La voluntad del bosque [Saga]
LinkIcon Enlace al Post
Última modificación: 26-06-2024, 01:55 PM por Narrador Ñ.



~ La voluntad del bosque ~


26 de Enero 16 DK
País del Fuego, Konohagakure
Horas de la tarde.


~ AMBIENTACIÓN ~

Se alzó sobre el terreno más boscoso del país del fuego un clima tan tenso como húmedo. La calor azotaba el paisaje con bravura, y la densa vegetación atrapaba este apelmazándolo con la humedad que guardaban las gigantes copas de los árboles, generando un efecto invernadero sensiblemente insoportable por toda la zona.

El bosque de la muerte, tan silencioso como traicionero, se ha presentado siempre como un campo de entrenamiento y pruebas, sin embargo, los últimos sucesos en el país lo han llevado a erigirse como un punto de enclave donde las brasas de la fragua de una guerra inminente comenzaban a agitarse sobre su terreno.

Centenares de metros lo remarcan con sus gruesos árboles generando casi una fortaleza natural, la riqueza de su suelo alimentada por su río crearon el paraje, y ahora estos elementos del ecosistema serán tan propios de él como de los propios shinobis que se hallan dentro, así como los más astutos, podrán aprovecharlo según las circunstancias, pero no han de fiarse, pues hasta los más necios sabrían interpretar el peligro que supone confiarse dentro de él.


~ SITUACIÓN ~
  • El bosque presenta una forma casi circular visto desde el aire, partido por un río que divide el paraje en 2, justo en su centro, una enorme torre se alza abandonada, años atrás utilizada por el imperio pero en desuso actualmente, y 2 puentes la conectan con cada margen del bosque. Es un potente punto estratégico disputado por ambos bandos, quien controle la torre, además de ganar sus beneficios estratégicos, también encontrará una serie de recursos que el imperio dejó olvidados y que pueden utilizar en el bosque.
  • Los árboles se levantan en su mayoría hasta los 50-70 metros de altura, y la anchura de sus troncos puede alcanzar casi los 2 metros según la altura y edad de este.
  • Cada bando tiene información suficiente como para saber que, en la otra parte del bosque se halla el grueso del bando enemigo y que, de un momento a otro, furtivos duelos de las avanzadillas toman lugar en algún punto de la espesa arboleda, retumbando entre la vegetación a consecuencia de explosiones, gritos e incluso derrumbamiento de árboles.
  • Margen izquierda, bando rebelde. Margen derecha, bando imperial.
  • Las avanzadillas de cada bando han comenzado a realizar las primeras incursiones sobre la zona central de cada margen, la disputa del terreno resulta peligrosa pero de obligatorio dominio, ya que el control de la zona resultará primordial para expulsar a los enemigos del bosque y es por eso, que los encuentros de estas avanzadillas darán como resultado al bando que lo encuentre, una inoportuna situación o una valiosa información para utilizar a su beneficio.

~ Recuerden, sin riesgo, no hay gloria ~


mapa orientativo

reglas y consideraciones


El tiempo para postear de 48 horas ya ha expirado.

LinkIcon Enlace al Post
Akari se encontraba ojeando la situación del puente desde el lado de los rebeldes a una distancia segura, parada en una de las gruesas ramas de un árbol aun más colosal, pero tan solo la media del tamaño del resto de arboles de este bosque.

No era su primera vez aquí, ya hacía un tiempo se había paseado por estas zonas, pero ciertamente era una área muy grande que no se había atrevido a explorar al completo por lo que le tomo de ligera sorpresa que hubiese dicha torre en el lugar.

...

¿Que traería Akari aquí de nuevo? ¿Dinero? ¿Ideales? ¿Sueños?

...

Tal vez nada en particular, simplemente una necesidad de hacer su trabajo por más fea que sea la paga. Es sorprendente que los rebeldes todavía la acepten después de su "incidente" durante la cacería de Nakia, o tal vez ni la hayan reconocido ahora que venía sin su mascara. Raro de ella, pero algo le decía que no la iba a necesitar.

(Un susurro en el corazón)

Sus pensamientos vuelan cada vez más lejos, ya ha dejado de escuchar su voz interna en un punto y en su mente solo se oye un sonido de viento vacío, mientras mira casi ausente el campo de batalla. Aun así, ella espera atenta al enemigo o sus posibles aliados. Su mano derecha alcanzando lentamente por la wakizashi enfundada, funda atada a su cinturón.

Estadísticas de Akari

[Imagen: ?u=https%3A%2F%2Ftse2.mm.bing.net%2Fth%3...ipo=images]
LinkIcon Enlace al Post
Pocas veces iba a considerarse afortunada un alma tan abatida como la del Kirinin. El chico, de cabellos azulados y destellos verdosos, se preguntaba cuál de sus pasos había sido el desafortunado que le había traído aquí, lejos de casa, en una situación de mierda y sin ningún tipo de esperanzas de mejoría. Y aún cuando admitiese empujar por el beneficio del imperio con todas sus fuerzas, no podía sino preguntarse si aquello estaba bien. Aquel despliegue de poder, ¿Era tan necesario? ¿Así de fuerte era el enemigo también? ¿O acaso la intención era usarlos como ejemplo del poderío de aquellos señores a los que él servía?

Un suspiro ahogado fue lo que pudo responder a aquellas intrigas de su mente mientras trataba de acostumbrarse al terrible clima que le rodeaba. Estaba acostumbrado hasta cierto punto al aire húmedo de su tierra, pero la peste a naturaleza le atacaba el olfato cual alfiler y era difícil sacudirlo. — Con suerte esto acabará rápido y puedo volver a casa… — una bandera de muerte en toda regla acababa de ser pronunciada por el inocente chico, casi como llamándola con los brazos abiertos. Así, con el desconocimiento general de la situación avanzaría cual ciego dando tumbos, pero con la mayor de las precauciones para evitar ser visto. Debía acostumbrarse a la cantidad de vegetación, y nunca había salido de su país para saber cómo se comportaría esta, pero arrastrarse de matorral en matorral parecía un buen plan.

El objetivo había sido informado y estaba claro, al contrario de los recursos necesarios para conseguirlo. Aparentemente, y dado que no podía cuestionar información proveniente de sus superiores, un enfrentamiento entre las dos fuerzas sería inevitable. Y para Yusuke aquello eran malas noticias. Reconocía que sus habilidades habían mejorado mucho, pero aún no eran suficiente para conseguirse cómodo arrancando cabezas y rasgando estómagos. — Creo que podría intentar evaluar un poco más primero. — pensó.

Y así lo hizo. Aunque su instrucción sería hacer avanzadillas, fue moviéndose hacia el centro en solitario, buscando desplazarse entre troncos y arbustos con cierta tosquedad pero con la misma efectividad.

Llevaba consigo su arsenal que, aunque no muy extenso, alcanzaría para poder desempeñarse como mejor sabía, y con el Bo en mano, las armas ubicadas en sus portadores al igual que los utensilios ninjas, esperaría a conseguir algo interesante que espiar. O, por el contrario, ser encontrado él. Cualquiera de las dos estaba bien, y estaba dispuesto a escapar en cuanto sucediese.

OFF
LinkIcon Enlace al Post


El dia habia llegado, el bosque de la muerte, escenario de incontables entrenamientos, examenes chunin e incluso Jounin, ahora convertido en el campo de batalla para una de las guerras mas importantes y cruciales en la historia del Pais del Fuego. La Hokage estaba siendo perseguida, cazada por el imperio ahora que se habia revelado su verdadera naturaleza y el imperio usó todo el poder que tenia en su mano en aquel pais para aplastar aquella rebelion ahora manifestada en todo su esplendor en aquel tétrico bosque. ¿Pero donde se encontraba Gojo a todo esto? Uno podria pensar que un joven shinobi imperial tan correcto, amable y responsable como él estaria en las filas imperiales, marchando por defender y proteger su regimen, su patria, su hogar, pero no. Gojo se encontraba del otro lado del bosque, preparandose junto a sus camaradas rebeldes, si, asi es, Gojo era un rebelde ¿Pero como era esto posible?

El Hyuga habia sido criado como todo un imperial por sus padres, sus amigos, su clan, todo su entorno. Vivio su vida como una promesa militar en el imperio desde niño hasta adolescente, un joven destacado para su edad, comprometido, leal, confiable, un orgullo en las filas del orden. Gojo se veia en el futuro como un alto mando del imperio, tal vez un general muy famoso, una leyenda, o quien sabe, quizas emperador del fuego. Sin embargo todo eso cambio en aquella mision, aquella mision que lo envio al hospital por tanto tiempo, aquella mision que lo dejo al borde de la muerte, aquella mision donde Gojo perdio a todo su escuadron, incluyendo a su sensei y su equipo de toda la vida con los que se habia graduado y formado como genin. Aquella fue su tercera mision avanzada, alli vivio todos los horrores que un ser humano podria experimentar, cosas a las que no estaba preparado y pago el costo por ello, pero entre todo eso tambien vio la verdadera cara del imperio, el otro lado, vio cosas que no debia ver.

Por suerte de aquella mision no hubo supervivientes excepto él, por lo que nadie supo de todo esto y Gojo se aseguro de no decirle nada de esto a nadie excepto a las personas indicadas en el momento y lugar indicado. El Hyuga habia comprendido muchas cosas, entre ellas que sus amigos y seres queridos que cayeron en aquel sitio habian muerto en vano, asi seria si Gojo no hacia algo al respecto, si no tomaba cartas en el asunto. Por ello, Gojo tomo la decision de tirar toda su carrera militar imperial por la borda, rompiendo con sus antiguos ideales y creencias, desechándolos y tomando ahora una vision mas afin a los rebeldes. Pero no podia irse de la aldea aunque bien dispuesto estaba a hacerlo, apenas le habian dado de alta del hospital. No, primero debia recuperarse, rehabilitarse poco a poco hasta recuperar su estado fisico a como era antes de haber caido en aquella mision, algo que le tomaria tiempo ¿Quien iba a decir que la revolucion de la que tanto se hablaba entre los rebeldes iba a llegar tan pronto? Apenas si Gojo llego a recuperar su estado fisico, justo a tiempo se habia recuperado por completo.

Ya en el bosque, el joven Hyuga preparaba su equipo junto a sus compañeros y se disponia a subirse a la copa de un arbol para observar alrededor, para luego bajar junto a sus camaradas y prepararse para la batalla, lo bueno era que el contaba con la ventaja de sus ojos, lo cual lo hacian un perfecto radar andante, por lo que sabia cual seria su papel perfectamente en esta dura y suicida mision, el se ocuparia de guiar y alertar al resto de todo lo que pasara a su alrededor, buscaria caminos para llegar primero a la torre abandonada y haria un mapeo completo de la misma para ubicar aquellos recursos abandonados que podrian servirles en la batalla.

¡Escuchen! ¡Llegar a la torre es nuestra maxima prioridad! ¡Yo puedo guiarlos, les indicare todo lo que suceda en ciento cincuenta metros a la redonda! — Exclamo el Hyuga, facilmente reconocible pues portaba una banda negra que cubria sus ojos, algo muy curioso, sus compañeros podrian suponer que quizas era ciego, quizas poseia habilidades sensoriales, como sea, si eran inteligentes le harian caso y lo tendrian en cuenta, sino, pues el objetivo de Gojo no cambiaba en lo absoluto, iria a esa torre aunque tuviera que arrastrarse para ello.





info
LinkIcon Enlace al Post
mapa general

Notas

eventos relevantes



~ Margen izquierdo, bando rebelde.


La atmósfera tensa e incómoda que se palpaba entre la espesura de la vegetación, azotaba como un látigo candente la respiración de absolutamente todos los presentes del bosque, pues en la oscuridad de sus terrenos, los ecos agónicos y bélicos tomaban cada vez más presencia siendo más sucesivos.

La joven Akari, era astuta y experimentada en la zona, pese a su corta edad había avanzado superando todos los flancos en su recorrido, pasando inadvertida entre las lúgubres ramas de los árboles y hallándose en las cercanías del río, sobre un árbol, pudiendo ver el puente que conectaba su margen con el trozo de tierra en el que se erigía la torre central, tan imponente como silenciosa y amenazante.

Por su dirección, podría cerciorarse de 2 individuos que se acercaban desde el norte, uno de ellos andando a duras penas entre jadeos y ayudándose de su acompañante. Van en dirección sur siguiendo la estela del río, y portan ropajes del bando rebelde algo desaliñados.

En otra parte, algo más alejada del centro del bosque, un joven y talentoso hyuga se alza como vocal de un reducido escuadrón de 3 shinobis del bando rebelde, informando a sus iguales sobre sus cualidades, y sin perder el tiempo, toma responsabilidades como guía del trío al que pertenecía. Los otros 2 shinobis, a pesar de ser del mismo bando, no parecen tener tanta experiencia o talento como él, y aunque estos casi doblan la edad del chico, titubean viendo como alguien tan joven pero determinante, les da órdenes, no obstante, acceden a mantener la composición y a fiarse de sus instintos.

Desde la parte externa del bosque, avanzan con cautela camino a la torre, cuando unos gritos más cercanos que de los de costumbre llegan a los oídos del trío rebelde. No parecen muy alejados, provienen desde el sur, y será inevitable que el grupo entre en tensión aún más.

- Eso fue demasiado cerca... puede que sean de los nuestros, si bien también podría ser una trampa, deberíamos al menos echar un vistazo con cuidado para ver si hay algún aliado en peligro -

Alertó uno de ellos, deteniendo el avance y haciendo que Gojo y el restante se tuvieran que detener también para evaluar la situación, pues, aunque la disputada torre fuera la máxima prioridad como dijo el hyuga, también debía de saber de que las circunstancias en ese bosque irían cambiando constantemente, tanto para bien, como para mal.




~ Margen derecho, bando imperial.


Aunque pareciera que el bosque escondía todo tipo de peligros, los nativos del país habían labrado algunas sendas seguras para cruzarlo de árbol en árbol, había rutas no señalizadas de entre los gruesos árboles que componían la espesura que aseguraban un avance limpio y que disimulaba el rastreo. Así fue como Yusuke, un joven imperial de la aldea de la niebla recorrió de este a oeste una considerable distancia hasta situarse en las cercanías de la zona caliente del bosque. La torre central.

Permanecía atento y cauto, preparado ante cualquier anomalía, y desde una postura evaluativa del terreno, yacía oculto entre altos arbustos pudiendo contemplar lo que pudiera suceder, siendo así como, a casi una centena de metros, podría divisar con dificultad algunas siluetas que se movían alrededor de la torre en silencio, así como en su interior sobre los pisos intermedios sin emitir ruido alguno tampoco.

mapas
LinkIcon Enlace al Post
Última modificación: Ayer, 08:03 AM por Gojo.


Byakugan




En cuanto se puso en marcha, Gojo activo su Byakugan, aunque esto el resto no lo notaría pues llevaba aquella bandana negra cubriendole los ojos para ocultarlo. En ese momento Gojo observo todo lo que ocurria a su alrededor sin perderse ningun detalle en ciento cincuenta metros a la redonda. Observaba a sus camaradas y antiguos camaradas luchar unos contra otros, era una masacre total, en cierta forma le daba lastima que las cosas terminaran asi, pues Gojo como ex imperial bien sabia que la mayoria eran personas paralelas a los rebeldes, buenos hombres y mujeres que luchaban por proteger sus hogares, sus ideales y lo que ellos consideraban era lo correcto, muchos seguro tenian familia y estarian preocupados por su bienestar, aunque era plenamente consciente de la crueldad y frialdad que algunos podian desarrollar con la crianza y formacion imperial, no dejaba de darle pena que tuviera que correr tanta sangre de ambos bandos para devolverle al mundo nuevamente el equilibrio.

¿Esto terminaria con el imperio? No, y Gojo lo sabia. Liberar el Pais del Fuego era solo el primer paso de la jugada final, si tenian exito, entonces el resto de ramas rebeldes en el mundo se atreverian a unirse en conjunto para declarar la guerra definitiva. Solo habia una manera de acabar con el yugo imperial sobre el mundo, y esa era recuperar las otras 4 grandes naciones, la Tierra, el Agua, el Rayo y por ultimo el Viento, el cual si bien no era gobernada por el imperio, era dominada por la cabeza principal de la Yakuza.

Pero no era momento de pensar en todo esto, pues de pronto un grito ensordecedor de desesperacion se escucho muy cerca de donde se encontraba el Hyuga y su grupo.


Cita:- Eso fue demasiado cerca... puede que sean de los nuestros, si bien también podría ser una trampa, deberíamos al menos echar un vistazo con cuidado para ver si hay algún aliado en peligro -


Gojo observo rapidamente con sus ojos a su alrededor en direccion de donde provinieron los gritos para comprobar si esto era una trampa o realmente alguien estaba en peligro. Si se daba el primer caso les avisaria a sus compañeros para que lo ignorasen y siguiesen su camino hacia la torre. Si se daba el segundo caso entonces Gojo les describiria la situacion a sus compañeros con toda la informacion util que pudiera proporcionarles y les pediria que ellos se encarguen de la situacion si se veian capaces de ello.





info
LinkIcon Enlace al Post
El kirinin hacía paralelismos entre las misiones que había tenido que desempeñar en sus tierras y esta prueba de fe por la que estaba pasando ahora mismo. Sus ideales se mantenían ahí, imponentes y casi inamovibles dada la situación, y maldecía a cada uno de los desgraciados que, persiguiendo aquella idea de rebeldía, le habían obligado a tener que venir de visita a Konoha. No era su primera vez, pero sí la primera en mucho tiempo, y no esperaba ni quería que fuese así. El ramen de Konoha era famoso internacionalmente, y la infamia de su bosque de la muerte se expandía de igual manera.

— Como sea… — se sacudió los pensamientos intrusivos con aquella célebre frase y alzó la mirada un poco más allá de su escondite. Ahora estaba cerca de la torre, y podía ver dejos de movimiento, pero era imposible discernir si se trataba de unidades enemigas o aliadas. Lo que sí podía, sin embargo, era estudiar el terreno un poco. Aprovechó su aparente situación de incógnito y escaló el árbol más cercano y frondoso que pudo encontrar. Sus movimientos eran ágiles aún para alguien de su nivel, y con la medida justa de chakra acumulado en la planta de los pies no fue una tarea demorada o compleja.

Una vez oculto, entre las enmarañadas ramas del árbol, observó y escuchó con más atención la torre e intentó dar con la mirada en algún grupo de ninjas que pasaran por ahí o por los alrededores. Sería fácil, en teoría, identificar a los miembros de su propio bando, bien sea por indicativos visuales o por simplemente recordar sus rostros. De encontrar a algún grupo, buscaría unirseles mostrándose indefenso y haciendo señas visuales para indicar de qué a qué pelotón pertenece. De cualquier manera, encontrase o no imperiales con los que amontonarse, se prepararía para lo peor. Tomaría de su portautensilios un sello explosivo y lo pegaría en el tronco de aquel árbol donde estaba. Antes de partir, si es que partía.

De no encontrar apoyo cercano tomaría una decisión arriesgada, empezando a desplazarse en línea recta hacia el norte, aprovechando que se trataba de una zona un poco más boscosa, para pasar desapercibido. Con suerte no se encontraría con fichas del bando opositor, y sí con algún grupo de imperiales.

OFF
LinkIcon Enlace al Post
- FIN DEL TURNO -
Narrador posteando...
Salto de foro:

Usuarios navegando en este tema: 1 invitado(s)