir que el usuario caiga bajo un genjutsu si se ejecuta entre el turno en que se expande el chakra y el momento en que se realizan los sellos correspondientes.

Coste: 15 de Chakra.

Chakra: 90/105

— Narro | Habla | Piensa —

La realidad a veces es dura… es muy muy dura… - despierta… despierta – escucharía Kishue levemente, a un volumen cada vez más elevado, hasta que finalmente lo oiría casi como un regaño y un grito a fuerzas, hasta que sintió una patada en la pantorrilla – Despiertaaaa – gritaba Ulti, con sus brazos atados por sobre su cabeza y estirando todo su cuerpo lo máximo que podía para llegar hasta poder llegar con la punta de sus pies hasta la pantorrilla de Kishue. Al ver que por fin lograbas recuperar el conocimiento, esta se sintió algo más aliviada, te miraba con ojos desafiantes y rápidamente volvería a su lugar, retrocediendo y cruzando sus piernas sobre la paja de aquel granero.

Era bastante oscuro y la muchacha te observaba directamente a los ojos, al poco notarlo, tú también tenías las manos atadas, la joven te hizo una seña para que miraras a un lado, estaban encerrados en lo que parece ser un granero de mala muerte, con un hedor a putrefacción muy grande y lo que parecía ser un montón de sangre en las paredes – debemos escapar de aquí – le diría a voz baja la muchacha – no sé cuánto tiempo llevamos acá… solo sé que quizás las últimas semanas hayan sido solo una ilusión – diría Ulti, recordando esos momentos en la tierra feliz de las petunias y los dulces que no engordan – ah… se veía tan real – recordando como comía y comía sin engordar ni un gramo, como ninguna persona tenia rostro y como podía volar sin problemas… si, muy real Ulti… muy real…

La verdad es que estos muchachos habían llegado esta mañana y rápidamente cayeron víctimas de una ilusión, una persona de gran poder los habría atado en este granero, solo se veían manchas de sangre en las paredes y lo que parece ser un candelabro o fuego a la distancia… Ulti liberaría una de sus manos de las ataduras rápidamente y empezaría a ayudarse a sí misma para sacar la otra – te necesito activo niño, no podemos morir aquí – diría enojada, buscando la manera de escapar y ver en que podría servirle este muchacho.

Una vez se liberarán podrían darse cuenta que aquel granero tenia al interior un altar… un altar algo extraño, con el cadáver de una vaca por sobre el mismo, tenía el estómago rasgado y el hedor era penetrante. Había símbolos raros en el suelo que demostraban indicios de alguna especie de secta o algo extraño. Más lejos, más allá, se encontraba un par de granjeros atados de la misma manera que ellos… al parecer, cuando Kishue llego al pueblo, los granjeros que los recibieron y dieron advertencia de estos sucesos habían sido objetivo de sus captores también… ahora había civiles involucrados… ¿Qué clase de persona haría esto?

Ulti ya llevaba un mes viviendo en esta granja, parecía una simple granjera más junto a estas personas, ayudándolas en sus trabajos y entrenando de noche, pero la llegada de esta amenaza no fue advertida por Ulti… ella aún es muy inexperta respecto al mundo shinobi y cosas como estas la toman totalmente desprevenida… y si… Yiren fue producto de tu imaginación en este momento, él nunca estuvo acá. Las naciones encontraron tan poco importante que las vacas se enfermen y desaparezcan que casos como estos eran muy poco atendidos, y más estando tan lejos como era el país del té.

Última modificación: 05-09-2023, 08:48 AM por Kishue.

Despierta, despierta, despierta era lo que escuchaba cada vez más y más cerca hasta que logró abrir nuevamente los ojos, sin saber si fue producto de su técnica o de la patada que le alcanzó a dar Ulti, fue fácil acostumbrarse a la oscuridad, casi agradecía que lo primero que viera no fuera la luz cegante del sol o algo por el estilo pero su mente seguía un poco perturbada por el sueño o la ilusión que estaba teniendo hasta que notó que al menos algo de lo que vio no fue su imaginación, pues la muchacha que conoció estaba frente a él, amarrada. Entonces ¿Qué fue lo último que vio de la realidad? ¿Cuándo se quedó dormido? Intentó recordar el momento mientras al intentar erguirse, notó sus manos amarradas, alzó la vista para ver cómo estaba amarrado, asumiendo que se trataba de una cuerda.

El olor, la vaca muerta, la poca luz y el ritual satánico prefería pensar que empezó a soñar recién ahora y quería despertar, pero algo le decía que ahora si estaba viendo lo que estaba pasando, que estaba despierto y viviendo la realidad tan apestosa de la situación. —¿Semanas?— se preguntó confundido. "No llevo aquí una semana o sí... Diablos ahora todo va vueltas en mi cabeza, no logro recordar nada." ¿Niño? Kishue no tomó importancia de aquél referimiento a su edad pues estaba demasiado ocupado desatándose, con un poco de chakra soltó el nudo y se sacudió las piernas de la paja, antes de ponerse de pie.

—Soy Kishue, un gusto. Si vamos a trabajar juntos en esto deberíamos al menos sabernos nuestros nombres.— en realidad eso era lo de menos, pero hablando Kishue podía pensar mejor y dar con una solución al problema cercano, en este caso salir de ahí, pero no solo eso, tenía que cuidar de los aldeanos presentes. —Ya vengo.— advirtió antes de realizar una serie de sellos antes de sumergirse bajo tierra usando una técnica ninja, y así desplazarse bajo tierra para salir del granero por la parte posterior, antes de buscar salir sigilosamente en un lugar donde nadie lo viese, sacando solamente parte de su cabeza, hasta sus ojos antes de salir completamente una vez está seguro, y así explorar un poco los alrededores. De no encontrar una ruta segura, probablemente volvería para informarle a Ulti de lo que encontró.

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Técnicas y Chakra

Nawanuke no Jutsu

Rango E

Aprendida en 2023-08-03 13:19:40

ID: NIN005

SELLOS: NO

NINJUTSU

El usuario tiene la habilidad de liberarse de ataduras simples, que no requieren el uso de chakra, así como de técnicas de atadura realizadas por ninjas de nivel inferior al Rango B.

Coste: 10 de Chakra

Moguragakure no Jutsu

Rango D

Aprendida en 2023-08-28 13:48:47

ID: DOT102

SELLOS: SI

DOTON

NINJUTSU

El usuario puede sumergirse bajo tierra sin dejar rastro hasta una profundidad máxima de 2 metros y desplazarse a una velocidad de caminar (1m/s). El tiempo máximo que puede permanecer bajo tierra depende de su rango, siendo 3 turnos el valor base.

En el caso de un rango B, el usuario puede permanecer bajo tierra durante 4 turnos.

Coste: 15 de Chakra y 10 de Chakra por Turno.

Chakra: 65/105

— Narro | Habla | Piensa —

Ulti no lo sabía, pero para ella han pasado semanas en aquel mundo de fantasía. Al ser Ulti una muchacha muy tonta, su ilusión, aunque notoriamente anormal fue… demasiado fácil de detectar… por suerte para Kishue, este llego mucho después que ella, quien estuvo todo el día desde la madrugada dentro de una ilusión, aunque si, el tiempo para ella paso muy rápido y ni siquiera notaba como un día duraba apenas unos minutos, tonta Ulti. La verdad era que, aunque Ulti estuvo en esa ilusión desde la madrugada, Kishue solo llevaba unas 3 horas dentro.

Ambos ninjas se deshicieron de sus ataduras con facilidad, mientras Kishue revisaba el exterior, Ulti ayudaba a los aldeanos que estaban listos para recibir la bienvenida de san pedro, pero no, gracias a la intervención de los shinobis eso no sucedería hoy, tal vez mañana, tal vez pasado, PERO HOY NO CARAJO… dios, se me pego la actitud de Ulti, perdón lector, suele pasar…

En fin, Kishue estaba revisando el exterior, hábilmente expuso solo su cabeza para poder observar el terreno y poder revisar el exterior del granero… con destreza y habilidad podría buscar pistas, sin embargo, el exterior de este granero era bastante… escuálido… no habían animales pastando en toda la granja, estaba oscuro y frio y por la puerta principal solo un rastro de sangre que daba a un camino donde de-repente, este desaparecía… aparte de esto, ninguna huella podía ser encontrada en el lugar.

Al poco rato, Ulti saldría del interior del granero por la puerta principal, corriendo hacia donde Kishue y, al llegar junto a él, recobrar un poco el aliento, para luego decirle algo agobiada – ah… ah… hey celestito, no encontré a nadie… solo una especie de mesa rara llena de sangre y este rastro de acá – señalando al rastro que desaparecía a unos 15 metros de la puerta del granero – no he visto a nadie… ¿y tú? ¿Cómo te fue? – preguntaría mientras estiraba su espalda y miraba hacia el cielo… los civiles estaban a salvo, pero se resguardaban al interior del granero temerosos de que, si salían, podrían experimentar la muerte… Ulti se quedó parada mirando las estrellas y dejo caer sus brazos… - no… ¿no es eso un ave muy grande? – diría, señalando como a muchos metros a la distancia un ave de colores extraños volaba... los atacantes habían escapado.

Qué se podía decir acerca de la escasez de información más que eso, que no había nada que encontrar salvo la nada misma lo cuál era una pista de suma importancia, ni vacas había, ni un alma, ya el enemigo había acabado con todo, por ende no quedaba nada por hacer para los dos shinobis, salvo rescatar a los aldeanos que están atrapados. Kishue se encontró con la chica que lo llamo de una manera más que peculiar, más no hizo hincapié por corregirla, pues un enorme ave salió de la nada.

—Nada bueno, nada bueno.— dijo con pesadez ante la noticia mientras observaba como se marchaba el enemigo sin poder hacer nada al respecto, a menos que esa paloma fuese capaz de llevarlo tras el ave gigante, lo cual dudaba bastante, Kishue solamente pudo dar por perdida la situación, ni tenía poder seguramente para hacer algo al respecto, bajó la mirada hacia la joven. —Será mejor llevar a los demás a sus casas, no hay nada ya por aquí para nosotros.— Kishue se devolvería al granero para decirles a todos que no había peligro alguno y que volvieran a sus casas. Con ellos los acompañaría.

¿Qué sería de Ulti tras esta situación? ¿Se reencontrará con él?

— Narro | Habla | Piensa —

En aquella gran ave, un grupo de personas inadaptadas hablaban entre ellos, este grupo parecía como tocado de los huevos – tsk… tenían que llegar los malditos ninjas al pueblo – diría uno de los personajes misteriosos – joder tío, no podemos esperar a que no haya presencia de ninjas, pero si me sorprendió lo rápido que llegaron – diría una joven muchacha – al parecer una de las personas en el pueblo era un ninja y fue quien les informo – diría un joven más tranquilo que los demás – pero no significa nada esa mujer, el que me preocupo fue ese joven que llego después… la presencia de una de las grandes aldeas puede significar un caos para nuestros ideales – diría apacible aquel que parecía llevar las riendas del asunto.

Este grupo de ninjas tenían un objetivo en común, la muerte de centenares de animales y tiempo después volverían a provocar una masacre similar en el país de las aguas termales. Por otro lado, Ulti y Kishue lograron rescatar a los aldeanos, ayudaron a recuperar el resto del ganado que, aunque pocos, salvaron sus vidas de este grupo con ideales macabros. Kishue volvería entonces a su aldea natal en busca de informar lo ocurrido y que algo como esto era obra de ninjas posiblemente, un grupo organizado… por su parte, Ulti al ser una muchacha sin rumbos se quedó un tiempo más en el pueblo en busca de salvaguardar a las personas de posibles otros ataques, pero luego de un tiempo, continuaría su viaje en busca de aventuras singulares, sin saber que este caso aislado sería el primero de muchos otros.

Fin.

Este tema ha sido cerrado.

Última modificación: 11-09-2023, 01:12 PM por Moderador.

MISIÓN FINALIZADA

recompensas

Kishue: 500 Ryos, 10 Reputación y 5PE 
Ulti Ryu: 750 Ryos, 5PE y Mejora de Jutsu D 
Yiren: lo tuyo será proporcional a los post que realizaste puedes pedir la recompensa con petición administrativa 

Este tema ha sido cerrado.