Hay el proceso, ¿Qué te puedo decir de él qué ya no te sepas?, El proceso es lo que todos los humanos tenemos en común, todos tuvimos un proceso independientemente de quién seas. Si eres un prodigio, vas a tener un proceso, no importa tú estatus social. No importa a la edad que se presente el proceso, nadie tiene una vida perfecta.
- ¡No puede hacer tanto calor!, Dios. - Dije mientras veía como nuestra estrella mayor ya empezaba a acostarse, hacia calor, estábamos en verano y la verdad... Nada era peor que vivir en una montaña con demasiada abundancia de árboles; No era la mejor idea cuando era verano.
Al final de todo, debía preparar mi fogata para poder cocinar mi cena. Empecé mi camino hasta llegar a una planicie, por aquí siempre pasaba para traer las ramas del bosque que se encontraba a algunos kilómetros, pues; Nunca me ha gustado dañar el ecosistema de mi árboles, aunque sí. He insultado la humedad y calor que hace algunas veces.
Cuando pase la planicie tomé la suficiente madera y me devolví, en el camino. Muy tonto yo: Me olvide de cazar, pero eso no era problema pues me encontré a tres pequeñas gallinas, las cuales no dude en tomar y llevar. Cargaba la madera en mi espalda y las gallinas en mis brazos. La iba a llevar a mi pequeña granja que tenía montada, me daba huevos para el desayuno. Pero, seamos sinceros. No se cena con huevos.
Cuando llegue a mi casa, amarre a dos gallinas y a la otra empecé a despellejarla, la corte y la lavé. Con un poco de fuego creado por mis 5 dedos, logré prender la fogata. La cuál se aumentaba su fuego gradualmente. Puse mi caldero y empecé a hacer pollo frito. Era demasiado pollo, necesito a un acompañante que me ayude a acabarlo.
- ¡No puede hacer tanto calor!, Dios. - Dije mientras veía como nuestra estrella mayor ya empezaba a acostarse, hacia calor, estábamos en verano y la verdad... Nada era peor que vivir en una montaña con demasiada abundancia de árboles; No era la mejor idea cuando era verano.
Al final de todo, debía preparar mi fogata para poder cocinar mi cena. Empecé mi camino hasta llegar a una planicie, por aquí siempre pasaba para traer las ramas del bosque que se encontraba a algunos kilómetros, pues; Nunca me ha gustado dañar el ecosistema de mi árboles, aunque sí. He insultado la humedad y calor que hace algunas veces.
Cuando pase la planicie tomé la suficiente madera y me devolví, en el camino. Muy tonto yo: Me olvide de cazar, pero eso no era problema pues me encontré a tres pequeñas gallinas, las cuales no dude en tomar y llevar. Cargaba la madera en mi espalda y las gallinas en mis brazos. La iba a llevar a mi pequeña granja que tenía montada, me daba huevos para el desayuno. Pero, seamos sinceros. No se cena con huevos.
Cuando llegue a mi casa, amarre a dos gallinas y a la otra empecé a despellejarla, la corte y la lavé. Con un poco de fuego creado por mis 5 dedos, logré prender la fogata. La cuál se aumentaba su fuego gradualmente. Puse mi caldero y empecé a hacer pollo frito. Era demasiado pollo, necesito a un acompañante que me ayude a acabarlo.