Última modificación: 13-03-2024, 05:14 AM por Ren Uchiha.
En lo más profundo del bosque de la aldea de la Hoja Bajo la sombra de los cerezos florecidos, donde los espíritus encuentran abrigo, se alza una arboleda que tiñe el lugar con sus pétalos rosados en el aire danzar. Dicen que en su seno descansan los caídos, que tras las grandes batallas han sido olvidados, pequeños templos de formas caseras y rústicas honran a aquellos que la muerte trágica sufrieron. El hogar de innumerables espíritus errantes, en medio de la naturaleza exuberante, donde la paz se respira en cada rincón, bajo la sombra de los cerezos en flor. Ren Uchiha se encontraba practicando su jutsu de invocación. La joven albina de ojos rojos había heredado el talento de su clan para el ninjutsu y estaba decidida a perfeccionar sus habilidades como kunoichi.
Ren se encontraba en un claro rodeado de árboles altos y frondosos. Se concentraba en su chakra, sintiendo la energía fluir a través de su cuerpo, mientras trazaba los sellos con precisión y rapidez, una tanda de sellos realizada con total concentración -Jabalí... Perro... Mono... Pájaro... Rata...- recordaba a la par que hacia los sellos- Por favor... escucha la plegaria de mi corazón y atiende mi llamado... Ohhh poderosos espíritus de los lobos... aquellos son llamados los reyes de los colmillos Helados... aquellos grandes soberanos de algunos de los clanes del Valle Sagrado Ookamitani... Ohh Gran lobo escucha mi plegaria... hazte presente- vociferaba a la par que hacia los sellos y se mordía el pulgar con tal fuerza que se perforo y saco algo de sangre del mismo- Jutsu de Invocación- vocifero al colocar su mano en el suelo, era aquel jutsu entre el mundo animal y el mundo shinobi... el jutsu de invocación.
Para después observar como se formaba un sello en forma de círculo alrededor de dónde se posicionaba su mano principalmente constituido por runas escritas con caligrafía perfecta, extenderse gracias a unas siguientes runas que formaban hilos que se extendían hacia el exterior del círculo, dónde desaparecen a vista del guerrero gracias a una espesa pantalla de humo blanco, que logro cubrir su vista y a la ves su cuerpo completo junto con la zona en qué estaba ejecutando tal técnica.
Pero no solo humo se lograría visualizar... sino que también una gran cantidad de viento helado que soplaba con fiereza justo en frente de ella, sus rojos cabellos danzaban al compas del viento, sus ropas se movían de un lado al otro y aquel ambiente tranquilo y poco nublado, cosa común aquí en konoha para ser honestos, se volvía como un paisaje invernal, casi como si el invierno hubiera venido antes de tiempo- ¿Quién osa invocarme?... este olor... - el lobo quien habia sido invocado con cierta actitud fiera, al instante reconoció a su invocadora- ¿Acaso... eres quien me invoco? Niña...- pese a su educación... su tono burlón era totalmente notable, aunque quizás no era burlón sino mas bien juguetón... quien sabe...
![[Imagen: bcd1d7aa3bae30b6821f545e4e8ff13d.jpg]](https://i.pinimg.com/564x/bc/d1/d7/bcd1d7aa3bae30b6821f545e4e8ff13d.jpg)
De entre las sombras emergió un majestuoso lobo albino, con ojos de un intenso color azul cuyo brillo imitaba al del mismo cielo, como zafiros brillantes y resplandecientes... El animal se acercó a Ren con gracia y elegancia, mirándola fijamente con una mezcla de curiosidad y respeto. Ren extendió su mano hacia el lobo, mostrando confianza en sus gestos a pesar de su usual frialdad. El lobo la miró a los ojos y comprendió que aquella era una kunoichi diferente a las demás, una chica con un corazón puro y leal a pesar de su aparente indiferencia... sin embargo... - En tu corazón... hay tristeza... lo se...- vociferaría el lobo a la par que se acostaba en la grama del lugar- Dime... niña ¿Cuál es tu nombre?- una tono de confianza y respeto fue audible...- Uchiha Ren... pero prefiero que me digan Suisei Ren...- fue su respuesta.
Los dos se miraron en silencio por un momento, y el primero en hablar seria el lobo- Mi nombre es Xioni... es un placer... Ren- antes de que Ren hablara con voz suave pero firme - Acepto tu pacto, lobo blanco. Prometo ser tu compañera fiel y protegerte en todo momento... sin embargo a cambio pido lo mismo de tu parte...- las palabras de la albina sorprendieron levemente al lobo, era directa, pero al mismo tiempo parecía vacilar- Veo que ya conoces sobre esto... entonces... que así sea Ren... prometo mi lealtad... al mismo tiempo prometo protegerte... mi nombre es Xioni... el Lobo de la Ventisca... un placer... Uchiha Ren- fue lo que el lobo diría para después asentir con la cabeza en señal de aceptación, y un brillo de complicidad surgió en sus ojos azules. Ren sabía que aquel lobo sería su aliado en las batallas venideras, un amigo en quien confiar cuando las sombras de la noche se cernieran sobre ellos.
Ren Uchiha miraba fijamente al lobo con una mirada poco expresiva, su larga cabellera blanca brillaba bajo los rayos del sol. Sus ojos rojos, característicos de su condición de albina, miraban al horizonte con una expresión distante y fría. A pesar de su aspecto imponente, Ren era en realidad una joven tímida y reservada, con una personalidad un poco inestable en varios aspectos, que la hacía parecer inaccesible para aquellos que no la conocían bien.
- ¿Qué sucede, Ren?- preguntó el lobo con una voz profunda y resonante. Ren suspiró, acariciando suavemente el pelaje del lobo. - Me gustaría hablar contigo, Xioni... dijiste que en mi corazón hay tristeza... sin embargo... eso es debido a mi pasado...- diría mientras se sentaba junto al lobo en el césped... pensante al mismo tiempo que su mirada estaba distante pero fijada en el mismo... El lobo asintió, sentándose a su lado. - Estoy aquí para escucharte, Ren. Cuéntame lo que necesites.- La joven albina cerró los ojos por un momento, recordando fragmentos de su infancia. - Mi familia era conocida en la aldea de la Hoja por su habilidad con el Sharingan. Eran fuertes, respetados... y temidos. Pero un día, todo cambió. El nacimiento de la tercera hija de Uchiha Kirai... Uchiha Ren... fue una tragedia para el clan Uchiha... una error incapaz de controlar el sharingan, sin capaz de dominar el elemento fuego...- diría mientras aquella memorias se apoderaban de ella- Un simple objeto de burlas... maltratos y odio...- aquello era el motivo de su tristeza...
Xioni la miraba con atención, comprendiendo el dolor que la invadía- Lo siento, Ren. Debe de haber sido difícil para ti.- las palabras del lobo estaban cargadas de compasión... quizás empatizaba con la albina... o quizás comprenda aquellos sentimientos... Ren asintió, una lágrima solitaria recorriendo su mejilla pálida. - Desde entonces, he vivido en soledad... He aprendido a controlar mis emociones, a ser fría y distante para protegerme. Pero a veces... a veces siento que me estoy perdiendo a mí misma en ese muro de hielo que he construido a mi alrededor... tengo miedo... de ser lastimada de nuevo al final...- nunca le habia dicho eso a nadie... quizás ese lobo era la primera criatura en saberlo...
El lobo se acercó a ella, apoyando su cabeza en su regazo. - No estás sola, Ren... Tienes a tus amigos... una familia diferente... gente que vela por tu seguridad... Y también me tienes a mí... Estamos aquí para apoyarte, para ayudarte a superar tu pasado y a encontrar la paz que tanto anhelas...- tras escuchar aquellas palabras... Ren sintió un cálido sentimiento recorrer su pecho... mirando al cielo para contemplar aquella libertad... reprimiendo sus lagrimas y toda tristeza para mostrar una pequeña, aunque inexpresiva sonrisa, Ren sonrió levemente, sintiendo el calor reconfortante del lobo a su lado. - Gracias, Xioni... Eres alguien en quien puedo confiar...- vocifero con una pequeña sonrisa.
La joven albina se recostó en el suelo, cerrando los ojos y dejando que la brisa del bosque acariciara su rostro. Por primera vez en mucho tiempo, se sintió en paz consigo misma. Sabía que el camino hacia la sanación sería largo y difícil, pero ahora se sentía lista para enfrentarlo, con el apoyo incondicional de su fiel compañero... de su familia... se volvería mas fuerte y conseguiría su venganza... debía demostrarle a Kirai que al final nunca tuvo razón... además... queria volverse mas fuerte... para poder estar junto a Kin... dejando de estar en su sombra... no queriendo ser quien le siguiera toda la vida, sino quien caminara a su lado... Ren Uchiha y Xioni emprendieron un nuevo capítulo en sus vidas, listos para enfrentar el futuro con valentía y determinación.
Con su nuevo compañero a su lado, Ren regresó a la aldea de la Hoja con paso decidido. A pesar de su naturaleza dandere y kuudere, se sentía más segura y protegida con el lobo blanco a su lado. Sabía que juntos podrían superar cualquier desafío que se les presentara. A medida que pasaban los días, Ren se estaba abriendo lentamente a las personas de su alrededor. Su timidez y reserva dieron paso a una personalidad dulce y afectuosa, especialmente cuando se encontraba con aquellos que consideraba amigos de verdad. Su lobo blanco también se habia convertido en parte de dicho grupo, o al menos eso era lo que ella esperaba, siendo admirado por su fuerza y lealtad.
Off: Este tema también va en parte de mi trama del MS...
Ren se encontraba en un claro rodeado de árboles altos y frondosos. Se concentraba en su chakra, sintiendo la energía fluir a través de su cuerpo, mientras trazaba los sellos con precisión y rapidez, una tanda de sellos realizada con total concentración -Jabalí... Perro... Mono... Pájaro... Rata...- recordaba a la par que hacia los sellos- Por favor... escucha la plegaria de mi corazón y atiende mi llamado... Ohhh poderosos espíritus de los lobos... aquellos son llamados los reyes de los colmillos Helados... aquellos grandes soberanos de algunos de los clanes del Valle Sagrado Ookamitani... Ohh Gran lobo escucha mi plegaria... hazte presente- vociferaba a la par que hacia los sellos y se mordía el pulgar con tal fuerza que se perforo y saco algo de sangre del mismo- Jutsu de Invocación- vocifero al colocar su mano en el suelo, era aquel jutsu entre el mundo animal y el mundo shinobi... el jutsu de invocación.
Para después observar como se formaba un sello en forma de círculo alrededor de dónde se posicionaba su mano principalmente constituido por runas escritas con caligrafía perfecta, extenderse gracias a unas siguientes runas que formaban hilos que se extendían hacia el exterior del círculo, dónde desaparecen a vista del guerrero gracias a una espesa pantalla de humo blanco, que logro cubrir su vista y a la ves su cuerpo completo junto con la zona en qué estaba ejecutando tal técnica.
Pero no solo humo se lograría visualizar... sino que también una gran cantidad de viento helado que soplaba con fiereza justo en frente de ella, sus rojos cabellos danzaban al compas del viento, sus ropas se movían de un lado al otro y aquel ambiente tranquilo y poco nublado, cosa común aquí en konoha para ser honestos, se volvía como un paisaje invernal, casi como si el invierno hubiera venido antes de tiempo- ¿Quién osa invocarme?... este olor... - el lobo quien habia sido invocado con cierta actitud fiera, al instante reconoció a su invocadora- ¿Acaso... eres quien me invoco? Niña...- pese a su educación... su tono burlón era totalmente notable, aunque quizás no era burlón sino mas bien juguetón... quien sabe...
Los dos se miraron en silencio por un momento, y el primero en hablar seria el lobo- Mi nombre es Xioni... es un placer... Ren- antes de que Ren hablara con voz suave pero firme - Acepto tu pacto, lobo blanco. Prometo ser tu compañera fiel y protegerte en todo momento... sin embargo a cambio pido lo mismo de tu parte...- las palabras de la albina sorprendieron levemente al lobo, era directa, pero al mismo tiempo parecía vacilar- Veo que ya conoces sobre esto... entonces... que así sea Ren... prometo mi lealtad... al mismo tiempo prometo protegerte... mi nombre es Xioni... el Lobo de la Ventisca... un placer... Uchiha Ren- fue lo que el lobo diría para después asentir con la cabeza en señal de aceptación, y un brillo de complicidad surgió en sus ojos azules. Ren sabía que aquel lobo sería su aliado en las batallas venideras, un amigo en quien confiar cuando las sombras de la noche se cernieran sobre ellos.
Ren Uchiha miraba fijamente al lobo con una mirada poco expresiva, su larga cabellera blanca brillaba bajo los rayos del sol. Sus ojos rojos, característicos de su condición de albina, miraban al horizonte con una expresión distante y fría. A pesar de su aspecto imponente, Ren era en realidad una joven tímida y reservada, con una personalidad un poco inestable en varios aspectos, que la hacía parecer inaccesible para aquellos que no la conocían bien.
- ¿Qué sucede, Ren?- preguntó el lobo con una voz profunda y resonante. Ren suspiró, acariciando suavemente el pelaje del lobo. - Me gustaría hablar contigo, Xioni... dijiste que en mi corazón hay tristeza... sin embargo... eso es debido a mi pasado...- diría mientras se sentaba junto al lobo en el césped... pensante al mismo tiempo que su mirada estaba distante pero fijada en el mismo... El lobo asintió, sentándose a su lado. - Estoy aquí para escucharte, Ren. Cuéntame lo que necesites.- La joven albina cerró los ojos por un momento, recordando fragmentos de su infancia. - Mi familia era conocida en la aldea de la Hoja por su habilidad con el Sharingan. Eran fuertes, respetados... y temidos. Pero un día, todo cambió. El nacimiento de la tercera hija de Uchiha Kirai... Uchiha Ren... fue una tragedia para el clan Uchiha... una error incapaz de controlar el sharingan, sin capaz de dominar el elemento fuego...- diría mientras aquella memorias se apoderaban de ella- Un simple objeto de burlas... maltratos y odio...- aquello era el motivo de su tristeza...
Xioni la miraba con atención, comprendiendo el dolor que la invadía- Lo siento, Ren. Debe de haber sido difícil para ti.- las palabras del lobo estaban cargadas de compasión... quizás empatizaba con la albina... o quizás comprenda aquellos sentimientos... Ren asintió, una lágrima solitaria recorriendo su mejilla pálida. - Desde entonces, he vivido en soledad... He aprendido a controlar mis emociones, a ser fría y distante para protegerme. Pero a veces... a veces siento que me estoy perdiendo a mí misma en ese muro de hielo que he construido a mi alrededor... tengo miedo... de ser lastimada de nuevo al final...- nunca le habia dicho eso a nadie... quizás ese lobo era la primera criatura en saberlo...
El lobo se acercó a ella, apoyando su cabeza en su regazo. - No estás sola, Ren... Tienes a tus amigos... una familia diferente... gente que vela por tu seguridad... Y también me tienes a mí... Estamos aquí para apoyarte, para ayudarte a superar tu pasado y a encontrar la paz que tanto anhelas...- tras escuchar aquellas palabras... Ren sintió un cálido sentimiento recorrer su pecho... mirando al cielo para contemplar aquella libertad... reprimiendo sus lagrimas y toda tristeza para mostrar una pequeña, aunque inexpresiva sonrisa, Ren sonrió levemente, sintiendo el calor reconfortante del lobo a su lado. - Gracias, Xioni... Eres alguien en quien puedo confiar...- vocifero con una pequeña sonrisa.
La joven albina se recostó en el suelo, cerrando los ojos y dejando que la brisa del bosque acariciara su rostro. Por primera vez en mucho tiempo, se sintió en paz consigo misma. Sabía que el camino hacia la sanación sería largo y difícil, pero ahora se sentía lista para enfrentarlo, con el apoyo incondicional de su fiel compañero... de su familia... se volvería mas fuerte y conseguiría su venganza... debía demostrarle a Kirai que al final nunca tuvo razón... además... queria volverse mas fuerte... para poder estar junto a Kin... dejando de estar en su sombra... no queriendo ser quien le siguiera toda la vida, sino quien caminara a su lado... Ren Uchiha y Xioni emprendieron un nuevo capítulo en sus vidas, listos para enfrentar el futuro con valentía y determinación.
Con su nuevo compañero a su lado, Ren regresó a la aldea de la Hoja con paso decidido. A pesar de su naturaleza dandere y kuudere, se sentía más segura y protegida con el lobo blanco a su lado. Sabía que juntos podrían superar cualquier desafío que se les presentara. A medida que pasaban los días, Ren se estaba abriendo lentamente a las personas de su alrededor. Su timidez y reserva dieron paso a una personalidad dulce y afectuosa, especialmente cuando se encontraba con aquellos que consideraba amigos de verdad. Su lobo blanco también se habia convertido en parte de dicho grupo, o al menos eso era lo que ella esperaba, siendo admirado por su fuerza y lealtad.
Off: Este tema también va en parte de mi trama del MS...
