[Flashback] La practica hace al maestro.

En la academia, mas especificamente en la zona de entrenamientos, donde se encontraban los dojos para combatir, en uno de ellos no se escuchaba nada mas que el sonido de golpes y alaridos. En el intenso escenario del dojo, Gojo y Kon, su sensei, se enzarzan en una lucha feroz, cada uno demostrando su destreza y habilidades marciales. El sudor empapa sus frentes y sus respiraciones agitadas llenan el aire. Mientras esquivan y lanzan golpes, Kon aprovecha cada oportunidad para enseñarle a Gojo valiosas lecciones de combate. Entre los intercambios de puñetazos y patadas, Kon le habla a Gojo con voz calmada pero firme.


— Gojo, recuerda mantener tus movimientos fluidos y precisos. Tu determinación es admirable, pero no te dejes llevar por la impulsividad. Controla cada golpe y encuentra el equilibrio en tus acciones — Le aconseja Kon mientras bloquea un golpe de Gojo y contraataca con una patada barrida. Gojo, con su mirada fija en su sensei, asimila las enseñanzas mientras continúa luchando. Siente el impacto de las palabras de Kon, consciente de que no solo está peleando por la victoria, sino también por su crecimiento y desarrollo como luchador. La batalla se vuelve más encarnizada y Gojo muestra un enfoque renovado. Su determinación se mezcla con la sabiduría impartida por su sensei. Ahora, cada movimiento, cada golpe, muestra una mayor fluidez y precisión.

Kon, impresionado por la evolución de Gojo, sonríe ligeramente. — ¡Bien hecho, Gojo! Veo que has aprendido rápido. Ahora, recuerda leer los movimientos de tu oponente, anticiparte a sus acciones y encontrar los momentos oportunos para contraatacar — Gojo, con una expresión decidida, sigue las instrucciones de su sensei. Observa cada pequeño movimiento de Kon, buscando patrones y oportunidades. A medida que el combate continúa, Gojo se vuelve más astuto y estratégico, leyendo cada movimiento de Kon con precisión y lanzando ataques precisos en los puntos débiles expuestos. La intensidad del combate se eleva a medida que ambos luchadores sacan lo mejor de sí mismos. La destreza y el conocimiento se entrelazan en una danza de puños y patadas. Gojo continúa absorbiendo las lecciones de Kon, aplicando cada consejo con maestría y determinación.
La batalla persiste y los minutos parecen fundirse en un instante mientras Gojo y Kon se desafían mutuamente, explorando los límites de sus habilidades y empujándose más allá de sus límites.

La batalla entre Gojo y Kon continuaba en el dojo, donde los sonidos de golpes y movimientos rápidos llenan el aire. Gojo, imbuido de determinación, se adentra en un estado de concentración total. Cada músculo de su cuerpo está tenso y listo para responder con velocidad y precisión. Mientras esquiva un golpe giratorio de Kon, Gojo lanza un rápido contraataque, golpeando el costado de su sensei con una patada ascendente. Kon retrocede, pero rápidamente recupera su postura defensiva, reconociendo la habilidad y la fuerza creciente de su discípulo. — ¡Muy bien, Gojo! Tu velocidad y agilidad son impresionantes — Exclama Kon mientras bloquea los ataques rápidos de Gojo. — Sin embargo, no subestimes la importancia de la estrategia en el combate. Observa el patrón de tus movimientos y cambia tu enfoque para mantener a tu oponente adivinando —

Gojo asimila las palabras de Kon mientras continúa el combate. A medida que la batalla progresa, su mente se expande, explorando nuevas tácticas y estrategias. Los consejos de su sensei encuentran eco en su interior y se convierten en parte de su flujo natural de pensamiento durante el combate. — De acuerdo, Kon-sensei — Responde Gojo con determinación en su voz. "Seré más astuto y adaptaré mi estilo de lucha para mantenerme un paso adelante".

Gojo redobla su enfoque en leer los movimientos de Kon, anticipando cada ataque y contraataque. A medida que avanza la batalla, sus movimientos se vuelven más fluidos y calculados. Su cuerpo se mueve en perfecta armonía con su mente, ejecutando movimientos precisos y eficientes. Kon sonríe mientras esquiva un barrido de pierna de Gojo. — ¡Eso es! Mantén la concentración y el control en cada movimiento. Recuerda, el combate es un equilibrio entre la fuerza bruta y la habilidad táctica —
Gojo absorbe las palabras de su sensei y aprovecha cada oportunidad para aplicar sus consejos. En un rápido movimiento, esquiva un puñetazo de Kon y, aprovechando la apertura, lanza una serie de rápidos golpes en el torso de su sensei. Los golpes conectan con precisión, sacudiendo el cuerpo de Kon. Sin embargo, Kon no se deja intimidar. Reuniendo su fuerza interior, contraataca con una combinación de golpes y patadas, demostrando su experiencia y maestría en el taijutsu. Gojo bloquea y evita los ataques, moviéndose con agilidad y confianza.

Mientras el combate se intensifica, Gojo siente una oleada de energía y poder dentro de sí. Sus puños y patadas se vuelven más feroces, cada movimiento cargado con su determinación y convicción. Su mirada ardiente refleja su deseo de superar los límites y demostrar su valía. — ¡Este combate apenas esta comenzando! — Grita Gojo, su voz llena de determinación. — No me detendré hasta superarte. — Kon sonríe, impresionado por la determinación ardiente de su discípulo. "Así se habla, Gojo. Tienes la pasión y la fuerza necesarias para convertirte en un gran luchador. Sigue desafiándote a ti mismo y nunca dejes de crecer".
La batalla continúa con una intensidad creciente. Cada movimiento, cada golpe y bloqueo, muestra la habilidad y el espíritu indomable de ambos luchadores. El tiempo parece detenerse mientras se sumergen en un duelo épico de habilidades marciales.
Mientras sus cuerpos se entrelazan en una danza marcial, Gojo encuentra dentro de sí una fortaleza que nunca había experimentado. Sus movimientos son fluidos y precisos, sus golpes encuentran sus objetivos con implacable determinación.
La emoción y el respeto llenan el aire mientras Gojo y Kon se enfrentan en un combate que desafía los límites de sus habilidades. La batalla se extiende más allá de las expectativas, una muestra de la fuerza y el coraje que arde en el corazón del peliblanco. Ambos luchadores están dispuestos a darlo todo hasta el último aliento, sin rendirse ni retroceder.

La batalla alcanza un punto crítico mientras Gojo y Kon se sumergen aún más en su duelo. Cada movimiento se convierte en una sinfonía de golpes y bloqueos, ejecutados con una precisión y fuerza impresionantes. Gojo desencadena una serie de rápidos puñetazos dirigidos al rostro de Kon, quien, con reflejos ágiles, bloquea cada golpe con sus antebrazos. La fuerza de los impactos hace que ambos luchadores retrocedan momentáneamente, pero sin ceder terreno. Con una sonrisa determinada, Gojo ajusta su estrategia. Observa detenidamente los movimientos de Kon y se prepara para un contraataque. En un abrir y cerrar de ojos, se lanza hacia adelante con una patada giratoria que apunta al costado de su sensei.

El golpe se conecta con precisión, haciendo que Kon se tambalee brevemente. Sin embargo, no es suficiente para detenerlo. En un rápido movimiento, Kon aprovecha la abertura creada y contraataca con una combinación de golpes poderosos. Un puñetazo se dirige hacia el estómago de Gojo, quien responde rápidamente desviándolo con una maniobra hábil. Sin perder el impulso, Kon lanza una patada alta dirigida a la cabeza de su discípulo. Gojo se inclina hacia un lado, esquivando por poco el golpe que pasa zumbando junto a su oreja. El combate continúa en un torbellino de movimientos rápidos y ataques calculados. Gojo desata una serie de patadas rápidas y precisas, buscando puntos débiles en la defensa de Kon. Un golpe alcanza su hombro, otro impacta en su costado. Cada golpe es entregado con una combinación de fuerza y destreza. Pero Kon no se deja intimidar. Reuniendo su experiencia y habilidades, bloquea y desvía los ataques de Gojo con maestría. En un momento oportuno, Kon lanza un rápido golpe hacia la pierna de Gojo, pero este reacciona con velocidad sorprendente, saltando en el aire y evitando el ataque. El combate se desarrolla en una exhibición de destreza marcial. Cada movimiento es una manifestación de la habilidad y el poder de los combatientes. Gojo y Kon se desafían mutuamente a superar sus límites, empujándose más allá de lo conocido en busca de la victoria. Gojo, consciente de que está luchando contra un maestro experimentado, se sumerge aún más en su determinación. A medida que el combate continúa, sus movimientos se vuelven más fluidos y su técnica más pulida. Sus golpes ahora están imbuidos de una fuerza explosiva y un enfoque implacable.

En un intento por ganar ventaja, Gojo se acerca a Kon con una serie de rápidos puñetazos dirigidos al torso. Uno, dos, tres golpes impactan contra la defensa de Kon, quien se ve obligado a retroceder ante la embestida. La satisfacción brilla en los ojos de Gojo mientras continúa presionando su ataque. Sin embargo, Kon no se rinde tan fácilmente. En un movimiento audaz, agarra la muñeca de Gojo y realiza un giro rápido, utilizando el impulso para lanzar a su discípulo al suelo. Gojo cae con un estruendo, pero rápidamente se levanta, mostrando una determinación inquebrantable. La batalla está en su punto álgido, ambos luchadores estan agotados pero sin mostrar signos de rendirse.

En medio de la intensa batalla, Gojo siente que es hora de revelar su as bajo la manga. Con una mirada penetrante, sus ojos se iluminan con un destello de poderoso chakra azul mientras activa el Byakugan, la habilidad distintiva de su clan Hyuga. El mundo a su alrededor se transforma cuando el campo de visión de Gojo se expande drásticamente. Puede percibir el flujo de chakra de Kon, sus puntos de presión y debilidades, lo que le otorga una ventaja táctica inigualable. Con su Byakugan activado, Gojo se lanza hacia Kon con una velocidad sobrehumana, sus movimientos se vuelven aún más precisos y calculados, aprovechando cada oportunidad para atacar los puntos vitales de su sensei. Los golpes de Gojo ahora son aún más devastadores. Un puñetazo preciso se dirige al pecho de Kon, impactando directamente en su punto de chakra principal. La fuerza del golpe envía a Kon hacia atrás, su cuerpo se arquea en respuesta al dolor intenso.

Sin embargo, Kon no se deja vencer fácilmente. Aprovecha su experiencia y conocimientos para recuperar rápidamente su postura defensiva. Sus movimientos son fluidos y ágiles, contrarrestando los ataques de Gojo con una combinación de bloqueos y esquivas.
Mientras el combate avanza, Gojo se da cuenta de que el Byakugan no es una garantía de la victoria. Necesita combinar su poder visual con su habilidad táctica y su fuerza interna para triunfar. Con una sonrisa confiada, Gojo se mueve con gracia y velocidad, evitando los ataques de Kon mientras busca una apertura. A medida que sus ojos escanean el cuerpo de su sensei, detecta una pequeña abertura en su guardia. En un destello de movimiento, Gojo aprovecha la oportunidad, lanza una patada precisa y poderosa directamente hacia el punto de presión del brazo de Kon, debilitando su capacidad de ataque. El golpe impacta con fuerza, causando que Kon retroceda y suelte un gruñido de dolor.
— ¡Kon-sensei, nunca subestimes el poder de mi Byakugan! — Exclama Gojo con una voz llena de arrogancia. — Puedo ver a través de tus defensas y encontrar tus debilidades. Pero aún así, tu experiencia y sabiduría son una fuerza a tener en cuenta —

Kon, admirando la habilidad y el crecimiento de su discípulo, sonríe a pesar del dolor mientras respira agitado. — Tienes razón. El Byakugan es una poderosa herramienta, pero no olvides que la verdadera maestría viene del equilibrio entre el poder y la sabiduría. Sigue desafiándote a ti mismo y encontrarás un poder aún más grande — La batalla continúa, cada movimiento es más intenso y poderoso que el anterior. Gojo, con su Byakugan, utiliza su visión mejorada para evitar los ataques de Kon y lanzar contraataques estratégicos. Kon, a pesar de la desventaja, muestra una valentía inquebrantable y una habilidad insuperable.

Con el fervor de la batalla en su apogeo, Gojo aprovecha al máximo su Byakugan. Sus ojos escudriñan cada detalle de Kon, detectando incluso las sutilezas más imperceptibles. Cada movimiento de su sensei se revela ante él como un libro abierto, y Gojo se deleita en aprovechar esta ventaja. Gojo anticipa el próximo ataque de Kon y se mueve con una velocidad y agilidad sorprendentes. Esquiva hábilmente los golpes dirigidos a él, desviándolos con movimientos precisos. Cada movimiento suyo es una danza fluida y coordinada, en perfecta armonía con su visión mejorada. Mientras Kon se esfuerza por mantenerse a la altura del ritmo frenético de Gojo, su discípulo lanza un asalto implacable. Patadas y puñetazos velozmente ejecutados convergen hacia su sensei, apuntando a puntos vitales con una precisión milimétrica. Un golpe de puño dirigido al pecho de Kon es bloqueado por este en el último segundo, pero Gojo no se detiene. En un rápido giro, realiza una barrida con las piernas, derribando a su sensei y desequilibrándolo momentáneamente. 

La determinación arde en los ojos de Gojo mientras se levanta rápidamente. La brecha de habilidad entre ellos se hace evidente, pero Kon no se rinde. Con un grito feroz, su sensei se recupera rápidamente y contraataca con una serie de puñetazos y patadas furiosas. Gojo, confiando en su capacidad para leer los movimientos de Kon, bloquea y esquiva los ataques con destreza. Cada uno de sus movimientos parece calculado y ejecutado con una precisión impecable. A medida que avanza la batalla, Gojo encuentra nuevas oportunidades para contrarrestar y contraatacar. En medio del combate, Kon no solo se enfoca en defenderse y luchar, sino que también aprovecha cada oportunidad para darle lecciones a su apasionado discípulo.

— Gojo, recuerda que el poder visual del Byakugan no lo es todo. No olvides escuchar a tu intuición y confiar en tu experiencia y conocimiento — aconseja Kon mientras esquiva un hábil golpe de Gojo. Gojo escucha las palabras de su sensei y asimila su sabiduría en medio de la batalla. Con cada movimiento, busca equilibrar el poder del Byakugan con su intuición y su conocimiento táctico. Comienza a notar patrones en los movimientos de Kon, breves momentos de vulnerabilidad que puede aprovechar.
En un rápido movimiento, Gojo ejecuta una serie de combinaciones de puñetazos y patadas, apuntando a los puntos débiles que ha identificado. Un golpe dirigido al brazo de Kon lo obliga a ceder, mientras que una patada precisa al muslo lo deja momentáneamente inmovilizado. La intensidad del combate aumenta a medida que Gojo sigue presionando su ataque. Cada movimiento, cada golpe, es una manifestación de su determinación y destreza. El campo de batalla se llena de energía y chakra, mientras los dos guerreros continúan enfrentándose en una danza marcial sin descanso.

Última modificación: 09-07-2023, 02:24 AM por Gojo.

El combate se acerca a su emocionante conclusión. Gojo, imbuido con el poder del Byakugan y su determinación inquebrantable, se encuentra cerca de la victoria. Sus golpes son rápidos y precisos, cada uno destinado a debilitar a Kon y asegurar su triunfo.

Sin embargo, en un último acto de resistencia, Kon despliega su experiencia y conocimiento acumulados a lo largo de los años. A pesar de estar superado en velocidad y agilidad, él encuentra la manera de contrarrestar los ataques de Gojo, bloqueando y esquivando hábilmente sus ataques. La experiencia y la astucia de Kon comienzan a desequilibrar la lucha. Utilizando movimientos defensivos ingeniosos, encuentra aberturas en la defensa de Gojo y lanza una serie de contraataques precisos. En un momento crucial, Kon logra agarrar la muñeca de Gojo mientras intenta un puñetazo. Utiliza su dominio del agarre y la técnica para aplicar una llave dolorosa que hace que Gojo se doble de dolor. A pesar de su fuerza y determinación, el dolor insoportable impide que Gojo continúe luchando.

— Gojo, has demostrado ser un formidable discípulo y un adversario digno — dice Kon, mientras sujeta a Gojo en la llave. — Pero la experiencia y la sabiduría a menudo superan el poder y la determinación. Recuerda esto en tu camino hacia la maestría —
Gojo, aunque frustrado por la derrota inminente, escucha las palabras de su sensei con humildad y respeto. Acepta la lección aprendida y encuentra gratitud en la oportunidad de enfrentarse a alguien tan formidable como Kon. Con un último movimiento, Kon suelta su agarre y permite que Gojo se recupere. Ambos luchadores se miran, el respeto mutuo brilla en sus ojos cansados. Aunque la batalla ha terminado, el vínculo entre maestro y discípulo se ha fortalecido.

— Gracias, Kon-sensei — dice Gojo con una voz llena de gratitud. — Has sido un mentor excepcional y una inspiración para mí. Continuaré mi entrenamiento y buscaré alcanzar una maestría aún mayor — Kon sonríe, reconociendo el crecimiento y la determinación de su discípulo. — Eres un guerrero talentoso, Gojo. Tu camino hacia la maestría será largo y desafiante, pero estoy seguro de que alcanzarás alturas inimaginables — Ambos se inclinan en señal de respeto y despedida. La batalla ha llegado a su fin, pero el impacto de este enfrentamiento perdurará en el corazón y el espíritu de Gojo mientras continúa su viaje en busca de la maestría en las artes marciales.