Dentro de Kirigakure, la villa oculta del País del Agua, se encontraba Miku Yuki, una Kunoichi bastante amable y con la vocación de querer ayudar. Ella estaba junto a su padre, un Jounin de Kirigakure, integrante del Clan Yuki y fielmente servicial con el Imperio Boshoku. El hombre tenía la intención de enseñarle a su hija una disciplina de Sellado que crea una conexión entre dos personas, una conexión en la que ambos buscan beneficiarse.
Ambos Yuki se dirigieron a una sala subterránea de la casa de Miku, sala en donde su padre desarrollaba sus técnicas mal vistas y lugar en donde pudo aprender a usar el Sello Maldito.
- Es aquí, la sala de la que tanto te hablé, hoy porfín la conoces -
- Es tétrica y espeluznante… no creo que yo sea de las personas que se la pasen muchísimo tiempo aquí… -
- Es cuestión de acostumbrarse, aunque entiendo que no quieras estar aquí, tu sueño es ser una Ninja Médico como tu madre, pero en lo que a mí respecta, al menos quisiera que tengas algo de mí… -
- ¿Algo de ti? -
- Si… no hace mucho, logré desarrollar una técnica de Sellado, la vi hace tiempo en una misión y desde entonces mi curiosidad despertó, aún está en fase experimental por así decirlo. La técnica en cuestión es sencilla, para su realización se requiere de dos personas, Maestro y Maldito, como me gusta llamarles… El Maestro colocará un sello especial en el maldito, un sello que, gracias al chakra empleado, hace que el maldito adquiera capacidades superiores, ósea, una mejora en sus capacidades -
- Ya veo… interesante, pero, no es que me guste sacar provecho de los demás, me gusta ayudar a otros, pero ¿qué beneficio tendría hacer una técnica así? Te conozco lo suficiente como para saber que tu no desarrollas técnicas en beneficio de otros si éstas no te dan un beneficio a ti -
- Conoces muy bien a tu padre, Miku… obvio que esta técnica tiene sus beneficios para el Maestro, a cambio de un pequeño sufrimiento por parte del Maldito, el Maestro es capaz de obtener chakra y recuperarlo gracias a unas marcas que el sello proporciona al Maldito con cada uso -
- Eh… eso es terrible… no creo que técnicas así deban existir… yo… no se si quiero aprender a hacer eso… -
- No tomes decisiones precipitadas Miku… la técnica también tiene la opción de solo darle el beneficio al Maldito, claro, el Maldito no podrá recibir una marca con cada uso de su sello y el Maestro no podrá sacar beneficio de ello, es por eso que es la técnica apropiada para ti, tu pecas de querer ayudar a otros, entonces puedes entregar Sellos Malditos a quien quieras sin necesidad de hacerlo sufrir -
- Eso suena genial… aunque me sigue pareciendo una técnica descabellada y horrible… -
- Tu siempre con tus cosas, en eso te pareces mucho a tu madre, aunque también tienes todo su físico… En fin, ¿quieres aprender a implantar Sellos Malditos? Te pregunto de nuevo ya que no te veo convencida… -
Miku estaba pensativa, por un lado, tenía a su merced, una técnica capaz de otorgarle un aumento de sus capacidades a otros y eso era parte de su sueño como Médico, ayudar siempre. Pero también tenía una técnica con la capacidad de causar dolor y sufrimiento en otros. Maru, padre de Miku, miraba a su hija esperando su respuesta, no la presionó, pues entendía totalmente el dilema interno que podría estar teniendo.
- Bueno… acepto, quiero aprender a hacer ese sellado… -
- Buena decisión hija, pero antes de poder comenzar a implantar los sellos que benefician, debes aprender a hacer el sello de sumisión, como me gusta llamarlo. Se basa en imponer algo sobre el Maldito, puede ser cualquier cosa, una forma fácil de obtener vasallos eh… en caso de que incumpla con los designios de su Maestro, tendrá que sufrir un poco… -
- Eh… ¿De verdad necesito aprender a hacer eso primero? -
- Por supuesto, es algo que va evolucionando, el sello benefactor es una variante muchísimo mejorada del sello de sumisión, ¿Cómo quieres aprender a correr sin siquiera saber caminar? -
- Tienes razón, lo siento -
- No te disculpes Miku, entiendo que solo quieras aprender el sello benefactor, pero así son las cosas, sin nada más que decir sobre este asunto, creo que es conveniente comenzar con el entrenamiento -
Miku asintió y su padre sonrió, ambos se prepararon para comenzar el entrenamiento de aquella arte misteriosa, mal vista para algunos, pero para otros, un arte que sólo trae beneficios.