Última modificación: 10-08-2023, 04:22 PM por Musacus.
13 de Junio del 15 D.K
Bosque de la Muerte
Ubicación desconocida
Una nueva mañana en lo profundo de aquel antiguo Bosque, los rayos del Sol como hilos atravesando las ramas y hojas de los Arboles, el cantar de las bestias, el susurro del viento, el movimiento de las altas malezas y la constante incertidumbre que aplastaba con todo intento de comprender las posibles bestias que por allí andaban.
Cuatro días atrás Satoru había comenzado un viaje a lo desconocido, allí en aquella planicie, encima de esas rocas fue que Satoru y Kenta habían viajado al Reino Saru. Esta vez aquel lugar anunciaría el Retorno de Satoru.
Una explosión de Vapor anunciaba el Regreso de Satoru, como tenía previsto al re-utilizar la técnica volvería al ultimo punto de viaje.
Kuchyose...-
Satoru había amanecido temprano en el Reino de los Monos para luego retornar a la Aldea puesto que no quería levantar sospechas ni demorar demasiado en volver... En cuanto llegó echo un vistazo rápidamente a su alrededor para dar marcha hacía la Aldea. Le pareció interesante poner a prueba lo que había aprendido por lo que rápidamente escalo un árbol y empezó a avanzar a los saltos, extendiéndose de rama en rama con gran facilidad. En comparación, los árboles allí eran mucho más pequeños, por lo que no debía preocuparse por las alturas.
El tiempo había pasado lento y había desarrollado un gran sentido de empatía y pertenencia con aquellos Simios. Un surtido de pensamientos invadió la mente de Satoru cuando se percato de sus ropajes. Se olvidó completamente que solo vestía pantalones, aquellos pequeños simios y sus travesuras... Si se presentaba así probablemente le llamasen la atención en la Aldea, y no estaba en sus planes llamar la atención de nadie, sino más bien pasar desapercibido.
En cuanto se percató de su semi-desnudez se ubico en lo alto de una árbol para vestirse o al menos simular un poco. Su clásica vestimenta de Monje le serviría.
El tiempo había pasado lento y había desarrollado un gran sentido de empatía y pertenencia con aquellos Simios. Un surtido de pensamientos invadió la mente de Satoru cuando se percato de sus ropajes. Se olvidó completamente que solo vestía pantalones, aquellos pequeños simios y sus travesuras... Si se presentaba así probablemente le llamasen la atención en la Aldea, y no estaba en sus planes llamar la atención de nadie, sino más bien pasar desapercibido.
En cuanto se percató de su semi-desnudez se ubico en lo alto de una árbol para vestirse o al menos simular un poco. Su clásica vestimenta de Monje le serviría.